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RESOLUCIÓN Nº 031/10

Vistos:

Que, con fecha 27 de noviembre de 2009, don … interpone reclamo ante esta
Defensoría del Asegurado con relación a la Póliza de Seguro Nro. …, solicitando que …
otorgue cobertura al siniestro (accidente vehicular con daños materiales a la unidad
asegurada con placa de rodaje …) ocurrido con fecha 31 de octubre de 2009;

Que, analizado dicho reclamo, esta Defensoría determina que, en razón de su cuantía, el
mismo se encuentra dentro de su ámbito de competencia material y, además, que ha sido
presentado dentro del plazo de 180 días calendario establecido en su Reglamento, ya
que mediante carta …, de fecha 12 de noviembre de 2009, … informó al asegurado que
rechazaba la atención del siniestro porque el conductor contaba con Licencia Militar, lo
que no le permitía manejar vehiculares particulares ni públicos por ser suboficial de las
Fuerzas Armadas, operando la correspondiente exclusión de cobertura;

Que, habiendo sido notificada del reclamo, …, mediante escrito presentado con fecha
31 de diciembre de 2009, remitió a esta Defensoría sus correspondientes descargos;

Que, habiendo sido invitadas ambas partes para fundamentar sus respectivas posiciones,
con fecha 8 de febrero de 2010 concurrieron a la sede de esta Defensoría para dicho
efecto;

Que, el reclamo interpuesto se sustenta sucintamente en lo siguiente: a) Con fecha 31


de octubre de 2009 el vehículo asegurado fue objeto de un accidente de tránsito con
daños materiales; b) El reclamante optó porque el seguro contratado reponga los
respectivos daños, por lo que habiendo cumplido con los procedimientos de ley
procedió finalmente a internar el vehículo en el taller autorizado; c) El seguro no
aprobó el presupuesto de reparación fundamentándose en que su licencia de conducir
(brevete militar) no lo autoriza a conducir vehículos particulares, por lo que con fecha
12 de noviembre de 2009 comunica el respectivo rechazo; d) Que si bien el D.S. 015-
94-MTC autorizaba para conducir vehículos motorizados y no motorizados por las vías
nacionales a quienes contasen con “Las licencias otorgadas a Militares en servicio
activo y expedidas de acuerdo al Reglamento de Tránsito Militar”, dicha norma ha sido
derogada por el D.S. 040-2008-MTC, el mismo que enuncia entre las licencias válidas
para conducir en el territorio nacional a las “Licencias otorgadas exclusivamente al
personal de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional del Perú, en situación de actividad”,
por lo que no sólo se omite la mención al Reglamento de Tránsito Militar sino que se
incluye expresamente al personal policial, de tal manera que conforme a las normas
vigentes, sí cuenta con una licencia válida para conducir en territorio nacional; y e) Su
licencia de conducir (brevete militar), conforme consta en su dorso, no lo autoriza para
conducir vehículos de servicio público, por lo que se entiende que sí lo autoriza para
conducir todos los demás.
Que, por su parte, … con ocasión de absolver el trámite relacionado al reclamo
interpuesto, expresa resumidamente lo siguiente: a) Al momento de producirse el
siniestro, el señor … (entiéndase …) presentó su Brevete Militar Nro. … en el cual se
indica su condición de SOT1 de la PNP, emitido con fecha 12 de agosto de 1997; b) Se
gestionó una consulta ante la Escuela Material de Guerra del Ejército del Perú, entidad
encargada de emitir los brevetes militares, siendo que por Oficio Nro. 1155-SECC
BREV MIL/EMG del 14 de octubre de 2009 expresa que, entre otros, el personal de
técnicos suboficiales, no está facultado para conducir vehículos particulares empleando
el Brevete Militar; c) Que mediante constancia emitida por el Ministerio de Transportes
y Comunicaciones, se acredita que el reclamante no cuenta con licencia particular para
conducir; d) Siendo que el Brevete Militar no facultaba para conducir el vehículo
siniestrado, se aplica lo establecido en las Condiciones Generales del Seguros Vehicular
(VEG001), artículo 5 (Exclusiones), numeral 2, literal D, en el sentido que el seguro no
cubre los daños cuando el vehículo asegurado se encuentre “Siendo conducido por una
persona que no cuente con la licencia de conducir vigente y auténtica que corresponde
al tipo de vehículo, o cuya licencia de conducir esté suspendida o cancelada o vencida
…”, y e) Si bien el D.S. 040-2008-MTC señala que tienen validez las licencias
otorgadas exclusivamente al personal militar y policial en actividad, ello no deroga al
Reglamento de Tránsito Militar, conforme se reconoce por el Ministerio de Transportes
y Comunicaciones mediante Oficio Nro. 14413-2009-MTC/15.03, del 9 de diciembre de
2009, destacando la vigencia del artículo 50 del Reglamento Administrativo de Tránsito
Militar en Tiempos de Paz – D.S. Nro. 11-EMG/A2c del 20 de agosto de 1960, de
manera que conforme a lo señalado en el Oficio Nro. 1155-SECC BREV MIL/EMG, el
personal de suboficiales no está facultado para conducir vehículos particulares
empleando el brevete militar. En consecuencia, la aseguradora solicita que se declare
infundado el reclamo.

