100 partidas
comentadas
Partida Nº 21
Comentarios de Paul Keres
Torneo Internacional de Margate, 1937
Blancas: P. Keres
Negras: A. Alekhine
Ruy López
1.e4 e5
2.Cf3 Cc6
3.Ab5 a6
4.Aa4 d6
5.c4 …
Alekhine empleó esta variante de la de-
fensa Steinitz en importantes partidas de tor-
neo, logrando con la misma varios buenos
éxitos. En vista de que mi adversario cono-
cía muy bien el planteo, me decidí por esta
menos frecuente jugada, que, sin embargo,
difícilmente puede considerarse inferior a la
usual 5. c3.
5. … Ad7
6.Cc3 g6
A pesar de que muchos consideran mejor
la maniobra 5...Ag4; seguido de Cf6–d7–c5,
el desarrollo del alfil por vía g7 también tiene
sus ventajas. Además, es de notar que Alekhi-
ne empleó casi sin excepción esta última va-
riante.
7.d4 Ag7
Muchos teóricos conceptúan imprecisa
esta movida y recomiendan aquí cambiar pri-
meramente 7...exd4. Por supuesto, las negras
pueden también seguir de este modo, pero
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Prof. J.L. Matamoros
después de 8.Cxd4 Ag7 9.Cxc6 bxc6 (también
es posible 9...Axc6); 10. O-O, deberán jugar
con mucho cuidado. Un error sería Ce7; por
11.c5!, con gran ventaja de las blancas, tal
como ocurrió en la partida Boleslavsky vs.
Fine, match por radio, URSS vs. USA, 1945.
Las negras deben proseguir con 10...Cf6; con
juego satisfactorio (Unzicker v. Keres, Has-
tings, 1954/55).
8.Ae3 …
Después de 8.Ag5 f6 9.Ae3, que muchos
consideran la refutación de la última jugada
de las negras, éstas consiguen con 9...., Ch6!;
una posición satisfactoria, hecho demostra-
do por el mismo Alekhine en varias partidas,
entre otras en una posición parecida de su
match con Bogoljubow en 1929.
8. … Cf6?
Esta imprecisión permite a las blancas
apoderarse firmemente de la iniciativa. Las
negras debían continuar aquí con 8...Cge7; o
por lo menos cambiar, antes de la jugada del
texto, en d4.
9.dxe5 dxe5
Ahora era mejor 9...Cxe5; en procura de
más espacio para sus piezas mediante algunos
cambios. También en esta eventualidad las
blancas quedarían mejor, dado que después
de 10.Cxe5 dxe5 11.O-O, estarían en una po-
sición más desahogada y dispondrían además
del fuerte punto de apoyo d5 .
10.Ac5 …
Con esta fuerte jugada las blancas impi-
den el enroque del adversario y colocan a las
negras ante arduos problemas. Ahora les re-
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sulta difícil iniciar un contrajuego favorable.
10. … Ch5
11.Cd5 …
Las negras intentaban conseguir contra-
chances por medio de la ocupación de la casi-
lla d4, por ejemplo después de 11.g3 b6! (pero
no 11...Ag4? 12.Axc6+ bxc6 13.Da4! , etc.);
12.Aa3 Cd4; etc. La jugada del texto impide
también la maniobra Cf4 y Ce6 de las negras.
11. … Cf4
12.Cxf4 exf4
13.e5!? …
Después de reflexionar largamente me
decidí por este promisorio sacrificio de peón,
pues no pude encontrar nada mejor contra la
amenaza 13...Df6; seguido de O-O-O. Sólo
más tarde el maestro Steiner encontró que las
blancas podían consolidar la ventaja conse-
guida en la apertura con la sencilla jugada 13.
O-O !
La idea principal de esta jugada resulta
evidente si las negras, de acuerdo con su in-
tención, continúan con 13...Df6. A esto segui-
ría inesperadamente 14.Ad4! Cxd4 15.Axd7+
Rxd7 (también después de 15...Re7 16.e5!
Db6 17.Cxd4 Axe5, las blancas están mejor);
16.e5! Db6 17.Cxd4 Axe5 (si no las negras no
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obtienen siquiera una compensación material
por su mala posición); 18.Cf3+ Ad6; y aho-
ra con 19.Ce5+!, las blancas consiguen cla-
ra ventaja. Por ejemplo : 19...., Re7 20.Dd5,
o también 19...Rc8 20.c5! Axc5 (o 20...Dxc5
21.Cxf7, etc.); 21.Dd7+ Rb8 22.Dd5 Rc8!
