Antequera

Antequera, ciudad situada en el principal cruce de caminos de Andalucia, ha sido, y lo es en la actualidad, el paso obligado de los viajeros
de todos los tiempos. Por su estratégica situación se le ha llamado "el corazón de Andalucía". De hecho, hasta se la consideró para ser
la capital de Andalucía tras conseguir la autonomía.

La ciudad se encuentra en el regazo de la famosa Sierra del Torcal, en la que encontramos el Paraje Natural del “Torcal de “Antequera”,
que constituye uno de los mejores y más espectaculares ejemplos de relieve kárstico de toda Europa y que está formado por rocas que
se encontraban en el fondo marino.

Las características naturales de Antequera han hecho de ella lugar de tránsito y asentamiento desde la prehistoria, dejándonos el
Conjunto de los Dólmenes de Menga, Viera y El Romeral, que está declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO por sus
particularidades. Entre ellas, que tienen una orientación un poco particular, y miran hacia el Torcal y hacia la Peña de los Enamorados, un
peñón con forma de cabeza de indio que oculta una leyenda de la que hablaremos más tarde. Pero en general todas las sociedades que
han pasado por aquí lo han considerado un sitio mágico.

El nombre de la ciudad proviene de la palabra “Antikaria”, la Antigua. Esto se debe a que cuando los romanos llegaron vieron en los
dólmenes una señal inequívoca de un poblado anterior a ellos. Posteriormente se asentaron y Antequera se convirtió en una próspera
comarca que les surtió de cereales y aceite. De esta época, de los romanos, nos han llegado hasta hoy un conjunto de termas que
veremos luego.

Más tarde, con la llegada de los árabes, se consolida un importante núcleo denominado Madina Antaquira. Y desde mediados del siglo
XIII, una vez conquistadas Sevilla y Jaén, comienza a tener importancia como fortaleza militar fronteriza.

Los monarcas castellanos comprendieron la importancia de esta ciudad si querían llegar a conquistar Granada. Así que en abril de 1410,
el Infante Don Fernando convocó a nobles y capitanes para hablar sobre el próximo objetivo. Algunos le recomendaban Baza, otros
Ronda, otros Gibraltar por la importancia del mar. Pero finalmente el Infante se decidió por Antequera. Así que salió de Córdoba Don
Fernando con su gran ejército, pero de camino fue sorprendido por un gran temporal de agua y viento. Habían llegado a un río y los
capitanes querían retrasar el cruzarlo, pero el Infante que quería llegar a Antequera cuanto antes les dijo que iban a cruzarlo en ese
momento y pronunció la conocida frase de “salga el sol por Antequera y que sea lo que Dios quiera”. ¿Creéis que le salió bien? ¿Lo
consiguieron?
Efectivamente, consiguen cruzar el río, cosa que les subió la moral muchísimo ya que pensaron que Dios estaba de su lado. Llegan a
Antequera y al día siguiente se produce una sangrienta batalla. Tras el desastre, el emir granadino manda a su embajador a hablar con
el Infante hasta dos veces intentando acordar la paz. ¿Creéis que aceptó? No, ni en broma iba a aceptar las condiciones del emir y dejar
la lucha, porque quería conseguir una gran victoria que le hiciera muy famoso y le abriera las puertas del trono aragonés.

Gracias a un judío traidor los soldados cristianos saben que los musulmanes ya apenas tienen comida ni agua, salvo la que les llega
por un pequeño postigo. Así que vigilan ese postigo para que tampoco puedan coger agua de ahí. Las tropas cristianas guardan el sitio y
amenazan a cualquiera que quiera tomar agua.
Imagináos, los tenían aislados, sin comida ni agua, estaban desesperados. En los días siguientes mientras continuaban las peleas en los
alrededores, los cristianos idearon una estratagema para hacerse con la torre principal de la villa. Fue una dura batalla cuerpo a cuerpo en
la villa que obligó a los defensores a retirarse a la alcazaba, donde pidieron negociar la entrega de la fortaleza a cambio de sus vidas,
familias y bienes. ¿Creéis que Don Fernando aceptó?

