Sei sulla pagina 1di 12

“Vistámonos las

armas de la luz”

Romanos 13:11-14

"La noche está avanzada, y se acerca el día.


...es ya hora de levantarnos del sueño.
...vistámonos las armas de la luz.
Andemos como de día, honestamente...

Se utilizan algunos objetos para ilustrar ciertos puntos.


Información al respecto en el cuerpo del mensaje.

I. Introducción.
A. Salutación.
B. El título de este mensaje: Vistámonos las armas de la
luz.
C. El texto bíblico donde se encuentra este título
es Romanos 13:11-14. Pasaje de poderosa retórica y
simbología muy instructiva. Leámoslo. (11) “Y esto,
conociendo el tiempo, que es ya hora de levantarnos del
sueño; porque ahora está más cerca de nosotros nuestra
salvación que cuando creímos. (12) La noche está
avanzada, y se acerca el día. Desechemos, pues, las
obras de las tinieblas, y vistámonos las armas de la
luz. (13) Andemos como de día, honestamente; no en
glotonerías y borracheras, no en lujurias y lascivias, no en
contiendas y envidia, (14) sino vestíos del Señor
Jesucristo, y no proveáis para los deseos de la carne.”
II. “Conociendo el tiempo…”
A. El “tiempo” lo debo conocer y entender,
interpretándolo acertadamente. Todo ser humano
debería conocerlo y entenderlo.
B. ¿Lo conoce usted?
1. ¿Sabe en qué época le ha tocado vivir? No, de
cierto, en la Mosaica o en la anterior Patriarcal sino
en la Era Cristiana.
2. ¿Sabe qué etapa de esta Era Cristiana está
transcurriendo? No, desde luego, las primeras
etapas, pues ya han pasado dos mil años de
nuestra Era. Abundancia de señales indican que
vivimos los días que preceden el comienzo del
temido “poco de tiempo”mencionado en
Apocalipsis 20:1-10.
3. Jesucristo reprendió a los fariseos y saduceos por
no poder ellos discernir “las señales de los
tiempos” (Mateo 16:1-3). ¿Discierne usted “las
señales de los tiempos” actuales, estando
capacitado para comprender lo que indican?
4. En lo concerniente al tiempo, dos grandes
torpezas las comete la mayoría de nuestra raza:
a) No preocuparse por conocer el tiempo y sus
señales.
b) Ignorar voluntariamente la marcha inexorable
del tiempo hacia el desenlace final de cada vida
humana en particular y de la creación material en
su totalidad.
Le rogamos no abanderizarse con la mayoría.
III. Cuatro hechos debemos conocer acerca del tiempo,
según Romanos 13:11-14.
A. Primer hecho: “…es ya hora de levantarnos del
sueño”.
1. “Es YA hora de levantarnos…”
a) No hay tiempo para seguir dormitando.
Soñando con los angelitos, o acaso con los
diablillos. Inconsciente de oportunidades, deberes
o peligros.
b) La alarma está sonando duro repetidamente.
Apagarla, dar espalda al reloj y continuar
durmiendo puede que resulte en nuestro despido
eterno.
c) “Es ya hora” de abrir bien los ojos y ponerse
en movimiento.
2. “Es ya hora de levantarnos del sueño”. Sí,
del “sueño” de…
a) Irrealidades disfrazadas de realidades.
b) Ilusiones ficticias hechizantes.
c) La soporífera indiferencia.
d) La indolencia espiritual.
e) El letargo mental.
f) La pesadez de la ignorancia o dejadez moral.
g) “Despiértate, tú que duermes, y levántate de
los muertos, y te alumbrará Cristo” (Efesios 5:14).
h) Sin ofensa, ¡esto va también para
quienes acostumbran dormitar durante las
predicaciones! “¡Despiértate!” ¿Durmió bien
anoche? ¿Viene descansado? Pues, ¡ponga
atención! No se duerma. Ocupe su mente y
espíritu en el mensaje o la clase bíblica,
procurando encontrar alguna joya espiritual que
añada usted a su tesoro.
B. Segundo hecho acerca del tiempo: “…ahora está
más cerca de nosotros nuestra salvación que
