Sei sulla pagina 1di 4

INTRODUCCIÓN A LA CULTURA AMBIENTAL

Hoy se habla de la cultura ambiental y la necesidad de considerar una comunidad sensible, con conciencia
ambiental, para la conservación de los recursos naturales y la biodiversidad.
El hombre, desde tiempos antiguos, tuvo plena conciencia de su dependencia del ambiente, sus primeras
normas religiosas y jurídicas consagraron su protección. Todas las culturas primitivas temían a los elementos
naturales, los identificaban, les ofrecían sacrificios para que preservaran su ambiente natural, imponían tabúes
para protegerlos.
A lo largo de su historia, cada ser humano, construye su propio repertorio de valores individuales, los cuales
determinarán su comportamiento sobre el ambiente, y afectan sus valores-actitudes, es decir su cultura.
Para la UNESCO(2016), la Cultura permite al ser humano la capacidad de reflexión sobre sí mismo: a través de
ella, el hombre discierne valores y busca nuevas significaciones.
Miranda (2013) afirma que, la cultura es un término globalizador, que incluye todo aquello que la humanidad
ha incorporado en la naturaleza, con el fin de dominarla, transformarla, establecer relaciones sociales
acertadas, generar respuesta a sus interrogantes y tener su propia cosmovisión...Por ejemplo, la agricultura
es una de las primeras acciones que realizó el ser humano en la naturaleza para la satisfacción de sus
necesidades... Por lo tanto, el ser humano es siempre un portador de valores culturales.
La cultura ambiental es la manera como los seres humanos se relacionan con el medio ambiente. Cada pueblo
impacta en sus recursos naturales y en su sociedad de manera particular. De ahí que el tratamiento a los
problemas ambientales involucre la necesidad no solo de un enfoque educativo, sino también cultural, que se
aborde desde los valores, las creencias, las actitudes y los comportamientos ecológicos.
Aparicio (2011), manifiesta que la cultura ambiental para que sea real y presente en nuestra sociedad debe
ser difundida y el medio es la educación ambiental (también se encuentran otros como los medios de
comunicación) la cual implique la interiorización de los valores ambientales. La cultura ambiental en las
universidades no debe quedar en simples propuestas sino en acciones entre docentes y estudiantes de todo
nivel educativo hasta los universitarios.
En el contexto actual (mundial), el desarrollo de una cultura ambiental supone un cambio de concepción del
hombre sobre sí mismo y sobre su lugar en el mundo, y consecuentemente de su lugar respecto con los otros
hombres, con la sociedad y con la naturaleza. Es a través de la Educación que el hombre interioriza la cultura;
el hombre, en tanto sujeto educable, es capaz de construir y producir conocimientos, de desarrollar su
capacidad y formar y reorientar sus valores, lo que hace posible que modifique sus fines a través de su
actividad, pudiendo contribuir como sujeto individual a la transformación de la realidad.
Para ello, debemos conocer los objetivos de la Educación Ambiental, sus propósitos, los cuales se encuentran
definidos en el Seminario Internacional de Educación Ambiental (Belgrado, Yugoslavia, 1975), siguen en plena
vigencia y son: Toma de Conciencia, Conocimientos, Actitudes, Aptitudes, capacidad de evaluación y
Participación.
Así mismo debemos conocer los conceptos sobre: Consumo Responsable, sus dimensiones, promover el
desarrollo sostenible y sus ejes: ambiental, social y económica. Y practicar la ecoeficiencia, para minimizar los
Problemas ambientales, como: cambio climático, contaminación, deforestación, degradación del suelo,
consumo de energía, escasez de agua, etc.

PROGRAMA ACADÉMICO DE FORMACIÓN GENERAL


SEMESTRE 2019-2
RELACION DEL HOMBRE CON LA NATURALEZA

Las relaciones hombre-sociedad-naturaleza condicionan y son condicionadas por la cultura ambiental y


determinan la orientación de la dimensión ambiental de la actividad humana, expresada en las políticas de los
Estados, de las instituciones productivas, de servicio, de investigación, sociales, educativas, artísticas,
culturales, y en el comportamiento social; por lo tanto, la formación de un ciudadano contemporáneo en un
país que construye una sociedad diferente, tiene que estar en correspondencia con una cultura que posee un
sistema de valores propios, en el cual los valores morales son pilares, pues guían la conducta y los momentos
de elección del hombre en un asunto de cualquier índole. La moralidad es un fenómeno social que hay que
analizar a partir de la actividad humana, en especial de la práctica productiva que el hombre realiza, que es
donde las cosas toman significación para los hombres. Es necesario considerar los valores que emergen del
contexto histórico nacional y mundial, y aquellos que emanan de la actividad concreta que realiza el individuo.
Es importante conocer desde cuándo el hombre se ha interesado en cuidar su ambiente, y para ello debemos
hacer revisión de información sobre las tres fases o etapas, desde la aparición del homo sapiens hasta la
actualidad.
A) Sociedad cazadora y recolectora
Durante el Paleolítico, (Entre 2.5 m.a. – 10.000 a.), hace entre 50 000 y 40 000 años.
El hombre primitivo tomaba lo que la naturaleza le ofrecía:
recolectaba los frutos, raíces, hojas, semillas y cazaba los animales
para su alimentación y protección.
Cuando éstos escaseaban tenía que ir de un lugar a otro en su
búsqueda, por lo que no contaba con un sitio fijo donde vivir y por
tales condiciones de vida se le conoce como hombre nómada. Al
cambiar de residencia permitía que el medio natural se regenerara,
conservando así los recursos naturales.

