Sei sulla pagina 1di 15

APELACIÓN INTERPUESTA POR EL IMPUTADO CONTRA DECISIÓN QUE

REVOCA LA PRIVACIÓN JUDICIAL PREVENTIVA DE LIBERTAD POR EL


VENCIMIENTO DEL LAPSO DE DOS AÑOS PERO QUE EN SU LUGAR
IMPONE UNA MEDIDA CAUTELAR MENOS GRAVOSA

Ciudadanos
Presidente y demás miembros de la Corte de Apelaciones del Primer Circuito
Judicial del Estado……….., con sede en la ciudad de………….
Su Despacho
Yo,…………………….. Abogado en ejercicio, inscrito en el IPSA bajo el No.
…….. con domicilio procesal en ……………… de esta ciudad, actuando en
este acto en mi carácter de Apoderado-Defensor del ciudadano …………… ,
titular de la Cédula de Identidad No. …………….. , imputado del
delito………………. ante Usted y con el debido respeto acudo para presentar la
siguiente:
APELACIÓN DE AUTOS
CAPÍTULO I
DE LOS ANTECEDENTES DEL CASO BAJO EXAMEN Y DE LOS MOTIVOS
PARA DECIDIR DE LA SENTENCIA RECURRIDA
En fecha……….. el Tribunal……….. de Control de este Circuito Judicial Penal,
decretó la privación judicial preventiva de libertad de mi defendido. Presentada
y admitida como fue la acusación del Ministerio Público, fueron pasadas las
actuaciones al Juzgado……… de Juicio; este Tribunal ha fijado la oportunidad
para que tenga lugar la audiencia oral y pública y hasta la fecha, en las siete
ocasiones fijadas, la misma ha sido diferida, por causas nunca imputables a mi
defendido. Pero es el caso que mientras mi defendido espera por su
enjuiciamiento permanece recluido en el Centro de Reclusión Preventiva de
esta ciudad bajo condiciones infrahumanas, siendo inocente de todas las
imputaciones formuladas en su contra, hasta tanto no haya sentencia
definitivamente firme que señale lo contrario. Honorable Juez, desde la fecha
de la imposición de esta medida privativa, hasta la presente fecha, ha
transcurrido más de dos años. Por esta razón esta representación, solicitó del
Juez de la causa, por vía de revisión, la revocatoria de la medida privativa
impuesta, y que en consecuencia se ordenara la excarcelación de mi defendido
sin imponer restricción de libertad alguna, basado en lo establecido por el
artículo 244 del Código Orgánico Procesal Penal. El Juez de Juicio consideró
que la medida impuesta había sobrepasado el límite de duración posible, así
que decidió que en lugar de la privación impondría medidas cautelares
sustitutivas, específicamente las establecidas, en los ordinales 3ero, 4to y 8va
es decir, presentaciones periódicas, prohibición de salida de esta jurisdicción, y
la prestación de una caución económica adecuada, para la cual condicionó la
excarcelación del imputado a la presentación de determinados requisitos que
no vienen al caso analizar, pero que han sido de imposible cumplimiento para
el imputado.
CAPÍTULO II
DE LA ADMISIBILIDAD DEL PRESENTE RECURSO DE APELACIÓN
Ciudadano Juez el artículo 264 del COPP, que regula el examen y revisión de
las medidas cautelares establece en su parte in fine lo siguiente: “La negativa
del tribunal a revocar o sustituir la medida no tendrá apelación”. Pero es el caso
que el Máximo Tribunal de la República, haciendo referencia a esta norma, en
sentencia de la Sala Constitucional de fecha 4 de noviembre de 2003, de No
3060, en el expediente No. 2554 dijo:
“De acuerdo con la norma anterior, no es susceptible de ser apelada
aquella decisión del juez mediante la cual niegue la revocación o sustitución de
la medida privativa de libertad; ello encuentra su justificación en el propósito del
legislador de evitar que se obstaculice el trámite del proceso penal a través de
incidencias que ocasionen una dilación innecesaria, por cuanto esa solicitud
puede volver a proponerse ante el juez, sin limitación alguna.

