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UNIVERSIDAD NACIONAL MAYOR DE SAN MARCOS

Facultad de Educación
COLEGIO DE APLICACIÓN SAN MARCOS

CONSPIRACIONES CRIOLLAS EN EL PERÚ SIGLO XIX

CONSPIRACIONES EN LIMA

1. En 1789, los llamados patriotas anónimos enviaron al poeta cubano José Caro a
Europa para reunir fondos y ayuda para promover una insurrección en el virreinato
del Perú.

2. La conspiración de José Gabriel Aguilar y Manuel Ubalde en el Cuzco tuvo lugar el


año 1805, aún en tiempos del virrey Avilés, ambos amigos soñaron con la
independencia americana. Organizaron en la ciudad Imperial un plan se sublevación
pero la conspiración se frustro por la delación de Manuel Lechuga. Aguilar y Ubalde
fueron ajusticiados en la horca el 5 de diciembre de 1805.

3. Los fernandinos – profesores y alumnos de la Escuela de Medicina de San Fernando


– se reunieron durante 1808 y 1809 para discutir temas políticos del momento, sobre
todo el tiempo de gobierno que debía adoptarse en las colonias, se congregaban
peruanos ilustres como el sabio Hipólito Unanue, el cosmógrafo Jose Gregorio
Paredes, los médicos Gabino Chacaltana, José Pezet, Miguel Tafur y José Manuel
Valdez. Abascal deshizo con mucha prudencia estas reuniones pues sus
participantes eran personas de mucho prestigio en el virreinato.

4. En 1809 los hermanos Mateo y Remigio Silva, junto con Antonio María Pardo,
pretendieron formar en Lima una Junta de Gobierno, enterada la Audiencia de Lima
de tales intentos, siguió un proceso minucioso a los comprometidos en la
conspiración. Los hermanos silva fueron apresados.

REBELIONES EN TACNA

Contrariamente a lo que sucedía en la capital del virreinato, fuera de ella – sobre todo
en el sur del peru – el malestar frente al gobierno español derivo en levantamientos
armados. Examinados los movimientos rebeldes del siglo XIX se puede afirmar que
existe una continuidad evolucionaria desde 1780 (movimiento de Túpac Amaru II) hasta
1814 (rebelión de Pumacahua).

En 1811 se produjo el levantamiento armado del pueblo


de Tacna bajo la dirección de Francisco Antonio de
Zela, quien contó con el apoyo de sectores indígenas
dirigidos por el cacique Toribio de Ara. Luego de iniciado
el movimiento (20 de junio), a los cinco días, los realistas
contra – atacaron y derrotaron a los insurrectos, Zela
fue apresado y, enfermo, trasladado a Lima y
condenado a la pena de prisión. Murió a los 51 años en
1819.

El segundo levantamiento se produjo en 1813 al mando de Enrique Paillardelle y sus


hermanos Juan Francisco y Antonio Felipe, y el alcalde de Tacna, Manuel Calderón de
la Barca, se alzaron en la ciudad el 3 de octubre de 1813 (segundo grito de Tacna),
también derrotado por el ejército realista.

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