Considerando:

Primero: Que, de acuerdo a su Reglamento, la Defensoría del Asegurado resuelve los


reclamos en base a la documentación obrante en el expediente y conforme a derecho.

Segundo: Que, el artículo 1361 del Código Civil sanciona que los contratos son
obligatorios en cuanto lo expresado en ellos, presumiéndose que lo declarado
corresponde a la común intención de las partes de generar una relación jurídica que se
regirá por dichas declaraciones y, en su defecto, por la aplicación supletoria de la ley,
siendo que la parte que niegue dicha coincidencia deberá probarlo.

Tercero: Que, el artículo 380 del Código de Comercio establece que el contrato de
seguro se rige por los pactos lícitos contenidos en la póliza, siendo que la misma debe
contener las condiciones de cobertura de riesgos, conforme al artículo 326 de la Ley
Nro. 26702 – Ley General del Sistema Financiero y del Sistema de Seguros y Orgánica
de la Superintendencia de Banca y Seguros.

Cuarto: Que, el artículo 196 del Código Procesal Civil establece los principios básicos
de la carga de la prueba, al señalar que, salvo disposición legal diferente, la carga de
probar corresponde a quien afirma hechos que configuran su pretensión, o a quien los
contradice alegando nuevos hechos.

Quinto: Para fines de sustentar el rechazo objeto del presente reclamo, … se


fundamenta en una razón puntual y precisa contenida en el artículo 5, numeral 2, sobre
“Exclusiones” de las Condiciones Generales del Seguro Vehicular (VEG001), en el
sentido que: “Esta póliza no cubre los daños materiales y/o daños o pérdidas físicas
y/o responsabilidades y/o daños personales y/o pérdidas, cuando el vehículo asegurado
se encuentre … D. Siendo conducido por una persona que no cuente con la licencia de
conducir vigente y auténtica que corresponda al tipo de vehículo, o cuya licencia de
conducir esté suspendida o cancelada o vencida …”, conforme consta de la copia de las
Condiciones Generales acompañada al reclamo. Este colegiado destaca que en el
presente caso no se aprecia que haya surgido controversia sobre la existencia y
contenido de la exclusión, sino que la controversia radica en la pertinencia de su
aplicación al siniestro. Conforme a ello, la cuestión controvertida relacionada al
reclamo e identificada por este colegiado consiste en determinar si el denominado
brevete militar corresponde o no a una licencia de conducir “vigente y auténtica que
corresponda al tipo de vehículo, …”.

Sexto: Con relación controvertida, este colegiado destaca lo siguiente:

