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3
LA VOCACIÓN SUCESORIA Y LA ADQUISICIÓN HEREDITARIA
1.-CONCEPTO.
De modo general en el campo del derecho, la capacidad se define en su forma
más amplia, como la APTITUD O IDONEIDAD que se tiene para ser sujeto
de derechos y obligaciones en las relaciones jurídicas, familiares, reales,
contractuales, obligacionales y sucesorias, que es la aptitud para ser sujeto
activo o pasivo. Por otra parte, la capacidad puede ser absoluta cuando
permite al sujeto actuar en toda clase de actos jurídicos y políticos por sí
mismo, o relativa, cuando consiste en realizar algunos de esos actos y no
otros, así se puede tener capacidad absoluta para adquirir, ejercer, obrar o
disponer sobre los derechos o solamente la de adquirir y no la de obrar.
En sentido restringido, se la conceptúa como la IDONEIDAD LEGAL para
ser titular de derechos y ejercitarlos, o sea, ser sujeto de derechos y
obligaciones. Toda persona por el solo hecho de ser persona, es capaz de ser
titular de derechos, por tanto, que posee la capacidad jurídica que se la
adquiere por el hecho natural del nacimiento y que acompaña a la persona
hasta la muerte.
1.1. Implicancias.
La capacidad conforme a su acepción jurídica, presenta dos implicaciones
sustanciales:
a) La capacidad significa la idoneidad para ser titular de derechos, lo que
implica tener personalidad.
b) La idoneidad legal para ejercitar por sí mismo esos derechos (puede ser
mediante otra persona en caso de incapacidad relativa).
De donde se llega a la conclusión que la capacidad es la regla y la incapacidad
la excepción. La incapacidad viene a significar la antítesis de la capacidad,
significando la falta de idoneidad para ser titular de derechos y obligaciones.
Para ser sujeto sucesorio, se requiere contar con la capacidad jurídica, que en
este caso es amplia.
2.- LA CAPACIDAD JURÍDICA PARA SUCEDER.
La capacidad jurídica para suceder, es aquella APTITUD O IDONEIDAD del
que se halla INVESTIDA una persona para recibir una herencia, o ser titular
de derechos provenientes de otra persona; a ese respecto, elArt. 1008delC.C.,
prescribe que: « para suceder es preciso existir en el momento de abrirse la
sucesión, nacido o concebido «.
De lo anterior, se llega a la conclusión de que a la muerte del titular de los
derechos y poder acceder a la sucesión hereditaria, ya sea por el ministerio de
la Ley o la voluntad del decujus, es necesario tener existencia a través de la
concepción o el nacimiento, cuyos hechos otorgan la capacidad jurídica para
hacer viable la transmisión hereditaria.
3- REQUISITOS VÁLIDOS PARA LA SUCESIÓN.
En el antiguo derecho romano para acceder al derecho de la sucesión, era
imprescindible existir por lo menos en estado de hijo concebido al momento
del fallecimiento del causante, ya que no era permitido la sucesión en favor de
personas inexistentes.
De acuerdo a la doctrina moderna contemporánea, acerca de la persona
natural, que no difiere con los principios del derecho romano, se dice que para
ser capaz de suceder, es necesario haber nacido o al menos encontrarse
concebido en el momento en que se produce la apertura de la sucesión.
Situación que denota la existencia de dos requisitos: 1. Que se debe contar con
personalidad y; 2. La capacidad se la debe tener en el momento de la
apertura de la sucesión.
La propia Ley formula presunción legal cuando refiere, que: «salvo prueba
contraria, se presume concebido a aquél que al momento de abrirse la sucesión
ha nacido con vida dentro de los 300 días después de muerto el decujus»,
aspecto que podría demostrarse eficazmente con el certificado de defunción
donde consten los datos precisos de la fecha, lugar y año del fallecimiento.
Del estudio sistemático del tema, se tiene que para llenar los requisitos válidos
para la sucesión, es necesaria la existencia de las siguientes circunstancias:
a) Encontrarse concebido en la fecha de apertura de la sucesión: hecho
natural que da principio a la personalidad.
b) Contar con la existencia real a través del nacimiento y;
c) Estar con vida o haber nacido vivo; hecho natural que confirma el
derecho de la personalidad del ser.
4.- DETERMINACIÓN DE LA EXISTENCIA.
Conforme a los principios que rige en nuestra economía jurídica, la
existencia de la persona natural se determina bajo la concurrencia de fases o
periodos:
1. La existencia natural del ser. Que se inicia desde el momento preciso
en que el espermatozoide masculino fecunda el óvulo femenino, o sea, el
instante en que se produce la concepción.
2. La existencia legal del ser. Se concreta en el momento de su
nacimiento con vida.
Consiguientemente, a los fines de la transmisión hereditaria, las personas
son capaces para suceder, y por lo tanto, adquirir derechos desde el momento
de su concepción, estando supeditados únicamente al nacimiento con vida,
como condición sine quanum, aunque mueran inmediatamente. A ese respecto,
cabe la aplicación del principio jurídico que dice: «al concebido se
lo tiene por nacido para todo lo que le sea favorable».
5- TEORÍAS QUE EXPLICAN LA EXISTENCIA DEL SER.
En razón de que por la herencia se transmitirán derechos y obligaciones
de una persona fallecida en favor de otras llamadas herederas, se ha hecho
imperiosa la necesidad de determinar cuál el momento en el que los sucesores
se hacen acreedores de tales derechos, especialmente cuando las personas se
encuentran solamente concebidas a la muerte del causante, motivo que ha
despertado una serie de controversias en el ámbito jurídico desde la
antigüedad.
Para la explicación científica de tales preocupaciones, se planteó la
existencia de dos teorías genéricamente aceptadas en la doctrina y la mayoría
de las legislaciones del mundo actual, como son: La teoría de la viabilidad y la
teoría de la vitalidad.
5.1. Teoría de la viabilidad.
Esta teoría es clásica y explica que para que una persona sea considerada
nacida, debe tener figura humana en sus partes principales, nacer vivo y
sobrevivir las 24 horas completas luego de la separación del cordón umbilical
materno, sin esas condiciones no será considerado nacido. Empero, a los
efectos de la sucesión hereditaria, los hijos concebidos debían nacer dentro de
los 10 meses producida ya la muerte del progenitor, si nacía un día después de
ese término, se le privaba el derecho de heredar. Ese era el principio que regía
en nuestro Código Civil abrogado.
El requisito de nacer con figura humana, era resabio del derecho español,
en el que se creía que de la unión sexual de personas con animales podrían
nacer seres mostruosos, mitad hombre, mitad animal. Los estudios científicos
de la genética y la biología han comprobado que esa posibilidad no existe.
5.2. Teoría de la vitalidad.
En las legislaciones modernas, como la alemana y todas las que se han
inspirado en ella, tales como la italiana de 1.942, fuente principal de la
nuestra, con criterio más amplio y científico indica que basta que el niño nazca
con vida, aunque inmediatamente después muera, es decir, que el ser tenga
vida propia, aunque sea por brevísimo instante. Esta teoría preconiza el
sistema de la vitalidad, o sea, «la idoneidad orgánica y fisiológica del nacido
para seguir viviendo».
Para comprobar si el niño ha nacido con vida, se recurre al método
denominado DOSCIMACIA HIDROSTÁTICA, que consiste en sumergir los
pulmones de éste en el agua, si flota es que logró respirar; de lo contrario,
significará que ha nacido muerto. El método también ha dado lugar a la
suposición de fraudes, ante la posibilidad de insuflar artificialmente aire en los
pulmones del niño que nació muerto.
De cualquier manera, haciendo énfasis en lo previsto en nuestro Código
Civil, que recoge los principios de esta teoría, para ser considerado persona, es
preciso nacer con vida, como requisito esencial, ocurrido ese hecho vital, el
sujeto se hace acreedor a la personalidad y por lo mismo, con capacidad para
suceder la herencia.
6- EL CÓMPUTO CIVIL SOBRE LA CONCEPCIÓN DEL SER.
De acuerdo con las prescripciones contenidas en el Código de Familia
(Arts. 179, 185, 186, 190 y 208) y el Código Civil, determinan que la persona
luego de su concepción, para ser acreedora del derecho para suceder, es
preciso que su nacimiento se produzca dentro de los siguientes plazos:
1. La gestación mínima. Período que consta de 180 días, término en el
que se presume que una persona pueda nacer con vida; en la praxis estos
nacimientos se los conoce como prematuros.
2. La gestación máxima. Que es de 300 días como período máximo de
nacimiento de la persona.
Se consideran estos términos de gestación en el entendido de que una
persona natural no puede nacer antes del período mínimo, ni después del
período máximo de su concepción, aunque en la práctica esos plazos son
relativos, especialmente los máximos, pudiendo darse casos excepcionales en
los que se producen los partos después de los 300 días, razones explicables por
los que otras legislaciones como la peruana, han establecido entre 305 a
310 días como términos máximos.
En los nacimientos múltiples de dos ó más personas, nuestra legislación
no reconoce el derecho a la primogenitura, tampoco existe disposición
referente para determinar quién nació primero, pero por analogía se considera
que todos nacen al mismo tiempo y mueren en igual forma, ya que tampoco
existe la figura jurídica de la conmoriencia.
TEMA No 5
LA INCAPACIDAD COMO IMPEDIMENTO DE LA SUCESIÓN
1- EXPLICACIÓN Y CONCEPTO.
Conforme se había expresado en el tema anterior, la capacidad constituye la
regla para suceder y la incapacidad es la excepción de constituirse en la
antítesis de lo adverso a la capacidad.
La incapacidad se define, según los tratadistas, como el DEFECTO O LA
FALTA de aptitud legal para adquirir derechos, ejercerlos y contraer
obligaciones, así como la falta de aptitud o de idoneidad para recibir,
transmitir o recoger la herencia, tratándose de materia sucesiva.
De una definición general; se afirma que la incapacidad es la falta de
idoneidad legal para ser titular de derechos, que puede ser: absoluta o relativa,
pero el análisis y estudio, de estos temas corresponden a otra rama jurídica.
1.1. Concepto.
Tratándose de materia sucesoria, la incapacidad significa la falta de aptitud o
idoneidad legal para ser heredero, aunque los casos de impedimentos
constituyen incapacidades relativas ya que no existe la incapacidad absoluta.
2- CAUSAS DE INCAPACIDAD.
Según la legislación nacional, al igual que la generalidad de las existentes en
los demás paises, se conocen principalmente aquellas causas que hacen
inviable la sucesión, como pasamos a enumerar:
1. Los que no se encuentran concebidos a la muerte del autor;
2. Los concebidos nacidos muertos;
3. Los excluidos por causas de indignidad y;
4. Los desheredados.
1. En el primer caso, los no concebidos a la muerte del causante, por no tener
una existencia real o falta de personalidad, no pueden ser instituidos
herederos, en razón a que no se puede transmitir la herencia en favor de
personas inexistentes, sean naturales o jurídicas.
2. Los que habiendo sido concebidos al momento del fallecimiento del
causante, nacieran muertos, son considerados como inexistentes al no haber
logrado poseer la personalidad o la han perdido al nacer sin vida.
3. Los que han sido declarados indignos para suceder al decujus, cuando
inicialmente eran capaces y son privados del derecho de suceder, tal como se
explicará en el siguiente punto.
4. Los desheredados que son excluidos por voluntad del causante.
3- LA INDIGNIDAD COMO FORMA DE EXCLUSIÓN.
La indignidad consiste en la exclusión o privación del derecho a suceder
pronunciada a TITULO DE PENA contra quien ha sido culpable de FALTAS
GRAVES contra el causante y su memoria, fundada, en razones o motivos
personales (P. Planiol).
De esa manera la indignidad viene a constituir una sanción civil de carácter
penal, que afecta.unicamente a los herederos forzosos y a los ab-intestato,
otea, con quienes sé halla íntimamente ligado a través de lazos de parentesco
muy estrechos.
Esta figura jurídica, es ANÁLOGA a la INCAPACIDAD en los efectos,
que hará incapaz al heredero para suceder o recibir por transmisión sucesoria.
La incapacidad como forma de exclusión es incapacidad relativa, es una
especie DE INCOMPATIBILIDAD MORAL para suceder a su causante.
Singularmente, en la indignidad se aprecia que el llamado a la sucesión se
hace incapaz por la culpabilidad de un delito contra la persona del decujus o
contra la persona íntimamente ligada a él, por actos atentatorios contra su
vida, su honor, contra la libertad de testar o que haya ejercitado actos infames
contra él.
