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DEVOCIONAL Semana 8: NADA MENOS QUE LO MEJOR DE DIOS

DÍA 50: SOY HIJO.


Pues no habéis recibido el espíritu de esclavitud para estar otra vez en temor, sino que habéis
recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos: ¡Abba, Padre!”. (Romanos 8:15)

Darek Prince es un hombre a quien Dios usa en gran manera, adoptó nueve hijos. Años
después abriendo una obra misionera en África, llegó a su casa una mujer con una bebita en
sus brazos, muy desnutrida. Esta mujer le dijo: “Se que usted me puede ayudar, no puedo
alimentar a este bebé. Su mamá murió y ha estado en un hospital, pero ya no se pueden
hacerse responsables por ella y yo no tengo como cuidarla. Por favor, adóptela”. Él le dijo: Ya
no hacemos eso. Somos misioneros, y no recibimos niños”. La mujer respondió: “Está bien,
pero déjeme descansar unos minutos y luego me iré”. Cuando la señora se levantó para partir,
en el momento que se despedía, la bebita estiró sus brazos hacia el doctor Prince, y esto lo
recibió como una señal de parte de Dios de que debía adoptarla, así que le dijo a la señora:
“cambié de opinión, vamos adoptarla’’. En la actualidad, es una tremenda misionera en Israel.

Al adoptarla, Darek Prince le dio los mismos cuidados y el mismo lugar de privilegio en su vida
que le hubiera dado a un hijo biológico, porque cuando se adopta, éste adquiere los mismos
derechos que el legítimo, son participe de la misma herencia, de la misma familia, del mismo
trato y de los mismos privilegios.

Cuando venimos al Señor, ¿Cómo nos encontrábamos? La mayoría está en una situación
lamentable, comparable con la carencia de padre y madre. Nos hallamos desamparados,
desnutridos y desnudos espiritualmente. El Señor nos miró y vio tanta suciedad, tanta fealdad,
que pudo pensar: “Pero si yo ya tengo mi propio pueblo, Israel. Con ellos estoy más que
satisfecho”. Dios pudo habernos mirado como a extraños, pero no lo hizo. Aunque no teníamos
esperanza de redención, Él extendió Su misericordia y nos amó con Su infinita gracia. Nosotros,
al igual que aquella bebita, le extendimos nuestros brazos al Señor y Él fue movido a
misericordia. A pesar de no ser Su pueblo original, nos hizo pueblo Suyo. Aunque no éramos
hijos legítimos, nos adoptó y le plació darnos los mismos derechos de Sus hijos.

Dios nos hizo Sus hijos para que ya no vivamos en temor. Él es tu Padre, tú eres Su hijo,
cuando decidiste entregarle tu vida al Señor, Él te adoptó para que estuvieras el derecho de ser
hijo de Dios. Cuando Dios Nos adopta recibimos Su corazón y Su carácter y nos convertimos
en herederos de Sus riquezas y privilegios.

2. VIVE LA LECCIÓN. Hay diferencias entre una persona que visita una casa y alguien
que es hijo de la casa. En el cuadro anota las diferencias y evalúa tu situación. ¿Te
sientes hijo o como visitante?

Hijo Visitante
Hasta ahora me he sentido como ___________ porque Soy ____________en la casa de Dios.

De mis actitudes, me gustaría cambiar _____________________________________________

______________________________________________________para ser un mejor hijo Suyo.

Comienza desde este mismo instante a pensar y a comportarte como un verdadero heredero de
Dios.

3. RECUERDA LA LECCIÓN. Ya no eres extranjero, eres hijo de Dios.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

Salmos 103 Salmos 104 1 Corintios 15

DÍA 51: LA MEJOR HERENCIA.

Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que


padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados. (Romanos
8:17).

Cuando tenemos un encuentro con nuestro Padre Celestial, nos adopta como Sus hijos por Su
infinito amor y misericordia, de modo que para Él ya no somos ciudadanos comunes, sino por
causa de nuestra fe en Jesús, Él nos elevó a la misma dignidad de Su Hijo. Ahora somos
partícipes de los privilegios de Jesús, y podemos disfrutar de Su herencia. Además, contamos
con el Espíritu Santo, que nos revela al Padre y al Hijo, y nos guía por la senda por la que
debemos andar.

Si pudieras sumar el valor de las propiedades que tiene tu Padre Celestial, ¿Cuánto sería el
monto al que llegarías? Dios es dueño de toda la creación, de todo cuanto existe. Y, ¿Sabes
algo?, ¡tú eres Su heredero! Eres coheredero juntamente con Cristo de Sus riquezas. Él te hizo
partícipe de Su herencia, lo cual quiere decir que tienes derecho a obtener sus riquezas. Dios
ha preparado muchas bendiciones espirituales y materiales para tu vida. Si no las has obtenido
aún es porque te falta el elemento esencial: la fe. Pues sin fe es imposible agradar a Dios.
(Hebreos 11:6).

Él tiene para darte más de lo que puedas pedirle. Mientras piensas en las cosas pequeñas,
Dios quiere darte algo grande. Él mismo dijo: Pídeme, y te daré por herencia las naciones, y
por posesión tuya los confines de la tierra. (Salmos 2:8). ¿Qué más dice la palabra acerca de la
provisión y la herencia que Dios nos entrega? Veamos: Pedís, y no recibís, porque pedís mal,
para gastar en vuestros deleites (Santiago 4:3) Amados,…confianza tenemos en Dios; y
cualquier cosa que pidiéremos la recibiremos de él, porque guardamos sus mandamientos, y
hacemos las cosas que son agradables delante de él. (1 Juan 3:21-22)

El adversario siembra la idea de que pedir cosas materiales es ostentación y por causa de este
concepto, muchos batallan contra el espíritu de pobreza. El adversario piensa que entre menos
recursos económicos tengan los creyentes, menor será su impacto sobre otros. Pero cuando
entienden los privilegios y los reclaman ante el Señor, causan un gran impacto en las naciones.
Dios quiere bendecirte sobreabundantemente tu vida, familia, tu iglesia y tu nación. Pablo dijo:
“El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿Cómo no nos
dará también con él todas las cosas?” (Romanos 8:32). Dios no retuvo a Su Hijo, no negoció,
sino que lo entregó por nuestro rescate. El precio por nuestra salvación fue muy alto. ¿Acaso el
Hijo de Dios no vale más que una casa, carro o la provisión económica de toda una vida?