No obstante, la disposición in commento contempla el supuesto en que


se solicite la revisión de la medida de privación preventiva de libertad en el
curso de un proceso que se ha tramitado conforme a las previsiones legales y,
por tanto, no ha excedido el lapso que normalmente debe durar el proceso
penal, lo cual implica que la antedicha medida cautelar se encuentra aún dentro
de los límites establecidos. Si por el contrario, la privación de la libertad se ha
prolongado más allá del límite máximo establecido, esto es, dos (2) años, y sin
embargo el juez se niega a hacerla cesar, no podría pretenderse aplicar la
prohibición de ejercer el recurso de apelación, conforme al citado artículo 264
del Código Orgánico Procesal Penal, por cuanto el legislador no comprendió en
esa norma dicho supuesto; y para constatar tal afirmación, basta con destacar
que la aludida limitación temporal está prevista dentro del capítulo relativo a los
principios generales que imperan en materia de medidas de coerción personal”.

Entonces, basado en esta sentencia de la Sala Constitucional debe


considerarse admisible el presente Recurso de Apelación, y así debe
declararse.
CAPITULO III
DE LOS MOTIVOS PARA RECURRIR DE LA SENTENCIA
Ciudadano Juez, la sentencia recurrida, al revocar la medida de privación
judicial preventiva de libertad impuesta, y aplicar en su lugar una medida
cautelar sustitutiva, ha violentado específicamente la norma establecida en el
artículo 244 del COPP. La referida norma en su encabezado y primer aparte
establece lo siguiente:
“Proporcionalidad. No se podrá ordenar una medida de coerción
personal cuando esta aparezca desproporcionada con relación con la
gravedad del delito, las circunstancias de su comisión y la sanción
probable.
En ningún caso podrá sobrepasar la pena mínima prevista para cada
delito, ni exceder del plazo de dos años.”
Nótese que el legislador dice al principio de la norma citada que “No se podrá
ordenar una medida de coerción personal cuando aparezca desproporcionada
(…)”. Ahora bien, una medida de coerción personal de las establecidas en el
COPP, propiamente hablando, puede ser, o la privación judicial preventiva de
libertad o las medidas cautelares sustitutivas. Entonces, habiendo el legislador,
hecho referencia a las medidas de coerción personal en conjunto en la norma
citada, dispone luego que “en ningún caso podrá [la medida de coerción
personal] sobrepasar la pena mínima prevista para cada delito ni exceder de
dos años”. Lo que conlleva a concluir que como medida de coerción personal
debe entenderse cualquier modo de restricción de la libertad personal y en
consecuencia ninguna de ellas, podrá sobrepasar de dos años, incluyendo a
las medidas menos gravosas; y así lo ha señalado expresamente la Sala
Constitucional del Tribunal Supremo de Justicia, en Sentencia No. 1712 de
fecha 12 de septiembre de 2001 cuando estableció:
“Etimológicamente, por medidas de coerción personal, debe entenderse
no sólo la privación de libertad personal, sino cualquier tipo de sujeción a
que esté sometida cualquier persona, por lo que incluso las medidas
cautelares sustitutivas, son de esa clase”.
En consecuencia no hay posibilidad de que luego de revocar la medida
privativa, pueda el juzgador sustituirla por otra medida menos gravosa, porque
éstas están dentro de la limitación global de tiempo que hace el legislador; así
quedó establecido en la misma Sentencia arriba citada, cuando se afirmó lo
siguiente: “En consecuencia, cuando la medida (cualquiera que sea) sobrepasa
el término del artículo 253 [hoy 244] del Código Orgánico Procesal Penal, ella
decae automáticamente sin que dicho Código prevea para que se decrete la
libertad, la aplicación de medida sustitutiva alguna, por lo que el cese de la
coerción –en principio- obra automáticamente, y la orden de excarcelación, si
de ella se trata, se hace imperativa, bajo pena de convertir la detención
continuada en una privación ilegítima de la libertad, y en una violación del
artículo 44 constitucional”.
CAPITULO IV
DEL PETITORIO
En virtud de los razonamientos jurídicos y jurisprudenciales antes expuestos, y
de conformidad con el artículo 447, numeral 4to, procedo en este acto a
presentar FORMAL APELACIÓN contra el auto dictado de fecha…….. que
ordenó la aplicación de una medida cautelar sustitutiva, como consecuencia de
haber revocado la privación judicial preventiva de libertad por haberse excedido
de su límite máximo de duración de dos años. Y en consecuencia, solicito que
sea revocado el presente fallo, y se ordene la libertad libre de restricción de mi
defendido, quien todavía se encuentra detenido, por no poder cumplir con los
requisitos impuestos por el Juez de Juicio que decidió el fallo recurrido, por ser
de imposible cumplimiento para el mismo. Es todo es justicia que se espera a
la brevedad posible, en…….. a la fecha de su presentación.-
SOLICITUD DE MODIFICACIÓN DE LAS CONDICIONES ESTABLECIDAS
EN MEDIDA CAUTELAR INNOMINADA POR VÍA DE REVISIÓN

