Sei sulla pagina 1di 6

La teoría antropológica y el estudio

de la técnica. Una aproximación crítica

Gimena Perret

Lic. y doctoranda en Antropología, FFyL, UBA.


Ayud. de 1ª. de Antropología, CBC, UBA. Becaria
doctoral del CONICET

“La tecnología pone al descubierto el comportamiento activo del hombre con respecto
a la naturaleza, el proceso de producción inmediato de su existencia, y con esto, asimismo,
sus relaciones sociales de vida y las representaciones intelectuales que surgen de ellas.”
KARL MARX, El Capital

A partir de su constitución como el evolucionismo y el funcionalismo,


disciplina científica, la Antropología ha para terminar con lo que podría llamar-
abordado de maneras diferentes y con se el análisis dinámico de la técnica pro-
supuestos diversos el estudio de la puesto por André Leroi-Gourhan. Final-
actividad material del hombre, tanto mente, y a modo de reflexiones finales,
de los objetos producidos y las herra- plantearemos algunas preguntas que
mientas fabricadas como de su utiliza- nos (re)conecten con la Antropología
ción, es decir, lo que en forma genéri- contemporánea. Así, problematizaremos
ca podemos denominar las técnicas.1 las características que asume la reflexión
En el presente trabajo es nuestro antropológica respecto de la técnica a
objetivo acercarnos a dicho tema ana- partir de la década del sesenta, momen-
lizando críticamente el modo en que to en el que ocurren dos hechos en for-
la Antropología ha llevado adelante el ma paralela. Por un lado, como conse-
estudio de la técnica, en su contexto cuencia de los procesos de descoloniza-
social de producción, significación y ción, se cuestiona la validez de la pro-
utilización y, consecuentemente, qué ducción de conocimiento antropológi-
concepción de técnica y de relación co generado en dicho contexto y, por el
con lo social supone el mismo. otro, comienzan a desarrollarse análisis
Si bien el espacio que aquí tenemos teórico-prácticos del problema de la
no nos resulta suficiente para un desarro- relación entre ciencia, tecnología y
llo más extenso, hemos elegido comen- sociedad a partir del reciente campo de
1. A lo largo del trabajo emplearemos el término zar por los aportes de dos de las perspec- los denominados estudios sociales de la
“técnica” en su sentido más general (téchne). tivas fundantes de la Antropología, ciencia y la tecnología.

26 ESPACIOS
Antropología y técnica: el evolu- En La sociedad primitiva (1877),
cionismo y la técnica como fetiche Morgan propone diferenciar los distin-
Durante la segunda mitad del tos grados de desarrollo cultural a par-
siglo XIX –más precisamente entre tir del conocido esquema de los tres
1860 y 1890– la Antropología comen- períodos étnicos: salvajismo, barbarie y
zó a producir sus primeros trabajos civilización. Dichos períodos son cons-
etnológicos. Como es sabido, estuvo truidos a partir del supuesto de que las
influida tanto por las ideas de evolu- diversas técnicas de subsistencia que
ción y progreso social provenientes el hombre fue desarrollando a lo largo
de la filosofía del siglo XVIII, como de la historia son las que deben ser
por aquellos pensadores que extra- consideradas en primer término por la
polaron la explicación darwinista del influencia que deben haber ejercido
cambio en lo biológico-natural hacia sobre la condición del género huma-
el cambio y el progreso en lo históri- no, y las que ofrezcan, por tanto, las
co-social. bases más apropiadas para el estable-
Lewis H. Morgan y Edward B. Tylor, cimiento de dichas divisiones.
principales representantes del evolu- A partir de este supuesto se inten-
cionismo en Antropología, intentaron taba reconstruir el camino seguido por Lewis Henry Morgan
reconstruir la historia de la cultura la humanidad “hasta un punto en el
humana a la manera de una historia cual, sin conocimiento del fuego, sin
natural, con el objetivo de establecer lenguaje articulado y sin armas artifi-
las leyes del orden y la evolución ciales, estaba sujeta, como los anima-
socio-cultural. les salvajes, a los productos espontá-
Para ello partieron del supuesto de neos de la tierra”.3 Una especie de
que las diferentes sociedades, tanto “punto cero” de la humanidad a partir
de la actualidad como del pasado y a del cual, “[…] lenta, casi imperceptible-
pesar de las evidentes diferencias cul- mente, avanzó a través del salvajismo,
turales que presentaban entre sí, eran [...] desde la maza como arma primera,
producto de una misma historia evo- hasta el dardo con punta pedernal y,
lutiva. De esto se desprendía una con- más adelante, hasta el arco y la flecha;
secuencia teórica importante para la desde el cuchillo y formón de peder-
Antropología: la de la unidad de la nal, al hacha y martillo de piedra [...].”4
naturaleza humana, tanto en su Para lograr clasificar, y por lo tanto
aspecto biológico como cultural. La diferenciar, los períodos entre sí y, a
cultura, afirmaban, al igual que la su vez, establecer el paso de uno a
naturaleza, es única y, como tal está otro hasta llegar al estadio de la civili-
sometida a un proceso de cambio zación, Morgan utilizó, al igual que
constante y, por ende, de diferencia- Tylor en La cultura primitiva (1871), el
ción a lo largo del tiempo. Así, las método comparativo. Dicho método
diferencias culturales fueron conside- le permitía ordenar científicamente
radas como de grados de desarrollo las diferencias y semejanzas culturales
cultural alcanzados por una sociedad de manera tal que, al recogerse las
en un determinado momento de su diversas técnicas de subsistencia, era
evolución histórica y social. Por esto posible organizarlas de acuerdo con 2. Tylor, E., La ciencia de la cultura (1871), en Khan,
mismo, los “distintos grados deben esquemas integrales de clasificación. J. S., El concepto de cultura: textos fundamentales,
considerarse etapas de desarrollo o Por ejemplo, las armas podían dividir- Barcelona, Anabra-Biblioteca Anabrama de Antro-
evolución, siendo cada una el resulta- se en categorías como la lanza, el pología, 1975.
do de la historia anterior y colaboran- garrote, la honda, el arco y la flecha y, 3. Morgan, L. H. , La sociedad primitiva, Madrid,
do con su aportación a la conforma- de esta manera, disponerse de forma Ayuso, 1971, p. 524.
ción de la historia del futuro”.2 tal que revelaran pautas de desarrollo 4. Morgan, op. cit., p. 524.