2. VIVE LA LECCIÓN. Dios tiene provisión para todas las áreas de tu vida. Analiza los versos y
conecta con una línea cada promesa de Dios con el área que representa.

 Romanos 8:38-39 Mi llamado con Dios.


 Salmos 2:8 Mi familia.
 Josué 24:15 Mi trabajo/estudio.
 Jeremías 29:11 Mi vida espiritual/ Mi relación con Dios.
 Salmos 20:4 Mis deseos personales.

3. RECUERDA LA LECCIÓN. Dios ha reservado lo mejor para ti.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

Salmos 105 1 Corintios 16 2 Corintios 1

DÍA 52: LA VOLUNTAD DE DIOS.

Antes de formarte en el vientre, ya te había elegido; antes que nacieras ya te había apartado; te
había nombrado profeta para las naciones. (Jeremías 1:5 NVI)

Para el pueblo judío, la progenitura era la más grande bendición que se podría tener. En la
biblia encontramos la vida de dos hermanos mellizos. El mayor se llamaba Esaú, y el menor,
Jacob. Aunque Esaú salió primero del vientre, como reclamando la bendición del primogénito,
Jacob nació agarrándole el talón, como si lucharan a ver quién nacía de primero. Rebeca, su
madre, sintió la opresión de dos naturalezas dentro de sí. Como Jacob anhelaba la bendición
del hijo mayor, vivían peleando continuamente. Rebeca busco la dirección divina. Dios le reveló
que para Él, el primogénito sería el que naciera de segundo: Dos naciones hay en tu seno, y
dos pueblos serán divididos desde tus entrañas; un pueblo será más fuerte que el otro pueblo,
y el mayor servirá al menor. (Génesis 25:23).

Jacob representa al hombre espiritual y Esaú al hombre carnal. La voluntad de Dios se cumple
en aquellos que están dispuestos a llevar una vida en el Espíritu. Tienes que determinar vivir en
el Espíritu. Es importante saber la diferencia que hay entre vivir en el Espíritu y vivir en la carne.
El hombre carnal se vale por sí mismo sin tomar en cuenta a Dios, y como sabe que lo que
hace Dios no lo aprueba, prefiere vivir distanciado de Él.

Porque los que son de la carne piensan en las cosas de la carne, pero los que son del Espíritu,
en las cosas del Espíritu. Porque ocuparse de la carne es muerte, pero el ocuparse del espíritu
es vida y paz. Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se
sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden, y los que viven según la carne no pueden agradar
a Dios. (Romanos 8:5-8)

El hombre espiritual se esfuerza por vivir obedeciendo al Espíritu Santo, esto es, determinar
vivir en rendición total a la voluntad de Dios. Mas vosotros no vivís según la carne, sino según
el Espíritu, si es que el Espíritu de Dios mora en vosotros., y si alguno no tiene el Espíritu de
Cristo, no es de él. Pero si Cristo esta en vosotros, el cuerpo en verdad está muerto a causa del
pecado, mas el espíritu vive a causa de la justicia. Y si el Espíritu de aquel q1ue levanto de los
muertos a Jesús mora en vosotros, él que levanto de los muertos a Cristo Jesús vivificara
también vuestros cuerpos mortales por su Espíritu que mora en vosotros. (Romanos 8:9-11).

Dios nos conoce desde antes de nacer y nos ha enviado a este mundo con una misión
específica, y ha reservado una bendición especial para aquellos que determinen escoger vivir
en el espíritu. No intentes hacer todo en tus propias fuerzas, no pretendas vivir
independientemente de Dios. Hoy, determínate a rendir tu vida y tu voluntad a Dios. Recuerda,
la voluntad de Dios para ti es buena, agradable y perfecta.(Romanos 12:2).

2. VIVE LA LECCIÓN.

De acuerdo con Romanos 8:5-11, escribe tres características del hombre carnal y tres
características del hombre espiritual.

Hombre Carnal: __________________ _____________________ __________________

Hombre Espiritual:___________________ _____________________ __________________

3. RECUERDA LA LECCIÓN. La voluntad de Dios se cumple en mi vida cuando yo me


determino a vivir en el espíritu.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

Salmos 106 2 Corintios 2 2 Corintios 3 2 Corintios 4

DÍA 53: ACEPTANDO LOS PENSAMIENTOS DE DIOS.

Fiel es el que os llama, el cual también lo hará. (1Tesalonicenses 5:24).

De entender el poder que tiene un solo pensamiento de cualquier tipo. Todo aquello que
aceptamos en nuestro pensamiento influye nuestra voluntad para generar acciones
específicas que determinan el rumbo de nuestra vida. Por esa razón es necesario ser muy
cuidadosos acerca de lo que pensamos.

Dios tiene lo mejor para nosotros Sus hijos. Él nos llamó para entregarnos una vida abundante
y con propósito. Que permanezcamos en la idea original de Él para nosotros, y disfrutemos de
sus bendiciones. Sin embargo, tenemos que escoger vivir esa clase de vida que Él nos ofrece.
El comportamiento del hombre está destinado por las ideas que éste acepta en su mente.
Como ejemplo de esta verdad está la historia de los hermanos mellizos. Jacob, quien anhelaba
la bendición y desde el comienzo luchó por ser el primogénito. Por otra parte, Esaú la
menospreció, impulsado por sus deseos, vendió su progenitura por un plato de lentejas
(Génesis 25:27-34).