B) Sociedad agrícola y ganadera: Comenzó en el Neolítico, hace unos 10 000 años.


Con el descubrimiento de la agricultura y de la domesticación de
animales, el hombre ya no tuvo necesidad de cambiar
constantemente de morada.
El mismo generaba los productos que requiera cultivando la tierra y
criando animales. Los recursos que estos pueblos tomaban y
aprovechan de su medio natural, solo eran los necesarios para
satisfacer sus necesidades y hacer cambios con otros pueblos en
pequeñas cantidades. Aun cuando ya se practicaba la quema para
limpiar las tierras de cultivo y la tala de bosques, por realizarse a baja escala, no dañaban la naturaleza, lo que
permitía regenerarse para seguir proporcionando sus recursos al hombre. La necesidad de obtener productos
escasos y de alta demanda social motivó el descubrimiento de América, suceso que influyo en el aumento de
la explotación desmedida de la naturaleza. Se incrementó la práctica de la agricultura y la ganadería y al ocupar
grandes extensiones de terreno para cultivar productos de interés comercial y pasto para la cría de ganado,
se destruyeron las plantas y los animales que originalmente habitaban allí. Además se hizo una explotación
minera y forestal muy grande, ocasionando el desequilibrio del medio natural.
C) La sociedad industrial (XVI a XVIII/ XIX-XX-XXI) (1401-1800; 1801-1900; 1901-2100)

PROGRAMA ACADÉMICO DE FORMACIÓN GENERAL


SEMESTRE 2019-2
Con la invención de la maquina a vapor, la explotación de los recursos naturales se hizo más intensa, afectando
fuertemente al medio natural.
El uso de máquinas permitió obtener recursos naturales con más rapidez y transformarlos en productos de
consumo, a través del proceso de industrialización, para poblaciones cada vez más grandes. La cantidad de
recursos naturales que se toman y la velocidad con que se obtienen aumentó con el uso de máquinas de
combustión interna (motores de automóviles) y el uso de energía que proporciona el petróleo; trajo como
consecuencia una alteración enorme de la naturaleza. El uso del petróleo, como combustible, arroja al
ambiente una gran cantidad de sustancias tóxicas que aquel es incapaz de reincorporar. Como consecuencia
surgen los daños a la salud del hombre y de los demás seres vivos. La contaminación ha sido provocada, por
el crecimiento industrial desordenado y el aumento de la población humana, que se han dado sin considerar
las posibilidades de la naturaleza para asimilar la gran cantidad de productos desecho. Estos procesos de
degradación ecológica, iniciados con la Revolución Industrial, se caracterizan por su dimensión planetaria y
por su complejidad, dado que es expresión de una crisis más amplia. La crisis ambiental de carácter global
que padece el planeta, supone uno de los principales frenos al desarrollo económico y social de todos los
países.
Su carácter global se hace patente en multitud de fenómenos: la lluvia ácida, el calentamiento de la atmósfera,
el deterioro de la capa de ozono, la extinción del bosque subtropical, el agotamiento de los recursos no
renovables, la producción masiva de residuos urbanos, etc. Todos ellos reflejan las externalidades ambientales
producidas por un modelo económico basado en el crecimiento sostenido y en la explotación de la naturaleza.
Si bien no es esta la primera crisis en la historia humanidad, es la primera que tiene un alcance global.

Bibliografía

Código de biblioteca LIBROS, REVISTAS, ARTÍCULOS, TESIS, PÁGINAS WEB.

Andía, J. (2013). Manual de Derecho Ambiental. Segunda Edición. Perú.

Aparicio, Z. (2011). Promoción de la educación ambiental para un desarrollo


sostenible en el ámbito universitario (Tesis maestría). Recuperado de:
http://repositorio.une.edu.pe/handle/UNE/734.
599.9 D56 Díaz, M. (2013).Breve historia del homo sapiens. (3° ed.).Madrid: NOWTILUS.

333.7 A79 EJ. 2 Salas, I.(2010). Medio ambiente y evolución. (1° ed.).Bogotá: Universidad
Externado de Colombia.
CTMA – 2º Bachillerato (2015).La humanidad y el medio ambiente. Evolución de
las relaciones entre humanidad y naturaleza. España: ESSO. Recuperado en
http://files.camolinaro.webnode.com/200000577-
5c5d65e518/LA%20HUMANIDADE%20Y%20EL%20MEDIO%20AMBIENTE.pdf

MINAM. (2011). Educación Ambiental. (1 ed.). Lima: Biblioteca Nacional de Perú.

Miranda L. (2013). Cultura ambiental: un estudio desde las dimensiones de valor,


creencias, actitudes y comportamientos ambientales. Artículo de revisión.
Producción + Limpia. Vol.8, No.2. 94 – 105.
PROGRAMA ACADÉMICO DE FORMACIÓN GENERAL
SEMESTRE 2019-2
PROGRAMA ACADÉMICO DE FORMACIÓN GENERAL
SEMESTRE 2019-2

Potrebbero piacerti anche