Capítulo 10: Comunicación, postura cuando se habla al frente de un

publico

Comunicación sin palabra

Como la influye la postura total de tu cuerpo y tu apariencia personal. La posición que les
a tu cuerpo, o que tan cerca o lejos te sitúes de la persona con la cual estás hablando dice
mucho sobre tus intenciones. El uso de las manos es uno de los aspectos más importantes
de la comunicación no verbal. Las personas extravertidas, por ejemplo, no piensan
realmente cuando, como o donde utilizar los componentes no verbales mientras hablan,
sino que lo hacen de modo natural y espontáneo.

La primera impresión es la que cuenta

Hay un dicho que dice que la primera impresión es la cuenta. Nunca tendremos una
segunda oportunidad para lograr una primera impresión. La impresión que transmites en
los primeros dos segundos es tan fuerte, que toma aproximadamente cuatro minutos más
para agregar un 50% más a esa primera impresión.

En el 80% de los casos la decisión se toma incluso antes de que el aspirante haya dicho
una sola palabra. En muchos casos, la decisión se ha tomado basándose en el aspecto y
apariencia física. Un problema de postura es colocar todo el peso de nuestro cuerpo en
una pierna eso dice “yo no quiero estar aquí “. Tu manera de vestir es importante ya que
dice mucho de ti hasta se dice de ahí se sacan las ideas y eso se debe porque así actúa el
cerebro primario.

Tu postura y el espacio personal de los demás

Las personas agresivas como las seguras adoptan posturas abiertas, expansivas y
cómodas, mientras que las personas e inseguras se cierran sobre sí mismo y adoptan
posturas incomodas que las empequeñecen. A menudo, cuando dos personas hablan, se
acomodan en posturas idénticas sin darse cuenta y de ese modo revelan y confirman la
empatía mutua. Otro aspecto importante que ver con la distancia que te separa de tu
interlocutor.

Capítulo 11: El arte de escuchar activamente

Escuchar, la escucha activa, es un arte moribundo. Estamos perdiendo nuestra capacidad

para escuchar. En una comunicación, pasamos el 60% del tiempo escuchando, pero solo

retenemos el 25% de lo que escuchamos.

Definimos la escucha como el proceso de extraer el significado de un sonido. Por tanto, es

un proceso mental y un proceso de extracción. Escuchar no es lo mismo que oír, pues esto

último se refiere sólo a notar los sonidos que entran por los oídos. Escuchar requiere

descodificarlos para comprenderlos, es un proceso físico que, siempre y cuando no se

tengan problemas de audición, ocurre de forma automática, más no por esa razón deja de

requerir esfuerzo de concentración. En realidad, eschar es agotador.

Por otra parte, escuchar mal no es sólo estar atendiendo a medias mientras haces otra

cosa. Seguramente en más de una ocasión has estado en conversación con alguien sólo

para descubrir que antes de que ni tan siquiera termines tu versión ya tiene su propia

respuesta, pero sólo a lo primero que dijiste, dejó de oír a partir de ahí. Esto es un fallo

común, en lugar de escuchar con atención lo que alguien está diciendo, nos distraemos

después de una o dos frases, para empezar a pensar en lo que vamos a decir en respuesta
porque queremos decir algo genial e inteligente. Irónicamente esto significa que queremos

impresionar al oyente porque nos importa, aunque con el resultado logremos lo contrario.

Capítulo 12: Cuatro maneras seguras de perder a tu oyente

Interrumpir: la peor ofensa

Aprende a hablar cuando sea turno.

Muérdete la lengua si es necesario, pero no interrumpas. El único momento en que una

interrupción se puede justificar es cuando necesitas una aclaración inmediata sobre algo

que la otra persona haya dicho.

Cuando tu mirada esta asenté, tu mente está ausente ¿Hay alguien ahí?

Cuando no responde a lo que está escuchando y por último el enemigo

llamado impaciencia
Capítulo 13: la programación neurolingüística

Las personas visuales ven el mundo que los rodea:

La persona visual prefiere ver las cosas. Cuando le describes algo, ella trata de visualizar lo
que estés describiendo. En general, ella piensa, formando imagines en su mente.

Las personas auditivas escuchan al mundo que les rodea:

La persona auditiva oye lo que sucede a su alrededor y diseña sus respuestas basándose
en aquello que escucha, más que en aquello que ve. Las personas cuyo mapa metal es
fundamental auditivo constituyen aproximadamente el 25% de la población.

Las personas kinestésicas sienten el mundo que los rodea:

Las personas kinestésicas que constituyen hasta el 40% de la población, actúan dejándose
guiar por lo que siente y experimentan. Hacen juicios rápidos acerca de si alguien les gusta
o les disguste y comúnmente basan sus decisiones en sus instintos e intuiciones. Ellas
obtienen su información a través del tacto, las sensaciones y las emociones.