Esaú estaba frente a dos caminos: su deseo físico y su derecho a la primogenitura, por medio
de la cual heredaba todas las bendiciones de Abraham y de su padre Isaac; pero por no haber
visto una bendición inmediata proveniente de ella, Esaú la menospreció. El pensamiento que él
aceptó venía del mismo adversario: ¿Qué has obtenido siendo el primogénito? Mejor vende tu
primogenitura antes de que te mueras de hambre”.

La estrategia que utiliza el adversario es sembrar semillas a través de pensamiento; poner una
carnada a las personas con el fin de controlar sus vidas. El ha usado los deseos de la carne
para cegar los ojos del espíritu, y de esta manera bloquea el entendimiento e impide oír la voz
de Dios, para que obren torpemente para tener dominio sobre ellos.

La decisión que tomó Esaú de vender su primogenitura fue efectuada sin ninguna presión de
parte de Dios, porque Él respeta la libertad para escoger de cada ser humano. Como cristianos
debemos cuidar todo lo que entra en nuestra mente, los pensamientos que aceptamos y las
decisiones que tomamos. Uno de los dilemas más grandes que vivimos es enfrentarnos a lo
desconocido, pues esto produce temor, incertidumbre y duda. Desde el momento en que Dios
nos creó, nos dotó con un espíritu de conquista. Para conquistar el plano espiritual debemos
mantener una mente constantemente renovada.

2. VIVE LA LECCIÓN.

1. Desafíate a filtrar tus pensamientos de acuerdo con la palabra de Dios. Todos los días,
pregúntate lo siguiente: ¿Este pensamiento es bueno? ¿Es agradable? ¿Es perfecto?
2. Lee Filipenses 4:8 y haz un análisis de cada pensamiento de acuerdo a este verso.

3. RECUERDA LA LECCIÓN.

Los pensamientos de Dios son mucho más altos que los nuestros.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

Salmos 107 2 Corintios 5 2 Corintios 6 2 Corintios 7

DÍA 54: DIOS ES MI FORTALEZA.

Bástate mi gracia; porque mi poder se perfecciona en tu debilidad. (1Corintios 12:9)

Un hombre estaba durmiendo en su cabaña cuando de repente una luz llenó su habitación y
apareció el Salvador, quien le dijo que lo que debía hacer era trabajar para Él y le mostró una
gran roca en frente de su cabaña. El Señor le explicó que debía empujar la roca con todo su
poder. Y esto hizo este hombre día tras día, por muchos años desde que amanecía hasta que
anochecía, se entrego de lleno a la enorme y fría roca inamovible, empujándola con toda su
fuerza. Cada noche el hombre regresaba a su cabaña adolorido y desgastado, sintiendo que
todo su día había transcurrido en vano.

Viendo que le hombre estaba mostrando señales de desmotivación, Satanás decidió entrar en
su vida poniendo pensamientos en la mente, tales como: “Has estado empujando esa roca por
un largo tiempo, y no se ha corrido. ¿Por qué matarte haciendo esto? Nunca la moverás”.

Dando al hombre la impresión de que la tarea era imposible y que él era un fracaso. Estos
pensamientos desanimaron a este hombre aún más. “¿Por qué matarme haciendo esto?”,
pensó: “Simplemente te invertiré mi tiempo, haciendo mi menor esfuerzo, y eso será
suficientemente bueno”. Él planeó hacerlo de esta manera, hasta que un día decidió hacer de
su labor un asunto de oración y llevar ante el Señor sus perturbados pensamientos. “Señor”,
dijo, he trabajado larga y duramente a tu servicio, poniendo toda mi fuerza en la tarea que me
has pedido hacer. No obstante, después de todo este tiempo, ni si quiera he movido esa roca
un milímetro. ¿Qué pasa? ¿Por qué estoy fracasando?”

A esta oración el Señor respondió compasivamente, “Mi amigo, cuando te pedí que me sirvieras
y tú aceptaste, te dije que tu tarea era empujar la roca con toda tu fuerza, lo cual has hecho. No
te dije que yo esperaba que la movieras. Tu tarea era empujarla. Ahora has venido a mí, con tu
fuerza gastada, pensando que has fracasado. Pero, ¿realmente es así? Mírate a ti mismo. Tus
brazos son fuertes y musculosos, tu espalda está fornida y bronceada, tus manos están
callosas de la presión constante, y tus piernas se han vuelto gruesas y duras. A través de la
oposición has crecido mucho y tus habilidades ahora sobrepasan aquello que solías tener. Tu
llamado era a ser obediente y a empujar y a ejercitar tu fe y tu confianza en mi sabiduría. Esto
es lo que has hecho. Ahora Yo, mi amigo, moveré la roca”.

En este relato lleno de enseñanza, hay una especial en la que tenemos que fijarnos con mucha
atención. Lo que cambio el corazón del hombre de la historia, lo que hizo entender y descansar
en su interior, fue la oración. Cuando el decidió exponer sus pensamientos y sus
circunstancias delante de Dios, el Señor le respondió no solo con reposo para su alma, sino
con la transformación de su situación externa, que consistía en mover la gran roca.

La noche más angustiosa que vivió Jacob fue aquella en la que supo que su hermano Esaú
venía a encontrarse con él. El recuerdo de las amenazas de muerte vino a su mente (Génesis
27:41). Comenzó a sentir el terror de la muerte, y la angustia se apoderaba de él porque venía
la destrucción de su casa (Génesis 32:7). Jacob se refugió en la oración, o Dios intervenía, o el
mal lo alcanzaba. Oro intensamente toda la noche, y al fin sintió la liberación de su alma
(Génesis 32:30). Toda la presión que se había gestado en el mundo espiritual había
desaparecido. Vino gran paz y confianza a su vida, (Génesis 32:24-25). “Pero Esaú corrió a su
encuentro y le abrazó, y se echó sobre su cuello, y le besó; y lloraron” (Génesis 33:4). ¿Qué
sucedió, que hizo que su hermano cambiara de actitud? El milagro que produce la oración,
cambia las circunstancias. Tener una vida rendida ante Dios significa que ya no son nuestras
fuerzas lo que cuenta, sino la medida de fe que tengamos. (Génesis 32:26). Esta es la gracia de
Dios. La vida del creyente debe ser una vida de fe. No podemos caminar y conquistar en
nuestras propias fuerzas. Todo lo que queramos conquistar, debemos ganarlo primero en
oración, y apoyándonos en Dios. Cuando Él ve un corazón que lo busca y que depende de Él,
inevitablemente se inclina a escucharlo, mueve Su mano a nuestro favor y nos da Su gracia.

