Era el año 2099, Varias cosas han pasado, el mundo en el que habitan los humanos no ha

cambiado mucho, guerras, dolor, sufrimiento todo sigue existiendo, quizás sea por varias de estas
cosas que él ahora no siente nada, Sebastián, Sebas como común mente lo llaman sus amigos y
familiares es un chico de 19 años el cual con su vida en plena juventud es simplemente un
cascaron vació.

Talvez sea por el mundo en el que creció, tal vez sea porque desde muy pequeño perdió la
inocencia de un niño y se dio cuenta del mundo tan podrido en el que vivía, pero no me refiero a
su entorno familiar, el nació en una familia llena de amor y cariño, su Padre lo amaba, para su
madre era su mayor tesoro junto a su hermano menor el cual lo admiraba y lo quería, sebas en su
vida con su familia siempre estuvo rodeado de cariño y amor, él tenía la familia perfecta que
cualquier ser humano quisiera tener, pero aun así la corrupción del mundo pudo más que el amor
que le dio su familia.

Cuando apenas tenía alrededor de 4 años, sebas era un niño muy listo, aprendía rápido lo que le
enseñaban y era muy curioso, siempre quería aprender muchas cosas nuevas, aunque solo era
bueno en lo que en realidad de gustaba, ya que para otras cosas era pésimo un pequeño ejemplo
los deportes, como los odiaba.

Después de algunos años cuando aprendió a leer lo considero un gran logro en su vida, mientras
que los demás niños se iban a jugar él siempre se quedaba solo con un libro siempre
acompañándolo y a consecuencia de esto jamás se dio cuenta de que se había convertido en
alguien solitario.

Los libros que leía eran variados, era una forma de escapar de la realidad ya que a él nunca le
gusto estar rodeado de niños que a su parecer eran tontos con ideas estúpidas e incoherentes en
su cabeza, para muestra de un ejemplo cuando tenía 7 años el y su madre presenciaron un
accidente fatal de un niño que por perseguir un balón salió a la calle y fue atropellado muriendo al
instante y de paso dejando una escena grotesca que muchas personas ni siquiera eran capases de
soportar mirar, pero ahí estaba la madre de sebas horrorizada por aquel accidente ella ni pudo
hacer nada más que abrazar a sebas el cual había mirado todo con suma indiferencia.

Pero talvez lo que más impacto a su madre fueron las palabras de sebas el cual simplemente dijo

“que idiota, murió por ser un estúpido ¿Quién cruzaría la calle sin mirar?”

Su madre solo se quedó callada, no sabía que decir, las palabras de su hijo eran ciertas pero eran
muy directas, simplemente su adorable hijo había madurado a tan temprana edad que le
preocupaba.

A pesar de ello la vida siguió, sebas cada vez más se retraía de la sociedad, a penas y tenía un
pequeño grupo de compañeros como él lo decía, jamás llego a considerar a alguien como un
amigo, a los únicos que de verdad quería y amaba era a su familia, a nadie más, en el colegio a sus
“compañeros” siempre los utilizaba, a pesar de que siempre era molestado por los abusivos él
siempre se desquitaba de formas muy crueles, él siempre fue conocido por ser muy callado y poco
interesante sin saber que el en realidad era un ser rencoroso he inteligente, pero nunca sobresalió
en sus notas siempre las mantenía a un promedio regular el odiaba llamar la atención.
Tal vez él era así ya que desde pequeño guiado por su fascinación por leer descubrió grandes
historias del mundo pero la mayoría de ellas era sobre guerras y dolor, su pequeño cerebro a
penas y comprendía por qué la humanidad se mataba entre sí, la crueldad de la que podía ser
capaz un humano con tan solo tener poder sobre los demás, estas ideas impactaron en lo
profundo del ser del pequeño sebas que ahora era un joven el cual manipulaba a cualquiera con el
simple hecho de obtener lo que quería.

Creo que nos desviamos del punto, ahora sebas tiene 19 años, con profundo dolor se despidió de
su hogar, de su padre, de su madre y de su pequeño hermano, sebas salió de casa para hacer su
vida a la edad de 18 años, su familia la cual era muy cariñosa y a pesar de que jamás le falto nada
no tenían mucho dinero así que sebas sabiendo bien que él era un gasto muy grande para sus
padres él se fue de casa, quería que su pequeño hermano tuviera futuro, sin él sus padres podrían
darle educación, y sin más se fue.

