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DETERMINADOS A COMPARTIR DE SU AMOR

Base Bíblica: Mateo 9:36. RV/1960.


-Y al ver las multitudes, tuvo compasión de ellas; porque estaban desamparadas y
dispersas como ovejas que no tienen pastor.

Objetivo: Entender y aceptar que la mayor manifestación de compasión


hacia una persona es compartirle del amor de Jesucristo, para que obtenga
la salvación y su vida sea transformada.

Actividad introductoria: La fuente de la compasión es el amor, el cual nos


lleva a interesarnos por las necesidades de las personas y a suplirlas. La
vida de Jesús fue un ejemplo vivo de compasión; realizo grandes milagros
para ayudar a las personas y murió en la cruz para darnos salvación.

INTRODUCCIÓN: William Carey. Misionero protestante inglés y ministro


bautista, conocido como el padre de las misiones modernas. Carey fue uno
de los fundadores de la Sociedad Misionera Bautista. Fue misionero en
India. Evangelizo, fundo escuelas y tradujo la Biblia a diferentes lenguas del
país. Se le considera como uno de los grandes del evangelismo y misiones
modernas. Desarrolló un plan de misiones y animó a muchos a sumarse. Un
día en su trabajo (vendiendo zapatos), escuchó el llamado de Dios.” si el
deber de todo hombre es escuchar el evangelio… entonces, nuestro deber
es llevarlo a todas las naciones”. En ese tiempo no había agencias
misioneras y mucho menos interés por ellas. Sin embargo, persistió. Sabía
de la necesidad de muchos de conocer de Cristo. La distancia y la hostilidad
de la India contra los misioneros no lo detuvo. En 1793, él, su esposa
Dorothy y dos hijos fueron a la India. Luego de un viaje de cinco meses en
barco llegaron. El inicio de su ministerio no fue fácil, con enfermedades,
hambrunas, deudas, deterioro mental de su esposa. Predicó por muchos
lugares de la India. Fue a zonas aisladas, llenas de animales salvajes,
caminaba por kilómetros, y al llegar, debía hacer a un lado el cansancio para
compartir de Cristo. En medio de serpientes, tigres y chacales recorrió
muchos lugares y por años no vio fruto (ni un convertido en 7 años), no se
desanimó, sabía que Dios le había llamado y tuvo determinación por la
evangelización en medio de la idolatría y de la indiferencia ocasionada por
las costumbres. Se opuso al ritual de arrojar a niños al río como sacrificio a
los dioses y a la tradición de quemar vivas a las viudas en el entierro del
esposo. El año 1800 se bautizó el primer convertido del hindú al cristianismo
y se logró imprimir el Nuevo Testamento a Bengalí.
El siguiente paso sería enseñarle a la gente a leerlo y en poco tiempo, él y
el equipo misionero que había logrado establecer, tenían aproximadamente
cien escuelas en bengalí. Como misionero, demostró un gran amor por la
gente y determinación en la predicación del evangelio.

Para determinarnos a compartir del amor de Jesucristo debemos:

1- VER LAS PERSONAS COMO JESÚS LAS VE: “Y al ver las multitudes,
tuvo compasión de ellas”. Jesús no se limitó a dar una enseñanza o un
mensaje en la sinagoga, salió, recorrió los caminos de aldeas y ciudades,
para darse cuenta del estado en que estaban las personas y de la necesidad
que tenían. Él se interesó genuinamente por el estado de las personas y
corrió a ayudarlos. Jesús, lleno de compasión, se dispuso a dar alimento,
sanar enfermos, liberar endemoniados y a resucitar muertos. Así mismo,
nosotros, debemos determinarnos y salir a mirar lo que pasa con las
personas que están a nuestro alrededor (hijos, esposo(a), familiares, amigos
etc. Solo cuando vemos los sufrimientos de las personas podemos sentir
compasión, e ir hacia ellos para ayudarlos en sus necesidades.

2- PROTEGER Y CUIDAR LAS PERSONAS: “porque estaban


desamparadas y dispersas”. Las ovejas son presa fácil cuando son
atacadas, además, pierden fácilmente el sentido de dirección, pues aun
estando cerca del rebaño se pueden perder; por tal motivo necesitan de un
pastor que las acoja y proteja en su redil para poder sobrevivir. Por eso
cuando Jesús vio a las multitudes sintió compasión, porque se dio cuenta
que estaban perdidas, confundidas y espiritualmente desorientadas y las
comparó con ovejas desamparadas y dispersas, quiere esto decir que las
personas necesitan de un rescatador (líder o pastor) con la determinación
de ampararlas, protegerlas y guiarlas por el camino que las lleve hasta la
seguridad de la salvación y Dios nos ha elegido a nosotros para que lo
hagamos.

