Bendice a tus Hijos Diariamente

Dra. Mary Ruth Swope

QDROS, ministries 7 Kairos Ministries P.O. Box 0093 Jenison, MI 49429-0093 Título
original en Inglés: Bless Your Children Everyday, O 1992 por Swope Enterprises, Lone Star,
TX 75668
The Bates Enterprises Trust P.O. Box 398 Avinger, TX 75630-0398
Tercera edición en español, revisada y ampliada 42002 por Mary R. Swope y publicada por
Kairos Ministries, P.O. Box 0093 Jenison, MI 49429-0093
E-mail: minkairosQaol.com
Todos los derechos reservados. Ninguna parte de este libro puede ser reproducida, por
ningún medio, sin el permiso escrito de la casa editora.
Carátula y fotografía: Adriana Kuhar Traductores: Héctor P. Torres y Lina Herrera
ISBN: 958-33-8020-2 32* Edición - Junio 2008 Impresor: Editorial Kimpres Ltda. Bogotá,
Colombia
Dedicatoria
Este libro lo dedico en primer lugar a mi
nieto, José Daniel Dabro, quien nació el 29 de abril de 1985.
También va dedicado a todos los padres y
abuelos del mundo que anhelan tener una influencia sobrenatural en sus hijos y nietos,
aunque estén separados de ellos por la distancia.
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nt Reconocimientos
La idea de escribir este pequeño libro nació como una inspiración. Sin embargo, al
comparar ésta con mis anteriores experiencias de escribir y publicar, me sorprendió ver
cómo todo salió tan bien y tan rápido. No parecía que fuese realidad.
He aquí algunos amados amigos quienes hicieron valiosas contribuciones.
e Elise Michelle Darbro, mi nieta;
e Elisabeth Chambers, una artista
inglesa;
• Peter Chambers, mi revisor;

• Leigh Knowles, una artista de Illinois;

• Dick y Christine Deitsch, mis amigos;

• Charlotte Bates, mi asistente;

• Val Cindric, mi editor;

• Susan Cornwell Darbro, mi hija.