Ciudadano
Juez………………. de Control del Primer Circuito Judicial del Estado………,
con sede en la ciudad de…………..
Su Despacho
Yo,…………………….., titular de la Cédula de Identidad No. ……………..
actuando en este acto en mi carácter de solicitante de la entrega de Vehículo,
asistido en este acto por el ciudadano …………….., Abogado en ejercicio,
inscrito en el IPSA bajo el No. ……..con domicilio procesal en……………… de
esta ciudad, ante Usted y con el debido respeto acudo para exponer:
CAPÍTULO I
DE LOS ANTECEDENTES DEL CASO
En fecha……………… este Tribunal ordenó la entrega del Vehículo
marca………, modelo………….., año ……….., color ……….., serial de la
carrocería ………………………, serial del motor …………., clase …………, de
uso ……………., por considerar que los hechos controvertidos en el
procedimiento penal no revestían, ni nunca revistieron carácter penal, sino que
debían ser conocidos por la jurisdicción civil, expresando que el tercero
reclamante o mi persona, si fuera el caso, debían acudir ante los tribunales
civiles, para formular cualquier reclamación que estimaren procedente, en
virtud de los contratos consensuales de opción a compra-venta, o de
arrendamiento, que cada una de las partes respectivamente sostuvieron haber
pactado.
Pero fundamentado en que existe un riesgo de que se produzca un daño físico
al vehículo y que el mismo pueda tornarse irreparable, ya que el tercero
reclamante presentó ante este Juzgado Expediente Administrativo de Tránsito
No……….. emanado de la Oficina de Investigaciones, Técnica, Científica,
Criminalística de los Accidentes de Tránsito Terrestre de la ciudad de ……….,
de donde se evidenció que el vehículo presentó daños materiales a la fecha
de…………, en la ciudad de…………., o el riesgo de que el mismo pueda
deteriorarse por su uso indebido, o el riesgo de que el poseedor pueda
transferir la posesión del vehículo a un tercero, este Juzgado haciendo uso a su
Poder Cautelar General, decretó una medida cautelar innominada, de
conformidad con los artículos 256 ordinal 9no del Código Orgánico Procesal
Penal y 588 parágrafo primero del Código de Procedimiento Civil, que consistió
en que el referido vehículo aun cuando permanecería con el último poseedor,
es decir, mi persona, no podría salir de la jurisdicción de este Estado ………….,
el poseedor no podría realizar ningún acto de disposición sobre el mismo y que
debía cuidarlo como un buen padre de familia.
CAPITULO II
DE LA REVISIÓN DE LA MEDIDA INNOMINADA IMPUESTA
Pero es el caso que desde la fecha del referido auto, hasta el día de hoy, ha
transcurrido más de un año, y el tercero, para aquella oportunidad reclamante,
no ha incoado la respectiva demanda civil en mi contra. Así las cosas, el riesgo
de que se pueda deteriorarse el vehículo ha desaparecido pues he demostrado
que me he comportado como un buen padre de familia, y ello se evidencia de
Inspección Judicial de fecha………. que sobre el referido Vehiculo practicare el
Juzgado ……… Civil de esta ciudad de…………, donde se dejó constancia del
buen estado físico y de funcionamiento del mismo.
Ahora bien, a la fecha de hoy, la labor que presto me ha llevado a la necesidad
de requerirle a este Tribunal que me permita transitar por todo el territorio
nacional, ya que mantengo relaciones comerciales con la Empresa………..,
que se encuentra domiciliada en el Estado………., y estas relaciones forman
parte del sustento que proporciono a mi hogar y el empleo que genera mi
empresa a terceros. Mi empresa está denominada……….. y está debidamente
inscrita ante el Registro Mercantil, cuya copia del Registro anexo al presente
escrito identificado con el número “1”, y mantiene relaciones comerciales con
la antes mencionada Empresa…….., según se evidencia de contrato de
prestación de servicios, debidamente autenticado ante la Notaría Pública del
Estado……, cuyo documento anexo en copia certificada signado con el número
“2”. Ahora bien, según se evidencia de los estatutos de mi Empresa, tengo
facultades para supervisar las labores que presta mi compañía, y ello porque
mi presencia en las obras que ejecuta mi compañía es fundamental para el
mejor desempeño de los servicios que presto. La limitación que este Tribunal
dispuso para el uso de mi vehículo, ocasiona que deba viajar en transporte
público lo que origina como consecuencia mayores gastos e incomodidades, lo
que se refleja en la disminución de la rentabilidad de mi compañía.
CAPÍTULO III
DE LA SOLICITUD DE ESTA REPRESENTACIÓN
Entonces, en virtud de que la necesidad de la limitación ha variado ya que he
demostrado cuidar como el mejor padre de familia a mi vehículo, y que tengo
necesidades personales que justifican la revisión de esta medida, es por lo que
pido de su competente autoridad para que se sirva autorizar mediante auto y
por la vía de revisión de medidas de coerción personal, el tránsito de mi
vehículo por todo el territorio nacional, y me comprometo nuevamente en este
acto a presentarlo cada vez que la autoridad competente lo requiera. Es todo
en……….. a la fecha de su presentación.-