3.1. Motivos excluyentes.
Los motivos excluyentes de la relación sucesoria se encuentran enumerados en
el Art. 1009 del C. C., de acuerdo a los siguientes cargos:
a) El que fuere condenado por haber voluntariamente dado muerte o intentado
matar al decujus, a su cónyuge, ascendientes o descendientes, o cualquiera de
sus hermanos o sobrinos consanguíneos. La incapacidad comprende también
al cómplice.
Constituye a su vez la causal más grave y no admite rehabilitación.
b) El sucesor mayor de edad, que habiendo conocido la muerte violenta del
decujus, no hubiera denunciado el hecho a la justicia dentro de los TRES
DÍAS, a menos que ya se hubiera procedido de oficio o por denuncia de otra
persona, o si el homicida fuera el cónyuge, ascendiente, descendiente,
hermano o sobrino carnal de quien debia denunciar.
c) Quién había acusado al decujus, a su cónyuge, ascendiente, descendiente, o
a cualquiera de sus hermanos o sobrinos consanguíneos de un delito grave que
podría costarles la libertad o la vida, y si la acusación es declarada
calumniosa; o bien ha testimoniado contra dichas personas imputadas de ese
delito, y su testimonio ha sido declarado falso en juicio penal.
d) El padre que abandone a su hijo menor de edad o los prostituya o autorice
su prostitución.
e) Quién con dolo, fraude o violencia ha logrado que el decujus otorgue
revoque o cambie el testamento, o ha impedido otorgarlo.
Respecto a la causal:
d) Se debe entender como el hecho de que los padres expongan a sus hijos, al
abandono o a la prostitución, o atenten contra su pudor. El término exponer,
significa «dejar al niño recién nacido en la puerta de una Iglesia o casa, o en
algún otro paraje público».
4.- LA DECLARACIÓN DE LA INDIGNIDAD.
La declaración de la indignidad de acuerdo con lo que
establece nuestra legislación, tiene dos posibles modos de operar:
1. Declaración ipso-jure (de pleno derecho); y
2. La indignidad por declaración judicial.
1. La indignidad ipso-jure. Para el caso de haber dado voluntariamente
muerte a su causante o intentado matarlo, o a sus parientes próximos
consanguíneos, como señala el inc. 1) del Art. 1009 de C.C., y que hubiere
merecido pena condenatoria como culpable de dichos delitos, no requiere la
declaratoria judicial de indignidad, pues la sentencia penal surte sus efectos de
inmediato y de pleno derecho; de modo que a la apertura de la sucesión YA
ESTA DECLARADA, por lo cuál el indigno no puede suceder, por
encontrarse en estado de incapacidad por su exclusión.
2. La declaración de la indignidad.-Procede a solicitud o iniciativa de los
coherederos o de un tercero interesado en la sucesión, después de la apertura
de la sucesión. La acción de la declaración corresponde ejercitará los
interesados en la sucesión mediante demanda en la vía ordinaria y merece una
sentencia de declaración expresa de indignidad.
Conviene aclarar que los co-herederos enterados de la exclusión, accionan la
COMPROBACIÓN de la indignidad. En cuanto a sus efectos, la indignidad
opera retroactivamente al momento de la apertura de la sucesión; tiene
también la virtud de producir la figura de la sustitución en forma directa del
indigno en favor de sus descendientes; el declarado indigno es considerado
inexistente o como si nunca hubiera sido sucesor. La acción caduca en 3 años
contados desde la apertura.
5.- EFECTOS JURÍDICOS DE LA INDIGNIDAD.
Cuando el declarado indigno es excluido de la sucesión por los motivos que se
han señalado, da origen al surgimiento de los siguientes efectos jurídicos:
1. La indignidad, por su naturaleza, alcanza principalmente a los herederos
forzosos; comprende también a los herederos ab- intestato.
2. 2. La declaración de la indignidad es completamente personal y
portoTnismo, no tiende, a perjudicar a los descendientes ó sustituidos
del indigno, por cuya razón el indigno no puede heredar, adquirir, ni
recibir la herencia, pero puede trasmitir lo suyo en favor de sus propios
herederos.
3. El declarado indigno no puede conservar lo recibido o adquirido, o
administrar con ese título de legitimidad.
4. 4. El indigno no tiene derecho a la administración o el usufructo dé
Iós'bienes heredados por sus hijos por el derecho de representación, aún
en el caso de que éstos sean menores de edad.
5. Por otra parte, el indigno se halla reatado a la obligación de restituir los
frutos de los bienes hereditarios que le hayan llegado después de la apertura de
la sucesión (se equipara al poseedor de mala fe). En suma, el indigno se halla
privado en forma absoluta a la relación sucesoria.
6- REHABILITACIÓN DEL INDIGNO.
Con excepción de la indignidad por causa de parricidio, el indigno puede ser
favorecido con su rehabilitación y por lo mismo recuperar la capacidad para
suceder, por voluntad propia del decujus, como una forma de perdón que éste
le habría concedido; en ese sentido, la rehabilitación puede ser expresa o
tácita, total o parcial.
a) EXPRESA.
Es expresa cuando así lo determina el causante en documento público o
testamento, con absoluta claridad y en términos precisos e inequívocos.
b) TACITA.
Es tácita cuando conociendo el causante cualesquiera de las causas de la
indignidad en que incurrió el indigno, lo instituye como su heredero o
legatario. (Total=Heredero: parcial= legatario).
TEMA 7 LA SUCESIÓN A TITULO UNIVERSAL Y PARTICULAR
1 ANTECEDENTES GENERALES. La sucesión mortis causa es la forma más amplia de la
transmisión patrimonial, por lo mismo es una de los modos de adquirir la propiedad. Acto
jurídico que produce como efecto inmediato de la muerte real o presunta de su titular en
favor de los comúnmente llamados herederos.
Nuestra legislación y la doctrina establecen dos MODOS o FORMAS de sucesión mortis-
causa:
1. La sucesión a TÍTULO UNIVERSAL que abarca la totalidad de los bienes
patrimoniales afincados por el de cujus.
2. La sucesión a TÍTULO PARTICULAR O SINGULAR que comprende la sucesión
de sólo una parte del conjunto patrimonial del causante. Entre los sujetos activos de la
sucesión se distingue sólo la sucesión que distingue al heredero y al legatario. El primero es
el sucesor por excelencia, que es convocado a recibir la herencia por estar vinculado al
causante mediante la relación de parentesco en su condición de heredero forzoso o
simplemente legal. El segundo, es el llamado a la sucesión por la voluntad expresa del
causante mediante el testamento como un acto de liberalidad.
2- DIFERENCIA ENTRE HEREDERO Y LEGATARIO.
2.1. HEREDERO.
Es la persona que sucede indistintamente en la universalidad de los bienes
(patrimonio hereditario) como sucesor
único o en concurrencia con otros de igual calidad; por ese hecho, se dice que el heredero
sustituye al causante en idéntica situación jurídica, de tal modo que el contenido de las
relaciones jurídicas queda sin modificar.
2.2. LEGATARIO.
Es aquella persona que sucede al causante por voluntad expresada en su testamento,
pudiendo recaer su nombramiento en favor de sus parientes o personas extrañas a dicha
relación de parentesco. El legatario sucede principalmente sobre un derecho real, o sea,
sobre un bien o conjunto de bienes expresamente determinados o en relaciones jurídicas
determinadas. Eje. El crédito del causante con respecto a un tercero.
En la doctrina moderna, al legatario no se lo conceptúa como heredero, sino, como
causahabiente, porque no representa al decujus y sucede en forma particular sobre
determinados bienes solamente, y no en la universalidad o totalidad como ocurre con los
herederos.
3- LA SUCESIÓN UNIVERSAL.
2°. Que como consecuencia de la herencia, se convierte en deudor de las cargas y deudas
del decujus; situación que antes de ingresar en la sucesión no la tenía, de modo que nace
también para él, un nuevo derecho que lo convierte en deudor, ante quien los acreedores
hereditarios (acreedores del causante) se hallan facultados para exigir el cumplimiento de
las obligaciones contraídas por el de cujus.
Al respecto, conviene discriminar en qué consisten las
cargas sucesorias y las deudas.
a) Carga sucesoria.
Las cargas sucesorias son aquellas que surgen como efecto necesario de la apertura de
la sucesión (impuestos fiscales sucesorios, costas judiciales, de inventario, gastos
funerarios, etc.). Estas cargas son las que se reputan como aquellas obligaciones emergentes
del fallecimiento del causante y los pagos que se realizan con respecto a los trámites
administrativos referidos a la transmisión del derecho patrimonial, nuevos impuestos al
heredero.
b) Deudas sucesorias.
En cuanto a las deudas sucesorias, el heredepo se presenta como sucesor de ellas y
con la obligación de pagarlas; al nacer estas cargas o deudas por primera vez en la persona
del heredero, debe asumir a título originario para cumplirlos de la manera que le hubiese
correspondido al causante de haberlos podido hacer.
5- PRINCIPIO DERIVATIVO DE LA INSTITUCIÓN UNIVERSAL.
La institución de heredero a título universal, puede originarse
como efecto de los siguientes principios:
a) Por el ministerio de la Ley, cuando el causante no ha nombrado expresamente a su
sucesor;
b) Por disposición expresada en el testamento como acto de última voluntad por el
decujus, en el que nombra o instituye a sus herederos.
6.- EFECTOS.
Los efectos generales de la sucesión universal respecto a los herederos son las
siguientes:
a) Gozan del derecho de acrecer las porciones de las alícuotas que les corresponde,
cuando los otros herederos no
quieren o no pueden recibir la herencia.
b) Como efecto relevante, los herederos responden con su patrimonio (ultra vires)
cuando el caudal sucesorio no alcanza para cubrir la obligación y cargas del causante.
7- LA SUCESIÓN A TÍTULO PARTICULAR.
La sucesión a título particular o singular, es el acto jurídico por el cual se transmite un
objeto particular o un simple derecho o varios derechos sobre objetos materiales o
inmateriales concretos, Eje. La compra-venta, la donación y el legado.
La sucesión particular o singular constituye el legado;' el legatario es la persona que
se constituye en causahabiente y la sucesión se caracteriza porque la transmisión se verifica
sobre un derecho real, o sea sobre objetos o bienes determinados.
8.- CARACTERÍSTICAS.
En la sucesión a título particular, el sucesor legatario de ordinario no responde de las
cargas ni las deudas hereditarias, porque no se encuentra revestido de la llamada
REPRESENTACIÓN hereditaria de la cual está investido el
heredero.
- El sucesor a-título particular, no responde de las deudas, porque el legado obedece a
un acto de liberalidad.
- El sucesor particular adquiere el legado sin necesidad de aceptación no está obligado
a la colación de los bienes.
- No sucede de derecho en la posesión de los bienes hereditarios como el heredero.
- No tiene el derecho de pedir la división de los bienes, sólo tiene derecho al legado.
- Sin embargo, el legatario sufre la preferencia de los acreedores hereditarios
cuando los bienes sucesorios no alcanzan para cubrir las deudas por lo que de
alguna manera comparte la suerte del patrimonio hereditario, en ese sentido no es
posible determinar o afirmar la eficacia traslativa de las liberalidades
testamentarias, antes que sean pagadas íntegramente las obligaciones; en síntesis,
diríamos que los acreedores hereditarios
ejercen preferencia en la recuperación de sus acreencias.
9- PLURALIDAD DE HEREDEROS Y DE LEGATARIOS.
Cuando concurren varios herederos a una misma sucesión, se los denomina
COHEREDEROS y los bienes susceptibles de transmisión de denominan ALÍCUOTAS
(partes iguales). Todos los herederos cuando son forzosos o legales, ingresan a la relación
sucesoria con los mismos derechos y obligaciones o cargas sucesorias, comparten en partes
iguales, ninguno tiene el derecho a la exclusión o preferencia en la elección de los bienes y
obligaciones.
Cuando se presenta la renuncia de alguno de ellos, su derecho renunciado acrecenta la
masa hereditaria en favor de los otros coherederos en forma proporcional.
Cuando concurren varios sucesores a un legado singular (la masa o legado), se los
denomina colegatarios (legatario con otros). Empero cuando varios sujetos son llamados a
la sucesión de un solo legado, (una sola masa) se los denomina LEGATARIOS COMUNES
O COLEGADOS.