Cs. Antropológicas 27
La teoría antropológica y el estudio de la técnica. Una aproximación crítica

sociocultural. Partiendo del supuesto Antropología y técnica: el funcio-


de que siempre lo más simple es lo nalismo y la sociedad como fetiche
más antiguo: “quien compare un arco Iniciado el siglo XX se constituyó, a
y una ballesta no dudará de que la partir de los trabajos de Bronislaw
ballesta fue un desarrollo originado Malinowski, la corriente funcionalista
en el instrumento más sencillo”.5 en Antropología. Sus investigaciones
De este modo consideraban que fueron precursoras de una concepción
podían reconstruir la secuencia del holista de la cultura, lo que significaba,
desarrollo seguido por los hechos tec- entre otras cosas, que “los objetos no
nológicos sobre una base más o debían ser estudiados in vacuo, sino
menos objetiva. contra el fondo de la cultura total en la
De la tesis de Morgan considera- que eran encontrados”.7 Según Mali-
mos significativo que los períodos nowski, poco puede comprender el
étnicos por él caracterizados no solo etnógrafo si aborda el estudio de las
representan modos de vida más o técnicas –o cualquier otro hecho cul-
Edward Tylor menos particulares y diversos grados tural– de manera aislada, escindiéndo-
de desarrollo sociocultural, sino y las o separándolas de su contexto
sobre todo, que lo técnico es conside- social, porque así perderían significa-
rado el principal criterio a partir del ción para el observador.
cual establecer a qué tipo de sociedad Si tomamos en cuenta el análisis de
–salvaje, bárbara o civilizada– pertene- la fabricación de canoas que Malinows-
ce una cultura particular. ki realiza en Los Argonautas del Pacífico
Por su parte, Tylor también enfatiza Occidental (1922), observamos que “la
el hecho de que “[…] una punta de canoa es un artículo de la cultura mate-
flecha de piedra, un bastón tallado, un rial y, como tal, se puede describir, foto-
ídolo, un montículo funerario [...], son grafiar e incluso trasladar a un museo.
cosas que por sí solas manifiestan la Pero –y esta es una verdad con dema-
situación de un pueblo en un punto siada frecuencia olvidada– la realidad
concreto de la cultura ...”.6 etnográfica de la canoa no puede ser
Sobre las tesis de ambos autores trasladada a la casa del que estudia, ni
quedan sentadas las bases de la evo- aún poniéndole enfrente un perfecto
lución cultural como universal y con- ejemplar”. Aquellos que han creído que
secuentemente necesaria, unilineal y esto era posible, han dejado de lado el
progresiva, siendo lo técnico el crite- hecho de que la canoa, como cualquier
rio principal mediante el cual pueden otro artefacto,8 “se construye para cier-
erigirse la historia de la cultura y defi- tos usos y con un propósito concreto;
nirse los tipos sociales característicos es el medio para un fin, y nosotros, los
de la humanidad. Debido a que los que estudiamos la vida indígena, no
5. Tylor, op. cit. objetos fabricados, extraídos de su debemos invertir esta relación y conver-
6. Tylor, op. cit., p. 5. contexto social de producción, signifi- tir el objeto en un fetiche”.9
7. Richards, A. I., “El concepto de cultura en la obra cación y utilización, “hablan” por sí Es en los propósitos y usos para los
de Malinowski”, en Firth, A. R., Hombre y cultura. La mismos acerca del estadio de desa- que se construye, en este caso, la
obra de Bronislaw Malinowski, Madrid, Siglo XXI, rrollo socio-cultural alcanzado por canoa, en los que el etnógrafo pondrá
1974, p. 26. una sociedad, podemos plantear que su atención, acercándose así al sentido
8. Podemos ver cómo –curiosamente– la palabra se establece una suerte de determi- que la misma tiene para el indígena.
“artefacto” combina arte (téchne) + facto (hecho): nismo tecnológico que fetichiza lo Por ello, es que resulta necesario consi-
lo hecho por una técnica, el objeto resultante de técnico considerándolo no solo un derar todo aquello que rodea la cons-
una técnica. hecho autónomo respecto de lo trucción de la canoa: técnicas, materia-
9. Malinowski, B., Los argonautas del Pacífico Occi- social, sino además con poder de les utilizados, organización del trabajo,
dental, Barcelona, Península, 1995, p. 117. determinarlo. ceremonias asociadas, etc.