2. VIVE LA LECCIÓN. ¿Cuál ha sido tu debilidad? Tómate un tiempo para escribir una oración,
en la que le pidas a Dios que Él sea tu fortaleza.

3. RECUERDA LA LECCIÓN. En Su presencia Dios borra nuestra debilidad y nos da Su gracia.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

Salmos 108 Sa Salmos 109 2 Corintios 8.

2 Corintios 9 2 Corintios 10.

DÍA 55: UNA MENTE RENOVADA.

No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro


entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios agradable y perfecta.
(Romanos 12:2)

Salomón dijo: “Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él” (Proverbios 23:7a).
Somos la suma de nuestros pensamientos, y éstos son expresados en palabras. El enemigo
trabaja a través de los pensamientos, empieza a lanzarnos toda clase de dardos, porque él
sabe que si la persona en su mente acepta las ideas que él planta, se fortalecen y puede
conquistar fácilmente su voluntad.

Cuando esto sucede, quedamos espiritualmente desprotegidos; venimos a ser como una ciudad
sin muros, fácil de conquistar. Pero Si en nuestra mente no los aceptamos, nuestra voluntad
permanece firme, y no sufriremos ningún daño. Una de las maneras en que el enemigo se
mueve muy seguido es a través de los medios de comunicación, pues ejercen una gran
influencia. Debes cuidar tu mente de la contaminación que producen los medios audiovisuales,
que bombardean la mente con imágenes negativas y palabras hasta produzcan actos
incorrectos de diferente índole. Por esa razón valora las siguientes sugerencias:

 Televisión. Escoge programas que influyan positivamente sobre tu vida y que te lleven a
una verdadera edificación.
 Internet. Es el medio más utilizados en el mundo de la comunicación. Evita la
contaminación visual, la inmoralidad y el trato con desconocidos a través de las redes
sociales.
 Música. Cuida la clase de música que escuchas, ya que muchas veces traen mensajes
que afectan y cambian tu conducta.

El adversario puede intentar de influenciar a través de personas que sean parte de tu vida,
por eso procura tener cuidado con tu círculo de amigos. Escoge personas que te edifiquen y
te bendigan cuando te relaciones con ellas (1 Corintios 15:33).
El gran predicador norteamericano Norman Vincent Peale escribió: Hay que pensar en grande.
Nuestro gran problema es que nuestros pensamientos tienden a empequeñecerlo todo: a
nosotros mismos, a nuestra familia, a nuestros hijos, a nuestros negocios. Grandes
pensamientos obtienen grandes resultados.

Pensar en grande significa tener una mente renovada. Y tener una mente renovada depende de
nuestro contacto con la palabra de Dios. La mejor manera de invertir tu tiempo es escudriñando
la palabra de Dios. Nunca se apartará de tu boca este libro de la ley, sino que de día y de noche
meditarás en él, para que guardes y hagas conforme a todo lo que en él está escrito, porque
entonces harás prosperar tu camino, y todo te saldrá bien. (Josué 1:8)

El éxito depende de tus pensamientos. Hoy tienes la oportunidad de alimentar tu mente con el
mejor nutriente, la palabra de vida eterna.

2. VIVE LA LECCIÓN. Responde las preguntas y haz los ajustes de acuerdo con la enseñanza
de hoy.

1. Menciona 4 programas de televisión/películas que viste esta semana:


_______________________________________________________________
2. ¿Cuánto tiempo invertiste conectado en las redes sociales esta semana?

3. ¿Cuáles fueron las diez canciones que escuchaste más frecuentemente esta semana?

4. ¿Cómo se llaman tus cinco amigos más cercanos?___________________________

5. ¿Estudiaste la Biblia todos los días? _________

3. RECUERDA LA LECCIÓN. No obtendrás resultados más grandes que tus pensamientos.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

Salmos 110 Sa Salmos 111 Salmos 112

Salmos 113 2 Corintios 11 2 Corintios 13

DÍA 56: SOY VENCEDOR.

Entonces Caleb hizo callar al pueblo delante de Moisés, y dijo: Subamos luego, y tomemos
posesión de ella; porque más podremos nosotros que ellos. Más los varones que subieron con
él, dijeron: Nos podremos subir contra aquel pueblo, porque es más fuerte que nosotros.
(Números 13:30-31)

Medita ¿En qué cosas pensaba el Señor Jesús estando en la tierra? Todo lo que pensaba
estaba ligado a la palabra, por eso decía: “Mi comida es que haga la voluntad del que me envió,
y que acabe su obra” (Juan 4:34). Cada palabra de Jesús decía, ya tenía la aprobación de Su
Padre. Él nunca permitió que Su mente estuviera ociosa, y así como Jesús, un vencedor nunca
piensa o habla de la manera incorrecta, siempre ve la solución a todo problema, pues sabe que
con Dios todo es posible.

En ocasiones, especialmente si estamos cansados, vemos que las circunstancias tratan de


confundirnos y vencernos, pero para poder escalar las montañas más altas, siempre tenemos
que ver las cosas de la forma en que Dios las ve. La vida de fe implica un esfuerzo de nuestra
parte, y es opuesta a la vida de pecado que siempre lleva a las personas por el camino más
fácil, pero en descenso. La fe, en cambio, demanda nuestro esfuerzo y nos lleva a subir la
montaña de las dificultades con la plena certeza de que las venceremos.