TEMA No. 8
LA ACEPTACIÓN DE LA HERENCIA
1- GENERALIDADES- PRESUPUESTO-
La aceptación es el acto jurídico por el cual el heredero que es llamado a la sucesión por
voluntad del causante o por la Ley, manifiesta su voluntad de suceder al decujus con los derechos y
deberes inherentes a ellos; de donde la función jurídica de la aceptación consiste en la adhesión al
llamamiento como consecuencia de la apertura de la sucesión.
La aceptación integra a la vocación y por lo mismo es un acto de voluntad, pues, sin ella la
herencia no se adquiere, ya que la sola voluntad del causante o de la Ley no es suficiente, la
aceptación debe sumarse con la vocación, por lo que se constituye en el elemento sinequanum para
adquirir o contraer la herencia, con la finalidad de hacerla propia, o sea, para transformarse en
heredero y ocupar la titularidad del patrimonio en sustitución del de cujus.
Para que la aceptación de la herencia pueda surtir todos sus efectos jurídicos, debe constituir
un acto de expresión del heredero enteramente voluntario, alejado de todos los medios que vician el
consentimiento, ser libre e individual; de existir otros herederos, unos pueden aceptar y otros
repudiarla, unos aceptan
en forma pura y simple y otros con beneficio de inventario.
Sin embargo, se debe tener presente que el PRESUPUESTO para adquirir la herencia es que
se concrete uno
de los posibles modos de delación; pero que no es suficiente, porque para que el acto jurídico sea
completo es necesario la aceptación.
2- EFECTOS JURÍDICOS.
En el punto anterior se había indicado que con la delación el llamado a la sucesión se
perfeccionaba, pero para que la misma sea también eficaz y el llamado se convierta en heredero, era
necesaria la aceptación, por consiguiente su función jurídica es, pues, la adhesión del llamamiento a
la sucesión donde se tiene que la aceptación se constituye también en una CARGA, que sin ella no
se adquiere la herencia.
En cuanto a los efectos jurídicos que produce la aceptación de la herencia se patentizan los
siguientes:
a) En el tiempo. Retrotrae la fecha de la aceptación a la fecha de la apertura de la sucesión,
en cuanto a los fines de su cómputo se refiere.
b) El heredero aceptante se subroga de derecho (ipso-jure) en los derechos y obligaciones del
causante, en todas sus peculariedades concebidas por el de cujus al momento de su fallecimiento,
asumiendo la posesión de los bienes dejados por el causante (Art. 1007C.C.)
3- CARACTERÍSTICAS DE LA ACEPTACIÓN.
El hecho de la manifestación de la aceptación significa que el llamado a la sucesión ha optado
por constituirse en calidad de heredero, en las formas que señala la Ley, sin embargo, para que ese
acto jurídico surta sus efectos de derecho, debe estar revestido de ciertos caracteres que resultan
siendo esenciales y que se hallan señalados en la propia Ley y que se refieren a los siguientes:
a). Derecho personal e individual.
El derecho de aceptar la herencia es eminentemente personal del llamado a suceder como
acto de disposición, en razón a que tiene consecuencias de carácter patrimonial que en el futuro
puede comprometer el suyo, en ese entendido, cada heredero convocado puede ejercitar por sí y
para sí ese derecho, en forma individual o en concurrencia de los otros llamados a suceder. Es un
derecho exclusivo del llamado a suceder para optar la decisión de constituirse o no en calidad de
heredero.
b). Es un acto de libre decisión.
En vista de que a nadie se le puede imponer la aceptación o la renuncia a la herencia. El
llamado a suceder tiene absoluta libertad de elegir la opción que más le convenga a sus intereses;
sin embargo, puede ser sujeto a que en los plazos mínimos que señala la Ley, adpote la decisión de
elegir esa opción.
c). Es un acto neutro.
La aceptación de la herencia se considera un acto neutro, porque no es oneroso ni gratuito;
esto significa que para la aceptación no se requiere de desembolsos económicos (no se puede
comprar), como que tampoco proviene de un obsequio o regalo.
d). Es indivisible, pura y simple.
Significa que la aceptación emitida por el heredero no puede ser parcial, o sea, elegir entre
algunos bienes y rechazar otros; por ese hecho, el llamado, debe aceptar la totalidad del patrimonio
o rechazarlo tal cual nos señala el Art. 1019 del C. C. Por otra parte, la aceptación no puede estar
sujeta a condición ni término, sino
que es pura y simple.
De lo contrario la Ley misma la sumará a la herencia.
e). Es irrevocable.
Conforme lo determina el Art. 1032 del C. C., el heredero tiene el PLAZO de 6 meses para
aceptar la herencia con el beneficio de inventario; plazo que se computa a partir de la
apertura de la sucesión y es fatal e improrrogable. Vencido este plazo, prescribe el derecho
y se sobreentiende que lo acepta en forma universal, o sea, en forma pura y simple.
3-ALTERNATIVA CONCEDIDA AL HEREDERO. OPCIONES E
INVENTARIACIÓN.
En el curso del plazo que concede la Ley para la aceptación con el beneficio de inventario,
que es de 6 meses, el llamado a suceder puede optar las siguientes alternativas:
a) Que pueda aceptar directamente la herencia con el beneficio de inventario.
b) Que previamente se levante el inventario para luego deliberar si acepta o no la herencia.
1.-CONCEPTO.
La renuncia en términos generales tiene el significado de dimisión o dejación
voluntaria de una cosa que se posee o de un derecho que se tiene; dentro del campo del
derecho, más propiamente en el sucesorio, la renuncia a la herencia, viene a
constituirse la antítesis de la aceptación (antónoma). que viene a manifestarse como una
resistencia u oposición del llamado para consolidar su calidad de heredero con la
aceptación de una transmisión patrimonial mortis causa que no le conviene o le resulta
desventajoso.
Por lo general la renuncia a la herencia se lo conceptúa como el acto de repudio a la
herencia, al cual es convocado por la voluntad de la ley o del decujus, como efecto de la
apertura de la sucesión, hecho jurídico, que como dijimos en los temas anteriores,
concuerda fatalmente con la muerte real o presunta del causante.
De cualquier manera, para el caso de que el llamado declare no aceptar la herencia,
para su eficacia jurídica, en forma similar al acto de la aceptación con el beneficio de
inventario, debe obedecer a un acto enteramente DECLARATIVO, VOLUNTARIO Y
LIBRE DE TODA PRESIÓN, dolo o violencia que vicie su consentimiento, además deberá
ser exclusivamente escrita y formal, ya que nuestra legislación no admite la renuncia tácita.
En sus antecedentes, se remonta al Derecho Romano, en el que inicialmente se conocía la
aceptación impositiva o forzosa de la herencia por parte del heredero, quien como se sabe
continuaba con la personalidad de su causante ejerciendo la titularidad del patrimonio
familiar, representándolo en las relaciones económicas, políticas, sociales y especialmente
religiosas; empero, posteriormente se suscitan grandes cambios dentro del derecho
en el que se implementa la figura de la «repudiato» por el que el heredero podía rechazar la
herencia, inclusive en forma tácita o expresa sin mayores solemnidades, cuyo efecto era
irrevocable y el heredero quedaba totalmente ajeno o extraño a la sucesión, dando paso al
derecho del acrecimiento y la substitución, es entonces que se hizo más patente el adagio
latino de que "puede renunciar aquel que puede adquirir« o » los derechos son siempre
renunciables».
2.- REQUISITOS VÁLIDOS PARA LA REPUDIACIÓN
HEREDITARIA.
Considerando la naturaleza jurídica de la renuncia o dejación de la herencia, este acto
declarativo debe reunir ciertas condiciones válidas que hagan viable su eficacia jurídica,
entre las que mencionamos:
a). Debe ser expresa. Ello significa que el heredero que renuncia o repudia a la herencia al
que ha sido convocado, debe manifestar su deseo de repulsa en forma expresa y por escrito,
en forma indubitable que dé la certeza a los terceros interesados de que no se desea asumir
la calidad de heredero, en vista de que nuestra norma legal no admite la renuncia tácita.
b). Debe ser formal. Aparte de estar manifestada la voluntad de no aceptar la herencia
mediante escrito, para su validez y el surgimiento de su eficacia jurídica, debe ser
formulada a la autoridad jurisdiccional del lugar de la apertura de la sucesión y
dentro de los plazos señalados en la propia ley. La declaración escrita debe estar precedida
del certificado de óbito, los documentos que acrediten la relación de parentesco, la nómina
de los coherederos si hubieren. La citación se lo hará por edictos incluyendo a los
acreedores y otros interesados.
De no observarse dicho procedimiento, la renuncia será considerada nula o no válida. Por
otra parte, para confirmar su validez, en todo caso, deberá existir la sucesión abierta por
muerte real o presunta, ya que no se admite la sucesión entre vivos por prohibición expresa
sometida a nulidad.
c). Debe ser voluntaria. La renuncia como acto de negación o rechazo al derecho de
suceder, esencialmente presenta la particularidad de ser eminentemente voluntaria, libre y
espontánea en la persona, alejado de todo acto que vicie el documento.
d). Es un negocio de inter-vivos y unilateral. El heredero llamado a la sucesión debe
expresar su voluntad de rechazar la herencia en forma personal e individual, sin requerir la
aquicensia de ninguna otra voluntad, ya que la decisión que adopta obedece a un acto
enteramente personal y unilateral que no afecta a los demás herederos.
e). La renuncia es indivisible. El acto de la renuncia de la herencia se los debe realizar en
su universalidad o la totalidad del conjunto patrimonial, de modo que no le está permitido
al renunciante aceptar en'párte y repudiar la otra, o sea que no existe la renuncia parcial,
como que tampoco existe plazo ni condición, la renuncia debe ser simple y llana.
3.- EFECTOS JURÍDICOS DE LA RENUNCIA.
Es importante la renuncia a un acto enteramente unilateral y típicamente consensual,
reporta una serie de efectos jurídicos como la que pasamos a desglosar:
a) En el tiempo. Los efectos de la repudiación se retrotraen al momento preciso de la
apertura de la sucesión, haciendo entender como que el llamado a herederar, jamás existió
en la relación jurídica y que nunca ha poseido los bienes sucesorios , dándose la presunción
de que jamás ha sido llamado a suceder: quedando nulos todos los actos de su actividad
eventual, salvo los autorizados por la ley.
b) Sustitución o representación. En caso de producirse la renuncia a la herencia por parte
del heredero llamado a la sucesión, sus derechos son transmitidos en forma inmediata en
favor de sus propios descendientes en el lugar y grado de su ascendiente, Art. 1089 del
C.C., por el derecho de sustitución o de representación. En caso de ser los renunciantes
menores de edad, la renuncia será formulada por sus representantes legales o tutores,
así como de los propios incapaces.
c) Acrecimiento de la herencia. De cualquier manera, en el supuesto caso de que el
heredero renunciante no tuviese herederos forzosos,es decir descendientes, la cuota parte de
la herencia al que ha sido convocado, acrecentará el acerbo hereditario de los coherederos,
sin embargo se salvan los bienes recibidos en calidad de donación en vida del causante lo
que no impide el derecho de retención ni el derecho de exigir la ostensión del legado si es
que ha sido instituido como heredero voluntario.
d) Revocabilidad. Una vez declarado el acto de la renuncia a la aceptación de la herencia
al que ha sido convocando el sucesor, en forma expresa y solemne, la leyjio admite su
RETRACTACIÓN, de modo que es IRREVOCABLE; sin embargo, puede ser
impugnado cuando adolece de alguno de los vicios del consentimiento, cuya acción puede
ser perfectamente interpuesta por terceros interesados en la sucesión, en especial de los
acreedores hereditarios que pudieren resultar perjudicados con la renuncia.
e) La herencia deferida al Estado no es renunciable.
El Art. 1053 C.C., De modo general dice que: « Los sucesores tienen el plazo de 10 años
para aceptar y renunciar a la herencia». Este plazo se computa siempre a partir de la
apertura a la sucesión o desde el día en que se cumple la condición cuando , el heredero
fue instituido condicionalmente. Sin embargo, los acreedores hereditarios, los legatarios o
cualquier otra persona interesada en la sucesión, pueden pedir judicialmente al heredero
para que manifieste si acepta o no la herencia, dentro de los plazos que señala el Art. 1023
del C.C., que estipula: "Que transcurridos 9 días del fallecimiento del causante, pueden
pedir al Juez que fije un plazo razonable que en este caso es de 30 días, para que en ese
término se manifieste el llamado aceptando o rechazando la herencia.
Al vencimiento del plazo anterior, el llamado a suceder tiene la alternativa de aceptar en
forma pura y simple la herencia, O la de aceptar con inventario o finalmente la de rechazar
o repudiar; si no se pronuncia la ley LO CONSIDERARA como ACEPTANTE PURO
Y SIMPLE en forma tácita.
