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Lección #9
EL DIEZMO Y LA OFRENDA
Esquema de la lección
ESCRITURAS PARA ESTUDIAR: Malaquías 3:8-12; Proverbios 3:9-10; 1 Reyes 17:8-16;
Lucas 6:38; 2 Colosenses 9:6
Lección #9
EL DIEZMO Y LA OFRENDA
Plan de Trabajo
Esta hoja debe ser llenada por todo el equipo ministerial. Se recomienda fotocopiarla
Fecha _____/_____/_____
1. Alabanza y Adoración
2. Anuncios
A. ________________________________________________________________
B. ________________________________________________________________
C. ________________________________________________________________
D. ________________________________________________________________
3. Ofrendas
4. Versículo a memorizar: Proverbios 3:9 “Honra al Señor con tus bienes, y con
las primicias de tus frutos”.
5. Drama: “No robe a Dios”
6. Drama: “ Vale la pena pagar”
7. Lección Objetiva: “Los primeros frutos”
8. Historia Bíblica: “Elías y la viuda de Sarepta”
9. Lección Objetiva: “Echa tu pan al agua”.
10. Llamado y ministración
11. Repaso
A.
B.
C.
D.
Lección:
La Biblia dice que honremos al Señor con nuestras riquezas, y que le demos a él
nuestros primeros frutos.
Pero, ¿qué significa darle a Dios nuestros primeros frutos? Esto significa, que nosotros
necesitamos pagar nuestros diezmos a Dios antes de hacer cualquier cosa con nuestro dinero.
Muchos niños no le dan a Dios sus primeros frutos. Estos es lo que algunos niños
hacen. Ellos reciben una cuota el día viernes, y lo primero que hacen es correr a comprar
caramelos al abasto (Pele el cambur y dele un mordisco)
Después que se come un caramelo va al kiosco de revistas y compra unas barajitas
(muerda otro poco de cambur). Después corren a donde está el heladero y compran un
hela de chocolate (Termine de comerse el cambur y deje solo la concha)
El día domingo cuando están recogiendo la ofrenda, estos niños se meten las manos en
los bolsillos, y lo único que le quedan son algunas monedas, y así dicen ellos: “Toma Dios,
aquí están mis sobras” (Tire la concha en medios de la clase)
Niños Dios no quiere sus sobras. Dios quiere tus primeros frutos. La primera cosa
que ustedes deben de hacer cuando reciben su cuota semanal, es apartar sus diezmos para
llevarlos a la iglesia.
Algunos niños no le dan a Dios de su propia plata. Ellos vienen a la iglesia y le piden a
su mamá para ofrendar.
Dele a Dios tus primeros frutos y no las sobras.
NO ROBE A DIOS
Personajes: Maestro y Ladrón.
MAESTRO: Niños, hoy nosotros vamos a hablar acerca de los diezmos. El Diezmo es
el 10% de tu sueldo o el dinero que recibes a la semana. Si tu tienes 100
bolívares entonces el diezmo son 10. El diezmo le pertenece a Dios. Si tu
no pagas tus diezmos, la Biblia dice que tu estás robando a Dios.
(Entra un ladrón)
LADRON: Okey, manos arriba!! ¿Dónde está él? (El ladrón corre a una esquina
del salón y apunta con la pistola a una persona invisible) Ya te tengo
acorralado. Dame toda la plata que tienes. Hey!! ¿Para dónde fue? (Mira
confundido por todo el salón)
MAESTRO: Mire señor ladrón, venga acá un momento, ¿qué está tratando de hacer?
LADRON: Bueno, estoy buscando a Dios para robarlo (en tono malandro)
MAESTRO: Tu estas tratando de robar a Dios? ¿Y por qué quieres hacer eso?
LADRON: Me han dicho que Dios es el más millonario del mundo. ¿Es correcto?
MAESTRO: Sí.
LADRON: Bueno, yo pensé que si robo a Dios, entonces seré el hombre más billetuo
del mundo.
MAESTRO: Claro que si la hay, (Abre la Biblia) en la Biblia dice que si tu no pagas
tus diezmos y ofrendas a Dios tú lo estás robando.
MAESTRO: Correcto. Pero aquí es donde está el detalle. Si tu robas a Dios, entonces
tu nunca prosperarás, sino que te vuelves más pobre. La Biblia dice que
eres maldecido si robas a Dios.
MAESTRO: Por supuesto. Pero si tu pagas tus diezmos y ofrendas, Él promete abrir la
ventana de los Cielos y derramar una bendición sobre ti.