Poco más de un año ha pasado desde ese día, ahora sebas vive solo en un departamento no tan
lujoso, consiguió trabajo y de vez en cuando se comunica con su familia, la única capaz de hacer
sentir algo de amor en el corazón de piedra de sebas.

Actualmente era diciembre, el día 31 para ser más precisos eran las 12:55 y en las calles se sentía
la alegría de poder celebrar un fin de año más junto a sus seres queridos, sebas estaba sentado en
una silla mientras hablaba por su celular.

“espero que todos estén bien, y espero que todos tengan un feliz año nuevo, salúdame a todos
madre, los llamare luego y no lo olviden diviértanse”

Sebas termino la llamada, suspiro un poco y la leve sonrisa que tenía desapareció, tomo una
botella y bebió directamente de ella, mientras que se lamentaba por no sentir nada, desde joven
varias veces pensó en el suicidio, pero jamás lo hizo, no era justo pagarles a sus padres de esa
forma y además luego de pensarlo un poco llego a la conclusión de que eso era algo estúpido, de
todos modos algún día moriría solo tenía que ser paciente.

Sebas se acabó la botella de licor que tenía y la dejo caer al suelo, se levantó de su silla y
tambaleando un poco se acercó a la ventana miro al cielo y dijo

“que empiece otro año de mierda”

El reloj marco las 00:00

Sebas cayo inconsciente

El cantar de las aves era algo hermoso, se sentía paz y calmaba el alma, se sentía una calidez muy
agradable y a su vez una brisa tibia golpeaba su rostro y los rayos del sol llegaban a sus ojos
cerrados.

No paso ni 1 minuto cuando sebas empezó a moverse, poco a poco y se sentó aun con sus ojos
algo cerrados.
“demonios, me duele la espalda, de nuevo dormí en el piso”

Sebas se levantó mientras se tallaba sus ojos y luego estiraba su cuerpo

“creo que es hora de trabajar, maldito sea mi jefe que me obliga a trabajar en 1 de enero ojala y se
muera, no mejor que su familia muera así el bastardo sufrirá de verdad”

Sebas dio un suspiro que mostraba fatiga abrió sus ojos que poco a poco se ajustaban a la luz del
entorno que poco a poco se fue poniendo claro

“pero que”

Dijo sebas el cual pensaba que aún seguía durmiendo, ya que no creía lo que sus ojos miraban.

Frente a él estaba un acantilado muy profundo, las paredes del mismo mostraban grandes
cascadas de agua tan pura y cristalina como si fuera agua sagrada de los mismos dioses, a su
alrededor grandes árboles estaban presentes al igual que gran vegetación, varias aves surcaban el
cielo azul mientras que al frente miraba como el sol apenas estaba saliendo mostrando un
amanecer tan bello que parecía salir directamente de un juego de fantasía.

Sebas aun no podía creer lo que miraba, era algo simplemente hermoso, tanto fue el asombro de
ver tal bello paisaje que por unos momentos una leve sonrisa salió a flote, habían pasado tantos
años desde que había sonreído de verdad por algo más que no fuera su familia, respiro
profundamente sintiendo la pureza del aire del cual solo cuando era niño disfruto por unos años.

Sebas se sentó en el lugar donde despertó el cual estaba cerca de un gran árbol, se poyo en el
tronco y dijo con cierta tristeza

“que sueño tan maravilloso, pero estoy seguro que pronto sonara la alarma de mi celular y me
despertara”

Sebas daría un suspiro que mostraba algo de tristeza

Pasaban los minutos sebas parecía algo inquieto ya que no despertaba es más la idea de que todo
era real poco a poco cobraba más fuerza, sebas mientras sujetaba su cabeza diría

“bien es oficial creo que al fin me he vuelto loco”

Sebas se levantaría del lugar y comenzaría a caminar alejándose de aquel paraíso escondido entre
las montañas, claro está, sebas a lo largo de su vida adquirió mucho conocimiento de los libros y
combinados con su buena memoria él era una persona excepcional, él sabía bien que el lugar
donde despertó podría ser clave de él porque despertó en ese lugar así que con forme se alejaba
el trazaba un mapa en su cabeza el cual no olvidaría jamás ya que él tendría como objetivo volver.