5.- PERDIDA DEL DERECHO A LA RENUNCIA.
El Art. 1054 del C.C., señala como una forma de sanción civil para el heredero que
valiéndose de ciertos actos depredatorios del patrimonio sucesorio que vayan en su
desmedro, pierde el PODER DE RENUNCIAR, el derecho de acogerse al beneficio de
inventario, imponiéndose la aceptación de la herencia en forma pura y simple como una
especie de sanción o carga, sin participación de los bienes sustraídos u ocultados.
En suma, el heredero tiene el derecho a renunciar cuando incurre en actos de sustracción u
ocultación de los bienes que conforman el patrimonio sucesorio, con la intención de
apropiárselos, impidiendo que los otros herederos reciban su parte de dichos bienes,
provocando de esa manera la fusión patrimonial y asumiendo consiguientemente la
obligación de pagar las deudas de la herencia y los legados.
TEMA 11
LA RELACIÓN DE PARENTESCO COMO FUNDAMENTO DE
LA SUCESIÓN
1-DEFINICIÓN.
El Art. 7mo. del C. de Familia, define al parentesco de la siguiente manera: «El
parentesco es la relación de familia que existe entre dos o más personas. Es de
consanguinidad y civil o de adopción».
Por su parte, la doctrina define al parentesco como la relación recíproca que existe
entre las personas: esta relación requiere de un ascendiente común mediato o inmediato que
crea la unión familiar. Dentro de ésta corriente, se admite la unidad familiar que la mayoría
de las religiones acepta; todos los hombres y mujeres, que descienden de una pareja, se
encuentran en forma forzosa relacionadas por un parentesco, ya sea de una u otra
modalidad.
Según ciertos autores entendidos en la materia la palabra parentesco viene del latín
PARERE, que significa: «ENGRENDRAR».
Aunando el criterio anterior, podemos afirmar que parentesco es el vínculo o nexo
que existe entre dos o más personas, debido a una relación consanguínea o por ficción
creada por ley: suponiéndose en todo caso, la existencia de un autor común (ascendiente)
del cual unos descienden de otros.
2.- CLASES DE PARENTESCO.
Nuestra legislación reconoce las siguientes ciases de parentesco:
a) El parentesco de consanguinidad:
b) El parentesco Civil o de adopción y;
c) El de afinidad o legal.
Sin embargo, se conoce también el espiritual regido por el derecho canónico que hoy en día
ha desaparecido desde la vigencia de la Ley del Matrimonio Civil.
a) El parentesco de consanguinidad o NATURAL. Es la relación que media entre las
personas que descienden de un tronco común o cuando una es progenitora de otra. Esta
relación constituye el parentesco por excelencia y se desenvuelve dentro del círculo
de consanguinidad.
Este nexo familiar en el antiguo derecho recibió el nombre peculiar de PROLINA. En esa
relación se conocen por ejemplo, en línea directa o recta, a los padres e hijos, abuelos y
nietos, bisabuelos y bisnietos, tatarabuelos y tataranietos, y choznos. En lo colateral
aparecen los hermanos, primos, sobrinos y tíos.
b) El parentesco civil o de adopción. Es el nexo o relación que surge como consecuencia
de la creación de la moderna adopción y la arrogación de los antiguos romanos. Resulta de
una ficción de la ley que pasa el vínculo parental entre una persona con otra que es
adoptada, cuya secuencia se transmite a sus descendientes. Art. 12 del C. de Familia, «El
parentesco civil o adoptivo se establece por la adopción entre adoptante y adoptado y los
descendientes que le sobrevengan a éste último».
En el parentesco civil o de adopción, la relación está limitada al adoptante, adoptado y a los
descedientes de éstos, tiene la finalidad de dar una familia a quien carece de ella y dar hijos
a quien la naturaleza no puede dárselos.
c) El parentesco de afinidad o legal. Art. 13 del C. De Familia, « La afinidad es la
relación que existe entre un cónyuge y los parientes del otro».
En la misma línea y en el mismo grado en que una persona es pariente de uno de los
cónyuges que es afín del otro.
La afinidad cesa por la disolución o invalidez del matrimonio, salvo para ciertos efectos
especialmente determinados. De donde se obtiene que el parentesco por afinidad o legal
es el nexo que surge y existe entre el marido y los parientes consanguíneos de su mujer, y
recíprocamente. Surge como consecuencia del matrimonio o unión de hecho. Este
parentesco es el existente entre los suegros, yernos o nueras y entre cuñados. Como la
afinidad no crea parentesco alguno entre consuegros y consuegras, ni entre hermanastras y
hermanastros, al punto de poderse casar eventualmente entre si, sin necesidad de dispensa
alguna; sin embargo, el nexo familiar, que es en realidad la naturaleza de la relación, es
susceptible de cesación por efecto de disolución o invalidez del matrimonio, aunque sus
efectos subsisten en cargos especiales a pesar de la disolución del matrimonio, para
situaciones particulares como la prestación de alimentos o como impedimento para el
matrimonio.
La afinidad es un vínculo familiar o lazo familiar.
d) El parentesco espiritual o religioso. Es la relación que surge por razón de bautismo
entre los padrinos y el ahijado, y entre este y el ministerio del sacramento, se extiende
también a la confirmación: según el Canon 1079 del CODEX, solo el parentesco espiritual
resultante del bautismo constituye impedimento para el matrimonio, aunque puede ser
dispensado.
El parentesco espiritual no tiene consecuencia sucesoria en la actualidad, sin embargo, tiene
relevancia jurídica, no obstante el silencio de la norma, porque mantiene vigencia en el
ordenamiento establecido el inc. 3) del Art. 20 del C. de Pdto. Civil, como causa de excusa
y de recusación la relación de compadre, padrino o ahijado, proveniente de matrimonio o
bautismo.
3- ESTABLECIMIENTO DEL ORDEN SUCESORIO.
El establecimiento del orden sucesorio o la proximidad del parentesco, se establece por el
número de GENERACIONES, cada generación constituyeUN GRADO, y el orden de
grado constituye o forma, LA LINEA.
a) El grado. Es el cómputo o nexo familiar que existe entre un pariente y otro. O cada una
de las generaciones que hay desde un tronco o raíz de una familia hasta cada una de las
personas que pertenecen a ella. Entonces GRADO es la distancia que media en la línea
entre una persona y su pariente más inmediato.
b) La Linea. Es la parte ininterrumpida de grados o personas que descienden de una
persona, o no descendiendo las unas de lás otras, tienen un tronco común.
La LINEA se divide en:
1. LINEA DIRECTA y;
2. LINEA TRANSVERSAL O COLATERAL.
1. La linea directa. Es el nexo o serie de grados que une a las personas que descienden las
unas de las otras. Se contrapone a la transversal o colateral. A su vez se subdivide en:
a) Línea Ascendente y;
b) Linea descendente;
c) Línea paterna y;
d) Línea materna.
a) La línea ascendente. Es la serie de generaciones que ligan al tronco común o persona de
referencia con el padre, el abuelo, bisabuelo, tatarabuelo y los demás ascendientes más
lejanos. En la línea ascendente hay tantos grados como generaciones; por lo cual el padre
constituye el primer grado, el abuelo el segundo grado y así sucesivamente, tomando como
punto de partida al hijo.
b) Línea descendente. Es el conjunto de grados o generaciones que unen a una persona
con sus hijos, nietos, bisnietos, tataranietos y choznos y la ulterior descendencia.
c) y d) La línea directa también puede ser paterna o materna, según se determine el
parentesco por parte del padre o de la madre.
El tronco. Se denomina tronco, al grado de donde parten dos o más líneas, las cuales por su
relación y por su origen se denominan ramas, es el principio común del cual procede una
familia o el más próximo ascendiente de dos personas como lo es el padre de los hijos, el
abuelo para los nietos, etc.
2. Linea transversal o colateral.
Es la relación que vincula a personas que no descienden las unas de las otras, pero que
tienen un tronco común. En la línea colateral se distingue en igual y desigual parentesco,
según la igual o desigual distancia en que se encuentran con el tronco común, que se da
entre las personas de los distintos lados de la línea.
4- EL COMPUTO DEL PARENTESCO.
En materia de derecho o jurídica, el cómputo del parentesco consiste en la determinación
de los grados que separan a los miembros de una familia con relación a sus ascendientes o
descendientes y el tronco común.
El Art. 11 del C. de Familia nos señala que «En la línea recta o directa se computan tantos
grados cuantas son las generaciones, EXCLUYENDO AL TRONCO. Así el hijo está con
respecto al padre en Primer Grado, y el nieto en el Segundo con relación al abuelo, el
bisnieto en Tercero, teniendo en cuenta para ello la línea Descendente. En la Ascendente el
abuelo en Primer Grado, el bisabuelo en Segundo y así sucesivamente.
En la LINEA TRANSVERSAL o COLATERAL los grados se computan por el número de
generaciones subiendo desde uno de los parientes hasta el tronco común y descendiendo
luego hasta el otro pariente.SIEMPRE EXCLUYENDO AL TRONCO; así los hermanos
están en Segundo Grado, el tío y el sobrino en Tercero. y los primos hermanos en Cuarto.
TEMA 12
LA LEGÍTIMA Y LOS HEREDEROS FORZOSOS
1.-ANTECEDENTES:
En el derecho civil primitivo se fijo el principio de que el testador no podía dejar mencionar en el
testamento a los herederos suyos, ya sea instituyéndolos herederos o desheredándolos puesto
que por una simple omisión de los mismos no se los podía considerar excluidos de la herencia. En
la misma condición se encontraban los hijos nacidos con posterioridad a la muerte del causante y
su omisión producía la caducidad del testamento y la apertura de la sucesión ab-intestato. Pero
este sistema dejaba fuera a los hijos emancipados quienes quedaban excluidos del testamento
ante la simple omisión de los mismos.
Fue por ello que el pretor acudió en su protección con la finalidad de dar prevalencia a la familia
cognaticia y de esa manera va a equiparar a los hijos nacidos luego de la muerte del causante con
los hijos emancipados. "La sucesión legitima real es una limitación efectiva de la libertad de
testar, consistente en la obligación de dejar una cuota de los bienes a los parientes más
próximos entre los sucesores ab-intestato."
Con los comienzos de la Época Imperial aflora el instituto de la legítima. Es allí donde se la
reglamenta. La jurisprudencia clásica y la legislación imperial, crearon un verdadero derecho de
legitimas que se podía pedir a través de la querella inofficiosi testamenti, que no era otra cosa
más que partir de una ficción en la que se consideraba que una exclusión injusta solo odia
emanar de una mente enferma, esa irracionabilidad del acto del testador era motivo suficiente
para que procediere la acción de los purientes para impugnar el testamento que los hubiera
desheredado o preterido injustamente. Estaban legitimados los descendientes del testador, así
como los ascendientes y los hermanos y hermanas; pero no podían ejercer la acción si el causante
les hubiere dejado al menos una cuarta parte de la cuota que les hubiera correspondido en la
sucesión intestada: el testador debía reservar esa cantidad como mínimo, para los parientes más
cercanos. Se le llamo porción legítima o simplemente; legitima porque se fijaba en relación con lo
que les hubiera tocado en la sucesión legítima o ah-intestato.
Pero va a ser recién en el derecho Justiniano, donde la legítima adquiere su configuración
moderna, donde - según explica Borda - ya no cae todo el testamento, sino que el heredero
forzoso tiene derecho a reclamar una parte de la herencia de la cual no puede ser privado sin
justas causas.
2.- CONCEPTOS:
Eduardo Prayones; comienza por diferenciar los dos sistemas que existen para organizar la
transmisión hereditaria. El primer sistema llamado Libertad de testar no impone restricción
alguna a la facultad de disponer que tiene el propietario sobre sus bienes aún para después de su
muerte y rige en Inglaterra y en algunos de los Estados norteamericanos. El segundo llamado
Sistema de las legítimas, la ley interviene para imponer limitaciones, sostiene que si bien en vida
el hombre puede disponer de sus bienes no puede ocurrir lo mismo después de su muerte.
Nuestro orden normativo en Bolivia adoptó el sistema de las legítimas. Concluye diciendo que la
legítima "es un derecho de sucesión limitado a determinada porción .de los bienes, de la cual no
pueden ser privados ciertos herederos, sino por justa causa de desheredación".
Zannoni explica: "La legítima es un derecho de sucesión sobre determinada porción del
patrimonio del causante, protegido por la ley".