MAESTRO: Okey, Muchas gracias señor ladrón, Chao. Niños, vale la pena pagar los
diezmos a Dios, no lo robemos.
Lección:
Cuando Elías era un profeta en Israel, hubo un periodo de aproximadamente tres años
durante el cual no llovió. En ese tiempo había mucha hambre en Israel por la sequía. Dios le
dijo a Elías que fuera a Sarepta. Y de esta forma el Señor le habló a Elías “Le he ordenado ha
una viuda que te dé de comer”.
Elías se levantó y se fue a Sarepta. Al llegar a la entrada de la ciudad, vió a una viuda
que estaba recogiendo leña. La llamó y le dijo: “Por favor, tráeme un pedazo de pan”. La
viuda le respondió: “No tengo más que un puñado de harina que tengo en la tinaja y un poco
de aceita que tengo en una jarra, y ahora estaba recogiendo un poco de leña para ir a cocinarlo
para mi hijo y para mí. Comeremos y después moriremos de hambre.
Elías le respondió: “No tengas miedo, y ve a preparar lo que haz dicho. Pero primero
con la harina que tienes, hazme una torta pequeña y tráemela, y haz después otra para ti y para
tu hijo. Porque el Señor Dios de Israel ha dicho, que no se acabará la harina de la tinaja ni el
aceite de la jarra hasta el día en que el Señor haga llover sobre la Tierra”.
La viuda fue, e hizo lo que Elías le había ordenado, y ella y su hijo, y Elías tuvieron
comida para muchos días. No se acabó la harina de la tinaja ni el aceite de la jarra tal como el
Señor lo había dicho por medio de Elías.
Niños, esta mujer viuda puso a Dios primero. Ella le dio a Dios sus primeros frutos, y
el Señor le suplió a ella su necesidad, y cuidó de ella. Necesitamos recordar de poner a Dios
primero, especialmente con nuestras finanzas, y el Señor se encargará de ustedes.
HENRY: (Un poco nervioso) Esteee... Gracias Jesús por el dinero para comprar las
entradas para ver el juego de béisbol.
(Entra cerebro)
CEREBRO: Se está acercando el día, Henry. El juego de pelota es dentro de tres días, y
todavía no tenemos la plata. Nosotros como que mejor le pedimos dinero a
nuestro hermano mayor.
(Entra corazón)
CORAZON: Un momento!! Nosotros no vamos a pedir prestado dinero a nadie, Henry.
Dios nos proveerá del dinero, porque nuestra fe funciona ¿Correcto Henry?
HENRY: Sí. Yo lo creo, pero... pero el juego de pelota es dentro de tres días.
(Cerebro se anticipa)
CEREBRO: ... Dos días, veintitrés horas y cincuenta y seis minutos.
CORAZON: No más peros acerca de esto. El dinero vendrá!!
(La señora Ramírez entra)
HENRY: Hola Señora Ramírez, ¿cómo está usted?
SEÑORA: Bien Henry, y por cierto ¿estás muy ocupado hoy?
HENRY: Bueno, realmente no ¿por qué?
SEÑORA: Porque necesito a alguien que me corte la grama. Te daré 1000 bolívares si lo
haces.
CORAZON: Hazlo!!
CEREBRO: Son 1000 bolívares, hazlo.
HENRY: Lo haré
SEÑORA: Muy bien Henry.
CORAZON: Yo sabía que el Diablo era bruto, pero con lo que escuchado, es más bruto de
lo que esperaba. Un diezmo es la décima parte de lo que recibes. Hoy tu
recibiste 1000 bolívares; entonces los primeros 100 bolívares van para el Señor.
HENRY: Entonces eso es el diezmo?
CORAZON: Si. Y cuando nosotros pagamos nuestros diezmos, Dios abrirá la ventana de los
Cielos y derramará una bendición grande sobre nosotros. Él también prometió
proteger las cosas que poseemos.
CEREBRO: Por lo que puedo ver, diezmar es una buena inversión. Henry debemos diezmar
100 bolívares antes de que compremos cualquier cosa.
DIABLO: Tonto, no lo hagas! No ves que solo te quedarán 900 bolívares.
CORAZON: Si, pero cuando nosotros damos vamos a recibir más.
CEREBRO: Yo sabia que esta era una buena inversión.
CORAZON: Nuestros primeros 100 bolívares van para el Señor.
DIABLO: Me rindo. No hay manera. Este superman, digo Corazón es más fuerte que yo.
Voy a tratar de mentirle a otra persona. (El diablo sale)
HENRY: Que bien!! Hoy voy a diezmar.