Cuando el pueblo de Israel estaba en el desierto, Dios le dijo a Moisés que enviara a doce
hombres como espías para evaluar la tierra que Él les iba a entregar. Diez regresaron con una
mentalidad de derrota y de fracaso, mas Josué y Caleb llegaron con actitud de ganadores
(Números 13:30-31). Tenían plena confianza en la victoria sobre los enemigos a enfrentar,
porque el triunfo ya había sido asegurado por parte del Señor. En cambio en la mente de estos
diez espías, ya el enemigo había usado las circunstancias para hacerles creer que era
imposible; y por esta causa, pensaron tendrían que enfrentarse a estos gigantes con sus
propias fuerzas, Al quitar sus ojos de Dios y no pensar que la ayuda la recibirían de Él, su
ánimo decayó hasta desmayar. Por haber visto la situación con los ojos de la lógica, se
apartaron de la fe. Y sin fe es imposible agradar a Dios (Hebreos 11:6).

La lección que Dios quería darle a los hijos de Israel era que, aunque ellos se enfrentaran a
gente mucho más grande que ellos, Él movería Sus ejércitos angelicales para darle la victoria y
reducir a nada a sus enemigos. De esta historia podemos aprender varias lecciones:
 No podremos conquistar aquello a lo que temamos.
 ¡Habla siempre palabras de fe!
 Es necesario eliminar la queja de nuestro vocabulario.
Dios librará las batallas por ti. Él tiene la solución a todos tus problemas y luchas. Ármate de
valor y cree en Sus promesas para empezar a vivir siendo más que vencedor (Romanos 8:37).

2. VIVE LA LECCIÓN.

1. No permitas ningún pensamiento de duda; no hables nada negativo. Establece metas. Si


logras la meta por todo un día, intenta hacerlo por una semana y luego extiéndela a un
mes, a un año. De esta manera serás un vencedor.
2. Haz una lista de declaraciones de fe que puedas leer en alto todos los días.

3. RECUERDA LA LECCIÓN.

Un vencedor siempre tiene pensamientos y palabras de victoria.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

Salmos 114 Salmos 115 Salmos 116

Gálatas 1 2 Gálatas 2
SEMANA 9: UN NUEVO COMIENZO.

DÍA 57: COMENZANDO DE NUEVO.

Para llegar a ser una mariposa, la oruga tiene que pasar por una severa transformación.
Durante este tiempo, la oruga debe ser sumergida en una sustancia similar al gel que forma
una coraza. Dentro de ella, la oruga muda cada parte de sí misma y cuando termina este
doloroso proceso, la coraza se rompe, una vida comienza, y una hermosa mariposa emerge.
Esto es lo que el Señor hace con cada uno de nosotros: nos lleva primero a librarnos de nuestro
“viejo yo”, para que toda una nueva vida comience.

El pueblo de Israel había vivido 400 años de esclavitud en Egipto, y ninguno conocía la libertad.
Todos nacieron, vivieron y vieron morir a sus padres como esclavos. No conocían un mundo
diferente. Pero después de muchas señales y prodigios que hizo Dios para mostrar que estaba
con ellos, eran completamente libres. Habían salido de Egipto y se encontraban frente al Mar
Rojo y detrás de ellos estaba el ejército egipcio que los había seguido para regresarlos a la
esclavitud. Se encontraban entre la espada y la pared. Sin embargo, Dios intervino una vez más
a su favor, para separarlos totalmente de la esclavitud que los había agobiado todas sus vidas.
El Mar Rojo se abrió para que pudieran pasar sin dificultades y cuando el ejército egipcio intentó
seguirlos, el mar se cerró y todos murieron ahogados. El pueblo de Israel fue liberado, sus
enemigos ya no existían, iban camino a la tierra prometida donde fluían la leche y la miel.
Finalmente tenían la oportunidad de comenzar de nuevo.

También nosotros tenemos esa opción, dando un paso de obediencia para desprendernos de
nuestra vieja naturaleza y empezar una nueva etapa. Esa oportunidad se llama bautismo.
“Bautismo” es una palabra griega, bapto, que significa “inmersión”. Hay dos formas: o se
sumerge en agua, o quedar completamente cubierto, o se le derrama agua por encima. El
bautismo del nuevo testamento, es la inmersión total.

El bautismo de Jesús marcó el inicio de Su ministerio. Así como cuando el pueblo de Israel
atravesó el Mar Rojo para tener un nuevo comienzo, el bautismo para Jesús fue la transición
entre Su sencilla vida como carpintero y Su gran trabajo ministerial.

2. VIVE LA LECCIÓN.

1. ¿Qué hábitos y actitudes te gustaría dejar atrás para tener un nuevo y verdadero
comienzo? 2. Haz una oración pidiendo a Dios a que te muestre qué cosas te están
estorbando y no te permiten tener un nuevo comienzo, anótalas.

3. RECUERDA LA LECCIÓN

El bautismo es una transición entre dos estados, un cambio entero, una inmersión total. Es la
oportunidad de comenzar de nuevo.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

Salmos 117 Salmos 118 Gálatas 3 Gálatas 4


DÍA 58: ¿QUIÉN TIENE ESTA OPORTUNIDAD?

Ningún hombre está excluido de invocar a Dios, la puerta de la salvación está abierta para
todos los hombres: tampoco existe ninguna cosa que evite que entremos, excepto solamente
nuestra propia incredulidad”. Juan Calvino.

El apóstol Pedro se encontraba en casa de Cornelio predicando el evangelio de Jesús y,


mientras hablaba, el Espíritu de Dios descendió con poder sobre todos los que escuchaban el
mensaje y fueron llenos del Espíritu Santo. “Y él dijo: ¿Puede acaso alguno impedir el agua,
para que no sean bautizados éstos que han recibido al Espíritu Santo también como nosotros?
Y mandó a bautizarles en el nombre del Señor Jesús. Entonces le rogaron que se quedase por
algunos días” (Hechos 10:47-48).

La experiencia de Pedro con aquella familia gentil significó la aprobación de parte de Dios hacia
ésta. El dijo: Si Dios lo ha incorporado dentro de Su pueblo, y los ha hecho iguales a nosotros,
habiéndoles dado al Espíritu Santo, ¿quién podrá estorbar lo que Dios ha aprobado?

