En este ensayo abundaremos las problemáticas que se efectúan en un pelotón antes de un desbordamiento de un conflicto armado y las personalidades de Desmond antes de que se ejecute dicha guerra. En primer lugar, Desmond desde un principio se siente en la capacidad de decidir lo que él quiere, siempre y cuando no vayan en contra de las leyes establecidas por su iglesia y su Dios, sin embargo, al someterse al régimen de su país, es obligado a acceder a todo lo que se le ordene. Al momento de entrar al campo de entrenamiento es sometido a portar un rifle, Desmond se abstiene a portarlo y es condenado a la corte por llevar la contraria a su régimen; estando allí, él se declara culpable ante la corte, pero da una opción de acompañar la guerra sin portar un rifle pero siendo un paramédico de su pelotón, ya que sostiene la idea que su Dios dejo un legado de amémonos los unos a los otros, por tanto se contendrá al no portar un arma de fuego. Al mismo tiempo que se llevaban estas ideas a cabo llega una carta proveniente de un alto mando del gobierno el cual lo cobija, le brinda seguridad y lo deja continuar en su labor como militar sin portar un rifle para defenderse en la guerra, se le otorga el puesto de paramédico y es ascendido al pelotón de combate. Ya estando en el momento de la guerra, Desmond hace su labor correctamente salvando vidas mientras sus compañeros de tropa luchan por conservar la vida de ellos y la de él, luego de un lapso de tiempo su compañía es emboscada y hace que todas las tropas que están ahí presentes fuercen una retirada inmediata, ya que en el momento se habían perdido muchas vidas. Algunos de los compañeros de su tropa estaban gravemente heridos en el campo de batalla, pero los otros pelotones decidieron tomar la retirada siendo Desmond el único que se quedo y poniendo su fe en su Dios para poder rescatar cada una de estas personas que necesitaban ayuda. Después de esto, tras ser abandonado por las tropas y sin tener el apoyo suficiente, se aferra a su Dios y sigue al pie de la letra una frase simbólica que marco una historia para recordar, esta frase fue “uno más” y la repetía cada vez que descendía un herido por el risco. Finalmente, termina de descender y es felicitado por su tropa al bajar, después de estar agotado y exhausto el comenta todo lo que se vivió en el campo de batalla, los generales del pelotón aun sorprendidos por lo que había hecho Desmond empiezan a respetar los valores que el tenía y lo empiezan admirar por el corazón de hierro que tomaba al momento de la guerra. En esta película vimos choques de pensamientos de los ideales con un simple recluso, el desde un principio destaco sus creencias y mostro su inconformismo con la guerra, pudo sostener sus valores a pesar de que el ejército mantenía su idea de que cada soldado debía portar un rifle y por otro lado Desmond también sostenía la idea de que cada soldado debía ser libre de escoger lo que quisiera, si combatir o por el contrario salvar vidas. De esta película podemos destacar el hecho de que los valores de una persona valen más que una dictadura.