Por su parte Guillermo Borda define la legítima como "la parte del patrimonio del causante de la
cual ciertos parientes próximos no pueden ser privados sin justa causa de desheredación, por
actos a título gratuito".
En nuestra normativa la legítima de herencia se la encuentra en el Código Civil en sus Arts. 1059
al 1066 y manifiesta:
La legítima de los hijos cualquiera que sea su origen es de las cuatro quintas partes del
patrimonio del progenitor y a la de los adoptivos es la misma que de los demás hijos, si el difunto
no deja descendientes ni hijos adoptivos sino solo ascendientes, la legítima que les corresponde
es de las dos terceras partes y la tercera conforma la porción disponible para liberalidades, pero
si el difunto no deja descendientes ni hijo adoptivo, ni ascendientes la legítima del cónyuge es de
las dos terceras partes y la tercera conforma la porción disponible, pero si el difunto ha dejado
uno o más hijos y cónyuge se sigue la misma cuantía señalada, en caso de no tenerse ningún
heredero forzoso el de cujus podrá disponer de la totalidad de su patrimonio, es nulo todo acto
que disponga, modifique o suprima la legítima de los herederos forzosos o se impongan cargas a
la misma o un contrato celebrado antes de abrirse la sucesión.
Los fundamentos por los cuales puede considerarse que nuestro código siguió los mencionados
procedimientos pueden ser:
1.- En primer lugar, citamos a los de orden moral, según lo cual los parientes se encuentras
obligados recíprocamente a ayudarse frente a las vicisitudes que puedan presentarse. Entonces
existe una solidaridad moral que debe necesariamente corresponderse con una solidaridad
patrimonial, de forma que ocurrida la muerte de una persona parte de sus bienes pasen a sus
ascendiente, descendientes y cónyuge. Esto es así porque la moral familiar se resentiría, si la ley
permitiera que el perjuicio de los herederos forzosos del causante en pos del enriquecimiento de
terceros.
2.- Otro de los fundamentos es de orden social, ya que la familia no subsiste solo a base de afectos
sino que al transcurrir del tiempo se acumula cantidad de bienes materiales o inmateriales por el
titular, y siendo la familia la base de la Nación, es necesario que el Estado resguarde sus intereses
y no deje desprotegido tanto a sus descendientes del de cujus como a su cónyuge.
3.- En cuanto a los basamentos de orden político diremos que se relacionan directamente con la
justa distribución de las riquezas, de modo tal que el permitir que un individuo disponga a su
antojo de sus bienes, provoca distribuciones arbitrarias, llegando a causar perjuicios en el orden
social y distorsionando el objetivo que el Estado tiene de obtener el bienestar de la mayor
cantidad de individuos y esto se logra con la división de las riquezas y la partición de los bienes
inmuebles.
TEMA 13
EL REINTEGRO DE LA LEGITIMA Y LA ACCIÓN DE
REDUCCIÓN
1.-CONCEPTO.
En el tema precedente nos referimos a que la legítima es la reserva que hace la ley en favor
de los herederos forzosos, sobre los bienes fincados por el causante, en cuotas o porciones
debidamente conformadas en montos equitativos para todos y cada uno de los
herederos, ya sean testamentarios o ab-intestados, pero principalmente para los forzosos por
estar estos ligados por lazos consaguíneos con el causante.
Por otra parte, sabemos que la legítima es una limitación a la libre disposición de los bienes
del causante en favor de sus herederos forzosos, dando lugar a la sucesión por causa de
muerte o por actos entre vivos; estando previsto por la ley las cuotas o porciones
de la legítima, el titular del patrimonio no puede disponer libremente de sus bienes
sobrepasando las cuotas que corresponden a sus herederos forzosos constituyendo por
ejemplo: donaciones o legados, ya que éstas formas de disposición, por efecto de la ley,
son sancionadas con nulidad y son objetos de reducción a través del reintegro de la
legítima. La acción de reintegro tiene la exclusiva finalidad de reconstituir la legítima que
ha sido lesionada por el causante mediante los actos de liberalidad, a su porcentaje original,
que conforme a la categoría de los herederos forzosos se halla predeterminado en la Ley.
De modo que cualquiera de los herederos, coherederos que recibiere una cantidad inferior
frente a los coherederos o colegatarios, tiene la plena facultad de ser reintegrado en su
legítima por estar amparado su derecho por el principio de la intangibilidad.
2.- LA REDUCCIÓN.- DEFINICIÓN.
Se la entiende como a la figura jurídica que faculta a los herederos forzosos, para
restablecer la intangibilidad de sus legítimas o proceder a un reparto equitativo de la
herencia por haber hecho adjudicaciones el testador en porciones superiores a la capacidad
patrimonial. En ese entendido, la reducción tiene la función correctiva de los actos en que
hubiese incurrido el causante mediante donaciones o legados, lesionando la legítima, para
restablecerla en favor de los herederos forzosos; constituyéndose de esa manera en un
remedio para reintegrar la legítima y reparar su lesión provocada por los actos de
liberalidad. Art. 1067. C.C. «Cuando se abre todo o en parte la sucesión ab- intestato,
concurriendo herederos forzosos con otros llamados a suceder, las porciones que
corresponderían a éstos últimos se reducen proporcionalmente en los límites necesarios
para integrar la legítima de aquéllos, los cuales, sin embargo, deben imputar a ésta, todo lo
que han recibido del decujus en virtud de donaciones o legados».
3- PROCEDENCIA Y ORDEN DE LAS REDUCCIONES.
La acción de la reducción en las disposiciones mortis-causa, procede sobre los siguientes
actos de disposición:
a) Sobre las disposiciones testamentarias;
b) De las donaciones;
c) Sobre los legados y;
d) Del delegado o donación sobre inmuebles.
a) Reducción de las disposiciones testamentarias.
Cuando el causante ha dispuesto mediante testamento más allá de la porción disponible que
le faculta la Ley, lesionando de ese modo la legítima, procede la reducción de la isposición
testamentaria, hasta el límite de la porción disponible para la liberalidad. Pudiendo dirigirse
la acción contra los coherederos o legatarios a quiénes haya beneficiado con las
disposiciones testamentarias.
Art. 1068 C.C. Par. I «Las disposiciones testamentarias que exceden a la porción disponible
que el decujus puede destinar a liberalidades, están sujetas a reducción hasta el límite de
aquella.»
b) Reducción de Donaciones. En segundo orden, cuando el decujus ha lesionado la
legítima por actos entre-vivos mediante donaciones celebradas en vida, excediéndose el
valor o la porción disponible para los actos de liberalidad, son objeto de reducción
hasta el límite señalado por la ley. Estas podrán reducirse después de las disposiciones
testamentarias, es decir, después de reducidos los legados u otras disposiciones;
comenzando por la última donación y así sucesivamente remontándose hasta las anteriores.
Parágrafo II y III del Art. 1068 C.C. «Igualmente las donaciones cuyo valor excede a la
porción disponibles están sujetas a reducción hasta el límite de aquélla». «Sólo después de
reducidas las disposiciones testamentarias se reducirán las donaciones».
3.1. Orden y modo de las reducciones.
Art. 1071 y 1072 C.C. Conforme al orden establecido en el ordenamiento jurídico:
a). En primer lugar, se reducirán proporcionalmente las disposiciones testamentarias, sin
distinguir entre herederos y legatarios, (se refiere a los herederos no forzosos, o sea, no
legitimarios). Sin embargo, cuando el testador ha declarado expresamente que una de sus
disposiciones sea cumplida con preferencia a las otras, está disposición solo se reduce
cuando el valor de las otras no sea suficiente para integrar la legítima de los herederos
forzosos. Esta última parte, tratándose del cumplimiento de última voluntad, si es posible,
debe acatarse dicha voluntad. Si el testador designa preferencia para una de sus
obligaciones, ella solo sufrirá efectivamente la reducción, es decir, cuando aplicados los
demás el pago de la legítima, no alcance para cubrir el importe de ella.
b). En segundo lugar, después de las disposiciones testamentarias se reducen las
donaciones, comenzando por la última y así sucesivamente remontándose a las anteriores.
La ley concede preferencia a las donaciones, que deben ser respetadas mientras pueda
cubrirse la legítima, reduciéndose antes, o anulando si fuere necesario las disposiciones
testamentarias. Su razón consiste en que las donaciones, la reducción, supone pérdida de
cosas adquiridas, de las que ésta disfrutando el donatario y en las demandas o legados, sólo
se trata de una cosa por adquirir y es más dificil privar de un derecho adquirido, que de una
esperanza de derecho.
3.2. La reducción del legado o de la donación de
inmuebles.
La particularidad se refiere cuando el inmueble donado o legado no admite cómoda
división para el caso de imponerse la reducción. El principio atiende primero al interés de
los herederos forzosos, adjudicando la cosa objeto de donación a ellos, cuando el
excedente reducible supera la cuarta parte de la porción disponible del causante, sin
perjuicio del derecho de beneficio de liberalidad a ser reembolsado en el valor del saldo,
que le corresponda hecha la reducción. No siendo así, el inmueble quedará para el
donatario o legatario, es decir, cuando el excedente reducible no exceda la cuarta parte de
la porción disponible, con la obligación de compensar en dinero a los legitimarios.
Art. 1073C.C.; 1) Cuando el objeto del legado o de la donación a reducir es un inmueble, la
reducción se práctica separando el inmueble la parte necesaria para integrar la legítima, si
esto puede hacerse cómodamente.
2) Si la separación no puede hacerse cómodamente y el legatario o el donatario tiene en el
inmueble un excedente mayor que la cuarta parte de la porción disponible, el inmueble se
debe dejar entera en la herencia, salvo el derecho de obtener el valor de dicha porción. Si
el excedente no supera la cuarta parte, el legatario o el donatario puede obtener todo el
inmueble, compensando en dinero a los herederos legitimarios.
3) El legatario o el donatario que es heredero, puede retener todo el inmueble siempre que
su valor no supere el importe de la porción disponible y de la porción que le corresponde
como heredero legitimario.
4.- DETERMINACIÓN DE LA PORCIÓN DISPONIBLE.
Art. 1069 C.C., refiere que: «Para determinar la porción disponible se forma una masa de
todos los bienes que pertenecían al decujus en el momento de-su muerte, deduciendo de
ella las deudas": Se reducen después ficticiamente los bienes de los cuales se haya
dispuesto a título de donación según su valor determinado, conforme a las reglas contenidas
en el título de las colaciones, y se calcula sobre el caudal, así formando la porción de la cual
el difunto podía disponer». La operación de la determinación de la porción disponible,
según explica el Dr. Morales Guillen, implica tres operaciones:
a) Avalúo del activo existente. Todo el conjunto de bienes del difunto, existente en el
momento de su muerte, forman la masa de cálculo, o sea, del activo existente; se
excluyen los derechos vitalicios que se extinguen con la muerte, Eje. Renta vitalicia,
pensiones, derechos de usufructo, uso y habitación.
b) Deducción de deudas. El patrimonio supone un activo y un pasivo como conjunto
de relaciones jurídicas, no es más lo que queda del activo, deducido que ha sido el
pasivo. Se deducen las deudas del decujus, no las del heredero. Estas deudas
deducibles de la masa, incluyen los gastos funerarios, los de inventario y los
impuestos que incumban al difunto y que adeudaba al momento de su muerte. Los
impuestos por la transmisión sucesoria incumben a los herederos.
c) Estimación de las donaciones inter-vivos. Luego que se ha avaluado los bienes
existentes a la apertura y que de su importe se han pagado las deudas, se reúnen o
agregan a la masa de cálculo los bienes donados en vida por el decujus. Se trata de
reconstruir el total del patrimonio, incluyendo legados y donaciones.
5.- TITULARES DEL REINTEGRO Y LA REDUCCIÓN.
La acción de reducción únicamente beneficia a los herederos forzosos, cuyo derecho
procede por el mero principio de la ley, al considerarse el derecho como de interés público
e irrenunciable, toda renuncia a este derecho es nula, si se hace en vida del causante; luego
de la apertura a la sucesión, es válida. Los donatarios y legatarios no tienen el derecho pero
pueden vigilar la operación de la reducción, así como que tampoco lo tienen los acreedores
hereditarios ya que sólo incumbe a la legítima de los herederos forzosos.
En ese entendido, según lo dispuesto en el Art. 1070 del C.C., primero, los sujetos con
derecho a la petición de la reintegración a la legítima o la reducción de las liberalidades con
destino a la legítima, son los HEREDEROS FORZOSOS, SUS HEREDEROS Y SUS
CAUSAHABIENTES. Ellos no pueden renunciar a este derecho mientras viva el titular de
derechos o donante, ni con declaración expresa ni prestando su asentimiento a la donación.