Dios había mandado a Su pueblo a separarse completamente de todos los gentiles que
habitaban la tierra prometida, para no aprender sus conductas pecaminosas y no contaminarse
con ellos. Incluso Pedro los consideraba personas inmundas, por esa razón el Espíritu Santo
tuvo que convencerlo en una visión para que fuera a predicar a la casa de Cornelio (Hechos
10:9-16; 24-25). Dios se relacionaba únicamente con Su pueblo, los judíos, pero la reunión en
la casa de Cornelio abrió las puertas para que todos pudiéramos ser discípulos de Jesús.
Cuando Pedro entendió que Dios había escogido también a personas de otras nacionalidades,
los bautizó. Esto nos da entender que cualquier persona es apta para ser bautizada, si está
dispuesta a seguir a Dios sin reservas. Actuó en fe, quitando la barrera de separación que había
entre judíos y gentiles, por medio del bautismo.

Antes que el Señor ascendiera al cielo, dijo a Sus discípulos: “…Id y haced discípulos a todas
las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo;
enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado; y he aquí yo estoy con
vosotros dodos los días, hasta el fin del mundo. Amén” (Mateo 28:19-20, énfasis añadido).

Las últimas instrucciones que Jesús dejó a Sus discípulos fueron claras. La misión de hacer
discípulos en todas las naciones sigue vigente ya que la palabra de Dios permanece para
siempre (1 Pedro 1:25). Jesús enseñó la manera de discipular correctamente a las personas,
haciendo dos cosas: 1.bautizando y 2. Aprendiendo más cerca de Jesús.

La oportunidad de comenzar de nuevo a través del bautismo es únicamente para aquellos que
quieran vivir como discípulos de Jesús.

2. VIVE LA LECCIÓN.

1. Completa el siguiente verso: Id y haced _________________a todas las naciones,


__________________ en nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo; enseñándoles que
____________ todas las que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos los días,
hasta el fin del mundo. Amén (Mateo 28:19-20).
2. Busca las definiciones de las palabras a continuación:

Discípulo significa: _________________________________________

Bautismo significa: _________________________________________.

Para crecer como discípulo de Jesús voy a: ________________________.

Lo nuevo que anhelo ver en mi vida es: ____________________________.

3. RECUERDA LA LECCIÓN.

El bautismo es para cada persona que quiera ser un discípulo de Jesús.

4. ESTUDIA LA PALABRA

Salmos 119:1-44 Gálatas 5 Gálatas 6

DÍA 59: ¿PUEDO HACERLO YA?

El libro de Hechos registra a un gran evangelista cuyo nombre era Felipe. Si seguimos el rastro
de su ministerio, podremos ver en qué momento aquellas personas que eran alcanzadas por su
predicación del evangelio llegaban a ser bautizadas.

Cuando Saulo perseguía a la iglesia de Jesús, muchos huyeron a otras ciudades predicando a
donde quiera que iban. Lo que el enemigo planeó para el mal de la iglesia, Dios lo convirtió en
una enorme bendición para el mundo. Felipe fue a Samaria a predicar el evangelio, haciendo
muchos milagros y señales, con los cuales la gente se maravillada y creía a su palabra, porque
Dios lo respaldaba. “Cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y
el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres” (Hechos 8:12).

Posteriormente fue guiado a un camino por un ángel (Hechos 8:26), donde encontró a un
eunuco etíope, funcionario que leía al profeta Isaías pero no podía entenderlo. Felipe se le
acerco y le explicó a partir de esa escritura todo el evangelio de Jesucristo. Este hombre recibió
la convicción de que la Escritura era la Palabra de Dios y que Jesús era el verdadero Mesías.
“Y yendo por el camino, llegaron a cierta agua, y dijo el eunuco: Aquí hay agua; ¿qué impide
que yo sea bautizado? Felipe dijo: Si crees de todo corazón, bien puedes. Y respondiendo, dijo:
Creo que Jesucristo es el Hijo de Dios. Y mandó parar el carro; y descendieron ambos al agua,
Felipe y el eunuco, y le bautizó” (Hechos 8: 36-38).

Podemos ver que le habló del bautismo pues apenas éste vio agua, quiso dar ese paso y
ordenó detener el carro para bautizarse. El paso natural después de creer en el evangelio es
bautizarse. El eunuco preguntó a Felipe que requisitos necesitaban para poder bautizarse, y lo
único que Felipe le exigió fue tener fe: “Si crees de todo corazón, bien puedes hacerlo” (Hechos
8:37). Recordemos que una persona que cree en Jesús debe haberse arrepentido de sus
pecados y para eso debe haber escuchado por lo menos una vez el evangelio.
2. VIVE LA LECCIÓN.

Lo único que Felipe exigió del eunuco etíope fue que creyera de todo corazón. ¿Tú crees de
todo corazón? Si una persona te pidiera que le explicaras en qué crees, ¿qué le responderías?
Escribe tu propia declaración de fe:

Yo creo…

3. RECUERDA LA LECCIÓN

El bautismo debe ser una decisión inmediata a la conversión. Su único requisito: la fe.

4. ESTUDIA LA PALABRA

Salmos 119:45-88 Efesios 1 Efesios 2

DÍA 60: EL EJEMPLO DE JESÚS.

Pues para esto fuisteis llamados; porque también Cristo padeció por nosotros, dejándonos
ejemplo, para que sigáis su pisadas.(1 Pedro 2:21)

La palabra “ejemplo” corresponde a la palabra griega “hupogrammos” se refiere a la educación


elemental. En la antigüedad, el maestro creaba un patrón escrito que los estudiantes seguían
exactamente para perfeccionar su escritura. El patrón que seguimos para alcanzar la
perfección, es Jesús. Antes de dar inicio a Su ministerio, el Señor se acercó al Jordán para que
Juan lo bautizara, quien no sabía que era el Hijo de Dios pero debido a Su testimonio, Juan
reconoció que Jesús era más justo que él y por eso le preguntó: “Yo necesito ser bautizado por
ti, ¿y tú vienes a mí?” (Mateo 3:14). Ante el asombro de Juan por este acto de humildad, Jesús
le dijo:…Deja ahora, porque así conviene que cumplamos toda justicia (Mateo 3:15).

