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Aplicación de los microorganismos en la biotecnología.

El uso de los microorganismos se ha obtenido con el paso de los años por que antes no se veía tan
cotidianamente el uso de la tecnología para buscar beneficios comunes a la humanidad Hace
trescientos años Antonie van Leeuwenhoek observo por primera vez en un microscopio primitivo
“unos pequeños aniculos” que estos se conocen como microorganismos. Pero, ¿Qué son los
microorganismos? Son los seres más primitivos y numerosos que existen en la tierra, los podemos
encontrar en el suelo, agua, y aire. Estos participan de forma vital en todos los ecosistemas y están
en interacción continua con las plantas, animales y el hombre. Los microorganismos son clave para
el funcionamiento de los sistemas biológicos y el mantenimiento de la vida sobre el planeta, ya que
participan en procesos metabólicos, ecológicos y biotecnológicos. Estos son utilizados en la
industria, para la producción de una serie de sustancias como los son; disolventes alcoholes,
aminoácidos, enzimas, ácidos orgánicos, con un rendimiento mayor y con una inversión económica
menor para obtener los mismos beneficios. El lugar donde vive una población microbiana en un
determinado ambiente se denomina hábitat. Por lo tanto, los podemos encontrar tanto en ambientes
familiares como en lugar pocos comunes, como aquellos tan extremos que se consideran
inadecuado para formas de vida superiores. Las poblaciones microbianas se relacionan de varios
modos y tales interacciones pueden ser perjudícales o beneficiosas. En muchos casos las
poblaciones interaccionan y cooperan en funciones nutricionales con los productos de desechos
derivados de las actividades metabólicas de algunas células sirviendo como nutrientes para otras.
La humanidad se ha visto siempre afectada por enfermedades que se generan ocasionalmente en
forma de pestes o plagas, estas sean extendido a través de comunidades enteras. La primera prueba
documentada de una infección microbiana consiste en un bajorrelieve encontrado en la ciudad de
egipcia de Menfis. La teoría microbiana de la enfermedad, propone que los microorganismos son
la causa de una amplia gama de enfermedades. Estos pequeños organismos, invaden a los humanos,
animales y otros huéspedes. Su crecimiento y reproducción dentro del portador puede producir una
enfermedad. Estos microorganismos patógenos, pueden referirse a un virus, bacterias, protistas y
hongos. Los cuales son los causantes de enfermedades infecciosas, aun cuando el patógeno es la
principal causa de una enfermedad infecciosa, factores personales como la herencia
genética, nutrición, fortaleza o debilidad del sistema inmunológico, ambiente y hábitos higiénicos
a menudo influencian la severidad de la enfermedad y la probabilidad de que un individuo en
particular se infecte tras ser expuesto al patógeno. Esta teoría fue un descubrimiento científico
realizado en la segunda mitad del siglo XIX, demostrada por Louis Pasteur reemplazando teorías
anteriores. Aunque fue muy controvertida cuando se propuso, es ahora fundamental en la medicina
moderna y la microbiología clínica, conduciendo a innovaciones tan importantes como el
desarrollo de la vacuna, el antibiótico, la esterilización y la higiene como métodos efectivos contra
la propagación de enfermedades contagiosas.

“Sin los microorganismos, las formas de vida superiores no habrían aparecido nunca y no serían
capaces de sobrevivir. De hecho, incluso el oxígeno que respiramos es el resultado de la actividad
microbiana en el pasado. Además, tanto los humanos como los animales y las plantas dependen
completamente de la actividad microbiana para reciclar los nutrientes fundamentales y degradar
la materia orgánica. Así pues, podemos afirmar que no hay ninguna otra forma de vida más
importante que los microorganismos para el mantenimiento de la vida en la Tierra. “Brock, T.D.
(1997)
Efectivamente, los microorganismos han existido en la tierra miles de millones de años
antes de que aparecieran las plantas y los animales Si bien, son la forma de vida más pequeñas, y
llevan a cabo muchas reacciones químicas necesarias para los organismos superiores, sin ellos no
sería posible la vida en general. Estos abarcan diversas áreas como en la alimentaria, química,
farmacéutica, producción microbiana de enzimas y en la biotecnología. La aplicación de este
conocimiento ha mejorado muchísimo la salud y el bienestar de los humanos. Además de entender
los microorganismos como agentes de las enfermedades, la microbiología ha avanzado mucho en
la comprensión de la importante función que desempeñan los microorganismos en la agricultura y
la alimentación. De esta manera, los microbiólogos han podido explotar las actividades
microbianas para obtener valiosos productos humanos, generar energía y limpiar el medio
ambiente.
La biotecnología, ha sido un área aplicada para la obtención de buenos resultados y como
sabemos, todo esto se lleva en base a un proceso científico, para poder llegar a cierto resultado.
Esta se ve necesitada de microorganismos para la producción de fertilizantes, insecticidas
biológicos, producción de proteínas microbiana, la cual trabaja como suplemento alimenticio, las
bacterias y hongos son de gran ayuda para los insecticidas biológicos, ya que normalmente se usan
para que detengan las plagas, pero sin dañar el cultivo. Como sabemos la biotecnología tiene
diversas ramas, ya sea en la ingeniería de alimentos, biología molecular, alimentos transgénicos,
bioquímica, ingeniería genética, etc.
“La biotecnología, es aplicada para el uso de microorganismos solubilizadores de fosfato (MSF),
esto es una alternativa biotecnológica para que la agricultura sea sostenible, la solubilización del
fosfato en el suelo, es efectuada por microorganismos de muy variada taxonomía y estilo de vida.
Así mismo, utiliza el desarrollo de alternativas de biofertilización fosfórica basadas en
bioinsumos.” Torres Patiño (2014)