3- GUIAR LAS PERSONAS HACIA JESUCRISTO: “como ovejas que no


tienen pastor”. El mayor desastre para una persona es que no tenga quien
lo guíe hasta la salvación. Al ver Jesús que las personas no tenían quien las
guiara por el camino que los condujera hasta la vida eterna, tomo la decisión
de convertirse en su líder y pastor. Estuvo dispuesto a morir para lograr su
objetivo. De igual manera debemos determinarnos a dejar las excusas, para
convertirnos en los líderes de nuestra familia, barrio y/o comunidad y estar
dispuestos a guiar las personas hasta Jesucristo para que sean salvas y
descubran el propósito que Dios tiene con ellas.

CONCLUSIÓN: Debemos tomar de la decisión de ir y mirar lo que les pasa


a las personas que están a nuestro alrededor, compartirles del amor del
Señor, guiarlas a que reciban a Cristo en sus corazones, para que alcancen
la salvación y para ayudarlas en sus necesidades.
DESAFIATE A SER LUZ
Determinarás asimismo una cosa, y te será firme,
Y sobre tus caminos resplandecerá luz. Mateo 5:15-16
“Ni se enciende una luz y se pone debajo de un almud, sino sobre el candelero, y
alumbra a todos los que están en casa.
Así alumbre vuestra luz delante de los hombres, para que vean vuestras buenas obras,
y glorifiquen a vuestro Padre que está en los cielos”.

Objetivo: Llevar a cada asistente a la Red de Vida y a ganarse su familia,


amigos, vecinos para Cristo.

INTRODUCCIÓN: En este pasaje de la biblia, Jesús compara nuestras vidas


como la de una luz, que no puede ser escondida, sino al contrario debe brillar
a otros, cuando nosotros recibimos a Jesús en nuestras vidas, estas son
transformadas, salimos de la oscuridad a la luz admirable que es Jesús,
ahora a cada uno de nosotros nos corresponde ser esa luz que ilumina a
aquellos que están en oscuridad. Hoy te quiero enseñar 3 pasos sencillos
para llegar a una persona:
• Necesitas compasión.
• Se ejemplo.
• Habla de su amor.

1.- NECESITAS COMPASIÓN: Si algo necesitamos para ser luz es la


compasión, poder entender la necesidad de las otras personas,
desprendernos de ese pensamiento egoísta de mirar solo por nuestros
beneficios y poder ver a nuestro alrededor la cantidad de personas que
necesitan conocer del amor de Dios y solo nosotros les podemos presentar
al que pueda transformar, llenar y fortalecer sus vidas.

2.- SE EJEMPLO: Dios nos ha escogido para que seamos personas que
reflejemos la luz, por medio de nuestro comportamiento de nuestro amor al
prójimo de nuestras buenas acciones, de nuestro corazón perdonador;
porque podemos entonces decir que nos parecemos a Jesús y esto hará que
las personas vean en nosotros algo diferente y quieran tener lo que hay en
nuestras vidas.

3.- HABLA DE SU AMOR: El deseo del padre es que más personas pueden
ser tocadas por poder, si nosotros nos encargamos de ser portadores de
esas buenas de salvación y empezamos a mostrar la luz que es cristo para
que pueda alumbrar la oscuridad de las personas; esto hará que muchos
más conozcan su amor y puedan ellos también mostrarlo a otros y así miles
de personas estarán conociendo a Jesús y entregando sus vidas a Jesús.

CONCLUSIÓN: Ser una extensión para que otras personas conozcan a


Jesús es un gran reto que debemos estar dispuestos a tomar, pero para ello
necesitamos entender que solo él nos puede ayudar para ser luz a otras
personas y si primero lo buscamos y nos llenamos de su presencia vamos a
poder llegar a muchas más personas; no lo dudes más hoy es el día de ser
luz para otros.

Ofrenda: 1 crónicas 16: 29-30


VIVIENDO LA VISION
Texto Bíblico: Job 22:28
-Determinarás asimismo una cosa, y te será firme,
Y sobre tus caminos resplandecerá luz.