Y como siempre, quiero expresar mi agradecimiento a Dios por darme la vida, salud y
fortaleza al igual que por mis años de educación y experiencia necesarias para realizar un
trabajo como éste.
Contenido
Primera Parte: El concepto de bendecir
CÓMO COMENZÓ CONMIDO ocooo.............. M El origen de las bendiciones de Dios ....... 16 El
poder de la bendición ............................ 18 Pongamos en acción Su promesa de DONARCA
cccocnocoicioninicinanicucicnonaninininons 20 Promesas de bendición ............................ 23
Bendice a tus hijos y nietos ...................... 27 Una bendición para padres y abuelos ... 29
Bendecir trae su recompensa .................. 30
A la Doctora Mary Ruth Swope; A Mary Ruth Swope; A mi abuelita ..... 30
Segunda Parte:
El contenido de la bendición POIICIOOOS arica 36 PAUTA rc eS SO O 37 MA a cent O 38 o A
39 AO diaria 40 AA tc RRA 41 Sentido de dirección ooo... cc... 42 Un hablar controlado
................................ 43 Ms A A A A A 44 La mente de CriStO ccoo 67 CEA PIETER 45 Ministerio
AO 68 bal is diri ss naaa 46 A 69 vida lema 00 0 ¿200% Dis 47 AA 70 DOS UAEM.
ietedernnenes 48 Mi. Broad ORIO CEoO O 49 PR ccoo 7 Palabras placenteras
................................ 72 PEO sonata nd AO 50 Personalidad agradable ........................ 73 timo diana
2 0400.18 ZOCIODr 51 Alabanza mr 74 Un espiritu libre .............oonccnlalla 52 Promoción
ens 75 ISA SOA sicio AESAAARARE 53 PrOSPeridad ...........ccomrcimrmsics 76 UN ESPOSO
AMOTOSO cccnnninnnnnninnnnnnnnns 54 OCN sra 77 Manos que bendicen
................................ 55 o ici. Re anal 56 PLOVISIÓN ccoo 78 SOQUIIAAA ccoo
ciococonoccocoroccononononcnncnnnns 79 Sántidalc ia 2 ALA 57 Podet espiritu!
..........cicincrninarricmanrens 80 Ep cardos eras asma 58 Fuerza eras 81 Espíritu Sañtoa tina
banner os 59 Exito. AA EE 82 Humidiibaad: ells ohinateaol.. 60 EA corra 83 Gozo Eon, E ad
al Ebcutlcaras. roidercado LA. 61 Sabiduría AAA A AR EAS 84 OÍdOS QUe escUCheN
cococcococccccicciocccinoso 62 lwrgenidad ia arras 63 Tercera Parte:El fruto de la
bendición e EI A 64 Los resultados (Una serie de UNA DUBNA ESPOSO...
coococccnccoionociciccininnnnicons 65 TOSHIMONIOS) occoconinionicioninicionicncno 87
ISC inicio llo ceci 66 rl or mM AAA A Primera Parte
El concepto de bendecir Cómo comenzó conmigo
Una mañana, durante mi tiempo de oración, estaba pensando en José Daniel, el Único hijo
que tiene mi hija y en lo lejos que yo vivo de ellos. Me entristecí al pensar que no tendría la
oportunidad de influir en el desarrollo de su vida espiritual, social, emocional ni física de la
misma manera como influyó en la mía mi abuela materna.
Desde los seis meses de edad, cuando mi abuela Lutz vino a vivir con nosotros, me leía
historias, jugaba y oraba conmigo, al igual que me ayudaba a memorizar poesías. Tengo
gratos recuerdos de las horas felices que pasamos juntas mientras me enseñaba a coser y a
hacer distintas clases de tejidos.
Mi abuela llegó a ser un modelo para mí y observándola aprendí lo que significa ser una
sierva y líder cristiana en la comunidad. Ella no solo acostumbraba a enseñar en la escuela
dominical frecuentemente, sino que tomaba parte activa en los grupos de damas de la
iglesia, a la vez que también servía en
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A... los comités de varias organizaciones comunitarias. Mientras pensaba en su vida y en el
tremendo impacto que tuvo en la mía, deseaba hacer lo mismo con Daniel, mi precioso
nieto de siete años. Por la gran distancia que nos separaba, no me era posible estar con él
frecuentemente.
Entonces me acordé del testimonio de un pastor bautista que había visitado nuestra iglesia
hacía varios años. Este hombre nos contó cómo en su deseo de conocer a Dios con mayor
profundidad, poco tiempo después de empezar a acercarse más a Él, fue lleno del Espíritu
Santo. No pudiendo encubrir más esta experiencia, se la contó a un íntimo amigo.
Al domingo siguiente cuando llegó a la iglesia, el pastor se sorprendió al ver que el
presidente del comité de diáconos le estaba esperando. «Tan pronto usted termine el
sermón a las once de la mañana, queda despedido», dijo el diácono. «No podemos dejarle
ministrar más aquí en esta iglesia».
Asombrado por la noticia tan abrupta de su despedida y con el corazón quebrantado por la
manera tan desconsiderada en que se le comunicó, el pastor quedó deshecho. Para
empeorar la situación, muchos de los
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AAA a. AAA AAA
ministros de la región se alejaron de él, por lo cual se sintió solo y aislado.
No obstante, días después, el rabino judío de la ciudad, quien era uno de sus buenos
amigos, vino a expresarle solidaridad en esa desafortunada situación. «Quiero hacer algo
más que acompañarte en tu tristeza», le dijo el rabino. «He venido a bendecirte».
Esas palabras fueron cobrando un profundo significado espiritual a la medida que el rabino
compartía con él las tradiciones de los padres judíos en cuanto a bendecir a sus familias.
