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LA REFLEXION TEOLOGICA

1. El contenido de la imagen de Dios.

La imagen de Dios no es “fotografiable”. Decir esto nos puede ayudar a


comprender que la creaturidad, aunque signifique limitación y finitud, no
significa necesariamente cerrazón o conclusión; al menos cuando se trata
de la creaturidad del hombre.
La imagen de Dios se puede señalar o situar en rasgos o determinaciones
concretas del ser humano o en actitudes y enfoques con los que debe
abordarse cualquier determinación del ser humano.
1.1. Respuestas de carácter material.
Respuestas muy diversas:
a) Imagen divina del hombre se vio en su figura erguida, es decir que la
divinidad del hombre afecta también a su ser que es cuerpo, no es una
propiedad exclusiva del alma.
b) Los padres helenizados descubren la imagen divina del hombre en su
ser racional. Frente a ellos, la concepción ireneana de un cuerpo que
va siendo traspasado por el espíritu de Dios, hasta llegar a convertirse
en transparencia o irradiación de ese Espíritu,
c) Para la teología medieval, la imagen divina del hombre parece residir
sólo en su alma, espiritual e inmortal. De este modo se entiende de
que la imagen y semejanza es más un dato teológico que
antropológico.
d) Gen 1,26 “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza, para
que domine… ” R. Garaudy, “El hombre ha sido creado creador”.
e) Gen 1,27 “a imagen de Dios lo creó: varón y hembra los creó”.
Diferencia sexual. El hombre se parece a Dios porque no es
aislamiento, sino comunión de personas. Cabría decir: la mujer es
hombre, el varón es hombre; pero no son dos hombres, sino un solo
ser humano. La condición más profunda del hombre es su condición
amorosa, según Julián Marías, porque Dios es Amor. La expresión
“imagen y semejanza” desaparece de la biblia para dar paso a la
economía de la Alianza.
f) Según Emil Brunner, el atributo que puede ser la mejor definición de
Dios y la mejor definición del hombre: la libertad. El misterio de la
libertad constituye un acceso innegable al carácter divino del hombre.
Según Gregorio de Nisa, la imagen viene dada con la creaturidad, y
consiste en la racionalidad del hombre; la semejanza es una gracia
ulterior, y consiste en que esa racionalidad se haga así misma -
libremente- amorosa, misericordiosa y humilde.
g) Dios solo puede crear seres concretos, particulares. Por tanto, el
hombre es una particularidad universal. El hombre concreto y
personal solo se realiza como totalidad humana. “La imagen de Dios
tiene su cumplimiento en el conjunto de la naturaleza humana,
toda la naturaleza humana, desde los primeros hombres hasta los
últimos, es una sola imagen del verdadero Dios”.

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