23.Tac1, y las blancas ganan.
Y si las negras desisten de jugar 13...Df6;
tampoco obtendrán mejores resultados. Por
ejemplo: 13......, Axb2 14.Tb1 y 15.Txb7, con
evidente superioridad de las blancas, o bien
Ce5 14.Cxe5 Axe5 15.Dd5 Ag7 16.Axd7+ y
17.Dxb7, etc. Si 13...Ce7 14.e5, y después de
14....., Axa4 15.Dxa4+ Dd7 16.Da3, las ne-
gras no han conseguido aliviar mayormente
su posición. Relativamente lo mejor era, por
tanto, 13...b6 14.Aa3, y sólo ahora continuar
con 14....., Df6. Pero tampoco en este caso la
posición de las negras inspira mucha confian-
za.
El sacrificio de peón ofrecido con la juga-
da del texto no está muy claro en lo que a sus
consecuencias se refiere, pero garantiza a las
blancas buenas probabilidades, especialmen-
te cuando un análisis exacto de las varian-
tes resultantes de la aceptación del sacrificio
es casi imposible, en vista del tiempo de re-
flexión limitado.
13. … g5?
Alekhine meditó largamente esta jugada
y llegó finalmente a la conclusión de que, si
aceptaba el peón, haría peligrar demasiado
su posición. Un análisis efectuado en común
después de la partida nos permitió llegar a la
siguiente variante, que consideramos ser la
mejor para ambas partes: 13...Cxe5 14.De2
(si primero 14.Cxe5 Axe5; las negras dispon-
drían, después de 15.Dd5, de la defensa 15.....,
Ad6; y también 15.De2 f6 16.O-O-O c6; o
16...Axa4; dejaría a las negras con una po-
sición aceptable), 14....., f6 (la continuación
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14...Axa4 15.Cxe5 Axe5 16.Dxe5+ Rd7 17.O-
O, es indudablemente favorable para las blan-
cas), 15.O-O-O c6 16.Ad6 Da5 17.Cxe5 fxe5
18.Axe5 Dxe5 (después de 18...Axe5 19.Td5!
cxd5 20.Dxe5+, las blancas obtienen un pe-
ligrosísimo ataque); 19.Dxe5+ Axe5 20.The1,
y las blancas recuperan la pieza, logrando un
final algo más agradable.
Sin embargo, parece inverosímil que las
blancas no hayan podido sacar de esta posi-
ción más provecho que una mínima ventaja
en el final. Un detenido examen pronto nos
sugiere la idea de que las blancas no deben
apresurarse en recuperar el peón sacrificado.
Pueden, por ejemplo, muy bien continuar,
en vez de 16.Ad6, con la muy fuerte jugada
16.De4!, que amenaza eventualmente recupe-
rar el peón con 17.Dxf4, pero sin que por eso
tengan que simplificar la posición. Si ahora las
negras contestan con 16...Da5; entonces sigue
17.Cxe5 fxe5 18.Txd7! Rxd7 19.Dd5+ Rc8
20.Axc6, con ataque decisivo para las blancas.
Por consiguiente, la réplica de las negras debe
ser 16......, Dc7; a lo que sigue, sin embargo,
17.Dd4!, impidiendo el enroque largo y ame-
nazando, con 18.The1, intensificar más aún
su presión. Es evidente que las negras se en-
contrarían entonces en un serio aprieto.
No obstante, pueden buscarse también
mejores posibilidades de defensa para las ne-
gras. En primer lugar merece atención el sa-
crificio de dama 15...Axa4 (en lugar de 15.....,
c6). Después de 16.Txd8+ Txd8; las negras
tienen torre, alfil y peón por la dama, o sea
casi el material equivalente. Pero también en
este caso las mejores probabilidades estarían
de parte de las blancas, al continuar éstas con
17.Ad4 O-O 18.Axe5 fxe5 19.Cg5, y 20.f3.
En resumen, puede afirmarse que 13.
O-O, era quizá, desde un punto de vista ob-
jetivo, la mejor continuación para las blancas.
-55-
Pero también la jugada del texto, entregando
el peón, les otorga excelentes perspectivas de
ataque, ya que las negras se ven ante muy di-
fíciles problemas defensivos, manteniendo si-
multáneamente las blancas una pequeña ven-
taja, aun en presencia del mejor contrajuego
negro.