Normalmente Juan bautizaba para arrepentimiento (Mateo 3:11), pero ese no fue el caso de
Jesús porque Él nunca pecó y por eso no tenía nada de qué arrepentirse. Su bautismo no fue
como los demás, Jesús le dio un nuevo significado. El bautismo en agua es un requisito
fundamental de la justicia de Dios, El dijo: “conviene que cumplamos toda justicia”. Al respecto,
el Dr. Derek Prince dice: Cuando Él dice “conviene” se refiere a que es apropiado cumplir la
justicia de esta manera. Cuando eres bautizado en el nombre de Jesucristo, no estás siendo
bautizado para arrepentimiento. Ya te arrepentiste antes, por la cual te estás bautizando para
“cumplir toda justicia” o para “completar toda justicia”.

El apóstol Pablo escribió a la iglesia de Corintio: “Sed imitadores de mí, así como yo de Cristo”
(1 Corintios 11:1). Como cristianos tenemos la enorme responsabilidad y privilegio de ser como
Jesús, es nuestra mayor meta, ser como Él para que el mundo lo conozca a través de nuestras
vidas. Si Jesús, sin haber cometido pecado, cumplió con el requisito del bautismo, ¿cuánto
más nosotros, que vamos a iniciar esta nueva etapa, en la cual nuestra vieja naturaleza es
sepultada y nacemos a la nueva vida que Dios tiene para quienes guardan Su Palabra?

2. VIVE LA LECCIÓN. El bautismo no fue lo único que Jesús hizo para darnos ejemplo.
Cada cosa que vivió nos sirve como modelo para nuestra vida, porque debemos ser
como Él en todo. Escribe 5 cosas que admiras de Jesús y que quieras imitar, Como
podrías hacer para seguir Su ejemplo en tu vida cotidiana.

¿Qué admiro de Jesús? ¿Cómo puedo imitarlo?

3. RECUERDA LA LECCIÓN.

Jesús es el único modelo que todos los cristianos deben seguir. Nos dio ejemplo en todo.

4. ESTUDIA LA PALABRA

Salmos 119:89-132 Efesios 3 Efesios 4

DÍA 61: LO QUE SIGNIFICA PARA MÍ.

Siendo imitadores de Jesús, nos bautizamos para seguir el ejemplo que Él nos dejó. Sin
embargo, el bautismo tiene un significado espiritual más importante. No es un mero ritual.

¿O no sabéis que todos los que hemos sido bautizados en Cristo Jesús, hemos sido bautizados
en su muerte? porque somos sepultados juntamente con él para muerte con el bautismo, a fin
de que como Cristo resucitó de los muertos por la iglesia del Padre, así también nosotros
andemos en vida nueva. (Romanos 6:3-4)

El bautismo en agua es una identificación con Jesús en Su muerte, sepultura y resurrección. Al


bajar a las aguas del bautismo estamos muriendo a nuestra naturaleza y al levantarnos,
estamos renaciendo a una nueva vida con Cristo. El bautismo simboliza ser sepultado. El Señor
ya no nos pide ir al suplicio de la Cruz, pues en ella Él ya cargó nuestra culpa, pecado y
maldición. Lo único que Él mandó es que bajemos a las aguas del bautismo, lo cual nos
identifica con Su muerte en la Cruz. Porque si fuimos plantados juntamente con él en la
semejanza de su muerte, así también lo seremos en la de su resurrección; sabiendo esto, que
nuestro viejo hombre fue crucificado juntamente con él, para que el cuerpo del pecado sea
destruido, a fin de que no sirvamos más al pecado. (Romanos 6:5-6)
La parte nuestra que muere es “el viejo hombre”, ese rebelde, inclinado al pecado y enemigo de
Dios. Si queremos una nueva vida, no podemos reformar la que llevamos, nuestra antigua vida
debe morir. Debe ser destruida. Muchas veces queremos “amaestrar” nuestra vieja naturaleza
y vivir una vida cristiana consintiendo comportamientos que no corresponden, sin embargo la
única manera de experimentar la plenitud que nos ofrece Cristo es dejando atrás para siempre
esa vieja manera de vivir y aceptando todo lo que Jesús es.

El bautismo no significa únicamente nuestra muerte, sino también nuestra resurrección. Así
como Jesús no se quedó en la tumba, nosotros no nos quedamos en las aguas, sino que nos
levantamos, revestidos de nuestra nueva naturaleza, libres de la esclavitud del pecado
(Romanos 6:6) Los impulsos que antes nos dominaban y nos llevaban a fallarle a Dios no
tienen más poder sobre nosotros. El bautismo es una transformación total, nada de nuestra
vieja naturaleza queda, comenzamos una nueva vida. “De modo que si alguno está en Cristo,
nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas. (2 Corintios
5:17, énfasis añadido)

AL BAJAR AL SUBIR
________________________ ___________________________
2. VIVE LA LECCIÓN.

1. Pregunta a una persona de la iglesia que ya se haya bautizado qué cambios hubo en su
vida después de haberlo hecho, haz énfasis en las cosas de su antigua naturaleza que
dejó atrás. Escribe lo que más te impacte de su testimonio.

3. RECUERDA LA LECCIÓN.

El bautismo significa la muerte de mi vieja naturaleza y una nueva vida para mí.

4. ESTUDIA LA PALABRA

Salmos 119:133-176 Efesios 5 Efesios 6

DÍA 61: ¡TÚ DECIDES!