Segundo, los donatarios y los legatarios no pueden pedir la reducción ni beneficiarse de
ella, ni tampoco pueden pedirla o beneficiarse los acreedores del causante si el heredero
forzoso que tenga derecho a la reducción ha aceptado la herencia con beneficio de
inventario.
6.- RESTITUCIÓN DE INMUEBLES Y ACCIÓN CONTRA LOS
CAUSAHABIENTES SUJETOS A REDUCCIÓN. (Legados y Donaciones)
Los bienes inmuebles objeto a restitución a consecuencia de la reducción, se lo harán libres
de toda carga o hipoteca, con las cuales el legatario o el donatario los hubiese gravado
luego de la adquicision de la herencia. De igual forma se procederán también con los bienes
muebles sujetos a registro, vehículos, acciones telefónicas, aeronaves, etc.
Por otra parte, también se restituirán los frutos que hubiesen producido durante el tiempo de
la tenencia del bien. Ejemplo: cómputo para la cuantificación del fruto se calcula desde el
día de la notificación con la demanda de reducción. Empero, si los bienes han sido
enajenados por los donatarios a terceras personas, el heredero legitimario, previa
EXCUSACIÓN de los bienes pertenecientes al donatario, puede pedir a los sucesivos
adquirentes por el modo y orden en que podría pedir a los donatarios su restitución, o sea,
por el orden sucesivo de las enajenaciones.
En lo referente a los bienes muebles, se proceden de la misma forma; empero si la posesión
ha sido de buena fe, los derechos se limitan conforme a las reglas de la prescripción.
Finalmente, el tercero adquirente puede liberarse de la obligación de restituir pagando su
equivalente en dinero. La figura jurídica analizada, es una derivación de la regla
del 1072. Se persigue el inmueble por orden de antigüedad de las enajenaciones, haciendo
excusión de los bienes propios del donatario. El tercer adquirente, contando a partir del
último, es decir, el antepenúltimo de los adquirentes, puede liberarse de hacer la
restitución pagando su importe en dinero.
7.- CONDICIONES PARA EJERCER LA ACCIÓN DE LA REDUCCION.-
Art.1077C.C.
a) El heredero legitimario que no ha aceptado la herencia con el beneficio de inventario, no
puede pedir la reducción de las donaciones y legados, a menos que unos y otros se hayan
hecho a personas llamadas como coherederos, aún cuando éstos hayan renunciado a la
herencia. Esta disposición no se aplica al heredero que aceptó la herencia con beneficio de
inventario y cuyo derecho ha caducado, la regla se refiere al heredero legitimario, que
acepta pura y simplemente la herencia, solo puede pedir la reducción de donaciones y
legados hechos a otros coherederos, así estos hayan renunciado a la herencia. Puede ocurrir
que la donación o el legado sea superior a su cuota legítima y la ley, con esta disposición
prevé la forma de fustrar una violación encubierta de las reglas relativas a la legítima.
b) El heredero forzoso que pide la reducción de donaciones o disposiciones testamentarias,
debe imputar a su legítima las donaciones y legados que lo han favorecido, a menos que
tenga dispensa expresa. Ejemplo: Los anticipos de la legítima. La figura jurídica tiene
referencia con el cálculo de la porción disponible, así sea ficticiamente mediante la
imputación, en cuanto a la dispensa expresa por el testador, puede librar al donatario de la
reducción, en tanto y en cuanto no sea necesario para completar la legítima, cuando las
demás donaciones no la han reconstituido completamente o mientras el mantenimiento de
la dispensa no ocasione perjuicio a los donatarios anteriores, al efectuarse la
reducción por el orden de antigüedad.
c) El heredero forzoso que sucede por el derecho de representación, debe también imputar
las donaciones y los legados hechos, sin dispensa expresa, a sus ascendientes.
De modo general, según lo normado por el Art. 1507 del C.C., la acción de reducción
prescribe dentro del término ordinario de 5 años, el que se computa desde la muerte del
causante.
TEMA 14
EL DERECHO DE ACRECIMIENTO
CONCEPTO.
"El derecho que corresponde a cada uno de los coherederos llamados
conjuntamente a una misma herencia, o a una porción de ella, sin especial
designación de partes, a hacer suya la porción que en determinados supuestos
queda vacante".1
Llamado también derecho de acrecimiento, tiene lugar cuando alguno de los
herederos constituido, que tiene vocación hereditaria no accede a la alícuota parte
de la herencia por diferentes causas o motivos, en este caso acrece o beneficia a
los otros herederos2.
Es el Derecho que tiene el llamado a parte alícuota de una herencia o aquél a
quien se ha legado parte de una cosa o de un conjunto de cosas de recibir
también la cuota que no se le atribuyó en la misma herencia o en la misma cosa,
si tal cuota no tiene titular que pueda o quiera recogerla con preferencia los
herederos abintestato3.
«Efecto producido en la sucesión hereditaria cuando uno de los llamados
solidariamente a la herencia no quiere o no puede heredar, conforme con el
principio concursus partes funt, por cuya virtud la cuota resultante para los
efectivamente herederos será mayor o menor».4
El acrecimiento no solo tiene lugar entre coherederos sino también entre
colegatarios.
El derecho de acrecer se funda en la solidaridad existente entre los llamados a
heredar o que tengan vocación hereditaria, si algún Coheredero o Heredero está
excluido de heredar, esa cuota parte que queda como herencia vacante, favorece
a los otros herederos o colegatarios.
REQUISITOS
Para que se produzca el acrecimiento mediante causas o motivos de los que
tienen vocación hereditaria, se halla excluido de heredar, las causas son las
siguientes:
1. Por muerte del heredero, hace que su parte se disponga a favor de los
otros herederos.
> Cuando hay un solo heredero y muere antes del causante, renuncia,
es declarado indigno; al patrimonio acceden los Herederos Colaterales
(Hermanos, tios, sobrinos, primos)
II. La misma regla se aplica cuando el heredero legal haya muerto antes de
abierta la sucesión o no pueda recibir la herencia por cualquier causa
determinada por la ley.
IV. Las mismas reglas se aplican cuando el heredero instituido haya muerto
antes que el testador o no pudiera recibir la herencia por cualquier causa
determinada por la ley.
SI EL CAUSANTE O TESTADOR A DEJADO SUS BIENES SEÑALANDO A
LOS HEREDEROS FORZOSOS E HIJOS.
1.-CONCEPTO.
La sucesión legal o ab-intestata, sucede cuando es la ley la que regula la transmisión
patrimonial del causante en favor de sus herederos legitimarios, en ausencia de la voluntad
del titular expresada válidamente en un acto testamentario, de ese modo, se dice también
que es la ley la que suple la voluntad del causante al haber fallecido éste sin haber tenido
oportunidad de dejar disposición testamentaria en la que hubiese dispuesto la suerte de
sus bienes y nombrado a sus herederos además, distribuyendo según su voluntad sus bienes,
o de lo contrario que habiendo otorgado testamento, este es declarado nulo o ineficaz por
alguna causa señalada en la ley, entre sus fundamentos jurídicos, conforme lo expresan los
autores de la materia, entre ellos, Messineo, dice: « Que es una especie del deber ético para
proveer aún después de la muerte a las necesidades económicas de sus familiares»;
fundamento que también corresponde a la sucesión forzosa o necesaria.
La sucesión legal o ab-intestato, reconoce principios que le son característicos a
diferencia de las otras instituciones como
ser:
1.1. Principios.
a) Prevalencia. Por sus caracteres especiales, la sucesión legal o ab-instestato, tiene
prevalencia sobre la sucesión testamentaria, en razón a que ésta opera sin necesidad de
testamento, sino, por el mero principio de la ley.
b) La exclusión. Por la sucesión legal o ab-intestato, según al orden familiar al que
corresponden los sucesores se excluyen unos á otros, así el pariente más próximo excluye al
más lejano, Ej. el hijo excluye al nieto, los nietos a los bisnietos. Produciéndose de esa
manera también, la preferencia de los parientes por grados.
c) El derecho propio y la representación. En la sucesión legal en su terminología
técnica, se dice que los hijos heredan POR CABEZA y los demás descendientes, por
estirpe, de modo que suceder por cabeza significa suceder por derecho propio; o lo que
es lo mismo, y suceder POR ESTIRPE significa suceder por el derecho de representación.
d) Rige el trato jurídico igualitario. Art. 1084. A los descendientes, ascendientes y
parientes colaterales, se les defiere la herencia sin tener en cuenta el origen de la relación de
familia, que existió entre ellos y la persona de cuya sucesión se trata.
Conforme a la concepción doctrinal de nuestra Carta Magna, no se hacen más
diferencias en cuanto a las filiaciones se trata entre legítimas o naturales, respecto a los
hijos del mismo modo que el origen de la relación de familia como sería la matrimonial o
extra-matrimonial, entre los sucesores y el causante, por cuanto por esa razón, todos los
llamados concurren en igualdad de condiciones conforme al grado y orden de relación
familiar o parental.'
2- PRESUPUESTO DE LA SUCESIÓN LEGAL.
Las condiciones para que se opere la sucesión legal deben darse en las siguientes
circunstancias:
a) La muerte real o presunta del causante, ya que no existe posibilidad de suceder a
una persona viva en la totalidad de su patrimonio.
b) La sucesión legal es SIEMPRE UNIVERSAL en todo lo que comprende el
patrimonio del causante, en especial las obligaciones y las cargas; situación que conlleva la
EXCLUSIÓN DE LOS LEGADOS.
c) La sucesión también es LEGAL, porque al no existir disposición"téstamentaria, es
la ley la que se encarga de suplir la voluntad del decujus y organiza el sistema de la
sucesión fundándose en el principio del afecto o la relación de parentesco que existe entre
el de cujus y los sucesores. De ese modo, la sucesión corresponde en primer lugar a los
parientes consanguíneos del causante e hijos adoptivos, luego al cónyuge sobreviviente,
tomando en cuenta siempre el orden de grado de la relación parental.
d) ES SUPLETORIA, pues, la sucesión opera sin necesidad de testamento, o
existiendo este, es declarado nulo por no cumplir con las condiciones previstas en la ley y
es esta la que se encarga de suplir la voluntad del causante y distribuye sus bienes en la
forma que hubiese querido hacerlo en el momento de otorgar su testamento.
3.- ORDEN DE LAS SUCESIONES.
El orden del llamamiento que hace la ley según la vocación sucesoria de cada uno de
los grupos de herederos, obedece en todo caso a la relación parental existente entre el
causante y los sucesores, dando preferencia a los que se hallan ligados estrechamente por
vínculos consanguíneos, como son sus descendientes inmediatos, o sea sus propios hijos y
así sucesivamente; en ese sentido, el orden establecido por nuestra legislación, es el
siguientes:
a) El orden de los hijos y sus descendientes;
b) El orden de los padres y demás ascendientes;
c) El que comprende al cónyuge supérstite o conviviente;
d) El orden de los parientes colaterales y;
e) El del Estado.
ANTECEDENTES.
FUNDAMENTOS.
Como Se Justifica Que El Heredero Puede Heredar El Autor Jorge Osear Macias
decía la sucesión del cónyuge es una sucesión atípica por que no es descendiente
ni ascendiente por que tampoco no tiene un vinculo consanguíneo.
Los fundamentos del por que el cónyuge sucede son:
o COHABITACIÓN.- Los cónyuges se suceden así mismos por que
cohabitan, quiere decir que viven bajo un mismo techo por eso tienen
que heredarse mutuamente pero esta teoría ha sido rechazada por
insostenible por que es un fundamento de hecho.
o ES POLÍTICA Y FAMILIAR. -
o Es político.- refiriéndose al Estado por que el matrimonio es la base
de la sociedad y la sociedad base del Estado conformado con
territorio, población y gobierno, el Estado debe proteger al cónyuge
otorgándole al sucesión hereditaria.
o Es familiar.- por que el de cujus, el cónyuge supérstite no debe
querer que el sobreviviente se encuentre en estado de necesidad
que pase penurias o necesidades entonces es justo que el cónyuge
herede al que ha fallecido.
o VOLUNTAD PRESUNTA DEL CAUSANTE.- El causante no ha
tenido la oportunidad de dejar un testamento pero si hubiera tenido
esa oportunidad y si el causante no tuviera hijos a quien quisiera
dejar sus bienes naturalmente deja todo a la persona con la que se
encuentra vinculado matrimonialmente por que a nadie le gustaría
que su patrimonio quede a terceras personas.