«Creo que la bendición de Dios hacia el pueblo judío es resultado directo de la tradición de
bendecir a sus hijos, que los padres judíos han practicado constante- mente», dijo el rabino,
resaltando algunos hechos como el que la mayoría de los nominados para recibir el Premio
Nobel han sido hombres y mujeres judías y que un gran porcentaje de los millonarios en los
Estados Unidos y en otros países también lo son.
Como resultado de la visita del rabino, el pastor comenzó a estudiar en Las Escrituras el
fenómeno de la bendición. Poco tiempo después, comenzó a enseñar a otros padres
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¿ a bendecir diariamente a sus esposas e hijos y así se le abrieron nuevas oportunidades
para ministrar por todo el país.
Su testimonio y las palabras del rabino vinieron a mi mente mientras me preguntaba cómo
podría tener una influencia positiva en la vida de mi nieto.
Pensé: «¿Por qué no bendecir a mi nieto cada vez que hable con él por teléfono? Esa sería
una forma de impartir mis valores personales y espirituales a Daniel, aún cuando no pueda
estar presente físicamente con él».
Inmediatamente, empecé a escribir lo que posteriormente se ha convertido en este libro, el
cual recopila bendiciones de Dios para nuestras familias.
A la siguiente vez que hablé por teléfono con Daniel, le dije que quería bendecirlo. El
escuchó atentamente y respondiendo dulcemente dijo: «Gracias, abuela».
Cuatro días después, le di la segunda bendición. La tercera vez que llamé, estaba lista para
despedirme cuando él preguntó: «Abuela, ¿me vas a bendecir hoy?».
Mi corazón saltó dentro de mí, al darme cuenta que Dios me estaba confirmando
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que para mi precioso nieto las bendiciones significaban mucho.
Ahora, bendigo frecuentemente a Daniel por teléfono, enfocándome en áreas diferentes de
su cuerpo, su personalidad y sus necesidades espirituales, físicas y emocionales.
Definitivamente, me siento más cerca de él.
Mi anhelo es que otros padres y abuelos experimenten el mismo gozo que yo he tenido al
seguir este método bíblico de decir en voz audible una corta bendición.
El propósito de este libro es animar a los padres y abuelos a bendecir a sus hijos y nietos en
el Santo nombre de Dios. Él es quien perdona todo pecado; él es quien sana nuestro cuerpo,
alma y espíritu; él es quien nos rescata del infierno y nos rodea con tiernas misericordias y
con Su cariño.
Podemos esperar que Dios haga cosas grandes y maravillosas cuando reclamamos las
promesas de Su Palabra para nuestros seres queridos. En la medida en que bendigas a tus
hijos en el nombre del Señor, podrás ver cómo Dios llena su vida de cosas buenas y trae
completa salvación no solo sobre ellos sino sobre los hijos de tus hijos
(Salmo 103). 15 El origen de las
bendiciones de Dios
Una vez que descubrí la maravillosa experiencia de bendecir a mi nieto, decidí estudiar en
Las Escrituras sobre el origen de las bendiciones para conocer el concepto bíblico acerca de
ellas. Al escudriñar mi Biblia, pronto me fue claro que el soberano Dios del universo fue
quien inició la acción de bendecir. Fue idea Suya y no del ser humano.
En los primeros 34 versículos de la Biblia, encontré la palabra bendicióntres veces. En
Génesis 1:22, vemos que Dios bendijo a las grandes criaturas del océano, a toda criatura
que vive en el agua, a los pájaros que vuelan, e impartió su bendición diciendo: «...Que
tengan muchas crías y llenen los
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mares, y que haya muchas aves en el mundo».
luego que Dios creó al ser humano, hombre y mujer, a Su imagen, los bendijo diciendo:
«... Tengan muchos, muchos hijos; llenen el mundo y gobiérnenlo; dominen a los peces y a
las aves, y a todos los animales que se arrastran» (Gn. 1:28).
La palabra bendición aparece por tercera vez en Génesis 2:3: «Entonces bendijo el séptimo
día y lo declaró día sagrado, porque en ese día descansó de todo su trabajo de creación».
En estas tres ocasiones Dios imparte Su bendición con el fin de consagrar y separar para un
propósito especial a:
• las criaturas que Él creó por Su
Palabra (los peces y las aves], + las criaturas que Él creó por Su obra (varón y hembral,
• elséptimo día de la semana, Su día
de descanso (y el nuestro).
Dios tenía una razón para instituír la bendición. El bendecir era necesario para el
cumplimiento de Su propósito y de Su plan para el ser humano aquí en la tierra. Sabiendo
que la caída de Adán llevaría a la raza humana a
17 la muerte, y no a la vida, Dios instituyó un pacto; un acuerdo formal con validez legal
ante las potestades espirituales: la bendición, garantizando así al ser humano que el éxito
está en recibir Su bendición.
El poder de la bendición
En cada bendición de Dios narrada en Las Escrituras, siempre hay una unción especial; un
impacto de poder sobrenatural que esencialmente capacita para un propósito. Así, las
bendiciones de Dios:
• hicieron posible las cosas imposibles;

