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Escuela Normal Superior “Domingo F.

Sarmiento”

Profesorado de Educación Secundaria en Lengua y Literatura

Literatura Argentina/ 3er año/2018

Profesora: Silvia Piñol

Alumna: Skittberj, Gladys Liliana

“Enterado el gobernador de que su amiga

de la infancia Mariquita Sánchez viuda de Thomson,

había decidido emigrar, le mandó una esquela con una pregunta

autógrafa. “¿Por qué te vas, Mariquita?”,

que ella contestó de modo también autógrafo.

“Porque tengo miedo, Juan Manuel” (Rosasco, 1999).

¿Rosas el rey del mal?

Con Juan Manuel de Rosas llegaba al gobierno un hombre singular, su feroz


personalidad marcaría una profunda huella durante bastante tiempo en nuestra historia.

Durante su mandato creció la actividad ganadera de Buenos Aires, las exportaciones y


algunas industrias del interior que fueron protegidas por la Ley de Aduanas. Pero Rosas se
opuso categóricamente a la organización nacional y a la sanción de una constitución, ya que
esto hubiera significado el reparto de las rentas aduaneras al resto del país y la pérdida de
hegemonía porteña. La polarización del país comenzaba a formarse en medio de sangrientas
luchas. (Halperín, 1972).

Este contexto favoreció la construcción de una visión negativa sobre Rosas y su


política que se denominó rosismo. Así surgieron obras creadas principalmente por
intelectuales que en oposición a su gobierno contribuyeron con esta imagen negativa.

¿El Restaurador una figura construida?


Escuela Normal Superior “Domingo F. Sarmiento”

Profesorado de Educación Secundaria en Lengua y Literatura

Literatura Argentina/ 3er año/2018

Profesora: Silvia Piñol

Alumna: Skittberj, Gladys Liliana

Estas obras forjaron una visión de él en la que la barbarie rural, la violencia, la


arbitrariedad y el desconocimiento de toda ley eran los rasgos que lo identificaban y que
atribuían al régimen de caudillos. Pero Juan Manuel de Rosas, no había dudas, era el más
sanguinario.

La obra de Esteban Echeverría, mediante los hechos ocurridos en el matadero,


describe y cuenta con ironía en, “El Matadero”, el feroz salvajismo de la tiranía de Rosas y de
su influencia sobre el pueblo.

Ese Matadero es “el foco de la federación” y allí están los más salvajes, los que
imponen el orden del Restaurador: “Una comisión de carniceros marchó a ofrecérselo en
nombre de los federales…”, “La figura más prominente de cada grupo era el carnicero con el
cuchillo en mano, brazo y pecho desnudos, cabello largo y revuelto, camisa y chiripá y rostro
embadurnado de sangre”. Eran lo peor de la sociedad, lo más bajo. Así se fue construyendo
esa idea de salvajismo, al punto de ponerlos al mismo nivel de los animales. El joven unitario
los describe así:

“-Si, la fuerza y la violencia bestial. Esas son vuestras armas: infames. El lobo, el tigre,
la pantera también son fuertes como vosotros. Deberías andar como ellos en cuatro patas”.

Otra escena que contribuye a esta idea es la del unitario degollado:

“Pícaro unitario. Es preciso tusarlo.

-Tiene buen pescuezo para el violín.

-Tócale el violín

-Mejor es la resbalosa.
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Literatura Argentina/ 3er año/2018

Profesora: Silvia Piñol

Alumna: Skittberj, Gladys Liliana

-Probemos, dijo Matasiete y empezó sonriendo a pasar el filo de su daga por la


garganta del caído, mientras con la rodilla izquierda le comprimía el pecho y con la siniestra
mano le sujetaba por los cabellos”.

Estas escenas servían no solo para mostrar, que la gente estaba embrutecida y
degradada sino que este caos y violencia eran los que imperaban en el país y el responsable
era el “Restaurador”.

Otra obra que contribuye a la construcción de la imagen de tirano de Rosas es


“Facundo”, de Sarmiento, cuando relata: ..."Rosas no se ha contentado esta vez con exigir la
dictadura, las facultades extraordinarias, lo que pide es la suma del poder público perdida. Lo
que pide es tradiciones, costumbres, formas, garantías, leyes, culto, ideas, etc.”

Sarmiento a través de gran parte de su obra critica al gobierno tirano de Rosas,


tildándolo de salvaje y opuesto al progreso mediante su rechazo a los ideales europeos. “Esa
es la cuestión: ser o no salvajes”.

Sin embargo la historia Argentina reivindica hoy a Rosas como un representante de los
intereses argentinos olvidando su tiranía. Creo que esto pasa casi con todos los personajes
de nuestra historia, quizás porque el tiempo alivia, y ya no molesta tanto o porque quizás haya
existido otro más tirano. Considero que fue una figura importante en la historia Argentina, pero
todo el buen accionar que pudo haber tenido se opaca ante tanta tiranía de este rey del mal,
al punto de que su propia amiga de la infancia le teme y decide emigrar.
Escuela Normal Superior “Domingo F. Sarmiento”

Profesorado de Educación Secundaria en Lengua y Literatura

Literatura Argentina/ 3er año/2018

Profesora: Silvia Piñol

Alumna: Skittberj, Gladys Liliana

BIBLIOGRAFÍA

file:///C:/Users/Usuario/Downloads/facundo-o-civilizacion-i-barbarie-en-las-pampas-
argentinas--0%20(1).pdf

http://www.biblioteca.org.ar/libros/70300.pdf

Rosasco, Eugenio, (1.999). Color de Rosas. Ed. Sudamericana.

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