Pues esta vez sí que aceptó las condiciones, salvándose así las más de 2500 defensores que quedaban en la Alcazaba. El infante ya
tenía su gran victoria así que no necesitaba luchar más. Y en la mañana del 24 de septiembre de 1410, hizo éste su entrada en la plaza,
recibiendo las llaves de manos de su Alcaide y ordenando que se izase de inmediato la bandera de Castilla en lo más alto de la torre del
homenaje. La Villa de Antequera y su castillo quedaban desde ese día incorporadas a la Corona de Castilla.

El elevado coste del sitio de Antequera impidió continuar con la guerra, por lo que se propuso una tregua. Así que una vez liberado de sus
obligaciones en el sur, pudo centrarse en obtener el trono de Aragón, cosa que conseguiría un par de años más tarde y reinaría como Don
Fernando I “El de Antequera”.

A partir de la conquista de Granada en 1492, la ciudad comienza a transformarse y realizar su expansión fuera de las murallas,
aumentando su población en muy poco tiempo y convirtiéndola en una de las ciudades más importantes de la Corona de Castilla. La
nobleza antequerana se construirá suntuosos palacios y todas las órdenes religiosas se asentarán en ella para poblarla de iglesias y
conventos convirtiéndola en la auténtica “ciudad-conventual” que aún hoy sigue siendo, como podremos comprobar luego visitando
lugares como La Real Colegiata de Santa María la Mayor o el convento-museo de las Carmelitas Descalzas.

Pero será durante los siglos XVI y XVII cuando la ciudad realiza el mayor crecimiento demográfico, llegando a ser una de las ciudades
comerciales más importantes de Andalucía debido principalmente a su ubicación como encrucijada de dos de las principales rutas
comerciales: Sevilla-Granada y Málaga-Córdoba.
El siglo XIX se caracterizará por la pérdida de población debido a las epidemias y la entrada en escena de una burguesía que buscará en
el sector textil y lanero, alternativas a la agricultura y a los oficios en decadencia. El desembarco de la era industrial en la ciudad, hace
que sus productos puedan ser comercializados en toda España, siendo muy famosas y valoradas las mantas Antequeranas. Pero poco
después, esta misma expansión industrial le estallará en las manos a la ciudad, y Antequera irá perdiendo mercado en favor del textil
Catalán, hasta desaparecer por completo.

Pero en el siglo XXI se vive un fuerte y progresivo incremento de la actividad turística, fundamentada en la privilegiada situación
geográfica que como habéis visto ha sido muy importante durante toda su historia Y esto unido a la dedicación de años en la
conservación del Patrimonio histórico-artístico y la apertura del Museo de la Ciudad hacen de Antequera un destino maravilloso.

Ahora, a Antequera vienes por todo esto pero te quedas por una cosa muy importante. ¡La comida! Y es que la gastronomía antequerana
es una auténtica maravilla, con su mollete, su porra, sus platos de caza y por supuesto los dulces como el bienmesabe que yo creo que
con el nombre nos lo dice todo. También destacan los dulces festivos de Navidad o Semana Santa, ya que como os dije Antequera es
una ciudad con gran presencia religiosa y en los conventos se encargan de realizar estos maravillosos dulces.
A-B: 5 min B-C: 7 min C-D: 3 min D-E: 2 min E-F: 4 min F-G: 5 min G-H: 8 min H-I: 3 min
Plaza del Portichuelo: Iglesia de Santa María de Jesús y Capilla Tribuna Virgen
Socorro
Plaza San Sebastián
Convento de la Encarnación
Plaza Coso Viejo
Estamos ahora en la Plaza del Coso Viejo, que fue también conocida
antiguamente como Plaza de las Verduras por instalarse en ella el
mercado al aire libre. Se puede contemplar en el centro de la misma una
escultura ecuestre del Infante Don Fernando, el protagonista de la toma
de esta ciudad que os conté anteriormente. Y fijáos en el caballo. ¿Sabéis
qué significa que esté representado con una pata en el aire?
Veréis, si nos encontramos con una estatua ecuestre como esta, podemos
saber cómo murió la persona según la postura del caballo.
- Si el caballo tiene dos patas en el aire, la persona murió en combate.
- Si el caballo tiene una de las patas frontales en el aire, la persona murió
de heridas recibidas en combate.
- Si el caballo tiene las cuatro patas en el suelo, la persona murió de
causas naturales.

