CRONICA DEL SIMBOLISMO

En muchos casos el mundo de los sueños, de la imaginación y el mundo sensible resulta

ser mucho más interesante y divertido que el mundo real, tal vez este pensamiento haya pasado
por tu cabeza y la de muchas personas más; justo esa idea ocurrió hace tiempo a finales del siglo
XIX, pues surge el simbolismo, un movimiento literario y artístico que iba en contra del realismo
propuesto en la época.
Todo comienza en el año 1821, con el nacimiento de, quien más tarde sería un gran poeta
y padre del simbolismo, Charles Baudelaire. Este joven poeta rechaza los valores de la sociedad
y empieza a idear una nueva forma de escribir poesía, en donde se desprende del realismo y
naturalismo para poder buscar una manera de poder interrelacionar el mundo espiritual y sensible
por medio de su poesía. Fue teñido de poeta maldito debido a su vida bohemia y de excesos,
lamentablemente muere en 1827 de sífilis, que probamente fue contagiada por su amante
prostituta Sarah. No sin antes haber inspirado a muchos otros jóvenes poetas para continuar con
el nuevo movimiento que poco a poco surgía.
Durante los próximos años el simbolismo paso sin fama alguna, hasta que, en 1886 el
griego Jean Moréas, publica un manifiesto en donde declaraba que el simbolismo es enemigo de
la enseñanza, la declamación, la falsa sensibilidad y descripción objetiva. A partir de aquí, el
Simbolismo se extiende por Europa, Tal fue el impacto del simbolismo que el arte también
adopta sus ideas y empiezan a aparecer diversos artistas buscando mostrar al espectador un
mundo fantástico totalmente distinto al real. Y no solo se quedó en Europa, pues en el año 1888
llega hasta Latinoamérica con el nombre de Modernismo, siendo fuertemente influenciado por el
simbolismo.

En este punto, con el pasar del tiempo, el simbolismo fue siendo enriquecido por varios
poetas y pintores, como lo son Paul Gauguin con su pintura, ¿De dónde venimos? ¿Quiénes
somos? ¿Hasta donde vamos? En donde relata las 3 etapas de vida de un ser humano y el poeta,
dramaturgo Oscar Wilde, sin embargo, tiempo después ocurren 2 fatídicos hechos para este; en
1938 muere Néstor Martin Fernández de la Torre, considerado el Ultimo simbolista. La aparición
de las vanguardias después de la primera y segunda guerra Mundial, supusieron el verdadero
final del simbolismo.

Este movimiento artístico marco un antes y un después en la historia de la literatura y

arte, pues su objetivo de llevar al espectador y lector a un mundo de fantasía en donde se
entrelazaba el mundo espiritual y sensible resulta ser una experiencia difícil de lograr y
realmente satisfactoria