Camino por varias horas, ya había pasado el mediodía y sebas se encontraba tendido cerca de una
roca tratando de recuperar el aire ya como habíamos dicho antes era un pésimo deportista

“demonios, el sol al principio era bueno, pero ahora me está matando”

Sebas se había ocultado bajo un árbol a tomar un poco de sombra, pero debía encontrar algo de
beber porque en el transcurrir del día no ha comido ni bebido nada, su cuerpo pedía agua, pero no
encontraba ningún lugar con tan solo una mísera gota de agua, lo extraño era que estaba rodeado
de vegetación pero no encontraba ni un solo rio o lago lo que sea.

Al final paso lo que sebas esperaba, se quedó inconsciente nuevamente a causa de la

deshidratación quedando tirado en el suelo sin defensa alguna.

Un frio recorrió la espalda de sebas el cual despertó a causa de ello, para su sorpresa ya había
anochecido, sebas se levantó del suelo buscando un refugió, estaba oscuro, pero la luz de las 3
lunas que había en el cielo le daban la suficiente luz para guiarse.

“espera un momento, ¿3 lunas?”

Sebas miro atónito como en el cielo 3 lunas estaban brillando, era algo hermoso pero a la vez algo
desconcertante ya que si esto no era un sueño entonces

“donde diablos estoy”

Sebas fue sacado de sus pensamientos ya que de repente escucho lo que parecía ser caballos que
galopaban cerca de ahí, de igual forma miro lo que parecían ser antorchas, parece que al fin había
encontrado a alguien, sebas estaba a punto de levantar su tono de voz y llamar a aquellos
hombres que galopaban en caballos pero algo lo detuvo, cerca del apareció entre los arbustos una
chica baja de estatura y la cual estaba vestida de una forma pésima y sus pies descalzos llenos de
heridas al igual que sus manos y su cara todo su cuerpo estaba herido además se la miraba muy
agotada.

Con miedo la chica se acercó a él y en sus ojos se miraba el dolor y la angustia en su máximo
esplendor pero fue sacado de sus pensamientos al escuchar

“por favor ayúdame”

La chica abrió su boca simplemente para pedir ayuda, sebas el cual permanecía muy indiferente
ante la situación miro a la chica con algo de desagrado pero rápidamente pensó algo, sin pensarlo
más tomo a la chica en sus brazos y rápidamente se escondió en una pequeña cueva que había
visto cerca de ahí, pasaron solo unos segundos hasta que los hombres llegaron, buscaron por unos
momentos, se miraba que la buscaban de forma desesperada quizás esa chica de alguna manera
era valiosa, pero algo llamo la atención de sebas, algo que dijo uno de los tipos

“debemos encontrarla es valiosa para el imperio”

“pero debemos capturarla viva de lo contrario no vale nada”

Los tipos se fueron del lugar la chica respiro aliviada mientras que sebas estaba en total silencio, la
chica de forma tímida le dijo

“gracias por ayudarme, de verdad te lo agradezco”

“uhm si claro, ahora vamos te llevare a un lugar seguro”

La chica por primera vez en mucho tiempo se sintió protegida y a salvo ya que se había cruzado
con una persona amable y gentil que ayudaba a los extraños, a los ojos de la chica él era un dios,
pero sebas tenía otros planes, en su mente se estaba formando un primer plan que le podría servir
de ayuda en el futuro

“Ahora mismo no sé dónde estoy, tendre que averiguarlo y si de casualidad no puedo regresar a
mi hogar esta chica será mi boleto de seguridad, por lo que escuche es valiosa para un tal imperio,
debo averiguar más acerca de ese tema, quien sabe y quizás pueda sacar ventaja de los que
dirigen este lugar”

Sebas mientras seguía con su plan dejo escapar una pequeña sonrisa en la cual se miraba la
maldad pura de sus planes, la chica no le importaba en lo absoluto simplemente quería saber
cuánto provecho podría sacar de ella, así que de momento cuidaría de ella.

El bosque por el que caminaban estaba muy oscuro, apenas y podían ver el camino, la chica varias
veces tropezaba a causa de los obstáculos del camino aunque también pudo haberse debido al
agotamiento y a las heridas que tenía en sus pies descalzos.

Por otra parte sebas caminaba a paso ligero importándole poco si la chica le seguía el paso, él era
consciente de que estaba herida pero no le importaba en lo absoluto, lo único que quería era
encontrar un asentamiento de humanos en el cual pudiera obtener información o en su defecto
poder robar algo útil para poder subsistir más tiempo.

Pasaron alrededor de 2 horas, la chica ya no daba más al igual que sebas el cual estaba
sumamente agotado.