6.1. Conforme al artículo 1º del Reglamento Administrativo de Tránsito Militar en


Tiempo de Paz, aprobado por Decreto Supremo Nro. 11-EMG/A2c del 20 de
agosto de 1960 (cuya denominación actual es Reglamento Administrativo
Militar de Tránsito, conforme al Decreto Supremo Nro. 010-00-CCFFAA del 15
de julio de 1980), dicha norma tiene por objeto (entre otros aspectos) lo
concerniente a la organización y funciones administrativas de Tránsito Militar en
Tiempo de Paz, para el juzgamiento de las infracciones y accidentes de Tránsito
en Tiempo de Paz en los que intervengan miembros de las Fuerzas Armadas y
Fuerzas Policiales, manejando vehículos del Estado, así como la fijación de las
reglas de circulación de tránsito, las infracciones y sanciones por violación de las
disposiciones y consignas de carácter militar, siendo que el capítulo I de su
Título V regula lo referente al otorgamiento de los brevetes militares. Es así que
su artículo 50º establece que se otorgarán los señalados brevetes (señalándose los
requisitos aplicables) “… para conducir vehículos motorizados de la Fuerza
Armada y Fuerzas Auxiliares …” a los oficiales, oficiales asimilados, empleados
y especialistas de las dependencias militares que, “… por razón de su cargo,
tuvieran que intervenir en tránsito, docencia de choferes, mecánicos,
mantenimiento, conservación y reparación de vehículos …”, siendo que “Los
brevetes otorgados a los Oficiales de la Fuerza Armada y Fuerzas Auxiliares en
actividad les da derecho al manejo de carros particulares pudiendo ser
canjeados por el brevete profesional al pasar a la situación de disponibilidad o
retiro”. En consecuencia, conforme al señalado Reglamento Administrativo
Militar de Tránsito, puede concluirse que el otorgamiento de brevetes militares
sólo procede en ciertos casos y, tratándose exclusivamente del caso de oficiales
en actividad, los autoriza además a conducir vehículos particulares. Por
elemental exclusión, tratándose específicamente de los suboficiales, éstos no
están incorporados en el régimen privativo enunciado, en el sentido que sólo los
brevetes militares otorgados a oficiales autorizan al manejo de vehículos
particulares, lo cual no es posible mediante otros brevetes militares.

6.2. De otro lado, conforme al artículo 10º del Reglamento Nacional de Licencias de
Conducir vehículos motorizados y no motorizados de transporte terrestre,
aprobado por Decreto Supremo Nro. 040-2008-MTC del 18 de noviembre de
2008, para fines de conducir vehículos dentro del territorio nacional tiene validez
las licencias de conducir y permisos internacionales que se enuncian
taxativamente, entre los cuales constan “Las licencias otorgadas exclusivamente
al personal de las Fuerzas Armadas y Policía Nacional del Perú en situación de
actividad”.
De acuerdo a lo sostenido en el reclamo interpuesto, la norma anteriormente
reproducida habría dejado sin efecto la restricción contenida en el artículo 50º
del Reglamento Administrativo Militar de Tránsito, de manera que el titular de
un brevete militar (tratándose específicamente de un suboficial) estaría
autorizado para conducir toda clase de vehículos, militares y civiles, aunque en
este último caso, la autorización sólo operaría respecto de los vehículos
particulares y no de servicio público. En consecuencia, el reclamante -como
suboficial de la Policía Nacional del Perú (y no de las Fuerzas Armadas como se
expresa en el rechazo)-, conductor del vehículo siniestrado, sí habría contado
con licencia para conducirlo, vigente y auténtica, por lo carecería de legitimidad
el rechazo invocado por RÍMAC SEGUROS.

6.3. Si bien de acuerdo al Reglamento Nacional de Licencias de Conducir vehículos


motorizados y no motorizados de transporte terrestre una licencia militar permite
conducir dentro del territorio nacional, la cuestión radica en determinar qué es lo
que permite conducir, por cuanto dichas licencias se otorgan conforme al
Reglamento Administrativo Militar de Tránsito, el mismo que contiene una
específica disposición en cuanto a la categoría del miembro de las Fuerzas
Armadas y Fuerzas Policiales, ya que dispone que son únicamente los oficiales
en actividad quienes, con su brevete militar, están autorizados para conducir,
además de los vehículos militares, vehículos particulares. Para dilucidar la
cuestión enunciada, debe destacarse que el artículo 10 del Reglamento Nacional
de Licencias de Conducir vehículos motorizados y no motorizados de transporte
terrestre establece expresamente, y no está en discusión, que el brevete militar
permite conducir dentro del territorio nacional, pero no puede soslayarse el
hecho que los brevetes militares se expiden conforme a su propia
reglamentación lo que implica que, en el caso de un oficial, no tiene
restricciones para conducir vehículos particulares, pero en el caso de los
oficiales asimilados, suboficiales, empleados y especialistas, ello no resulta
legalmente posible.

6.4. Este colegiado asume que por el hecho inobjetable que los brevetes militares se
expiden conforme a su propia reglamentación, lo cual incluye requisitos y
condiciones de uso, entre otros aspectos, no corresponde sostener que su
reglamentación privativa ha quedado derogada o es inaplicable por el simple
hecho que el actual Reglamento Nacional de Licencias de Conducir no hace
expresa referencia o mención al mismo, a diferencia del anterior Reglamento de
Licencias de Conducir para Vehículos Motorizados de Transporte Terrestre
aprobado por Decreto Supremo Nro. 015-94-MTC del 13 de junio de 1994.