• dieron poder, directrices y habilidad «sobrenatural» para vivir de acuerdo con la

voluntad de Dios;

• dieron autoridad espiritual a la humanidad.

Nuestro antecesor Abraham, fue el primer hombre en recibirlas bendiciones del pacto con
Dios. En él se encuentran siete promesas según Génesis 12:2-4:
• te haré una nación grande;
e te bendeciré;
e haré tu nombre grande;
• serás bendición;
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• bendeciré a los que te bendigan;

• maldeciré a los que te maldigan;

• serán benditas en ti todas las familias de la tierra.

¿No es esto poder sobrenatural y suficiente para que vivamos? Seguro que sí; es suficiente
poder para ayudarnos a vivir una vida exitosa y consagrada a Dios. ¡Con razón el enemigo
de nuestra alma no quiere que aprendamos a bendecir en general y menos a nuestros hijos!
No permitamos que Satanás nos robe este gran privilegio. Como herederos del Reino,
debemos aprender a utilizar nuestra autoridad como creyentes y reclamar la rica herencia
prometida para nuestros hijos y nietos.
19 Pongamos en acción Su promesa de bendecir
¿Cómo podemos lograr ser partícipes de ese mismo pacto y de esas mismas promesas
hechas a Abraham? ¡Activando el poder de la bendición! Cuando expresamos verbalmente
palabras de bendición basadas en la Palabra de Dios, estamos colaborando para que la
promesa que Dios ha hecho de bendecirnos, se haga realidad.
Recuerda, la misma promesa que Dios le dio a Abraham también nos ha sido dada a
nosotros como simiente que somos de él. «Y todas las naciones del mundo serán
bendecidas por medio de ellos, porque me has obedecido» (Gn. 22:18).
La fuente de toda bendición en el mundo es Dios el Padre y puede ser nuestra a través de
Su Hijo Jesucristo. Cuando recibimos a Jesús como nuestro Salvador y Señor, llegamos a ser
hijos de Dios y simiente de Abraham.
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Como miembros de la familia de Dios, tenemos todo el derecho de recibir las bendiciones
dadas a nuestro padre Abraham. Por tanto, como él y nuestros antepasados lo hicieron,
podemos pasar las bendiciones del Señor a nuestros hijos y nietos.
El hijo de Abraham, Isaac, bendijo a sus hijos Jacob y Esaú en una forma muy práctica,
invocando sobre ellos «la lluvia del cielo, las mejores cosechas de la tierra, mucho trigo y
mucho vino» (Gn. 27:28,39).
Jacob, cuando estaba ya para morir, reunió a sus doce hijos y pronunció palabra profética
sobre cada uno de ellos de acuerdo a su carácter individual. El bendijo a cada uno con la
bendición apropiada para ellos (ver Génesis 49:28).
Creo que así es como debemos bendecir a nuestros hijos y nietos: con bendiciones
apropiadas para ellos y especialmente designadas conforme a su edad, carácter,
personalidad y talentos. Debemos procurar que nuestras bendiciones estén de acuerdo con
las promesas de Dios y que estén en armonía con Sus planes y propósitos para aquel a
quien estamos bendiciendo.
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Recuerda, la meta más importante para nuestros hijos y nietos es que traigan gloria a Dios en todo lo que digan y
hagan. Si mantenemos esto en mente, entonces nuestras bendiciones no serán egoístas o de naturaleza mundana.

Nuestro Padre celestial ha provisto una herencia maravillosa para sus hijos. Nos ha dado
todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad: lo físico, lo espiritual, lo material y lo
personal. Nada ha sido omitido para ayudarnos a tener todo lo que necesitamos para una
vida verdaderamente provechosa. Más aún, Él promete compartir con nosotros Su misma
gloria y bondad (ver 2* Pedro 1:3,4).
Dios quiere que nosotros disfrutemos de Sus bendiciones, las cuales recibiremos siempre y
cuando tengamos entendimiento de las muchas promesas que hay para nosotros, como
herederos que somos por medio de la fe en Jesucristo. Afortunadamente el libro Preciosas
Promesas Bíblicas, provee una lista de más de 37.000 promesas que Dios nos hizo como
hijos suyos (ver el apéndice).
Además de reclamar las promesas encontradas en las Escrituras, yo
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acostumbro emplear los nombres de Dios en hebreo para recordar el gran poder de Dios y
Sus muchas provisiones. Permíteme compartirte algunas de ellas. (Tomadas del Diario de
Oración de Larry Lea: [¿No pudiste velar conmigo una hora?], «Could You Not larry One
Hour»
Promesas de bendición
• Por medio de Jehová-tsidkenu hemos sido hechos justos. «Cristo no cometió pecado
alguno; pero por causa nuestra, Dios lo trató como al pecado mismo, para así, por
medio de Cristo, librarnos de culpa» [2 Co. 5:21).
• Pormedio de Jehová-m' Kaddesh, somos santificados, hechos santos, separados para
Sus propósitos. «Que Dios mismo, el Dios de paz, los haga a ustedes perfectamente
santos, y les conserve todo su ser, espíritu, alma y cuerpo, sin defecto alguno, para la
venida de nuestro Señor Jesucristo» (1 Ts. 5:23).