Porque el amor de Cristo nos constriñe, pensando esto: que si uno murió por todos, luego
todos murieron; y por todos murió, para que los que viven, ya no viva para sí, sino para aquel
que murió y resucitó por ellos .(2Corintios 5:14-15)

Cuando somos inmersos y nos levantamos de las aguas del bautismo, nuestra vida ya no nos
pertenece. Si alguien quiere seguir viviendo a su manera y tomando sus propias decisiones, no
debería bautizarse, ya que el bautismo es una determinación a morir a nuestra vieja naturaleza
y tener la oportunidad de resurrección. Nuestra vida le pertenece al Señor. ¿O ignoráis… que
no sois vuestros? Porque habéis sido comprados por precio; glorificad, pues, a Dios en vuestro
cuerpo y en vuestro espíritu, los cuales son de Dios (1 Corintios 6:19-20)

Recuerda las últimas instrucciones que el Señor dio a Sus discípulos: “Por tanto, id, y haced
discípulos a todas las naciones, bautizándolos en el nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu
Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado…(Mateo 28:19-20a).
Las dos maneras correctas de hacer discípulos son bautizar a las personas y luego enseñarles.
De la historia de Felipe, el evangelista, aprendimos que el bautismo se lleva a cabo
inmediatamente después que las personas se convertían. El bautismo es la señal del
compromiso de cada nuevo creyente, de entregarse sin reservas a Dios.

A pesar de que no era una decisión fácil de tomar, muchas personas se atrevían a dar el paso
de fe del bautismo para manifestar su convicción y su deseo de seguir las pisadas de
Jesucristo. Este acto de valentía demostraba que por encima de las circunstancias, todos ellos
estaban dispuestos a darle el rumbo correcto a sus vidas. Debes entender que para tomar una
determinación, no hace falta fijarse mucho en las circunstancias o condiciones que nos rodean,
sino en el destino al que queremos llegar y por el cual tomamos las decisiones que tomamos.
Este modelo establecido tiene mucho sentido, ya que algunas veces se pierde mucho tiempo y
esfuerzo enseñando a personas que no se van a compromete

2. VIVE LA LECCIÓN. Reflexiona en estas afirmaciones y marca SI o NO, de acuerdo a tu


convicción actual.

SI NO
Creo que Jesús es el Hijo de Dios. Que murió en la Cruz por mis
pecados, recibiendo el castigo que yo merecía. Que fue sepultado y
que al tercer día se levantó de los muertos.
He confesado todos mis pecados. Tengo mi conciencia tranquila
porque no estoy consintiendo nada fuera de orden en mi vida.
Estoy dispuesto(a) a morir a mi antigua manera de vivir. A dejar
completamente mis pecados, hábitos y todo lo que desagrade a
Dios.
Reconozco que mi nueva vida NO me pertenece. Estoy dispuesto(a)
a obedecer fielmente a Jesús en TODO lo que me diga, así yo no
quiera, no me guste o no esté de acuerdo.
Sé que el bautismo es sólo el inicio. Me comprometo a perseverar, a
seguir aprendiendo y a que el ser como Jesús será mi objetivo
principal. Jesús será mi ÚNICO modelo a seguir.

Bautízate sólo si marcaste SÍ en todas las respuestas. De lo contrario toma el tiempo necesario
para pensar, orar y luego toma tu decisión.

3. RECUERDA LA LECCIÓN. El bautismo es asumir el compromiso de ser discípulo de Jesús.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

S Salmos 120 Salmos 121 Salmos 122

a Salmos 123 S Filipenses 1 a Filipenses 2 y 3

DÍA 63: LA NUEVA VIDA.

Esta semana hemos estudiado el bautismo y su significado espiritual. Sabemos que representa
nuestra muerte y sepultura, pero también significa nuestra resurrección. El bautismo es el inicio
de una nueva vida. El predicador Charles Spurgeon comenta: La vida de un cristiano es
enteramente diferente de la vida de otros hombres, enteramente diferente de su propia vida
antes de su conversión, y cuando la gente trata de falsificarla, no puede cumplir su tarea… Un
ateo puede orar tanto como un cristiano, puede leer tanto la Biblia como un cristiano, e inclusive
puede superarnos en los aspectos externos; pero hay un secreto que él no conoce y no puede
falsificar. La vida divina es tan completamente nueva que el inconverso no tiene un modelo que
copiar… Es una cosa nueva, novedosa, fresca y divina.

Una de sus características, es que somos libres de la esclavitud del pecado. “Porque en cuanto
murió, al pecado murió una vez por todas; más en cuanto vive, para Dios vive” (Romanos 6:10).
Antes, cuando éramos esclavos, el pecado determinaba cada uno de nuestros movimientos.
Nos decía “ve” e íbamos. Era como si tuviéramos atados por lo cual estábamos indefensos.
Pero gracias a Dios el pecado ya no tiene ningún poder ni autoridad sobre nosotros. Cuando
vuelva para tentarnos (Porque vendrá la tentación), sus palabras serán tan inefectivas. El
pecado no se enseñoreará más de nosotros, porque para el estamos muertos.

Nuestra nueva vida es para Dios. Amando porque somos amados, viviendo en Cristo porque
Cristo vive en nosotros. ¡Ya no tenemos que cargar con nuestros pecados porque Jesús los
cargó y los llevó a la Cruz! Ahora podemos disfrutar de una libertad maravillosa y desconocida
para quienes viven todavía en esclavitud. ¡Finalmente podemos vivir penamente!

2. VIVE LA LECCIÓN.

1. Haz una lista de las cosas en las que has sido transformados.
2. Escribe una oración en la que le agradezcas a Dios de dónde te sacó y hasta dónde te
ha traído.

Jamás lo pierdas de vista para que tu corazón siempre sea un corazón agradecido. Y recuerda:
¡El que empezó la buena obra en ti, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo! (Filipenses
1:6)

3. RECUERDA LA LECCIÓN.

Después de bautizarnos inicia una nueva vida en la que podemos conocer la verdadera
libertad.

4. ESTUDIA LA PALABRA.

S Salmos 124 Salmos 125 Salmos 126

a Salmos 127 S Filipenses 4 a Colosenses 1

a Colosenses 2

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