SUCESIÓN DEL CÓNYUGE.
Las 2/3 partes que corresponde a la legitima del cónyuge el esposo solo puede
disponer de una tercera parte esto solo se aplica cuando no hay hijos.
Si existiese hijos se considera como si fuese otro hijo más por que el cónyuge
hereda con los hijos y ascendientes.
Cuando heredan los hijos le corresponde las 4/5 partes pero cuando no hay hijos
le corresponde 2/3 partes.
El cónyuge hereda en una especie de tercer lugar por que ese tercer lugar herede
cuando no hay hijos, descendientes, ascendientes y en tercer lugar el cónyuge y
se da dos situaciones:
1.- Hereda la totalidad de la herencia no comparte con nadie, hereda todo.
2.- cuando hereda el cónyuge en tercer lugar excluye a todos los colaterales y al
Estado no comparte su herencia con nadie.
LEGISLACIÓN BOLIVIANA
ART. 1102 C.C.- (SUCESIÓN DEL CÓNYUGE) Al que muere sin dejar hijos o
descendientes ni padres o ascendientes, sucede al cónyuge.
Vale decir en tercer lugar y cuando sucede el cónyuge excluye a los colaterales
naturalmente sino hay descendientes, ascendientes.
ART. 1103(CONCURRENCIA DEL CÓNYUGE CON LOS HIJOS) Cuando el
cónyuge concurre con hijos o descendientes el cónyuge tiene derecho a una cuota
igual de herencia que cada uno de los hijos.
Quiere decir si hay de por medio los hijos no lo excluye al cónyuge es mas el
cónyuge hereda como si fuera un hijo mas, por lo tanto la legitima del cónyuge que
es al de 2/3 partes se convierte en 4/5 partes por que tiene el mismo derecho que
un hijo consecuentemente cambia su situación de la legitima cuando hay hijos.
ART.1104 C.C. (CONCURRENCIA DEL CÓNYUGE CON ASCENDIENTES) La
otra mitad se difiere a los ascendientes conforme a lo dispuesto por los Art. 1097 y
1099.
Quiere decir que suponiendo fallece el de cujus o uno de ellos y no hay hijos pero
hay suegros uno o dos suegros se debe compartir la herencia al 50% aunque los
ascendientes heredan al segundo lugar y el cónyuge en tercer lugar pero el hecho
de que herede en segundo lugar no quiere decir el de excluir al cónyuge por que si
no hay nadie hereda solo.
Art. 1009 las causas de indignidad fuero de ello el cónyuge puede ser excluido de
una sucesión hereditaria cualquiera de ellos naturalmente.
Cuando uno de los cónyuges es joven y se casa con otro de mayor edad el cual
se encuentra a punto de morir o muere dentro de los treinta primeros días de
celebrar el matrimonio muere como causa de esa enfermedad entonces a ese
cónyuge se le puede excluir de la sucesión hereditaria.
Siendo la finalidad del matrimonio conformar una familia, pero en este caso la
persona que se casa con una persona enferma que va a fallecer dentro de los
treinta días su función no es formar una familia sino es heredar simplemente
suceder en matrimonio.
Por todo lo expuesto se pronuncia el autor argentino Augusto Renuncio y sus
libros "Vocación Sucesoria", también nos comenta Eduardo Samoni y el autor
nacional Armando Villa fuente y Carlos Morales, todos ellos concuerdan en decir
que es inmoral contraer matrimonio solo con el efecto de heredar por eso es que
la ley castiga sacándolo de la sucesión hereditaria mereciendo este articulo una
critica del doctor Carlos Morales y Armando Villa fuente señalando que este
articulo no prevee en personas que tienen una relación de hecho en términos
vulgares concubinos que no han formalizado su relación y antes de la muerte
legaliza la situación de los hijos y del concubino(a) según nuestra norma este
cónyuge tiene que ser excluido de la sucesión hereditaria sabiendo que el
matrimonio es un acto formal desde el derecho romano porque en esta legislación
si faltaba algún requisito el matrimonio era considerado nulo.
Entonces esta causal puede excluir a toda persona que se case por la herencia
hay dos teorías:
• La Teoría Objetiva
• La Teoría Subjetiva.
La Teoría Subjetiva.- Toma nuestro Código Civil y es la que toman todos los
códigos modernos establece que una persona no necesita estar postrado en cama
ni necesita mostrar su enfermedad objetivamente que este tambaleando, la
medicina establece que ciertas personas pueden estar muy bien caminando
libremente como ocurre con aquellas que tienen una enfermedad terminal pero los
médicos tienen que determinar que esa persona va ha morir y si en ese plazo
muere la teoría subjetiva plantea 30 días un mes ya no seis meses, muere
entonces es excluida de la sucesión hereditaria como lo decía por que el objetivo
la ley presume no es militante no pide que se demuestre sabia o que no sabia
IURE ET IURE presume IURE ET IURE que solo quería heredar, además tiene
que morir por la causa de esa enfermedad no por otra que pasa.
MATRIMONIO PUTATIVO.
Matrimonio putativo significa matrimonio aparente el matrimonio putativo es un
segundo matrimonio una de las partes o ambas partes pero en forma posterior ese
matrimonio es anulado y uno de ellos muere entonces ese matrimonio se
considera un matrimonio aparente.
Entonces no hay sucesión no tiene que haber otros cónyuges solo cuando no hay
entonces el aparente entra en sucesión por el contrario se rompería el principio de
legalidad.
TEMA 17
LA SUCESIÓN DE PARIENTESCOLATERALES
2do grado
E H 3er grado
F 4to grado
G 5to grado
DESCRIPCIÓN DE HEREDERO
Nuestra legislación civil no tiene la virud de definir, la figura del heredero,dejando
seguramente esa tarea a la doctrina, a diferencia de lo que preceptuaba el Código
Civil Santa Cruz en su Art. 485 Heredero es aquel que después de la muerte del
testador, entra en todos los bienes, acciones y derecho del difunto, ocupando el
lugar que este dejó"...
CLASES DE HEREDEROS
1. Herederos legales los que a su vez se subdividen en a) herederos forzosos y
b) herederos simplemente legales.
2. Herederos testamentarios.
3. herederos contractuales.
Herederos légales
En cambio los herederos simplemente legales, son las personas que son llamadas
para suceder a falta de la clase de los herederos forzosos o cuando éstos han
premuerto al causante o fueron separados y excluidos legalmente de la relación
sucesoria o de otra manera no han querido asumir la calidad de heredero por haber
renunciado a la herencia. En tal situación es la ley que llama a los parientes
siguientes en grado, en base de la proximidad del nexo parental correspondiente a la
línea colateral, a esta categoría corresponden los hermanos del causante, los sobrinos,
sobrinos nietos, tíos y otros.
Herederos testamentarios
Son aquello sujetos que son nombrados para suceder por expresa voluntad del
causante como disposición de última voluntad mediante el acto jurídico del
testamento, en el que individualizando a las personas y particularizando los bienes,
posibilita la transmisión patrimonial: los llamados a suceder reciben los
denominativos de causan habientes, legatarios, sucesores voluntarios, particulares o
singulares de manera indistinta, quienes pueden estar vinculados o no parentalmente
con el de cuius.
Herederos contractuales
Entre los sucesores pueden estar herederos forzosos, los simplemente legales o los
testamentarios, puede o no existir relación parental con el causante, y el contrato
solo recae sobre los bienes o derechos que forman parte de la porción de libre
disponibilidad, sin afectar para nada la porción destinada a la legitima, sin embargo
cuando se presenta la inexistencia de herederos forzosos, el titular puede disponer
por contrato la totalidad o parte de su propia sucesión, así regula los art. 1005 y 1006
de nuestra legislación civil.
TEMA 17
LA CAPACIDAD PARA TESTAR Y RECIBIR POR
TESTAMENTO
1.-CONCEPTO.
La capacidad para testar consiste en la cualidad de querer, entender y disponer que debe
reunir una persona o el titular de los derechos de posibilitar la transmisión de sus bienes en
favor de sus herederos o personas.afines a él. Por consiguiente, LA CAPACIDAD DE
TESTAR es la facultad o cualidad que constituye la regla, porque pueden hacer testamentos
todos aquellos o a quienes la Ley no les prohíbe expresamente.
Siendo la capacidad jurídica atributo inseparable de la persona humana, la capacidad
jurídica es la regla, el precepto jurídico que se explica ahora, es REGLA DE LA
CAPACIDAD DE TESTAR, salvo la especifica idoneidad exigida con relación a las
formas o clases de testamentos en las que se requiere el cumplimiento de ciertas reglas que
dan eficacia al testamento, respecto a su otorgante.
Al considerarse al testamento como un medio para posibilitar la transmisión
sucesoria, TESTAR ES UN ACTO DE DISPOSICIÓN; por consiguiente, la capacidad para
testar es por lo mismo también un caso de PODER DE DISPOCISION.
Por lo general, LA CAPACIDAD PARA TESTAR RADICA EN LA CUALIDAD
ESENCIAL, de exigirse en la persona que pretende otorgar el testamento, es decir la
idoneidad y goce de la capacidad intelectual, o de la plenitud del uso de la razón, o sea, la
capacidad en la mente de querer, entender, y de disponer, a fin de que pueda darle
efectividad a su poder de disposición, en ese entendido, será preciso que por lo menos
cuente con la edad exigida por la ley y encontrarse en la plenitud de su razonamiento
psicológico; toda vez que las causas que limitaban la capacidad para testar han sido
totalmente superadas tales como la esclavitud, la muerte civil, etc.
1.1. APRECIACIÓN.
LA CAPACIDAD DELTESTADOR se la aprecia únicamente con relación al
momento de la otorgación del testamento, tal cual refiere nuestra legislación en su Art. 1120
C.C., al respecto en todo caso, la declaración de última voluntad constituye un acto jurídico
de modo que es preciso determinar la idoneidad del testador en el momento de otorgarlo, no
interesando los actos posteriores.
2- DE LOS SUJETOS CAPACES PARA TESTAR.
De acuerdo a lo prescrito por el Art. 1118 del C.C., de modo general, manifiesta que:
«toda persona residente en el territorio nacional puede testar libremente excepto aquellas a
quienes la ley prohíbe esta facultad».
De donde se concluye que la capacidad es la regla y la incapacidad la excepción, es
decir, que todas las personas gozan del derecho de testar; en derecho de sucesiones, esa
capacidad es más amplia ya que la propia ley establece que son capaces para testar las
personas que han llegado a la edad de 16 años; en cuanto a las incapacidades se hallan
expresamente señaladas conforme analizaremos posteriormente.
3- DE LOS SUJETOS INCAPACES PARA TESTAR.
Si la regla general constituye la capacidad para testar, la excepción constituye la
INCAPACIDAD PARA TESTAR, estos casos de incapacidades son TAXATIVOS y de
interpretación estricta; a ese respecto, la ley señala expresamente quienes están
prohibidos o son incapaces para otorgar testamentos, conforme señala el Art. 1119 de
nuestro Código; «Son incapaces para testar».
a). Los menores que no han cumplido la edad de los 16 años. Estos no pueden
hacer testamento, sin embargo, en casos especialmente de testamentos especiales pueden
otorgarse luego de cumplidos los 16 años o los que han sido emancipados forzosamente.
b). Los interdictos. Los interdictos o enajenados mentales (los dementes) son los que
se hallan declarados, total o parcialmente para ejercer actos de vida civil. La declaración del
estado mental deberá ser emitido judicialmente mediante sentencia, pronunciada en juicio
ordinario para ser considerado de nulidad el acto testamentario, hecho en ese estado mental
c). Quienes no se hallen en su sano juicio por cualquier causa, al hacer el
testamento. En lo referente a este punto nuestro código Civil es más amplio, ya que en la
doctrina se conocen los otros casos, de cualquier manera nuestro código se refiere a otros
casos de enajenación mental que en forma ocasional pudiesen suscitarse en el momento
mismo de otorgar el testamento, tales como los accidentes.
d). Los sordomudos y los mudos que no sepan o no puedan escribir. El caso se
refiere a cierta clase de testamentos (ológrafos) ya que sí puede hacer testamento mediante
otras formas y ser válidas luego de la muerte del titular de los derechos y obligaciones; esta
viene a constituir una forma de incapacidad relativa.
4.- CLASIFICACIÓN DE LA CAPACIDAD.