• Pormedio de Jehová-salom, se nos ha dado paz. «Así Dios les dará su

23
nn paz, que es más grande de lo que el hombre puede entender, y esta paz cuidará sus
corazones y sus pensamientos, porque ustedes están unidos a Cristo Jesús» (Fil. 4:7). Por
medio de Jehová-sama, la presencia de Cristo está con nosotros y en nosotros. «¿Acaso no
saben ustedes que son templo de Dios, y que el Espíritu de Dios vive en ustedes?» (1 Co.
3:16).
Por medio de Jehová rafa, recibimos sanidad o sea que tenemos salud divina. «Bendeciré al
Señor con toda mi alma; no olvidaré ninguno de sus beneficios. El es quien perdona todas
mis maldades, quien sana todas mis enferme- dades» (Sal. 103:2, 3).
Por medio de Jehová-¡ireh, la provisión del Señor será vista. «Repite siempre lo que dice el
libro de la ley de Dios, y medita en él de día y de noche, para que hagas siempre lo que éste
ordena. Así todo lo que hagas te saldrá bien» Jos. 1:8)
• Por medio de Jehová-nisi Jehová es mi bandera; siempre tengo la victoria. «Pero
gracias a Dios, que. nos da la victoria por medio de nuestro Señor Jesucristo»
(1Co.15:57)
e Por medio de Jehová-rohi Jehová es mi pastor. Tengo seguridad pues éles mi guía. «Mis
ovejas reconocen mi voz, y yo las conozco y ellas me siguen. Yo les doy vida eterna, y jamás
perecerán ni nadie me las quitará» (Un. 10:27,28).
• Por medio de Jehová-sabaot se suplen todas nuestras necesidades y tenemos completa
victoria. «Si Dios no nos negó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó a la muerte por
todos nosotros, ¿cómo no habrá de darnos también, junto con su Hijo, todas las
cosas?» (Ro. 8:32).
Por medio del nombre de Dios, se nos ha provisto con todo lo necesario para que podamos
recibir bendición en esta vida, para recibir la salvación y experimentar la vida eterna. ¡Dios
suple para satisfacer nuestras necesidades en un ciento por ciento!
25 En la medida en que consideramos las maravillosas bendiciones y promesas que Dios
tiene disponibles para nosotros, la alabanza fluye de nuestros corazones y clamamos como
el salmista: «Reconozcan el poder de Dios: su majestad se extiende sobre Israel, su poder
alcanza el cielo azul. Maravilloso es Dios en su santuario; el Dios de Israel da poder y fuerza
a su pueblo ¡Bendito sea Dios!» (Sal. 68:34,35).
Bendice a tus hijos y nietos
Una vez nos apropiemos de las bendiciones y promesas de Dios para nuestra vida (las
cuales abarcan todas las esferas), y aprendamos a reclamarlas, tendremos la
responsabilidad de pasar estas bendiciones a nuestros seres queridos.
Si eres padre o abuelo y perteneces a la familia de Dios, por la fe en la sangre de Jesucristo,
tienes autoridad espiritual sobre tu hogar. Tienes autoridad y poder para bendecir la vida
de tus hijos y nietos.
Cuando bendices a alguien con tus palabras, la bendición se activa por el poder de Dios.
Cuando expresas verbalmente lo que Dios desea que hables, la vida de tus hijos y nietos
comienza a transformarse y a cambiar según tus palabras. Por eso hay que tener
cuidado con lo que dices cuando les - impartes tu bendición; debes ser positivo. No
olvides que una vez dichas las bendiciones,
ningún hombre o ningún poder de las
tinieblas podrá detenerlas ni contradecirlas 27
O (lee la historia de Jacob y Esaú en Génesis 27).
El mismo Señor Jesucristo nos da el mejor ejemplo de cómo bendecir a nuestros hijos.
Cuando los padres traían sus hijos ante Jesús para que los «tocara», Él, «...Y tomó en sus
brazos a los niños, y los bendijo poniendo las manos sobre ellos» (Mr. 10:13,16).
El Nuevo Testamento habla ampliamente de la «imposición de manos» por la cual se
imparte un don especial o una unción. Creo que es importante, cuando sea posible, que
toques a tus hijos con suavidad y ternura mientras impartes tus palabras de bendición.
Con el fin de ayudarte a que comiences, presento a continuación ejemplos de bendiciones
que he impartido a mi nieto. Son 49 bendiciones, una para cada día durante siete semanas.
Estoy segura que en la medida en que esto llegue a ser un hábito
en tu vida, tus bendiciones serán más Y
personales y específicas y empezarás a observar cambios maravillosos en la vida de los
miembros de tu familia. Es mi oración, desde ahora hasta que Cristo regrese, que seamos