cuando creímos”.
1. Esta sencilla realidad animadora y fortalecedora
es para nosotros los ya convertidos a Cristo.
2. Amado cristiano, ¿hace cuánto tiempo creyó
usted, se arrepintió y fue bautizado “para perdón de
los pecados” (Hechos 2:38)? ¿Tres años, cinco,
veinticinco, cuarenta o más? De cierto, ¡ahora está
más cerca su salvación eterna que cuando
primero obedeció!
3. El paso de cada día, hora y minuto nos acerca
cada vez más al momento del triunfo final. Es
cuestión de resistir un poco más, y tal vez un poco
más, hasta alcanzar la meta codiciada. Luego, será
nuestra la “corona… incorruptible” de
la inmortalidad (1 Corintios 9:25-27; 15:51-
58). Seguramente, no pensamos echar a perder el
tiempo ya vivido en Cristo, volviendo “atrás del
santo mandamiento” y enredándonos “otra
vez” en “las contaminaciones del mundo” (2 Pedro
2:20-22).¿Sigue usted resistiendo y soportando con
paciencia? ¡Ánimo! Su salvación está cada
vez “más cerca”.
4. No así en el caso de las
personas desobedientes al evangelio. Cada día,
hora y minuto les lleva más cerca de
su condenación eterna.
C. Tercer hecho acerca del tiempo: “La noche está
avanzada”.
1. “La noche…”
a) El manto oscuro que encubre toda suerte de
perversión, inmoralidad, fechoría, crimen,
violencia y rebeldía.
b) De tinieblas arremolinadas, vapores
nocivos, emanaciones venenosas.
c) De supersticiones religiosas, vanas
filosofías, huecas sutilezas e ignorancia
espiritual.
2. “La noche…” de sublevación contra Dios que
comenzó allá antes de la creación del mundo
cuando Lucifer pretendió usurpar la autoridad del
único Dios Todopoderoso.
3. La larga “noche” de pecado que se ha
extendido hasta el tiempo presente, pero que
ya “está avanzada”.
4. Para el mundo y sus moradores, como también
para Satanás y sus secuaces, ¡son más o menos
las cuatro, o las cinco, de la madrugada!
5. ¿Está usted consciente de la hora que marca
“el reloj de Dios” conforme al tiempo que él ha
programado para consumar su voluntad en los
humanos y el universo material?
D. Cuarto hecho acerca del tiempo: “…se acerca el
día”. Es decir, “se acerca el día” de la Segunda
Venida de Cristo.
1. “Porque vosotros (los cristianos informados y
entendidos) sabéis perfectamente que el día del
Señor vendrá así como ladrón en la noche; que
cuando digan: Paz y seguridad, entonces vendrá
sobre ellos destrucción repentina, como los dolores
a la mujer encinta, y no escaparán. (1
Tesalonicenses 5:2-3)
2. Este es “el día del Señor” grande y
portentoso que amanecerá con arreboles en el
cielo nublado, presagio de tempestades y
destrucción universal.
3. “Porque el gran día de su ira ha llegado; ¿y
quién podrá sostenerse en pie?”, exclaman los
impenitentes sorprendidos y espantados
sobremanera por el “fin” inesperado “de todas las
cosas” (Apocalipsis 6:17; 1 Pedro 4:7).
4. “Mas vosotros, hermanos, no estáis en tinieblas,
para que aquel día os sorprenda como ladrón” (1
Tesalonicenses 5:4).
IV. Seis acciones deberíamos tomar al conocer y entender
estos cuatro hechos sobre el tiempo. Por un lado, tres de
ellas tienen que ver con las tinieblas, y por el otro, tres se
relacionan con la luz.
A. Las tres que han de ejecutarse si no queremos
ser víctimas de la noche son:
1. La primera, en palabras del versículo
12: “Desechemos, pues, las obras de las
tinieblas”.
a) “Desechar” es la acción, y el objeto de la
acción es “las obras de las tinieblas”. Algunas
de estas “obras de las tinieblas” están anotadas
en el versículo 13. “Glotonerías y borracheras…
lujurias y lascivias… contiendas y
envidia.” Representativas estas de todas “las