Pero esta estatua lleva aquí relativamente poco tiempo, ya que anteriormente y desde la época franquista en el centro se encontraba una
Cruz de los Caídos para honrar a los caídos del Bando Nacional.

Al fondo encontramos una fuente representativa de los cuatro elementos: agua, fuego, aire y tierra. A esta plaza se asoman, desde la
ciudad alta, el mirador de las Almenillas, las murallas y el Arco de los Gigantes que visitaremos más tarde.

En la plaza encontramos también dos edificios importantes: el Convento de Santa Catalina de Siena y el Palacio de Nájera, bella
mansión antequerana en la que actualmente encontramos el Museo de la Ciudad.
Museo Conventual de las Carmelitas Descalzas
Plaza del Carmen y postigo La Estrella
Arco de los Gigantes
Nos encontramos ahora ante el arco de los Gigantes, construcción que es
BIC y Patrimonio Histórico de España y que se hizo para sustituir una
antigua puerta en recodo. Es una muestra del interés que tenía la ciudad
por preservar el legado romano, ya que se decidió colocar todas aquellas
estatuas y lápidas latinas que habían aparecido en las ciudades romanas
de alrededor. Pero los elementos más importantes de este arco son la jarra
de azucenas de la clave, el castillo y el león de la cornisa. ¿Sabéis por
qué?
Porque estos elementos conforman el escudo de la ciudad de Antequera.

Este arco estaba antiguamente coronado con una gran estatua de

Hércules recordando la leyenda que hay sobre la creación de Antequera,
con sus primeros pobladores y los dioses del Olimpo. Cuenta la leyenda
que cuando Hércules, hijo de Júpiter y de Alcmena, estaba realizando una
de sus tareas se encontró con un enorme dique que soportaba una gran
extensión de agua. Hércules lo rompió abriendo una brecha, llamada hoy
Los Gaitanes del Chorro, por donde las aguas se precipitaron en dirección
al mar.
Para dejar constancia del portentoso hecho que había realizado, clavó en el suelo 25 grandes piedras, en cuyo centro clavó tres a
modo de pilares, y cubrió el recinto con cinco enormes losas, creando así la conocida cueva de Menga de Antequera. Al marcharse
Hércules dejó pobladores, quedando así fundada Antikaria. Debido a esta leyenda este arco se le llama también de Hércules. De esta
estatua solo nos queda la parte inferior ya que fue destruida por los buscadores de tesoros, y se encuentra actualmente en el Museo
Arqueológico de la ciudad.
Mirador Plaza de Santa María
Llegamos a nuestra última parada del tour, la Plaza de Santa María, que recibe
su nombre porque aquí se encuentra la Colegiata de Santa María.
Actualmente en la Iglesia no se realizan cultos y su interior acoge conciertos y
exposiciones itinerantes.

Justo en el centro encontramos una escultura de Pedro Espinosa, ¿lo

conocéis?
Fue miembro de la escuela poética antequerana del siglo de oro; este
monumento rinde homenaje y recuerdo a la primera Cátedra de Gramática
creada por la Real Colegiata de Santa María la Mayor.

Y por último y lo más llamativo de esta plaza es su impresionante mirador,

desde el que podemos observar la ciudad de Antequera. Yo os voy a destacar
dos cosas:
La primera, las termas romanas, que son la prueba de que la ciudad romana de Antikaria existió. Estas termas datan de la segunda mitad
del siglo I d.C y su uso se prolonga hasta bien entrado el siglo V d.C. Se conoce que se encontraban en funcionamiento tres piscinas de
agua fría, templada y caliente respectivamente.