Considero que, la solubilización de los fosfatos no biodisponibles del suelo es una


capacidad natural que resulta ser generada por diferentes microorganismos, por sus características
y ventajas, está puede explotarse como una tecnología alternativa a la fertilización química que
conocemos tradicionalmente, para obtener una agricultura sostenible. El amplio conocimiento de
las bases biológicas de la solubilización del P, hace prever una utilización más generalizada, debida
a los mayores esfuerzos para el mejoramiento de la capacidad a través de prácticas de mejoramiento
y también por medio de aproximaciones de ingeniería genética.
Los microorganismos que se aplican en la biotecnología deben de tener ciertas
características como los son que sean capaces de crecer fácilmente, deben soportar el cultivo a gran
escala, deben de producir la sustancia que nos interese en cantidades apreciable y en el menor
tiempo posible y su cultivo debe ser fácil y económico. Pero debemos de tener en cuenta, que no
cualquier microorganismo se puede aplicar en la biotecnología, solo algunos son excepción para
que se les pueda dar un uso. Nosotros como biotecnologos emplearemos el uso de hongos,
levaduras y bacterias un uso de estos se encuentra en el yogurt, se emplea lactobacilius, para el pan
y el vino y se usan levaduras, los microorganismos abarcan muchas ramas en la biotecnología.
Estos influyen en la creación de nuevos fármacos antibióticos para la medicina humana y medicina
veterinaria, empleados contra microorganismos patógenos resistentes. Los grupos microbianos más
prolíficos, en cuanto a la producción de antibióticos, han sido los actinomicetos y hongos
filamentosos, sin embargo, históricamente, los actinomicetos han producido la mayoría de los
antibióticos existentes.

“Los actinomicetos han jugado un papel importante, con impactos positivos en distintos ámbitos,
desde la medicina, la industria y hasta la agricultura. Uno de los retos de la ciencia y la tecnología
ha sido producir alimentos y cada vez menos empleados de compuestos químicos potencialmente
contaminantes al igual que los pesticidas.” Quiñones Aguilar (2016)
Históricamente los actinomicetos han sido descritos como microorganismos que habitan en
el suelo, pero actualmente se conoce que están ampliamente distribuidos en ambientes acuáticos
como océanos, ríos y lagos, donde también se encuentran asociados a los sedimentos, sobre todo
en el material orgánico que está en proceso de descomposición. En el suelo, el tamaño y número
de la comunidad de actinomicetos depende de diversos factores, principalmente de las
características físicas y químicas como pueden ser la textura, humedad, pH y contenido de materia
orgánica. Estos son, candidatos para continuar proporcionando productos naturales novedosos, que
den como resultado especies capaces de sintetizar nuevos antibióticos. Igualmente, en la
agricultura, los actinomicetos pueden ser usados en la protección de los cultivos contra
enfermedades.
Esto contribuiría a mejorar la producción agrícola, así como a disminuir el consumo de
productos químicos, situación que reflejaría mejores ingresos para los productores y menor
contaminación de los ecosistemas. Actualmente se emplean las células microbianas para la
obtención de muchos productos específicos, para los cuales generalmente producen un gran
beneficio a nuestras vidas y medio ambiente. Pero, debemos de tener en cuenta que también tienen
efectos negativos en este sector.