14.Dd5 …
Alekhine se proponía inquietar a su ad-
versario con la amenaza 14...g4; pero la juga-
da del texto constituye una medida preven-
tiva absolutamente suficiente contra aquélla,
14. … Af8
Las negras advierten a tiempo el peligro
que las amenaza y desisten sabiamente de 14...
g4; porque a esta jugada seguiría 15.e6! , y las
blancas obtendrían ahora, después de 15....,
Axe6 (15...fxe6 16.Dh5! mate); 16.Axc6+
bxc6 17.Dxc6+ Ad7 18.De4+ Ae6 19.Td1, con
posición ganadora. La jugada del texto per-
mite a las negras aliviar algo su posición, pero
a costa de inevitables pérdidas materiales.
15.Axf8 Txf8
16.O-O-O De7
Era difícil para las negras encontrar
una defensa satisfactoria contra la amenaza
17.Cxg5, a 16...g4; seguiría de nuevo 17.e6,
y después de 16...h6; las blancas podrían for-
zar, con 17.h4, la apertura de la columna torre
rey (17......, g4 18.e6!) , o bien continuar con
17.Axc6 Axc6 18.Da5, 19. Cd4, creando fuer-
tes amenazas.
Con la jugada del texto Alekhine tiende
una celada con la esperanza de sacar la cabeza
del lazo.
17.Axc6! …
La idea básica del plan de ataque de las
blancas consiste en mantener al rey enemigo
en el centro; por tal razón eluden 17.Cxg5, a
lo que seguiría 17....., O-O-O; creando súbi-
tamente las negras varias desagradables ame-
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nazas.
17. … Axc6
18.Dd3 Ad7
Las negras deben imprescindiblemente
resguardar su rey, y ofrecen así por vez se-
gunda un peón. El final después de 18...Axf3
19.Dxf3 c6 20.Td6, etc., es manifiestamente
favorable para las blancas, y si primero 18...
h6; las blancas pueden, por medio de 19.e6!
fxe6 20.Ce5 Tg8 21.Dh3 Df6 22.The1, iniciar
un persistente ataque.
19.Cxg5 O-O-O
20.Cf3 …
A muy peligrosas complicaciones podría
llevar la captura del peón torre: 20.Cxh7, a
causa de 20....., Ag4. Por ejemplo: 21.De4
Axd1 22.Cxf8 Aa4!; y si ahora 23.Ch7, enton-
ces 23...., Dd7; con diversas amenazas.
20. … f6!
Las negras se deshacen así de su peón
doblado, abren la posición y proporcionan
mayor movilidad a sus piezas. Alekhine hace
todo lo posible para conseguir algún contra-
juego.
21.exf6 Txf6?
Con este error las negras dejan escapar su
última posibilidad de salvación. Debían abso-
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lutamente intentar 21...Dxf6!; después de lo
cual, con un sólido peón de más, las blancas
pueden forzar un final ventajoso con 22.Dd4
Dxd4 23.Cxd4, o también elegir la aguda con-
tinuación 22.Dxh7. Esta última continuación
resulta, sin embargo, muy arriesgada y permi-
te a las negras, después de 22....., Af5 23.Dh4
Txd1+! 24.Txd1 Dc6; conseguir un contra-
juego bastante peligroso. A manera de ejem-
plo puede indicarse la siguiente interesan-
te variante: 25.Dxf4 Da4 26.Ce1! Dxd1+ (la
tentativa de ataque 26...Dxa2 27.Cc2 Da4; se
refuta con 28.Td22); 27.Rxd1 Ac2+ 28.Rxc2
Txf4 29.Cd3 Txc4+ 30.Rd2, y los fuertes peo-
nes libres del flanco rey garantizan ciertas
perspectivas de triunfo a las blancas.
Es interesante acotar aquí que Alekhine
declaró después de la partida haber temido
22.Dxh7, mientras yo pensaba darme por sa-
tisfecho con 22.Dd4, teniendo en cuenta mi
escasez de tiempo.
22.The1 Db4?
Un burdo error en difícil posición, pero
también después de 22...Te6 23.Dd4, o bien
22...Df7 23.Dd4, la victoria de las blancas no
podía ser puesta en tela de juicio. Las blancas
conservan siempre un fuerte peón de más y
buen juego.
23.Dxd7+
1-0
Las negras abandonaron.
Sigue mate o pérdida de ambas torres.