28 ESPACIOS
Gimena Perret

Lo que Malinowski intenta mostrar-


nos es que la cultura trobriandesa10
está ella misma en la canoa y por lo
tanto es la que le da sentido. De este
modo podemos penetrar en el signifi-
cado –en la “realidad vital última”– que
la embarcación adquiere para la mujer
y el hombre trobriandeses.
Pero, en el esquema de Malinows-
ki la cultura se nos presenta como
una totalidad, como un sistema cerra-
do en el que los elementos que la
constituyen pueden comprenderse
en su relación recíproca y solidaria de
unos con otros y en un lapso acotado, Bronislaw Malinowski Marcel Mauss
es decir, de manera sincrónica. Lo que
importa es el momento “actual” de la
relación, a partir del cual podemos análisis de la técnica que evita el feti-
observar e inferir sus finalidades y no che técnico pero fetichiza lo social,
interesa, por tanto, dar cuenta de dado que el estudio de la vida indíge-
cómo las cosas han llegado a ser lo na que desarrolla el autor hipostasia la
que son. O sea que toda atención a cultura de tal manera que esta se nos
las técnicas cobrará sentido a partir aparece como una fuerza autónoma
de definir cuál es la funcionalidad y/o de cualquier determinación subjetiva,
utilidad que las mismas adquieren donde la técnica obedece a dicha lógi-
dentro del contexto sociocultural en ca más allá de cualquier tipo de deter-
el que se encuentran. De esto se des- minación y/o condicionamiento de
prende que, si el contexto cambia es otro orden.
probable que cambien consecuente- Es por ello que observamos aquí
mente las funciones y utilidades y, así, nuevamente un determinismo pero de
los sentidos culturales atribuidos a tipo social/cultural, produciendo, de
determinado artefacto. igual manera que el evolucionismo, un
El estudio de la técnica en su con- análisis que escinde lo social y lo técni-
texto social de producción, utilización co. En su afán crítico del evolucionis-
y significación tal y como lo realiza mo, unilateraliza el “otro polo” de la
Malinowski es precursor de un tipo de relación técnica-sociedad, otorgándole
aproximación teórica y metodológica a lo social autonomía y determinación
en la que se propone observar lo que sobre lo técnico.
se hace con los objetos, para qué, con
qué finalidad y, a partir de esto, inter- Transición a una Antropología
pretar y/o derivar su significado. (que de cuenta) de la relación
Es por ello que aquellos trabajos entre (ciencia), técnica y sociedad
que desde la segunda mitad del siglo Hacia 1926, la denominada escue-
XX intentan plantear una interpreta- la francesa de Antropología, con el
ción sociocultural de los fenómenos objetivo de sistematizar el estudio de
técnicos son en gran medida deudores la actividad material de los grupos
de la perspectiva funcionalista pro- humanos, institucionalizó –de la
puesta por Malinowski. mano de Marcel Mauss– dicho estu- 10. Recordemos que Malinowski realizó su trabajo
Sin embargo, nosotros nos pregun- dio como un campo específico de de investigación en las Islas Trobriand, situadas al
tamos acerca de las limitaciones de un la Antropología. este de Nueva Guinea.