encontrados 28
entre esos padres y abuelos que diariamente bendicen a sus hijos y nietos.
Ahora bien, permíteme bendecirte antes de que comiences.
Una bendición para padres y abuelos
«El Señor te bendiga y te guarde, haga resplandecer Su rostro sobre ti y te conceda lo que
pides, vuelva hacia ti Su rostro, y te dé la paz».
Tu has sido escogido para ser posesión Suya. Él es Dios, Él es fiel, Él guarda Su pacto y Su
misericordia de generación en generación para aquellos que le aman y obedecen Sus
mandamientos. El Señor guardará Su pacto de amor contigo, porque tu eres santo para Él,
tu Dios y tu Señor.
Permite que las bendiciones que impartas por fe en el nombre de Jesucristo, descansen
sobre la cabeza de tus amados hijos ahora y por el resto de su vida.
29 Bendectr trae su recompensa
A la Doctora Mary Ruth Swope; A Mary Ruth Swope; A mi abuelita Hace nueve años, cuando
yo tenía apenasl12 años, mi padre se casó con mi madrastra. Fue entonces cuando conocí a
la Dra. Mary Ruth Swope, la mamá de mi madrastra. Al principio me dio la impresión de
que era una mujer de negocios, que estaba siempre ocupada escribiendo libros, dando
enseñanzas sobre nutrición y viajando por todo el país para hacer presentaciones públicas
en radio y televisión. Pero hace aproximadamente tres años, durante un tiempo turbulento
en mi vida, Mary Ruth Swope, la mujer que yo veía tan distante, vino a ser un faro de luz en
mi oscuridad. Ella, muy amablemente me invitó a vivir en su casa lo cual nos dio la
oportunidad de conocernos más profundamente hasta llegar a ser mucho
más que conocidas; verdaderas amigas. En la medida en que pasúbamos tiempo juntas
aprendí que podía confiarle los
30
secretos de mi corazón. El compartir mis sentimientos y pensamientos íntimos
inevitablemente provocó en ella respuestas prácticas dándome sugerencias para sopesar
mis problemas, y palabras de esperanza para alumbrar mis pensamientos OSCUFOS.
Mary Ruth llegó a ser mi confidente, mi guía, mi protectora, mi amiga y mi abuela, aunque
no teníamos una relación sanguínea que conectara nuestras vidas. Pero más que todo, llegó
a ser un reflejo vivo del mismo amor y guía encontrados en Cristo Jesús.
Habían trascurrido solo tres meses de mi estadía con ella, cuando le pregunté si le podría
llamar abuelita. Ella cariñosamente me aceptó como su Única nieta.
Durante el tiempo cuando más desolada estaba, me lanzaba en sus brazos y ella me
abrazaba pidiéndole a Dios que derramara el aceite de gozo sobre mi mente y mi corazón.
No alcanzaba a darme cuenta que estas oraciones transformarían mis inqui- etudes en paz.
Sus palabras estimularon mi mente y se asentaron en mi quebrantado espíritu, de una
manera que nunca antes
31
—————— € ———— dit
había experimentado ni creía que fuese posible.
Cuando mi abuelita oraba, normalmente comenzaba con acción de gracias y luego
proseguía con un espíritu de quietud delante de Dios. Nuestras peticiones se centraban en
que mi mente se abriera al divino significado de mi vida.
Cada oración que mi abuelita hacía conmigo era una bendición en sí misma, porque yo
siempre terminaba pensando con mayor claridad acerca de mí misma, de mi
lugar en el mundo y de mi relación con Dios.
Al quinto mes de mi estadía con mi abuelita quien oraba por mí constantemente, sentí una
calma especial sobre mi espíritu. La confianza que había crecido entre nosotras ahora me
inspiraba a orar sin ella, y pronto descubrí que a través de la oración, adquiría confianza
para recibir el fruto del Espíritu encontrado en Cristo Jesús.
Además de las muchas oraciones que mi abuelita adornaba con acción de gracias e
¡impresionantes bendiciones, su conocimiento profundo de Las Escrituras también tuvo
una tremenda influencia en mi
32
vida. Al comienzo de mi estadía con ella, la abuelita me leía pasajes de la Biblia. Cada pasaje
se aplicaba a mi situación y me servía como consuelo y como guía práctica en la confusión
de mis situaciones diarias. La Palabra de Dios me ayudó a encontrar significado en mi caos
personal.
A pesar de sus múltiples ocupaciones, siempre tenía tiempo para mí por lo cuál estoy
agradecida. Hasta el día de hoy dedica tiempo para revelarme las verdades fundamentales