La segunda, la Peña de los Enamorados, que como os dije al principio de nuestro viaje ha sido considerado un sitio mágico por todas las
civilizaciones que han pasado por la ciudad de Antequera. La Peña de los Enamorados es visible desde muchos puntos de la ciudad. Es
un peñón calizo que tiene una morfología bastante característica: parece la cabeza de un indio tumbado. La leyenda cuenta que una
pareja de enamorados (él, cristiano y ella, mora) se encontraba huyendo de unos soldados enviados por el padre de ella cuando fueron
acorralados y, para evitar que los separasen, decidieron tirarse al vacío y así unirse en la eternidad.
 ITINERARIO 1

● Plaza de San Sebastián, Iglesia de San Sebastián (1)

● Cuesta Zapateros y San Judas
● Mirador de las Almenillas
● Arco de los Gigantes (2)
● Recinto Monumental de la Alcazaba (3)
● Plaza de los Escribanos
● Plaza de Santa María: Colegiata de Santa María (4), mirador (Peña de los
Enamorados y termas romanas (5))
● Calle Herradores
● Iglesia de Jesús (6) y Capilla Votiva (7) y Plaza del Portichuelo
● Cuesta Real
● Iglesia de San Juan (8)
● Complejo Henchidero. Antigua Fábrica de Mantas (9)
● Puerta de Málaga (10)
● Bajada del Río
● Puerta del Agua
● Plaza del Carmen. Iglesia del Carmen (11)
● Cuesta de los Rojas
● Plaza de las Descalzas. Iglesia San José y Museo Conventual
de las Descalzas (12)
● Calle Encarnación
● Plaza Coso Viejo y Convento de las Catalinas (13)
● Museo de la Ciudad (14)
● Convento de la Encarnación (15)

ITINERARIO 2

● Plaza de San Sebastián, Iglesia de San Sebastián (1)

● Cuesta de la Paz y Cuesta Caldereros
● Iglesia de Jesús (2) y Capilla Votiva (3) y Plaza del Portichuelo
● Calle Herradores
● Mirador de las Almenillas
● Arco de los Gigantes (4)
● Recinto Monumental de la Alcazaba (5)
● Plaza de los Escribanos
● Plaza de Santa María: Colegiata de Santa María (6), mirador (Peña de los Enamorados y termas romanas (7))
● Postigo de la Estrella, muralla Plaza del Carmen (8)
● Plaza del Carmen. Iglesia del Carmen (9)
● Cuesta de los Rojas
● Plaza de las Descalzas. Iglesia San José y Museo Conventual de las Descalzas (10)
● Calle Nájera
● Plaza Coso Viejo y Convento de las Catalinas (11)
● Museo de la Ciudad (12)
● Convento de la Encarnación (13)
http://www.sondytour.net/ruta_plaza_a_plaza
Estas visitas guiadas diurnas para individuales están programadas todos los viernes, sábados y domingos.
Se trata de una visita a pie cuya duración es de DOS HORAS y media (Horario: 11.00h a 13.30h.)
Itinerario
El lugar de encuentro para el inicio es la Oficina de turismo situada en la Plaza de San Sebastián. La ruta plaza a plaza necesitará un mínimo de 4 participantes o bien el
equivalente en euros.. En caso contrario se suspenderá la salida .
● Plaza de San Sebastián
● Cuesta de San Judas
● Arco de los Gigantes
● Colegiata de Santa María La Mayor
● Termas Romanas- Muralla árabe
● Plaza del Portichuelo
● Iglesia de Santa María de Jesús
● Calle Herradores
● Postigo de la Estrella
● Iglesia del Carmen

Tarifa
Precio por persona: 9 €
Visita Antequera completa: 45€ http://visitaantequera.com/producto/visita-guiada-antequera-piedra-sobre-piedra/#tab-booking-
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