obras de la carne” (Gálatas 5:19-21).
b) ¿Ha tomado usted esta acción de desecharlas?
2. No andar más en estas obras tenebrosas es
la segunda acción.
3. Y la tercera acción es: “...no proveáis para los
deseos de la carne”, como dice el versículo 14.
a) El texto no dice “las necesidades de la carne”
sino “los DESEOS de la carne”.
b) Nuestro solemne deber es proveer alimento,
vestimenta y techo para este cuerpo de carne, no
comiendo “de balde el pan de nadie” (2
Tesalonicenses 5:6-15). Y este deber se extiende
a los que dependen de nosotros, particularmente
a la “propia familia” (1 Timoteo 5:4-5). De manera
que “si alguno no provee para los suyos, y
mayormente para los de su casa, ha negado la
fe, y es peor que un incrédulo” (1 Timoteo 5:8).
La advertencia de Romanos 13:14 gira más bien
sobre proveer “para los DESEOS de la
carne”. “DESEOS” que exceden exageradam
ente lo necesario, que sobrepasan el uso
moderado, que resultan en perversiones y
abusos vergonzosos, que desembocan en
el caos moral.
1. La primera de estas tres es: “…vistámonos las
armas de la luz”.
a) ¿Las viste usted? ¿Las conoce?
(1) El “cinturón” ancho y fuerte de la verdad
divina.
(2) El “chaleco” de justicia.
(3) Las “botas” del “evangelio de la paz”.
(4) “El escudo de la fe.”
(5) El “casco” de la salvación.
(6) Y la “espada tipo láser”, “del Espíritu, que es
la palabra de Dios”.
(Adaptación de Efesios 6:13-17)
b) ¿O acaso prefiere vestir usted las armas, las
vestimentas y los adornos del “lado oscuro”?
(1) El personaje “Dark Vador”, en la serie “Guerra
de las galaxias”, ¿cómo se viste? Capa, casco y
botas, todo negro. ¿Correcto?
(a) ¿Qué quiere decir su nombre “Dark”? Quiere
decir “Oscuro”. La connotación es que él
pertenece a las tinieblas. Se fue con el “lado
oscuro”.
(b) “Vador” suena como derivado del lenguaje
vikingo, ostentando matices bélicos de “invasor
violento aliado con el mal”.
(2) La fascinación con el “lado oscuro”,
particularmente en la juventud, es, a mi entender,
una “señal” sumamente alarmante de los
tiempos que vivimos. ¿Qué opina usted?
c) Pero, querido joven y amigos todos, ¡la luz es más
poderosa que la oscuridad! Pronto, este “reloj de
Dios” marcará las seis de la madrugada. No mucho
después aparecerá en los cielos el “Sol de justicia”,
es decir, Cristo mismo, en todo su fulgor
resplandeciente, montando su “caballo blanco”, y no
negro, respaldado por “los ejércitos celestiales,
vestidos de lino finísimo, blanco y limpio” que le
siguen “en caballos blancos” (Apocalipsis 19:11-
14). Entonces, “las armas de la luz” prevalecerán
de una vez para siempre sobre las armas de las
tinieblas. Y ¿con cuál bando se encontrará usted al
lidiarse esta batalla final? Recalco: ¡el lado
resplandeciente de luz es más poderoso que el
lado oscuro de tinieblas!
2. La segunda acción de las que se relacionan con la luz
se expresa de la manera siguiente: “Andemos como
de día, honestamente”.
3. Y la tercera es: “…vestíos del Señor Jesucristo”.
a) El proceso de “vestirse de Cristo” comienza con
el bautismo, y esto lo sabemos por lo que dice
Gálatas 3:27. “Porque todos los que habéis sido
bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos.”
b) De no haber usted tomado ya esta acción de
vestirse del Señor Jesucristo por medio de sumergirse
en las aguas bautismales “para perdón de los
pecados” (Hechos 2:38), ¿qué le impide ejecutarla en
este preciso momento? Apresúrese, y no demore ya,
pues “la noche está avanzada, y se acerca el
día” del retorno de Cristo en victoria fulminante y
eterna.

Potrebbero piacerti anche