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UN CRIMEN CONTRA LA NATURALEZA

ES UN CRIMEN CONTRA NOSOTROS MISMOS.

(Papa Francisco)

Muy buenas Noches, mi nombre es Miguel Angel García Sánchez y tengo el gusto
de disertar el siguiente tema, que en las fiestas de Nuestro Seráfico Padre San
Francisco de Asís Declarado EN 1979 Patrono de la ecología por el Papa San Juan
Pablo II.

El tema lleva por nombre…

LA VOZ DE LA MADRE TIERRA

Hoy quiero hablar en nombre de nuestra Madre Tierra, nuestra Casa Común.

Perder mi futuro no es como perder unas elecciones o un partido de fútbol. Estoy


aquí para hablar en nombre de todas las generaciones por venir. Estoy aquí para
hablar en defensa de los niños hambrientos del mundo cuyos lloros siguen sin oírse.
Estoy aquí para hablar por los incontables animales que mueren en este planeta
porque no les queda ningún lugar adonde ir. No podemos soportar no ser oídos.

Tengo miedo de tomar el sol debido a los agujeros en la capa de ozono, que pueden
causar un cáncer en mí piel. Tengo miedo de respirar el aire debido a la
contaminación que hay en él. Antes el agua era abundante y corría sin parar por
nuestro lugar, hoy cada vez es más escaza y la poca agua que corre esta
contaminada. Es lamentable escuchar, como los animales y las plantas se extinguen
cada día, desapareciendo para siempre.

Durante mi vida, he soñado con ver las grandes manadas de animales salvajes y
las junglas y bosques repletas de pájaros y mariposas, pero ahora me pregunto si
existirán siquiera para que mis hijos los vean.

¿Tuvieron que preguntarse ustedes estas cosas cuando tenían mi edad?

Todo esto ocurre ante nuestros ojos y seguimos actuando como si tuviéramos todo
el tiempo que quisiéramos y todas las soluciones. Soy solo un joven y no tengo
todas las soluciones, pero quiero que se den cuenta: ustedes tampoco las tienen.

No sabemos cómo arreglar los agujeros en nuestra capa de ozono. No sabemos


cómo devolver a los peces a aguas no contaminadas. No sabemos cómo resucitar
un animal extinto. Y no pueden recuperar los bosques que antes crecían donde
ahora hay desiertos.
Si no saben cómo arreglarlo, por favor, dejemos de romperlo.

Y si hablamos de ecología o de amor por la creación de Dios, comencemos a


cuidarla, o estaremos cayendo en aquellas palabras de San Antonio.

El gran Peligro del Cristiano es Predicar y no practicar, Creer pero no vivir de


acuerdo con lo que se cree.

Si no queremos caer en el enfriamiento de no actuar les propongo lo siguiente.

Consejos prácticos para iniciar.

1. No tirar ni quemar basura en la calle.


2. No utilizar los vehículos para distancias cortas.
3. Reutilizar al máximo todos los recursos.
4. Cuidar los árboles que aún nos quedan y sembrar dónde ya no hay.
5. Disminuir el consumismo, de productos que generan más desechos o
utensilios de un solo uso (duroport, pañales desechables, pajillas entre
otros)
6. Desconectar los equipos que no necesitamos (televisores, cargadores de
celular entre otros)
Necesitamos reconciliarnos con nuestro ambiente.
Ya no hay tiempo.
Ya no es posible posponer.
Nosotros tenemos una gran oportunidad, construir un mundo mejor, más digno,
para nuestras generaciones futuras.
Y no sigamos teniendo el pobre pensamiento de decir, si el no cambia entonces yo
tampoco cambio, les digo si queremos que los demás cambien comencemos por
nosotros, Decía la madre Teresa “Quizá Parezcamos una gota de agua en el
océano, pero si nosotros no lo hacemos esa gota de agua faltara para la
eternidad”
Hoy es el día para hacer el intento, es el día de marcar la diferencia.
Cada día podemos hacer algo…
Los dejo con este pensamiento de San Francisco de Asís.

Comienza haciendo lo que es necesario,


Después lo que es posible y de repente estarás haciendo lo imposible.

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