SOLICITUD DE REVOCACIÓN O SUSTITUCIÓN DE LA PRIVACIÓN


JUDICIAL PREVENTIVA DE LIBERTAD POR VÍA DE REVISIÓN

Ciudadano
Juez………………. de Control del Primer Circuito Judicial del Estado………..,
con sede en la ciudad de………….
Su Despacho
Yo,…………………….. Abogado en ejercicio, inscrito en el IPSA bajo el No.
…….. con domicilio procesal en ……………… de esta ciudad, actuando en
este acto en mi carácter de Apoderado-Defensor del ciudadano …………… ,
titular de la Cédula de Identidad No. …………….. , imputado del
delito………………. ante Usted y con el debido respeto acudo para exponer:
CAPÍTULO I
DE LOS ANTECEDENTES DEL PRESENTE CASO
En fecha ……………………., este Tribunal ……. de Control, dictó auto
mediante el cual impuso la privación judicial preventiva de libertad a mi
defendido, por considerar que se encontraban llenos los requisitos de
procedencia de la medida asegurativa establecidos en el artículo 250 del
Código Orgánico Procesal Penal, fundamentado específicamente en que “se
está en presencia de un hecho punible que merece pena privativa de libertad
cuya acción penal no se encuentra evidentemente prescrita”, además que
“existen fundados elementos de convicción para estimar que el ciudadano
imputado fue autor del hecho que se le imputa y ello se evidencia y se
desprende suficientemente de las actuaciones cursantes a los
folios……………. , las cuales son: el acta policial, el acta de denuncia, las actas
contentivas de declaraciones testimoniales, (…)” y que “existe una presunción
legal de peligro de fuga por la pena aplicable al caso concreto, la cual excede
de diez años en su límite máximo”.

El auto de privación preventiva de libertad a que se ha hecho referencia,


tuvo lugar una vez que se celebrare la audiencia oral de presentación, donde
en virtud de la precalificación del delito que hiciere el Ministerio Público como
Homicidio Intencional, previsto y sancionado en el artículo 407 del Código
Penal, la pena aplicable al caso sería de doce a dieciocho años de prisión.