Cs. Antropológicas 29
La teoría antropológica y el estudio de la técnica. Una aproximación crítica

André Leroi-Gourhan, claro repre- la cual ejerce su influencia, dando


sentante de esta iniciativa, retoma en como resultado un objeto particular,
Evolution et technique (1943-1945), el están contenidos en lo que Leroi-
análisis dinámico de la tecnología Gourhan denomina “medio técnico”.
que –como ya había propuesto Este está conformado por la intersec-
Mauss–,11 consistía en ampliar lo que ción entre el “medio exterior” (aquello
tradicionalmente se consideraba técni- que rodea al ser humano: el medio
ca, a los movimientos ejecutados geográfico, climático, animal y vege-
sobre la materia. Lo que Leroi-Gourhan tal) y el “medio interior” (aquello que
plantea a través de su tesis central es constituye el “capital intelectual” de
una detallada descripción de los una sociedad, es decir, el conjunto
medios más elementales de que dis- complejo de “tradiciones mentales”).
pone el hombre –percusión, fuego, La relación entre ambos da como
aire, agua y fuerza física– para operar resultado un objeto material.13 En
sobre la materia y los efectos que este sentido, el “medio técnico” es el
sobre la misma producen, incorpo- recurso utilizado para analizar el lugar
André Leroi-Gourhan rando a su vez los procesos de adqui- donde las técnicas propias de una
sición –caza, pesca, ganadería y agri- sociedad se articulan con los demás
cultura– y de consumo –alimenta- hechos sociales.
ción, vestimenta y vivienda/mobilia- A partir del corpus teórico pro-
rio–. De este modo, el análisis no se puesto por Leroi-Gourhan,14 observa-
centra solamente en la descripción y mos claros intentos por desarrollar un
clasificación de los objetos por sus análisis de la técnica en relación con
rasgos formales sino que, por el con- lo social o, como él la denomina, con
trario, lo que intenta analizar son los la estructura tecno-económica de
procesos a partir de los cuales los una sociedad. Por lo tanto, el estudio
objetos han llegado a ser lo que son. de la técnica no será proclamado
11. Mauss, M., “Técnicas y movimientos corporales”, En este sentido, el objeto nos “infor- como un fin en sí mismo, sino que se
en Sociología y Antropología, Madrid, Tecnos, 1971. ma” acerca de las múltiples técnicas lo considerará un hecho social que
12. Leroi-Gourhan, A., L´homme et la matière, que fueron utilizadas para su fabrica- permite ser utilizado como medio
Paris, Albin Michel, 1943 y 1971, p. 13, traducción ción, siendo el mismo el resultado para estudiar las relaciones que se
de la autora. final de un proceso. establecen con otros hechos sociales,
13. ‘‘[…] el punto de contacto entre el medio Desde este punto de vista, al igual y así evitar el determinismo tanto téc-
interior y el medio exterior materializa esa película que Malinowski, Leroi-Gourhan pre- nico como social propio del evolucio-
de objetos que constituyen el mobiliario de los tende alejarse de aquellos análisis nismo y del funcionalismo.
hombres”, Leroi-Gourhan, op. cit., p. 339, traduc- que consideraban a los objetos en sí Sin embargo, y tal vez esto deba
ción de la autora. mismos, es decir, de aquellos que decirse más de sus continuadores
14. Lamentablemente, Leroi-Gourhan es un autor “...han visto más el lugar –atelier/taller que del propio Leroi-Gourhan, en el
casi desconocido en la Carrera de Ciencias Antro- donde se trabajan los metales– que intento por ofrecer una interpreta-
pológicas de la UBA, al menos en su orientación el trabajo de los mismos; el receptá- ción sociocultural de la técnica, a
sociocultural. No sabemos las razones de esta culo –el cesto– más que el proceso veces resulta difícil discernir algún
ausencia teniendo en cuenta que la escuela fran- de trenzado; la vestimenta, más que tipo de jerarquización teórico-causal
cesa en Antropología desde E. Durkheim y M. el trabajo de las fibras”.12 Y lo hace en relación con la utilización, produc-
Mauss hasta C. Lévi Strauss está altamente difun- describiendo con mayor especifici- ción y difusión de la misma. Decimos
dida y es muy leída en nuestro medio. Por lo dad los medios elementales y las téc- esto debido a lo problemático de
demás, es claro que parte de lo que aquí presen- nicas de adquisición y consumo para encarar un análisis de la técnica con
tamos de su propuesta teórica necesita de un llegar a preguntarse por el origen y la el supuesto de que todos los factores
desarrollo más en profundidad de modo tal de difusión de la técnica. sociales que intervienen “valen por
fundamentar algunas de las afirmaciones que Los medios elementales de que igual”, como si lo social fuera una
aquí nos animamos a plantear. dispone el hombre y la materia sobre simple sumatoria de dichos factores