6.5. De otro lado, sobre la base de lo precedentemente analizado, este colegiado no


advierte cuál es el sustento legal que permite consignar en el dorso de los
brevetes militares que “ESTE BREVETE NO AUTORIZA A CONDUCIR
VEHÍCULOS DE SERVICIO PÚBLICO. ESTE BREVETE AUTORIZA A
CONDUCIR VEHÍCULOS AUTOMOTORES DE TRANSPORTE
TERRESTRE, ES VÁLIDO EN TODA LA REPÚBLICA DE ACUERDO AL
D.S. Nº 15-94.MTC-10 JUNIO 94”, por cuanto la regulación militar limita
objetivamente el uso del brevete militar, y la regulación “civil”, si bien reconoce
la existencia y validez de los brevetes militares, no regula lo concerniente a los
requisitos y condiciones de uso, entre otros aspectos. Por lo tanto, no
corresponde asumir que en esta materia ha habido una tácita derogación
normativa, siendo que el marco legal que regula la expedición y uso de los
brevetes militares está plenamente vigente.

6.6. A mayor abundamiento, este colegiado destaca lo expresado en los Oficios Nros.
1155 SECC BREV MIL/EMG del 14 de octubre de 2009, y 14413-2009.-
MTC/15.03 del 9 de diciembre de 2009 (cuyo mérito probatorio ha sido ofrecido
por RÍMAC SEGUROS), que ratifican lo precedentemente expuesto. No
obstante, este colegiado deja expresa constancia que, en rigor, dichos oficios en
sí mismos no representan ni pueden interpretarse como normas de derecho que
permite sustentar el rechazo de …, ya que se trata de simples actos de
administración, dado que su base legal radica estrictamente en el artículo 50º del
Reglamento Administrativo Militar de Tránsito, de manera que el titular de un
brevete militar (tratándose específicamente de un suboficial) sólo está autorizado
para conducir vehículos militares dentro del territorio de la República, por lo que
dicha autorización no opera respecto de los vehículos particulares, menos de
servicio público. Este colegiado deja además constancia que dicha diferencia
entre el régimen aplicable al brevete militar de quien es oficial y de quien no lo
es, puede explicarse bajo la estructura de organización y funcionamiento de las
Fuerzas Armadas y Policiales, vertical por naturaleza, aunque ello resulte ajeno
y extraño para quienes no conforman dichos institutos.

Dado que la exclusión de cobertura pactada establece que no se cubren los daños
cuando el vehículo asegurado sea conducido por persona que carece de licencia de
conducir vigente y auténtica que corresponda al tipo de vehículo, este colegiado estima
que dicha situación fáctica se produjo con ocasión del siniestro, por cuanto el brevete
militar del asegurado no permite conducir el tipo de vehículo asegurado, particular, de
manera que la exclusión invocada está plenamente acreditada por RÍMAC SEGUROS y
es plenamente oponible porque las condiciones de cobertura (y exclusiones) han sido
conocidas oportunamente por el reclamante.
Sétimo: Por último, atendiendo a que en el reclamo se solicita la aplicación de algún
pronunciamiento que se haya expedido tratándose de algún caso similar al reclamado,
este colegiado deja expresa constancia que su posición sobre la existencia y vigencia del
régimen normativo privativo sobre los denominados brevetes o licencias militares para
conducir vehículos es invariable respecto a otros pronunciamientos, más allá del
régimen general sobre licencias de conducir expedido por el Ministerio de Transportes y
Comunicaciones, siendo que el sentido de lo resuelto finalmente está subordinado a una
serie de circunstancias y elementos de juicio relacionados a cada caso en particular, los
mismos que por su naturaleza no pueden aplicarse extensivamente.

Octavo: Conforme a lo expresado precedentemente, esta Defensoría del Asegurado


concluye su apreciación razonada y conjunta al amparo de lo establecido por el artículo
6 de su Reglamento, por lo que

Resuelve:

Declarar INFUNDADO el reclamo interpuesto por don … contra RÍMAC SEGUROS


con relación a la Póliza de Seguro Nro. …, quedando a salvo su derecho de recurrir ante
las instancias que considere pertinentes.

Lima, 15 de marzo de 2010

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