CAPITULO II
DE LA REVISIÓN DE LA MEDIDA DE ASEGURAMIENTO
PREVENTIVO IMPUESTA
Pero es el caso que tal como se ha venido denunciando por esta
representación a través del presente procedimiento, según escrito presentado
en fecha …………mediante el cual se solicitó que se declarase la
improcedencia de la medida solicitada por la representación fiscal; el Ministerio
Público, procurando una medida privativa de libertad, ya que no tenía indicios
suficientes que acreditaren el peligro de fuga conforme a las circunstancias de
estudio establecidas en el artículo 251 del COPP, precalificó el delito de
manera equivocada como Homicidio Intencional, lo que como consecuencia
daría lugar a la presunción legal del peligro de fuga, de conformidad con el
artículo 251 parágrafo primero del Código Orgánico Procesal Penal, porque la
pena aplicable sería mayor a los diez años; pero posteriormente, al presentar
acusación formal, califica el hecho punible como Homicidio Preterintencional
previsto y sancionado en el artículo 412 del Código Penal, con pena aplicable
de seis a ocho años de prisión.
CAPITULO III
DE LA DESAPARICIÓN DE LAS CIRCUNSTANCIAS QUE DIERON
ORIGEN A LA MEDIDA CAUTELAR IMPUESTA
Así las cosas, como puede observarse, la pena aplicable para el delito
por el cual se ha acusado a mi defendido, no excede de diez años en su límite
máximo y la representación de la vindicta pública, pese a la presentación de la
acusación y haber solicitado que la medida continúe impuesta, no ha
acreditado elementos serios en contra de mi defendido que evidencien el
peligro de fuga o de obstaculización, y por ende, comprueben la necesidad de
la imposición de la medida; Ello significa, que si la necesidad de la imposición
de la medida privativa de libertad nació de la presunción legal del peligro de
fuga, el cual, a su vez, se aplicó en razón de que la pena aplicable excedía a
los diez años en su límite máximo, y si de la acusación presentada por el fiscal,
se observa que al calificar el delito la pena aplicable no iguala ni excede a los
diez años en su límite máximo, significa que no existe tal presunción legal en
contra de mi defendido, y si en virtud de tal inversión de la carga de la prueba,
el Ministerio Público no ha logrado probar o acreditar la necesidad del
mantenimiento de la medida impuesta, cuestión que le corresponde con bases
en el principio de presunción de inocencia y todo lo que se deriva de éste,
respecto a las medidas de aseguramiento preventivo; ello quiere decir, que los
motivos que dieron origen a la imposición de la privación judicial preventiva de
libertad no solo han cambiado hasta el punto de su desaparición, sino que no
han aparecido otros que hagan nacer nuevamente la necesidad de la
imposición de la medida, por lo que la medida impuesta ha perdido vigencia, y
en consecuencia, debe ser revocada.
CAPITULO IV
DE LOS MEDIOS PROBATORIOS Y DEL OBJETO DE LOS MISMOS
Pero aunque no existen en actas los elementos suficientes para
acreditar el peligro de fuga, y por ende, se descarta la posibilidad de que sea
aplicable la privación judicial preventiva de libertad, para que no haya lugar a
dudas sobre la intención de mi defendido de colaborar con el proceso, procedo
en este acto a presentar la siguiente documentación: Cartas de buena
conducta y de residencia emitidas por la Prefectura Civil de la
Parroquia……….. Municipio ……… del Estado ……, signadas bajo los números
“1” y “2”; Carta de ofrecimiento de trabajo dirigida a este Tribunal, la cual
presento en este acto bajo el número “3”, emitida por la Empresa …….
debidamente inscrita ante el Registro Mercantil de esta ciudad de ……., cuyo
documento de inscripción reproduzco en este acto bajo el número “4”; y para su
debida comprobación solicito a este Tribunal que oficie a la referida Empresa
………. ubicada en……….. de esta ciudad de……… para que le informe a este
Honorable Tribunal, si en fecha……….. emitió un Informe dirigido a este
Tribunal, de donde se evidencia que ofrece trabajo al ciudadano …… para
cumplir el cargo de ………. recibiendo una remuneración de………. bolívares
mensuales; Carta de Residencia de la cónyuge de mi defendido, la cual
reproduzco en este acto identificada bajo el número “5”, de donde se evidencia
que la misma permanece viviendo en el domicilio donde residió por última vez
mi defendido, y de donde, por cierto, fue aprehendido el mismo, según se
desprende del folio …. de las actas del presente expediente; Acta de
matrimonio No.…, emitida por……., la cual anexo al presente escrito bajo el
número “6”; Acta de nacimiento No……, emitida por……. de donde se
evidencia el nacimiento del hijo de mi defendido procreado junto a su cónyuge,
signada bajo el número “7”; Todos los medios documentales en este acto
presentados, tienen por objeto acreditar el arraigo al país, asiento familiar y de
los negocios o intereses de mi defendido; Es por lo antes expuesto que solicito
nuevamente que se ordene la excarcelación de mi defendido y en
consecuencia que el mismo quede en libertad.