INTRODUCCIÓN: Uno no se convierte cambiando de iglesia, de eso no se


trata, porque el Señor jamás habló de religiones, Él habló del reino de los
cielos, y el apóstol Pedro enfatiza que Dios nos sacó de las tinieblas a su luz
admirable (1ª. Pedro 2:9); por tanto la conversión se trata de dejar las
tinieblas y entrar en la luz, y parte de las tinieblas es el espíritu religioso, y
esto lo utiliza el diablo para tener a más de uno sumergido en la maldad, y
hacerle creer que ser religioso es lo que satisface las demandas de Dios, y
por eso muchos creen que con simplemente asistir cada domingo a su iglesia
y cargar una biblia, con eso ya le están cumpliendo al Padre Dios; por tal
razón cuando a estas personas se les habla de qué se trata caminar con
Cristo como debe de ser, lo primero que dicen es “no me presione”, “yo creo
en Dios a mi manera”, “yo le sirvo a Dios cuando pueda”… y por su espíritu
religioso expresan que quizás puedan “colaborar” más adelante; porque
quien está atado con este espíritu, piensa no en que está sirviendo a Dios,
sino que está haciendo favores a los demás.

Este espíritu de religiosidad debemos confrontarlo y reprenderlo con más


insistencia que la fornicación, o cualquier otro espíritu similar… Una persona
con espíritu de religiosidad, es la misma que anda capturando por ahí cuanta
visión aparezca, porque tiene comezón de oír, y empieza a cuestionarse si
está en la iglesia correcta, si esa es en realidad la visón de Dios, o está
pendiente de cuánto chisme aparece en el Facebook, sobre alguna iglesia
cristiana o siervo de Dios; similar a como actuaban los fariseos y escribas de
la época de Jesús, … ese espíritu religioso no les permite que tengan libertad
en el Espíritu Santo que es quien les establece en una iglesia para echar
raíces y poder dar fruto… el apóstol Pablo lo advirtió cuando decía aquella
frase “vosotros que corrías tan bien -¿quién os estorbó para no obedecer la
verdad?” (Gálatas 5:7) Es posible que un ministerio haya sido fructífero por
un tiempo, no obstante en algún momento el espíritu de religiosidad –latente
en esa persona-, le toma ventaja, razón por la cual, viene la duda, el
prejuzgar a otros, o sentir que lo que hace no tiene sentido alguno; hay
quienes piensan que si una iglesia no ayuna dos veces a la semana está
muy mal, y una persona inmadura al escuchar un mensaje de estos, y si su
iglesia no lo hace, entonces pone en duda la autenticidad de su iglesia.

La única forma de ganar una ciudad para Cristo, es cuando nos


concentramos a hacer lo que Dios nos ha confiado a cada congregación, y
no criticando a otras porque no hacen las cosas como nosotros… Debemos
como dice el texto que hoy hemos tomado para reflexionar al respecto,
determinarnos una sola cosa y ésta, NOS SERÁ FIRME (Job 22:28); si Dios
te ha puesto en esta Congregación, es para que aprendas a hacer aquello
que Dios te mandó a hacer aquí, y hacerlo con excelencia en el Nombre
de Jesús; respetando las demás congregaciones, y al tiempo respetamos y
valoramos esta, donde Dios nos ha puesto. Si somos muy sinceros con
nosotros mismos nos damos cuenta que le hemos abierto puertas al espíritu
de religiosidad, por lo cual criticamos a otro hermano, o a otra congregación,
u otros ministerios, etc.; y en ocasiones ese espíritu de religiosidad hace
actuar a la gente de forma tan ilógica, cuando la Palabra advierte que
debemos “discernir los tiempos y las sazones, de nuestro Dios”; porque todo
tiene su tiempo y su lugar, pero la falta de discernimiento en el cuerpo de
Cristo, hace que la gente pierda tiempo y dinero, cosa que el enemigo sabe
que si logra esto, entonces la visión de Dios queda en “veremos”; por eso la
Palabra de Dios advierte también, que si sabiendo hacer lo bueno no lo
hacemos, es pecado (Santiago 4:17).

Como Congregación el Señor nos mandó a hacer la visión, por tal razón
hemos hecho Encuentros, en los cuales todos hemos sido muy bendecidos.
Escuela de Líderes, en la cual tú has recibido preparación y has sido por
tanto formado en esa misma visión, y de allí quedas listo para formar tu Red
de Vida y de esa forma, reproducir en otros la visión que has aprendido en
esta Casa. No obstante, muchos se impactan por otros líderes muy
carismáticos en la televisión, o se dejan “engañar” de quien hace un estudio
profundo de la biblia, por la radio… Cada uno tendrá que darle cuenta a Dios
de lo suyo, similar a cómo dice la Parábola de los talentos, cuando el dueño
de la viña viene a cobrarle a cada uno conforme le había dado; la diferencia
es que el de los cinco y el de dos talentos, se enfocaron en lo suyo, mientras
el de un talento, se distrajo e incluso se atrevió a juzgar a su señor. El de los
cinco y el de los dos, pudieron entrar en el gozo de su señor, pero a éste, de
nada le sirvieron las excusas (Mateo 25:24); LA VISIÓN HAY QUE VIVIRLA,
Y TIENE CARACTERÍSTICAS MUY IMPORTANTES:

1. PROPÓSITO: Todos y cada uno tenemos un propósito en la vida y en la


visión de Dios, y entre ese propósito, Dios revela la visión y la misión de
nuestra vida. La palabra propósito significa: algo hacia adelante por lograr, y
ese propósito se compone de: Visión más Misión.