encontradas en la Biblia. Una de Las Escrituras que compartió conmigo y que más recuerdo
es Filipenses 4:6,7: «No se aflijan por nada, sino preséntenselo todo a Dios en oración;
pídanle, y denle gracias también. Así Dios les dará su paz, que es más grande de lo que el
hombre puede entender, y esta paz cuidará sus corazones y sus pensamientos, porque
ustedes están unidos a Cristo Jesús».
Mi Abuelita también tiene sus propias palabras de sabiduría. Cada vez que yo le decía que
mi vida era triste, ella decía: «La batalla de la vida está en la mente, Elise». Ahora entiendo
esta frase y la recuerdo du- rante mis momentos de incertidumbre.
33
TT AqA7>7AAA 2 A Por medio de su amor hacia mí, de su vivo ejemplo, de su paciencia
para conmigo (de la cual tiene un gran depósito), de su preocupación por otros, su vitalidad
por vivir y su contagioso sentido del humor, he experimentado una renovación en mi vida.
Hoy, la casa de mi abuelita es mi hogar fuera de casa. Desde mi primera estadía con ella en
1990, he regresado a visitarla cada verano. Estaré etemamente agradecida al Señor por
haberla usado en mi vida cuando yo estaba más necesitada de ternura. A través de sus
lecturas de la Palabra de Dios y de su ejemplo, mis actitudes cambiaron. Por medio de sus
oraciones, mi espíritu ha logrado la sanidad. ¡Te quiero, abuelita!
Dios bendiga a todo el que lea este libro y que los niños, en cualquier lugar y de cualquier
edad, sean transformados por el Espíritu de Cristo quien lo ha inspirado.
Elise Michelle Darbro
Segunda Parte
El contenido de la bendición
Habilidades
En el nombre de Cristo Jesús:
Te bendigo para que tengas el poder de ver con claridad las habilidades especiales que Dios
te ha dado. Que llegues a ser un trabajador competente en el campo laboral para el cual
Dios te ha creado.
Mirate a ti mismo como una persona con muchos talentos escondidos. El Espíritu Santo
está dispuesto a ayudarte a entender y a desarrollar tus dones; por tanto, no temas pedirle
Su ayuda.
Que los dones y el fruto del Espíritu Santo sean evidentes en tu vida para ayudar a otros. Te
bendigo con la unción de Dios para que se cumpla el propósito especial que Él tiene para tu
vida.
So
Mateo 25:14-30 XX Romanos 12:4-8 MATT E y
Abundancia
En el nombre de Cristo Jesús:
Te bendigo con abundancia de bienes los cuales Dios ha ordenado que poseas y uses. Que
siempre tengas suficiente para prestar a muchas personas, sin que tu necesites pedir
prestado.
Que el Señor prospere la labor de tus manos, el fruto de tu cuerpo, el aumento de tus
inversiones de tiempo y energía, y el fruto de tu tierra. Él te bendecirá con abundancia.
Xx
MTI UNA A A) p0 EUA
37 Angeles En el nombre de Cristo Jesús:
Te bendigo con una hueste de ángeles activos a quienes Dios creó para guardar y rescatar a
aquellos que le reverencian. Desde el cielo Él envía estos espíritus ministradores para
proteger a Sus hijos de peligro y para defenderlos de sus enemigos.
Los ángeles asignados a ti en el cielo tienen constante acceso a tu Padre celestial y Él les
ordena que te protejan en dondequiera que vayas. Durante toda tu vida, ellos te sostendrán
con sus manos para que no tropieces a lo largo del camino.
Por tanto, no temas; guerreros invisibles caminan a la par contigo.
Seguridad
En el nombre de Cristo Jesús:
Te bendigo con la seguridad de que Dios irá en busca tuya si estás perdido, te vendará si
estás herido y te fortalecerá si estás enfermo. Ciertamente, Él siempre te buscará como a
una de sus ovejas y te llevará a un lugar seguro si te desvías del camino recto.
Nunca te dejará ni te desamparará; el Señor es tu ayudador, por lo tanto no temas. Ojalá
que tú, el amado del Señor, descanses seguro en Él porque Él te acercará a sí mismo con
amoroso cuidado y te preservará de cualquier daño.
Ten la seguridad de que Dios cumplirá lo
que ha prometido.
EAT E AA A MITA
TAL: E] pa MITIN URI MIR E AE IT OEA
Autoridad
En el nombre de Cristo Jesús:
Te bendigo con la revelación de que Dios te ha dado autoridad sobre toda fuerza del
enemigo (Satanás), y nada por ningún medio te dañará. Ninguna arma forjada contra ti
prosperará.
Has sido creado para tener dominio sobre las obras de las manos de Dios, las cuales han
