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Los objetivos que plantea la autora en esta publicación hacen mención a la fiscalización ambiental

como herramientas de aporte fortalecido y equilibrado dentro de los futuros retos que tiene la OEFA
inmiscuidas en el marco jurídico de Perú a fin de comprender el ámbito minero-energético. Sobre la
base de esta mirada del pasado, se presentan las principales funciones a cargo del OEFA, así como
su organización interna en la actualidad. Por último, se señalan los principales retos que presenta
esta materia a futuro.

Dentro de la reseña histórica la fiscalización ambiental en el Perú no tiene orígenes remotos, es decir
su historia ha sido corta y heterogénea durante los últimos veinte años destacando el sector minero
energético por tal razón, el análisis inicia desde dicho sector.

Principales acontecimientos y evolución de la fiscalización ambiental peruana en el tiempo:

En octubre de 1992 mediante D. Ley 25763. Se establece que el cumplimiento de las obligaciones
relacionadas a las actividades mineras, de electricidad y de hidrocarburos podrán ser fiscalizadas a
través de Empresas de Auditoría e Inspectoría, por ello se crea la figura de las empresas de auditoría
e inspectoría que debían ser registradas en MEM.

- Las empresas minero energéticas debían contratarlas e informar al MEM.

- Ningún funcionario del MEM podía realizar visitas in situ salvo el caso de emergencias.

En diciembre de 1996 mediante Ley 26734. se funda la Ley del OSINERG adscrito al MEM cuya
entidad queda a cargo de la fiscalización de actividades de hidrocarburos y eléctricas

En febrero y junio de 1998 se establece Ley 26923. - OSINERG: adscrito a PCM y D.U.025-98 -
OSINERG: adscrito a MEF.

En diciembre de 2000 se establece Ley 27322. - OSINERG: adscrito a PCM.

En junio de 2001 mediante Ley 27474. Ley de Fiscalización de las Actividades Mineras - Crea la
figura de los fiscalizadores externos calificados por MEM. Los cuáles serán contratados por el MEM
según arancel.

En mayo de 2004 mediante D.S.038-2004-PCM. Se establece el plan Anual de Transferencias que


incluye competencias de fiscalización ambiental para actividades mineras de menor escala.

En enero de 2007 mediante Ley 28964. Ley de creación del OSINERGMIN.

Transfiere la fiscalización de las actividades mineras a esta entidad.

En mayo 2008 por D. Leg.1013. se establece la ley de creación del MINAM y se crea OEFA.

En marzo 2009 Ley 29325. Ley de creación del SINEFA.


En julio 2010 la OEFA asume competencias de fiscalización ambiental minera.

En marzo 2011 la OEFA asume competencias de fiscalización ambiental energética.

En marzo 2012 la OEFA asume competencias de fiscalización ambiental en pesca.

En el año 2013 la OEFA asume fiscalización ambiental en cerveza, papel, cemento, curtiembre.

La fiscalización ambiental sujeta a las reglas del mercado promueven el cumplimiento de las normas
ambientales sujetas a un ente regulador en este caso del Ministerio de Energía y Minas, pese a
contar con este organismo surgen ciertas limitantes para el cumplimiento de sus funciones, la
Dirección de Fiscalización Minera contaba con una abundante planilla de inspectores, que
realizaban las visitas in situ para verificar en el campo el cumplimiento de las normas. Dicho personal
carecía de una remuneración adecuada y de los equipos necesarios para efectuar verificaciones.
Todo ello generó un alto nivel de desconfianza en la Dirección de Fiscalización Minera y un alto
grado de corrupción en las visitas in situ.

Por ello en los años 1992 y 1993 mediante D. Ley 25763. Se establece que

- Las empresas minero energéticas debían contratarlas e informar al MEM.

- Ningún funcionario del MEM podía realizar visitas in situ salvo el caso de emergencias.

Esta norma fue emitida bajo la norma política en base a las inversiones impulsada en el país a inicios
de la década de los noventa. Cuyo objetiva era la tercerización de las funciones de fiscalización,
dónde los propios administrados debían contratar a las entidades a cargo de la fiscalización del
cumplimiento de sus obligaciones.

En conclusión, este apartado fue objeto de cuestionamientos, debido a los incontables conflictos
por parte de intereses personales, porqué eran las propias entidades fiscalizadas quienes pagaban
directamente a las empresas auditoras e inspectoras por la provisión del servicio de fiscalización.

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