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María José Aranguren

9D
27/05/2019

La libertad como base de la esencia

La literatura occidental se ha visto afectada a lo largo de la historia por diferentes


factores sociales que han cambiado la perspectiva de la sociedad. A partir del siglo XIX hasta
el siglo XX, Europa se ve sometida a un proceso de modernización política, social y
económica que trajo como consecuencia un periodo de desacuerdo entre algunas naciones.
Las obras del escritor alemán Franz Kafka, La Transformación, y del escritor francés Albert
Camus, El extranjero, se sitúan en un ambiente de posguerra, y es interesante la manera en
que los personajes expresan su libertad para definirse a sí mismos. Por ende, es pertinente
cuestionarse, ¿qué relación tiene la libertad con la definición de la esencia en Mersault de El
Extranjero de Camus y en Gregorio de La Transformación de Kafka? A lo largo del escrito,
se demostrará que la libertad es la base de la esencia, ya que esta permite la toma de
decisiones para hacer de cada hombre un proyecto. En el caso de Mersault, la libertad le
posibilita elegir y por lo tanto para él es posible definirse, sin embargo, los estereotipos que
influyen en la libertad de Gregorio no le permiten tomar sus propias elecciones, y por lo tanto
su esencia ya se ve previamente establecida.

En su escrito “El existencialismo es un humanismo”, el filósofo Jean Paul Sartre


define el existencialismo partiendo de diversos conceptos de gran importancia. En primer
lugar, se establece que la existencia precede a la esencia, siendo esta el conjunto de cualidades
y propósitos que definen al hombre, ya que se tiene por entendido que no existe una
naturaleza humana previa a la existencia de este. Por consiguiente, se menciona que ante todo
el hombre es un proyecto, pues este tiene la total responsabilidad de su vida, y esta resultará
en lo que se haya decidido ser. Sin embargo, se debe tener en cuenta que la responsabilidad
de la que se habla no es exclusivamente individual, sino que, por el contrario, funciona de
manera colectiva, porque el proceso de cada individuo afecta a los demás. Sumado a esto,
Sartre menciona que la sensación de angustia es la que llama a la acción dentro de cada
hombre. La angustia se produce al ser consciente de la profunda responsabilidad que conlleva
la toma de decisiones respecto a las consecuencias que traerá a los demás, ya que se tiene
cierta incertidumbre de lo que podría pasar en el futuro. Finalmente, se explica el
funcionamiento de lo previamente mencionado a través del concepto de la libertad. Esta es
la base de todos los valores, ya que permite la toma de decisiones a voluntad propia, y
responsabiliza a cada quien con los efectos de estas. Todos los hombres están condenados a
ser libres, pero lo esencial, es lo que se decida hacer con la libertad que se ha sido otorgada.

Europa se vio marcada por una serie de acontecimientos durante los siglos XIX y XX
que sirven de referencia para contextualizar las novelas de Franz Kafka y Albert Camus. Para
comenzar, los cambios que trajo el proceso de industrialización llevaron a la sociedad a
adaptarse al sistema capitalista, el cual se convirtió en la principal estructura económica.
Paralelamente, el continente se vio expuesto a un periodo de conflicto internacional, en donde
se ven incluidas la Primera y Segunda Guerra Mundial. En 1914 estalló la Primera Guerra
Mundial hasta 1918 después de que se hubiera firmado el tratado de Versalles. Esta guerra
particularmente tuvo una magnitud inmensa a nivel global, y fue pionera en usar ataques en
contra de los civiles. Seguidamente, en 1939 la Segunda Guerra Mundial comenzó con la
invasión de Alemania a Polonia y acabó en 1945 con la captura de Berlín. Este es considerado
el mayor conflicto bélico en la historia, debido a la cantidad de países involucrados y al
número de muertes que hubo. Por todo lo anterior, se puede decir que estos acontecimientos
influyeron parcialmente en la forma de pensar de la sociedad europea ya que afectaron su
cultura en gran parte y crearon nuevos desafíos para quienes sobrevivieron a la experiencia.