La calificación de la incapacidad, o determinar la validez o eficacia del testamento, se
la toma considerando, si el testador en el momento o la fecha en que ha hecho el
testamento, estaba o no en su sano juicio o se encontraba o no en la plenitud de sus
facultades intelectuales; a ese efecto se retrotraen en el tiempo al momento mismo en que
fue redactado el testamento y la capacidad o incapacidad del testador SE APRECIA
ÚNICAMENTE CON RELACIÓN AL MOMENTO O INSTANTE DEL
OTORGAMIENTO DEL ACTO JURÍDICO. En concreto, consiste en determinar con
exactitud si el testador ha estado o no en capacidad mental para otorgar el testamento en el
instante de la disposición de sus bienes.
Al respecto, el tratadista Messineo se refiere que tratándose de un interdicto que
hubiere otorgado su testamento durante UN INTERVALO LUCIDO, es válido, siempre que
esa normalidad se acredite por dos facultativos, surtiendo sus efectos legales, ya que
el interdicto a gozado de la capacidad para testar.
5.- LA CAPACIDAD PARA RECIBIR POR TESTAMENTO.
La capacidad para recibir por testamento es más amplia, y puede definirse como la
aptitud para ser beneficiario de la institución o el nombramiento como heredero de legados,
donaciones, etc., en razón a que todas las personas tanto naturales como jurídicas
o colectivas pueden ser instituidas como herederas, inclusive las aun no nacidas, con
excepción de las declaradas incapaces para ello, como ser los indignos, los desheredados
forzosos o los legales, todas las personas son capaces de ser instituidos como herederos,
en este caso, también para recibir la herencia por testamento, ampliándose el concepto a los
que aún no tienen una existencia legal o natural por estar simplemente concebidos,
inclusive a los aún no concebidos.
De tal manera que las personas jurídicas o colectivas, también pueden ser capaces
para recibir la herencia por testamento, por Eje., los hospitales, las casas de enseñanza o de
beneficencia (escuelas, universidades, etc.) y las demás instituciones, siempre y cuando su
existencia no se halle prohibida por la ley, además que cuenten con la personalidad jurídica
obtenida conforme a los requisitos y condiciones que señala la ley.
6.- DE LOS SUJETOS INCAPACES PARA RECIBIR POR TESTAMENTO.
Siendo la capacidad para recibir por testamento la regla, la excepción consiste, en la
incapacidad o la PROHIBICIÓN legal para suceder o recibir la herencia por testamento,
debido a la incompatibilidad entre la calidad de heredero instituido y la función cumplida o
participación activa ejercida durante el otorgamiento del testamento, en cuyo acto pudo
haber influido en el ánimo del testador o abusar de la confianza del otorgante.
La incompatibilidad o prohibición se extiende inclusive a los casos de viabilizar la
transmisión hereditaria a través de INTERPOSITA PERSONA, cuando los bienes de
herencia han sido transferidos mediante la suscripción de CONTRATOS SIMULADOS
de carácter oneroso en favor de un incapaz o en el mismo testamento en calidad de
donación, en ese caso la cláusula testamentaria es nula. Puede también ocurrir el caso de la
transmisión mediante interpósita persona, cuando para burlar la incapacidad que recae
sobre el instituido, el testador nombra al hijo, al cónyuge o ascendiente de éste, existe la
presunción de que la finalidad está encubierta para lograr el traspaso de los bienes en
favor del incapaz; así lo expresa el Art. 1123 del C.C.,
I. Toda disposición testamentaria en beneficio de un incapaz es nula, aún cuando se
haya simulado bajo la forma de un contrato oneroso y se haya hecho bajo el nombre de
personas interpuestas. Son reputadas las personas interpósitas, para este efecto, los
ascendientes, descendientes, el cónyuge y los hermanos de la persona incapaz, salvando los
casos contemplados en el Art. precedente.
II. Las personas interpósitas deberán devolver los frutos percibidos de los bienes,
desde que entraron en posesión de ellos.
Entre los sujetos incompatibles incapaces para recibir por testamento, tenemos a los
siguientes:
1. Los no concebidos al morir el testador y los concebidos que no nacen con vida,
salvo los instituidos con existencia futura, Eje., los hijos aún no concebidos. Par. III. Art.
1008 C.C.
2. Las personas excluidas de la relación sucesoria mediante sentencia ejecutoriada
como son los desheredados y los indignos.
3. Las sociedades o instituciones ilegales o que no cuenten con su respectiva
personería jurídica; excepto cuando el testador disponga que se organice una nueva
coorporación o fundación, sujeta al trámite legal.
4. El notario y los testigos del testamento; la persona que a ruego escribe y el
intérprete; el cónyuge, los descendientes, ascendientes y hermanos de los mismos.
5. El médico o el profesional y el ministro de culto, el Abogado que asistió en su
otorgamiento, así como los parientes de éstos, con excepción de que si son herederos
legales.
6. Los tutores o curadores, albaceas y los parientes de éstos, a no ser que hubieran
sido instituidos antes de la designación para el cargo, excepto si son herederos legales.
7.- LA DECLARACIÓN DE LA INCOMPATIBILIDAD O
INCAPACIDAD.
La incapacidad para recibir por testamento no opera de pleno derecho, sino que debe
ser promovida por cualquiera de los interesados legítimos como ser los otros herederos
instituidos, dentro de los DOS AÑOS, desde la posesión de los bienes de herencia; en ese
sentido, se la debe tramitar judicialmente por la vía ordinaria pudiendo el Juez dictar
sentencia declarando la nulidad por la incapacidad para recibir la herencia. En todo caso, y
excepcionalmente, se salvan los contratos que en el Ínterin se hubieran celebrado sobre los
bienes, si es que el otro contratante obró de buena fe.
-96-
TEMA ?.16
-97-
ÍÁ
2- EL PRINCIPIO DE IGUALDAD JURÍDICA.
Cuando los descendientes sonJIamados a la sucesión en
el mismo grado, no existe referente a que si son de origen
mafrIrnoTíiat ~0~ éxtrámatrimonial, edad, sexo, bastará que el hijo
extramatrimonial, por ejemplo, se halle legalmente reconocido por
el causante. De modo que cuando son llamados a suceder,
concurren por derecho propio en exacta igualdad con todos ellos y
heredan en partes iguales y por cabeza.
3.- LA SUCESIÓN DE LOS HIJOS ADOPTIVOS Y SUS
DESCENDIENTES.
Conforme a la igualdad jurídica de los hijos, la proporción
del acerbo hereditario es idéntica a las porciones que corresponden
a los demás hijos, empero si bien la ley atribuye igualdad jurídica a
los adoptivos a la calidad de hijos (Art. 215 del C.F.), los hijos
adoptivos tienen vocación hereditaria respecto a los padres
adoptivos, pero no pueden suceder a los parientes de ellos, en
razón a que no existe ningún vínculo de parentesco que los .una.
En cuanto a sus descendientes se refiere, ellos pueden
suceder por el derecho de representación; sin embargo, al igual
que en el caso anterior, no pueden invocar la vocación sucesoria
respecto a los parientes del adoptante.
3.1. Sus limitaciones.
La adopción solo crea los lazos de parentesco entre el
adoptante y los adoptados, sin lugar a que el adoptado ingrese a la
familia de ellos; por otro lado, el adoptado no pierde su filiación
original con el que se halla vinculado a sus padres naturales, ya
que conserva todos su derechos y deberes con su familia de origen,
Art. 223 del C.F., de ahí el fundamento del que no pueda suceder a
los parientes del adoptante.
3.2. Causas de exclusión.
Según lo prescrito por el Art. 1096 del C.C., el adoptado
puede ser excluido de la relación sucesoria, cuando estando
pendiente el proceso de revocación de la adopción por causa
imputable a aquél, la sentencia condenatoria se pronuncia una vez
muerto el adoptante, como quiera que la adopción es revocable,
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Art. 227 C.F., se extingue toda relación de parentesco entre el
adoptante y el adoptado y por consiguiente, cesan sus efectos.
Al igual que cuando en la adopción no se han cumplido con
los requisitos de fondo y forma, tanto el adoptante como el adoptado,
pueden quedar excluidos de la relación sucesoria, el uno del otro
cuando exista proceso de «Nulidad de adopción». Según lo
prescribe el Art. 232 del C.F. a ese respecto, el art. 1096 del C.C.,
refiere: Exclusión del adoptado «Sin embargo el adoptado queda
excluido de la sucesión si existiendo juicio para revocar la adopción
por un hecho imputable a él, la sentencia revocatoria se pronuncia
una vez muerto el adoptante.».
4- LA SITUACIÓN DE LOS HIJOS ARROGADOS Y SUS
DESCENDIENTES.
Acorde con el principio señalado en el Art. 1085 del C.C. a
los efectos de derecho sucesorio, el arrogado y sus descendientes
gozan del derecho de prioridad para heredar conjuntamente los
otros hijos consanguíneos y adoptivos, en razón a que éstos forman
parte de la familia de los arrogadores por medio de la relación de
parentesco que media entre ellos, en razón que por la ficción de la
ley los arrogados son asimilados a los hijos consaguíneos habidos
en relación matrimonial de los arrogadores, con derechos, deberes
y filiación propias al igual que los demás hijos.
5.- LA SUCESIÓN DE LOS PADRES Y SUS ASCENDIENTES-
ORDEN SUCESORIO.
El segundo orden sucesorio corresponde, a los
ascendientes cuando adopta la rama de la línea directa-
descendente, o sea, cuando el causante carece de hijos, nietos,
bisnietos, etc. la ley llama a la sucesión a los ascendientes. La
prioridad hace que estos hereden a sus descendientes con
exclusión de los parientes colaterales, salvo los derechos del
cónyuge sobreviviente.
Por consiguiente, la cuota hereditaria que corresponde a
los padres del causante es igualitaria para cada uno de ellos, o
sea, padre y madre y estos suceden por derecho propio o por
cabeza. De existir solo uno, éste excluye a los otros parientes o
ascendientes del decujus.
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ElArt. 1097 del C.C., señala «Al que muere sin dejar hijos
ni descendientes suceden el padre y la madre o el que de ellos
sobrevive, salvo los derechos del cónyuge o conviviente».
5.1. La sucesión de otros ascendientes.
El Art. 1099 se encarga de indicar la sucesión de otros
ascendientes, como ser los abuelos, bisabuelos, tatarabuelos, etc.
cuando el causante no ha dejado hijos u otros descendientes,
cónyuge o conviviente, ni padres, en tal caso ingresarán a la
sucesión sus ascendientes más próximos conforme al orden y grado
por partes iguales, aún cuando fuera por líneas diferentes ya sea
paterna o materna, en todo caso, se salvan siempre los derechos
del cónyuge o conviviente sobreviviente. De cualquier manera, se
produce la figura de la exclusión de los parientes colaterales debido
al grado más lejano de parentesco.
5.2. La sucesión del adoptante.
A la muerte del hijo adoptado, le suceden sus padres
adoptantes, cuando éste no ha dejado descendientes, ascendientes
(sus propios padres), ni parientes colaterales hasta el segundo
grado.
En esta forma la sucesión se debe tener presente que el
adoptante sólo sucede al adoptado cuando no tiene ascendientes,
o sea, a sus padres naturales, y carece también de descendientes
y parientes colaterales hasta el segundo grado, en razón a que el
adoptado conserva todos sus derechos y deberes con su familia
de origen, Art. 215 del C. F., de donde se destaca que el adoptante
es un heredero meramente subsidiario, pero legal o necesario, al
igual que el Estado.
05.3. Exclusión de los padres y del adoptante.
a) De los padres. En el caso de que el padre, la madre o
ambos simultáneamente hayan reconocido al hijo (causante),
después que éste ha fallecido; excepto si él habia gozado de la
posesión de estado de vida. Esta forma de exclusión tiene su
justificativo en razón a que si los padres ignoraron el cumplimiento
de sus deberes naturales para con el hijo, negándole la certidumbre
de su filiación en vida. al reconocerlo post-mortem para el sólo fin
de beneficiarse con la sucesión, merecen la condigna sanción civil
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de la ley que niega efectos civiles al reconocimiento, una vez
fallecido el hijo.
b) Del Adoptante. Si existiendo juicio para revocar la
adopción por un hecho imputable a él, la sentencia revocatoria se
pronuncia después de muerto el adoptado. Del mismo modo debe
entenderse como causa de exclusión la nulidad de la adopción
prevista en el Art. 232 del C. F, que destruye el vínculo jurídico de
la filiación adoptiva y extingue el parentesco.
TEMA No. 17
LA SUCESIÓN DEL CÓNYUGE Y DEL CONVIVIENTE
SOBREVIVIENTES