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Monición:
Tu pedido Señor, fue que los niños se acercaran a ti. Es por eso que te
presentamos a nuestros pequeños, que te ofrecen su amor tierno y sencillo.
Permite que su inocencia jamás sea mancillada y despierta en ellos amor y
gratitud por todas las bendiciones que tú prodigas. Sella con la luz de tu
Santo Espíritu sus tiernos corazones y asístelos con la presencia de tu
madre, la virgen María.
Diálogo:
Sacerdote: Queridos niños ¿Qué desean?
Niños: La gracia de ser amigos del Niño Jesús.
Sacerdote: ¿Prometen acoger en su corazón el modelo del Niño Jesús y
seguir sus virtudes?
Niños: Sí, lo prometemos
Sacerdote: ¡Que el Divino Niño los proteja, los bendiga y los guarde¡
Niños: Amén
Padre de familia:
Para que iluminados con la gracia de Dios, sepamos conducir a nuestros
hijos por el camino de la fe, siendo testimonio vivo de su amor al interior
de nuestras familias. Oremos al Señor.
Docente:
Señor te pedimos la serenidad y el amor para llevar adelante la noble
vocación que nos has confiado, guiando a nuestros niños por el camino
que conduce hacia ti. Oremos al Señor.
Hermana SS.CC:
Por los niños que hoy te presentamos Niño Jesús, para que tu amor
desborde sus corazones de alegría y de anhelo por conocerte y seguirte.
Oremos al Señor.
Niño(a):
Niño Jesús, te pido por todos los niños que hoy nos hemos consagrado a ti;
par que siempre reines en nuestros corazones Oremos al Señor.
5. Liturgia Eucarística
Ofertorio:
Sacerdote: Recibe Niño Jesús, estas ofrendas que te presentamos con
infinita confianza y amor de hijos. En ellas te entregamos los anhelos y
esperanzas de tu familia, reunida aquí en torno a tu altar. Recíbenos Señor.
Pan y Vino: Signos de tu amor y comunión fraterna. Señor, que cada vez
que nos acerquemos a tu altar, podamos alimentar nuestro espíritu con tu
Cuero y con tu Sangre.
Cirios: Representan tu presencia en medio de nosotros; luz que guía el
sendero de nuestras vidas.
Flores: La fragilidad y colorido de sus pétalos son parte de tu obra
creadora. Que cada niño sea el aroma que alegra el corazón de nuestros
hogares.
Corazón: Recibe Señor el amor de nuestros niños, sus caritas que dibujan
ilusión, la ternura de sus miradas que te alaban; la sencillez de su tierno
corazón.