En particular, la manera en que los dos personajes expresan su libertad para establecer
su esencia es radicalmente diferente. Por un lado, Mersault hace caso omiso de lo que la
sociedad considere como correcto, y él mismo se encarga de tomar sus propias decisiones
respecto a lo que va ocurriendo en su vida. Sin embargo, se puede decir que no es
completamente consciente de la responsabilidad que conlleva ser libre, y por lo tanto es
incapaz de asumir la angustia que se produce al decidir. Contrariamente, Gregorio tiene una
manera muy diferente de expresar su libertad, puesto que él se ve encasillado en los
estereotipos que la sociedad impone y actúa en concordancia a eso. En vista de lo anterior,
se puede decir que por eso Gregorio es plenamente responsable al tomar sus decisiones, ya
que la angustia que se genera es el motor de su libertad.
Concretamente, Mersault es un personaje que es completamente autónomo al tomar
decisiones. Se puede decir que él es quien se define a voluntad propia sin necesidad de seguir
al resto de la gente que lo rodea. Un ejemplo claro de lo anterior, es cuando Mersault es
telefoneado por su jefe: “Me preguntó entonces si no me interesaba un cambio de vida.
Contesté que no se cambia nunca de vida, que en cualquier caso todas valían lo mismo y que
la mía estaba lejos de disgustarme. Pareció descontento, me dijo que nunca respondía
directamente, que no tenía ambición y que eso era desastroso en los negocios. Hubiera
preferido no decepcionarlo, pero no veía razón alguna para cambiar de vida” (Camus, 2016,
pág. 46). Es evidente que el personaje no vive bajo ningún tipo de expectativas, a medida en
que diversas situaciones se presentan en su vida, lo que él decide hacer, lo hace basándose
en su subjetividad sin pensar en lo que luego la gente pensará de sus acciones, puesto que él
se siente cómodo consigo mismo. En contraste, se puede decir que Gregorio basa todas sus
decisiones en lo que la sociedad establece que se debe hacer. En ese orden de ideas, se puede
decir que Gregorio es incapaz de definirse a sí mismo, ya que la sociedad es quien lo define
a él. Por ejemplo, cuando Gregorio se convirtió en un bicho, este se vio incapacitado para
continuar trabajando en la empresa, así y todo, tanto su familia como sus jefes le infundieron
un creciente sentimiento de culpa. La culpa en Gregorio lo llevó a cuestionarse incluso los
más mínimos aspectos de su existencia, hasta el punto en el que perdió su libertad de tomar
decisiones autónomamente.

Como se mencionó anteriormente, Mersault es autónomo al tomar sus decisiones,


pero Gregorio no lo es. El filósofo Jean Paul Sartre explica en su escrito que el hombre es
ante todo un proyecto, y que a medida en que este tome decisiones, será posible para él definir
su esencia tal y como se ha proyectado ser. Esto es evidente en la siguiente cita: “El hombre
no es otra cosa que lo que él se hace. (...) El hombre es ante todo un proyecto que se vive
subjetivamente, (...) nada existe previamente a este proyecto; (...) Así, el primer paso del
existencialismo es poner a todo hombre en posesión de lo que es, y asentar sobre él la
responsabilidad total de su existencia.” (Sartre, 2019, pág. 3). De hecho, se puede afirmar
que Mersault es un proyecto, porque previo a él, no existe una naturaleza humana que lo
defina o influencie en su proceso de experimentar. De esa manera, se puede decir que él tiene
la total responsabilidad de lo que pase en su vida, sin necesidad de que alguien más intervenga
en ella. Contrariamente, la existencia de Gregorio ya se ve previamente establecida, puesto
que desde que él se convierte en un miembro funcional de la sociedad, este ya se ve obligado
a trabajar para sostener a su familia, sin que exista la opción de dedicarse a otra cosa.
Precisamente, la esencia de Gregorio gira alrededor del trabajo, aunque él no lo haya decidido
así, porque alguien más influencia en las decisiones en cuanto a su vida. Es por esto, que
Gregorio no puede ser considerado un proyecto, él no es completamente responsable de lo
que ocurre en su vida, y por lo tanto su libertad se ve afectada.