“Los microorganismos desempeñan funciones importantes en la industria alimentaria, como el


deterioro, la seguridad y la producción de los alimentos. El deterioro de los alimentos por si solo
causa grandes pérdidas económicas cada año, y los sectores de la comida enlatada, congelada y
seca se desarrollaron como formas de conservar los alimentos que, de otro modo, sufrirían el
deterioro microbiano.” Brock, T.D. (1997)

Así pues, los microorganismos tienen una influencia significativa en la agricultura, tanto
positiva como negativa. Ya que, las enfermedades microbianas de las plantas y los animales
utilizados en la alimentación humana provocan grandes pérdidas económicas cada año. Puesto que,
los alimentos frescos como la carne, la fruta y la verdura, suelen ser más vulnerables a la
contaminación microbiana de la que prácticamente es imposible prevenir por el tiempo de vida que
tiene cada uno. De vez en cuando, un producto alimentario causa una enfermedad humana
importante, como la Escherichia coli o Salmonella, microorganismos patógenos que se transmiten
a partir de carne infectada o cuando otros patógenos microbianos se ingieren con frutas y verduras
frescas contaminadas.
Aunque la seguridad es un problema importante para la industria alimentaria, no todos los
microorganismos presentes dañan los alimentos o a quienes los consumen. Muchos son deseables
o incluso esenciales, como los que crecen en los alimentos fermentados. Por ejemplo, muchos
productos lácteos dependen de la actividad de los microorganismos para producir ácidos
fundamentales característicos de los productos, como en las fermentaciones que producen quesos,
yogur y mantequilla. Estos productos de fermentación no solo son sustancias deseables, sino que
funcionan también como conservantes de los alimentos frente al crecimiento de microorganismos
perjudiciales.

“Los microorganismos nos sirven para obtener productos comercialmente valiosos. La


microbiología gran escala de microorganismos que crecen de manera natural obtiene grandes
cantidades de productos de relativamente bajo costo, como antibióticos, enzimas y determinados
productos químicos. La biotecnología, en cambio, utiliza microorganismos modificados
genéticamente para sintetizar productos de gran valor, como insulina u otras proteínas humanas,
normalmente a pequeña escala. La genómica ha mejorado notablemente tanto la microbiología
industrial como la biotecnología al hacer posible la inspección del genoma de prácticamente
cualquier organismo en busca de genes de interés comercial.” Brock, T.D. (1997)

Como se muestra en la explicación anterior, la influencia de los microorganismos en los


humanos es enorme, y sus actividades son esenciales para el funcionamiento del planeta. O, como
dijo tan acertadamente el químico y microbiólogo francés Louis Pasteur. “En la naturaleza, el papel
de lo infinitamente pequeño es infinitamente grande”. Ya que, ha tenido un gran avance científico
brindando beneficios para nosotros y todo aquello que nos rodea.

Finalmente, tenemos que la biotecnología y los microorganismos se relacionan en muchas


áreas. Ya que, usa parte de los microorganismos para un fin benéfico a la sociedad, ya sea para
áreas farmacéuticas, hasta agrícolas. Todo esto está dentro de la rama biotecnología, por ser
multidisciplinaria. También, es importante tener en cuenta que en los alimentos ocurren muchos
cambios al momento de someterse a altas temperaturas y cuando se descomponen, hay presencia
de microorganismos que son patógenos y no patógenos. Los cuales, contaminan a los alimentos
dando como resultado el rechazo de estos mismos, considerando que pueden poner en riesgo
nuestra salud e incluso el medio ambiente. Es importante saber que hay, virus, bacterias, parásitos
u hongos, que afectan nuestros entornos. Todos estos procesos son de gran importancia, tanto
económicas como socialmente, donde intervienen microorganismos que son estudiados por la
biotecnología. La biotecnología resulta ser de gran importancia por las técnicas y procedimientos
aplicadas en los microorganismos para la obtención de productos útiles para nuestro desarrollo y
de todo aquello que nos rodea.
Bibliografías
 Brock, T.D. Biología de los Microorganismos (1997) Pearson Educación, S.A. 14° edición,
2-12. Madrid, España
 Quiñones Aguilar E. E. Et al. Los actinomicetos y su aplicación biotecnológica. Elementos
101 (2016) 59-64 Evangelina Esmeralda Quiñones Aguilar Biotecnología Vegetal y Unidad
Mérida Centro de Investigación y Asistencia en Tecnología y Diseño del Estado de Jalisco
 Torres Patiño, Carlos Omar; Reyes Sanclemente, Oscar Eduardo. Los microorganismos
solubilizadores de fósforo (MSF): una alternativa biotecnológica para una agricultura
sostenible Entramado, vol. 10, núm. 2, julio-diciembre, 2014, pp. 288-297 Universidad
Libre Cali, Colombia

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