Visión: En qué me voy a enfocar. Tu visión es SER COMO JESÚS


(Hebreos 12), por tanto, formar tu carácter para ser como Jesús. El
fundamento del amor y del servicio, es la fidelidad a Dios, no caerle bien a
todo el mundo. Cristo ni siquiera en la instancia más dura fue infiel a Dios el
Padre, por el contrario, en el momento más terrible de su vida, dijo: Padre
perdónalos porque no saben lo que hacen ¡ESO ES CARÁCTER!, y esa
debe ser nuestra visión, tener ese carácter de Jesús. Pero ese propósito de
tener una visión, hay que aterrizarlo en una misión, porque se trata de ser y
hacer; VISIÓN ES SER COMO JESÚS, MISIÓN ES HACER LO QUE EL
SEÑOR HIZO.

Misión: Hacer lo que hizo Jesús: FORMÓ DISCÍPULOS. Es la razón por la


cual el término a algunos le queda muy grande, porque ni son como Jesús,
ni hacen lo que hizo Jesús, así que de cristianos no tienen ni el nombre. Pero
esto va a demandar una vida de oración constante, y atender a qué el Señor
nos ha llamado, y por tanto no queda tiempo para averiguar chismes en las
redes sociales, el internet y otras formas. Debemos concentrarnos a lo que
Dios nos ha llamado. ASÍ QUE VISIÓN MÁS MISIÓN DA MI PROPÓSITO,
PORQUE VISIÓN ES SER Y MISIÓN ES HACER; y para ello hay que
trabajar con ahínco, porque la visión del señor no es para perezosos, ni
gente quejumbrosa, es para gente humilde, sencilla y trabajadora. Hay gente
muy buena para quejarse, pero no para salir a evangelizar.
2. TRANSFORMAR LA VIDA DE LAS PERSONAS: Transformas a otros
discipulando. Es importante comprender que para ello el punto de partida es
una auténtica conversión, no se trata de cuánto llore la persona, se trata
de una verdadera actitud de arrepentimiento y de anhelar aprender más de
Jesús; y este es todo un proceso de discipulado. La diferencia entre religión
y la iglesia de Cristo, es que la religión no cambia a nadie, mientras que la
iglesia de Cristo está conformada por gente verdaderamente convertida a Él
y por tanto, las puertas del Hades no prevalecerán contra la iglesia. Cuando
la persona se mueve realmente en la dimensión de la iglesia de Cristo, es
porque sabe que su vida ha sido transformada para transformar a otros,
comenzando por su propia familia. Ese proceso es: Ganar, consolidar,
discipular y enviar. Aunque tengamos miles de defectos o cometamos
muchos errores, así y todo, hemos logrado a miles de personas en este
proceso que se continua permanentemente en nuestra congregación. Si tú
te dedicas a este proceso, que Dios usó para cambiar tu vida, otras vidas
también serán transformadas.

CONCLUSIÓN: Hagamos todo esto así tan sencillo, el evangelismo,


consolidemos bien a las personas, trabajemos bien. Dejemos esa comezón
de oír, y tanta insatisfacción, algunos quieren aprender solamente más
teología y se olvidan del evangelismo; por eso debemos pedir a Dios que
tenga de nosotros misericordia y sacar de nuestra vida todo espíritu de
religiosidad. Es por tanto importante renovar nuestra mente y corazón
(Romanos 12:1-21)… ¡Libérate de ese espíritu de religiosidad! Debido a
que hemos tolerado ese espíritu de religiosidad, muchos se han confundido,
y otros más no los hemos podido ganar para Cristo, y muchos se han
desanimado y vuelto al mundo por la misma razón. Hoy debemos pedirle
perdón al Señor por esto; a muchos no les gusta lo sencillo de Dios, igual en
tiempos de Jesús, lo criticaban porque todo era tan sencillo, empezando
porque había escogido gente que no eran los fariseos de la época, sino a
gente muy sencilla y del pueblo. Hagamos bien el discipulado, y todo
hagámoslo como para Dios, porque de Él viene nuestra recompensa.

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