No obstante, la angustia que se genera al tomar las decisiones también es un factor


importante al hablar de libertad. Es decir, a pesar de que Mersault tenga control sobre sus
acciones, él se ve incapaz en algunas situaciones, de asumir la angustia que conlleva elegir.
Concretamente, lo anterior se puede ver en la siguiente cita: “Comprendí que había destruido
el equilibrio del día, el silencio excepcional de una playa donde había sido feliz. Entonces,
disparé cuatro veces sobre un cuerpo inerte en el que se hundían las balas sin que lo pareciese.
Fueron cuatro golpes breves con los que llamaba a la puerta de la desgracia.” (Camus, 2016,
pág. 63). Mersault era consciente de que los disparos le traerían consecuencias, y, aun así,
optó por disparar, sin tener en cuenta la manera en que después afectaría a todos los que lo
rodean. Inversamente, Gregorio, aunque esté sometido a lo que la sociedad dictamine, decide
asumir la angustia que se produce al decidir. Él escoge continuar manteniendo a su familia a
pesar de las circunstancias, ya que es consciente de la responsabilidad con la que carga. En
la novela, se expresa esta situación: “Por aquel entonces, Gregorio se había preocupado en
hacer todo para que la familia olvidara el descalabro económico que los había sumido en la
más completa desesperación. (...) Gregorio llegó a ganar tanto dinero que estuvo en
condiciones de llevar la obligación de toda la familia, a lo cual, en efecto, se aplicó.” (Kafka,
2010, pág. 33). Incluso, después de su transformación, Gregorio sigue pensando en lo que
sus acciones le causarían, no solo a él, pero también a los demás.

La angustia se produce al decidir, ya que, al tomar decisiones, se debe tener en cuenta


que las consecuencias van más allá de un nivel personal, estás afectan a una colectividad. No
solo eso, sino que también llaman a tomar medidas frente a algo que está sucediendo. En la
siguiente cita se aclara lo anterior: “El existencialismo suele declarar que el hombre es
angustia. Esto significa que el hombre que se compromete y que se da cuenta de que es no
solo el que elige ser, sino también un legislador, que elige al mismo tiempo que a sí mismo
que a la humanidad entera, no puede escapar al sentimiento de su total y profunda
responsabilidad.” (Sartre, 2019, pág. 4). Tanto Mersault como Gregorio sienten angustia al
momento de decidir. No obstante, Mersault decide ignorar la responsabilidad que conllevan
sus acciones, y actúa de una manera muy subjetiva, pues a pesar de que él sabe lo que sus
decisiones pueden llegar a causar, él decide continuar. En cambio, Gregorio siempre está
pensando en los efectos de sus acciones, para él lo más importante es el bien de su familia y
lo que piensan de él en la sociedad.

Finalmente, es pertinente resaltar la manera en que los dos personajes expresan su


libertad para definir su esencia. Mersault es capaz de decidir por sí mismo, y de esa manera
proyectarse a lo que él desea ser. Sin embargo, es incapaz de asumir la angustia, hasta el
punto en el que deja de pensar en el bien común, y se centra únicamente en su existencia. Por
otro lado, Gregorio es incapaz de tomar decisiones independientemente, puesto que se ve
encasillado en estereotipos, y por eso se puede decir que su esencia precede a su existencia.
Pero por otra parte, él constantemente piensa en los demás y los pone por encima al momento
de actuar. Por consiguiente, es posible afirmar que todas estas particularidades forman parte
del conjunto de características y propósitos de cada personaje, basándose en la forma en que
deciden hacer uso de su libertad. En conclusión, se puede decir que, aunque todos los
hombres son libres, estos pueden someter su libertad al pensamiento de otros o utilizarla
únicamente para fines personales sin pensar en comunidad. La terrible situación del siglo XX
por la que muchas personas atravesaron, se ve reflejada en la manera en la que deciden actuar,
y aun así, esta sigue siendo impredecible. Pues como dijo Heidegger, “Ninguna época ha
sabido tantas y tan diversas cosas del hombre como la nuestra. Pero en verdad, nunca se ha
sabido menos qué es el hombre". Por lo tanto, es oportuno cuestionarse ¿es posible definirse
completamente? ¿O es él hombre un constante proyecto en desarrollo?
Bibliografía:

Bibliografía primaria:
Camus, A. (2016). El Extranjero. Madrid: Alianza Editorial.
Kafka, F. (2010). La Transformación. Colombia: Editorial Norma.

Bibliografía secundaria:
Sartre, J. (2019). “El existencialismo es un humanismo”. Buenos Aires: Facultad de filosofía
de San Dámaso.

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