Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Se conoce como arte rupestre a los rastros de actividad humana o imágenes que han
sido grabadas o pintadas sobre superficies rocosas.
CUEVA DE TOQUEPALA
Están ubicadas en las cercanías del Asiento Minero de Toquepala, a la altura del km
103 del ferrocarril de Ilo a Moquegua en los meridianos 7°38′ y 71°00′ de longitud oeste
y los 17°30′ de latitud sur. Zona enclavada en la Cordillera Occidental de los Andes a
una altitud de 2,700 m.s.n.m. Dista 154 km en línea recta a la ciudad de Tacna.
Las cuevas de Toquepala son producto de la erosión en una formación de roca arenisca.
Las paredes de la cueva son comunes : roca viva, pero con una decoración excepcional
para los ojos del observador, porque su interior está decorado con pinturas rupestres.
En estos refugios, durante las estaciones frías y cuando el hombre disponía de comida
por un tiempo, debió pintar escenas que muestran su preocupación fundamental en la
alimentación a través de la recolección.
Estos hombres primitivos tiraron sus desperdicios de comida en la misma cueva, los que
con el tiempo formaron estratos.
Las pinturas rupestres de Toquepala presentan, un alto sentido animista, para propiciar
la caza y los alimentos. Estas pinturas no solo fueron hechas por distracción ni por
necesidad de expresar belleza, sino fundamentalmente, porque traía” buena suerte ”
pintarlas.
Petroglifos de Pusharo
Los Petroglifos de Pusharo son un conjunto de grabados en roca, posíblemente de
origen amazónico, ubicado en las riberas del río Palotoa, en el Parque Nacional del
Manú, en Perú y que fueron tallados entre los 1000 y 2000 d.c.
EN LA PROVINCIA DE JUNÍN
Los hallazgos en nuestro territorio andino de muchos sitios arqueológicos con estratos
pre-cerámicos sostiene la exigencia de una milenaria tradición de cazadores
pertenecientes a las comunidades pre-clasistas, anteriores a las altas culturas y cuyo
asiento principal había sido sin lugar a dudas el territorio alto andino.
Es de relevancia los que existen en los andes que circundan en legendario lago
Chinchaycocha en la altiplanicie de Junín.
Petroglifos de Samanga
Los dibujos antropomorfos de los petroglifos representarían sin duda deidades, lo mismo
que las figuras de los felinos, motivados no por una posible influencia de Chavín, sino
como representación de los jaguares y pumas que abundan en la región y que en cierta
forma eran objeto de veneración y culto. Otros animales que, en forma estilizadas,
aparecen en los petroglifos son los monos y las serpientes, los cuales también
abundaban en la zona en ese tiempo.
En cuzco
Los petroglifos de Hinkiori, grabados en una roca grande de pátina oscura enclavada en
medio del río Queros en la provincia de Paucartambo del departamento de Cusco,
resultan ser, junto con los de Pusharo en la margen derecha del río Palotoa en el vecino
departamento de Madre de Dios, las únicas manifestaciones rupestres halladas hasta
la fecha en la cuenca del Río Alto Madre de Dios y el único sitio rupestre en la parte
cusqueña de esta cuenca amazónica. Resalto este hecho ya que evidencia la
distribución desigual de estos vestigios arqueológicos en la ceja de selva y en el llano
amazónico adyacente a la cordillera de los Andes peruanos.
Aunque Cusco resulta ser uno de los dos departamentos con mayor concentración de
sitios petroglíficos en la Amazonía peruana (el otro es Junín, colindante con el
departamento del Cusco), éstos están localizados casi exclusivamente en las cuencas
de los ríos Urubamba y Yanatile (Gamonal y Pineda 2007, Barriales 1982, Pardo 1957).
Al sureste de esta zona sólo existen algunos sitios aislados, como los grabados de
Hinkiori, objeto de este artículo, los de Pusharo, en la zona cultural del Parque Nacional
del Manu (Hostnig y Carreño 2006, Vega C. 2003, Deyermenjian 2000, Baer et al. 1983),
y los petroglifos de Bajo Madre de Dios en el distrito Las Piedras, provincia de
Tambopata; estos dos últimos ubicados en el departamento de Madre de Dios. A estos
yacimientos rupestres se suma el sitio Boca Chaquimayo en el piedemonte andino de
Sangabán, Puno, registrado y documentado por el autor en 2007 (Hostnig 2009) y otras
dos localidades, una cerca de la unión de los ríos Malinosquillo y Azul y la otra en las
orillas del río Tambopata, en el Parque Nacional Bahuaja Sonene, Puno (INRENA,
2003).