“descansemos aquí por ahora”

La chica cayó al suelo aliviada tal vez ya que tarde o temprano colapsaría

No pasaron ni 5 minutos y el frio empezó a hacerse presente, antes tal vez no lo sentían ya que
estaban caminando muy deprisa con lo cual sus cuerpos estaban en calor pero ahora incluso sebas
quien era el que más arropado estaba se lo miraba temblando de frio.

“Maldición, necesitamos una fogata, pero no tengo ninguna herramienta para hacerla”

“Ti.tiene..e.e.s f..ri..ii.o”

Dijo la chica en tartamudeos la cual no dejaba de temblar

“si, pero no es como si tu pudieras hacer algo”

“re..e.e.une a.a..aalgo .d..ee.e le.. ñaa. Por fa..a.a.vor”

sebas miro la silueta de la chica a la cual no había visto bien a causa de la oscuridad, la miro con un
poco de dudas

“si está bien”

Sebas, un poco dudoso empezó a reunir leña que había cerca de él, ya que no podía alejarse
mucho a causa de la oscuridad del bosque, luego de algunos minutos había un poco de ramas y
hojas frete a la chica la cual levanto sus manos en dirección a ellas

“uhmm que planeas hacer niña”

La chica sin responder parecía estar sumamente concentrada

“oye responde”

De repente sebas miro con asombro como frente de las manos de la chica empezó a formarse un
circulo brillante de color rojo el cual cada vez tenía más detalle, se miraba varios símbolos dentro
del circulo que giraban lentamente, parecía ser una ilusión, sebas froto sus ojos varias veces
pensando que se trataba de un simple delirio suyo a causa del cansancio, pero no era así.

“FUEGO: CREACION LLAMA NIVEL BAJO”

La chica pronuncio esas palabras que ni siquiera paso 1 segundo y la leña que había recogido sebas
empezó a arder creando así una pequeña pero cálida fogata.

“tiene que ser un chiste verdad”

Pensaba sebas aun sin creer lo que había visto
“¿pasa algo señor?”
Pregunto la chica la cual miraba con curiosidad a sebas el cual tenía una cara de sumo asombro
“dime que acabas de hacer”
“uhm, solo era magia de fuego, es algo básico pero esto nos ayudara a calentarnos un poco”
Sebas aún seguía en su asombro

“magia es enserio, dijo magia, creo que realmente me he vuelto completamente loco, ya hasta
estoy alucinando”

Sebas miro a la chica la cual trataba de calentarse con las llamas pero a causa de la delgada prenda
que tenía aun sentía el frio que se producía en aquel bosque

“magia, es algo difícil de creer aun que lo estoy viendo con mis propios ojos, ¿será esa la razón por
la que es valiosa?, (sonríe) si es así le sacare toda la información que tenga, estoy seguro que con
ella podre saber por qué estoy en este lugar, deberé ganarme algo de su confianza”

En tan solo un segundo sebas pensó lo anterior, el solo pensaba en su beneficio personal y sin
decir nada se quitó la chaqueta que tenía y se la puso a la chica la cual se sorprendió por aquel
acto.

“Señor, no es necesario que haga esto por mí, tendrá frio y podría enfermarse”
“no te preocupes, tu eres la que tiene que cuidarse, apenas y eres una niña te enfermaras con
mayor rapidez”
La chica solo se sonrojo un poco mientras se acurrucaba con la chaqueta de sebas que por primera
vez vio el rostro de la chica la cual era muy bella pero lo que más llamo su atención fue su cabello
blanco, era algo inusual para sebas ver ese color de cabello en alguien tan joven, por un breve
segundo logro mirar sus ojos, eran de color verde, realmente eran hermosos, sebas nunca vio
chica tan hermosa en su vida cosa que lo asombro un poco.
“oye niña, dime cuál es tu nombre”
“¿mi nombre?, yo me llamo Asha, y usted señor puedo saber su nombre”
“Asha, por favor no me digas señor aun soy muy joven y respondiendo a tu pregunta mi nombre es
Sebastián”
“Sebastián, su nombre es muy peculiar, es la primera vez que lo escucho”
“o enserio yo debería decir lo mismo Asha aunque es un nombre lindo”
Asha simplemente agacho un poco su cabeza tratando de esconder su sonrojo que no paso
desapercibido por sebas
“perfecto, tiene una mente débil será fácil manipularla”