sido sujetadas bajo tus pies.
Por tanto, no temas, no tengas miedo. Puedes tener victoria sobre el enemigo de tu alma. Es
la voluntad de Dios librarte del mal.
Hijos En el nombre de Cristo Jesús:
Te bendigo con la bendición de Dios dada a Adán y a Eva cuando les dijo: «Fructificad y
multiplicaos, llenad la tierra y sojuzgadla».
Los hijos son un regalo de Dios y son como flechas en las manos de un guerrero. Ellos te
defenderán. Los hijos son como olivos plantados alrededor de tu mesa. Sí, tu vivirás y verás
los hijos de tus hijos y paz habrá sobre tu casa.
Tu familia obtendrá el favor del Señor. En el nombre de Cristo, el Señor, te bendigo con
hijos sabios y obedientes.
S
Salmo 8:6-8 MA Isaías 54:17 IMITAR:
TA ESTAN Proverbios 23:24 Isaías 54:13
40
41 Sentido de dirección
En el nombre de Cristo Jesús:
Bendigo tu salida y tu entrada hoy y para
siempre. Considera el camino de tus pies y no voltees ni a derecha ni a izquierda del camino
que Dios ha dispuesto para ti.
Que tengas un claro sentido de dirección del camino por el que debas avanzar hoy. Si le
permites a Dios dirigir tu vida, Él se deleitará con cada paso que des.
Que entiendas las lecciones que el Señor trata de enseñarte a través de las cosas que
permite que te sucedan. Si te mantienes en el camino de Dios, tu vida se llenará de gozo y
felicidad.
E
Salmo 32:8; 37:23; 121:8; 143:8,10 XX Proverbios 4:21-23,26; 8:20
Un hablar controlado
• En el nombre de Cristo Jesús:
Bendigo tu hablar y tu forma de expresarte. Te bendigo para que aprendas temprano en la
vida a sopesar tus palabras y a medir tus pensamientos antes de que salgan de tu boca.
Tulengua hablará palabras buenas para afirmar y bendecir a aquellos que las escuchen. Tu
lengua siempre dirá la verdad en amor y hablará a otros de cosas buenas. Constantemente
encontrarás formas de expresarte de tal manera, que produzcas alegría en otros.
Sin falta, tu lengua será usada para glorificar a Dios y edificar tanto a tu familia como a tus
amigos. Con ella, alabarás a tu
Dios todos los días de tu vida. y
AR Efesios 4:15 Santiago 3:4
Valor Creatividad
En el nombre de Cristo Jesús: En el nombre de Cristo Jesús:
Te bendigo con valor para enfrentar e Declaro que en ti habita el espíritu de miedo y con la
capacidad de creer que Dios creatividad porque has sido creado a es tu refugio y fortaleza.
No temerás ni té imagen y semejanza del gran Creador, aterrorizarás porque el Señor tu
Dios vd Hacedor del cielo y de la tierra. Él es quien te delante de ti; nunca te dejará ni té da
ideas para diseñar, construir y ejecutar. desamparará. Deja que Dios llene tu imaginación
con
Todo lugar que pise la planta de tus pies pensamientos creativos los cuales, una vez será
lugar de victoria para ti. Nadie podrá realizados, le glorifiquen a Él y sean de hacerte frente
en todos los días de tu vida. bendición a los demás.
El temor es contrario a la fe y Dios no te Que la hermosura del Señor nuestro Dios
ha dado el espíritu de temor. Te hd te inspire para que establezcas la obra de bendecido
con poder, amor y una mente tus manos.
sana. Esa es la esencia del valor.
INTE ORA CIEN EY
Josué 1:3,5 pe A Salmo 90:17; 146:5,6
Liberación Vida eterna
En el nombre de Cristo Jesús: En el nombre de Cristo Jesús:
Verás cómo Dios te libera del mal y d Tebendigo con la divina promesa de vida aquellos que
se levantan en contra tuya. F'8lerna, la cual se encuentra en Cristo Jesús Dios eterno es tu
refugio y los brazos de ff Nuestro Señor. El que cree en el Hijo tiene el Padre celestial te
sostendrán eternamente Testimonio de esta vida en sí mismo. Será El arroja a tus enemigos
de delante de ti. Fde aquellos que han creído en el Señor
Dios omnipotente es tu escudo y tu gloriosh Jesucristo y reciben la salvación. espada. Un
día verás el rostro de Dios y Su
Tus enemigos se humillarán ante ti! nombre estará en tufrente. Tu nombre estará hollarás
los objetos de su idolatría. Bendite escrito en el libro de la vida del Cordero. sea el Dios
altísimo quien pone a tu/ Que tu fe en el nombre de Cristo Jesús, enemigos en tus manos. el
cual es sobre todo nombre en el cielo y en
la tierra, sea tu herencia y tu regalo para las generaciones que te sigan.
27 Í VERNE TN TZ Deuteronomio 33:2-7,29 EUA TE ATAR