30 ESPACIOS
Gimena Perret

que condicionan los “objetos” tecno- efectuar a un análisis social no solo de


lógicos sin poder establecer de qué la técnica sino también de la cien-
manera se produce efectivamente tal cia.16 De esta manera, la reflexión teó-
condicionamiento. rica de las diversas corrientes antro-
Finalmente, lo dicho no invalida el pológicas ofreció conceptos claves al
hecho de que Leroi-Gourhan preten- nuevo campo de estudio de los deno-
dió constituir una Antropología de las minados estudios sociales de la ciencia
técnicas que partiera de la explora- y la tecnología que, en la mayoría de
ción del abanico de relaciones que se los casos, pasaron a formar parte cen-
instalan entre el hombre y la materia tral de sus análisis.17
que él ha objetivado. Creemos que su
mérito ha sido el de ampliar el alcan-
ce de lo técnico o de lo que puede Los estudios de Leroi-Gourhan se vinculan con
ser considerado como tal, mediante la
incorporación de las técnicas de pro-
ducción y de consumo, esto es, no el replanteo epistemológico y teórico de la Antropología
estudiar solamente el objeto materia-
lizado sino el proceso de trabajo que
este supone. En palabras de Leroi- en el contexto de la descolonización.
Gourhan, “[...] hemos visto cómo el
testimonio del objeto material es
secundario: este, sobre el cual se ha
fundado todo el estudio de la activi- A partir de esta reivindicación de la
dad humana, no es más que un validez teórica y metodológica de la
soporte inanimado sobre el cual fue- Antropología, se produce un doble
ron marcados los trazos del conflicto movimiento: como acabamos de men-
entre el ser humano y la materia”.15 cionar, es retomada como disciplina
fundamental para el análisis de lo cien-
Reflexiones finales. La Antropolo- tífico-tecnológico por los estudios
gía postcolonial: repercusiones sociales de la ciencia y la tecnología18
sobre el análisis de la técnica pero, a su vez, observamos que la
Si siguiéramos con una revisión tal Antropología vuelve a pensar la técni-
y como la venimos haciendo hasta ca nutriéndose de dichos estudios.
aquí, podría parecer que no ha habi- Consideramos, finalmente, que la
do en el estudio antropológico de la consecuencia principal que supuso
técnica grandes cambios luego de los para la Antropología este específico
trabajos de Leroi-Gourhan. Sin embar- modo de volver a pensar la técnica
go, consideramos que las característi- produjo una suerte de negación de
cas que asume dicho estudio pueden los fundamentos teóricos –algunos 15. Leroi-Gourhan, A., op. cit., p. 333, traducción
vincularse con el replanteo epistemo- de ellos los presentamos en este tra- de la autora.
lógico y teórico que se produce en la bajo– que formaron parte del análisis 16. Por ejemplo, Latour, B., Nunca hemos sido
Antropología a raíz de los procesos de y la interpretación antropológica de modernos. Ensayo de Antropología simétrica,
descolonización. En este contexto se la relación técnica-sociedad, desco- Madrid, Debate, 1983, especialmente capítulo IV.
verifica un hecho central: la Antropo- nociendo así sus posibles efectos 17. Cfr. Stagnaro, A., “Ciencia y debate antropoló-
logía vuelve su mirada sobre la propia sobre la producción de conocimien- gico: distintas perspectivas”, en Cuadernos de
sociedad del investigador. Observa- to actual. Antropología Social, 2003, N° 18, pp. 87-105.
mos que es a partir de este momento En todo caso, esta consideración es 18. Para una introducción pormenorizada de las
que será reivindicada –sobre todo en la que sometemos a debate y sobre la características de estos estudios, ver González Gar-
algunos países europeos– por el apor- cual seguiremos reflexionando en un cía, M., López Cerezo, J. A. y Luján López, J. L., Cien-
te teórico y metodológico que podría futuro trabajo. cia, Tecnología y Sociedad, Madrid, Tecnos, 1996.

Cs. Antropológicas 31

Potrebbero piacerti anche