CAPÍTULO V
DE LA LIBERTAD Y LAS MEDIDAS CAUTELARES MENOS GRAVOSAS O
SUSTITUTIVAS
Honorable Juzgador, de considerar que pueda existir algún elemento
que pueda representar algún peligro de que el imputado obstaculice la justicia;
ese negado peligro puede ser suficientemente satisfecho con la aplicación de
una medida cautelar menos gravosa para el imputado; ello debido a todos los
medios probatorios en este acto presentados, y en razón de la consideración
especial del principio de juzgamiento en libertad y de la excepcionabilidad de
las medidas cautelares, principios de los cuales se desprende, que la privación
se aplicará como medida de última instancia y necesidad, y que el orden para
la aplicación de las medidas restrictivas es el siguiente: 1. La libertad libre de
restricción; 2. Las Medidas Cautelares Menos Gravosas o Sustitutivas, y 3. La
Privación Judicial Preventiva de Libertad; reconociendo que la libertad libre de
restricción es un estado del ser humano inquebrantable, salvo cuando se está
en presencia de las necesidades extremas establecidas en la Ley, conforme al
artículo 44 ordinal 1ero de la Constitución Nacional. Es todo, y es justicia que
se espera en……….. a la fecha de su presentación.-
SOLICITUD DE REVOCATORIA DE PRIVACIÓN JUDICIAL PREVENTIVA
DE LIBERTAD VENCIDO EL LAPSO PARA PRESENTAR ACUSACIÓN
FISCAL

Juez………………. de Control del Primer Circuito Judicial del Estado………..,


con sede en la ciudad de………….
Su Despacho
Yo,…………………….. Abogado en ejercicio, inscrito en el IPSA bajo el No.
…….. con domicilio procesal en ……………… de esta ciudad, actuando en
este acto en mi carácter de Apoderado-Defensor del ciudadano …………… ,
titular de la Cédula de Identidad No. …………….. , imputado del
delito………………. ante Usted y con el debido respeto acudo para exponer:
CAPITULO I
DE LOS ANTECEDENTES DEL PRESENTE CASO
En fecha…………. este Juzgado decretó privación judicial preventiva de
libertad en contra de mi defendido, por considerar que se encontraban llenos
los requisitos de procedencia de la medida, establecidos en el artículo 250 del
COPP. Pero es el caso que desde la fecha de la imposición de la medida,
hasta el presente acto, han transcurrido más de treinta (30) días continuos y la
representación del Ministerio Fiscal no ha presentado Acusación Formal.
Asimismo, a pesar de la solicitud formulada ante este Juzgado por el Ministerio
Público de acordar la prórroga de quince (15) días para presentar acusación,
este Tribunal previa audiencia de las partes, desestimó la solicitud fiscal por
infundada y por lo tanto notificó al Ministerio Público que de no presentar
acusación dentro del plazo establecido de treinta (30) días, el imputado, según
sea el caso, quedaría en libertad o bajo alguna medida cautelar sustitutiva de
las establecidas en el artículo 256 del COPP.
CAPITULO II
DE LA SOLICITUD DE ESTA REPRESENTACIÓN Y SU BASAMENTO
JURÍDICO
Honorable Juzgador, basado en los principios de inviolabilidad de la libertad
personal, de juzgamiento en libertad, y en los demás preceptos jurídicos que
consagran a la privación preventiva como medida de último recurso y
necesidad, el legislador dispuso en el artículo 250 en su 6to aparte del Código
Orgánico Procesal Penal, que vencido el lapso de treinta (30) días continuos
(artículo 172 del COPP) para presentar Acusación, y su prórroga de quince (15)
días, si la hubiere, sin que el Fiscal la hubiere formulado, el detenido quedará
en libertad, mediante decisión del Juez de Control. Por ello, acudo ante su
competente autoridad, para solicitar, que en virtud de que se ha vencido el
lapso de treinta (30) días y el fiscal no ha presentado acusación, que revoque
la medida de privación judicial preventiva impuesta, por violentar el límite
máximo de duración para la presente fase preparatoria. En consecuencia,
solicito que mi defendido quede en libertad absoluta, libre de restricción, o en
su defecto, caso en el cual este Tribunal considere que existe algún riesgo de
fuga o de obstaculización, imponga medidas cautelares menos gravosas de las
establecidas en el artículo 256 del COPP.
CAPITULO III
DE LOS MEDIOS PROBATORIOS QUE DESACREDITAN LA NECESIDAD
DE IMPOSICIÓN DE LAS MEDIDAS CAUTELARES MAS GRAVOSAS PARA
EL IMPUTADO
Ahora bien, para acreditar el arraigo al país de mi defendido, determinado por
su domicilio, residencia habitual asiento de su familia, procedo a presentar los
siguientes recaudos: Constancias de buena conducta y de residencia emitidas
por la Prefectura Civil de la Parroquia……….. Municipio ……… del Estado
……, signadas bajo las letra “A” y “B”; Constancia de residencia de la cónyuge
de mi defendido, la cual reproduzco en este acto identificada bajo la letra “C”;
Acta de matrimonio No.…, emitida por……., la cual anexo al presente escrito
bajo la letra “D”; Actas de nacimiento No…… y …… respectivamente, emitidas
por……., de donde se evidencia el nacimiento de los dos hijos de mi defendido
procreados junto a su cónyuge, identificadas bajo las letras “E” y “F”.
CAPITULO IV
DE LA SELECCIÓN ENTRE LA LIBERTAD PLENA O MEDIDAS
CAUTELARES MENOS GRAVOSAS
En el caso de autos, es decir, cuando se encuentre vencido el lapso legal para
presentar acusación fiscal y el imputado se encuentra detenido, el legislador le
impone al Juez de Control, sin examinar requisitos de procedencia, la
obligación de revocar la medida privativa impuesta, y lo faculta para que
imponga una medida cautelar menos gravosa en sustitución de la privación
preventiva, u ordene la excarcelación del imputado sin aplicar de ningún modo
restricción a su libertad; pero solo para decidir sobre estas dos opciones, podrá
examinar los requisitos que dieron origen a su imposición, caso en el cual, si
observa que no es necesaria la imposición de medida alguna podrá decretar la
libertad libre de restricción. Ciudadano Juez, está demostrado el arraigo del
imputado al país, y de su familia, y no se evidencia de autos que mi defendido
haya observado alguna mala conducta en este proceso o en otro anterior,
además que no poseer antecedentes penales, según se evidencia al folio……..
de las presentes actuaciones. Es por ello que se afianza la solicitud de que mi
defendido permanezca en libertad libre de restricción o en el peor de los casos
bajo alguna medida cautelar poco gravosa para el mismo y de posible
cumplimiento. Por último, solicito que la presente solicitud sea decidida de
inmediato o dentro de los tres días siguientes, de conformidad con el artículo
177 del COPP. Es todo, es justicia que se espera en…….. , a la fecha de su
presentación.-

Potrebbero piacerti anche