PROCESIÓN EUCARÍSTICA

EXPOSICIÓN DEL SANTÍSIMO

Unos minutos antes que el sacerdote salga de la capilla con el Santísimo

Monitor: Vamos a prepararnos interiormente haciendo silencio para participar de la presencia de

Jesús en la Eucaristía.

Hoy que celebramos en el colegio la fiesta del Corpus Christi, nos sumamos a los millones de
católicos que a lo largo de la historia han rendido homenaje a Jesús Eucaristía, a Dios que se ha
quedado entre nosotros en un sencillo pan.

En la fiesta del Corpus Christi recordamos la institución de la Eucaristía que se llevó a cabo el Jueves
Santo durante la Última Cena, al convertir Jesús el pan y el vino en su Cuerpo y en su Sangre.

Esta fiesta tiene sus orígenes en Bélgica a finales del siglo XIII, cuando santa Juliana de Lieja comienza
a realizar enérgicas peticiones para la celebración del Corpus Christi. Ella afirmaba que desde su
juventud, Dios la había instruido para que un día pudiera establecer la festividad del Cuerpo de Dios;
es así que se dirige a numerosas personalidades de la iglesia, hasta llegar al Papa Urbano IV.

El Obipos de Liège, se impresionó con la iniciativa y en 1247 ordenó la celebración del Corpus Christi;
por su parte el Papa ordenó, que un monje escribiera las oraciones para esa ocasión.

En 1263 el Papa Urbano IV comienza a investigar el llamado Milagro Eucarístico de Bolsena, en el

cual una hostia consagrada comenzó a sangrar. Luego de esto, en setiembre de 1264 el Papa ordenó
que se celebrara la solemnidad de “Corpus Christi” en todo el mundo. Las oraciones para esta fiesta
fueron escritas por Santo Tomás de Aquino. Desde aquel momento, se celebra la fiesta el día jueves
después del domingo de la Santísima Trinidad.

Tras ser aceptada la fiesta por diferentes países, el Concilio de Trento declara que todos los años se
celebre este Sacramento con singular veneración y solemnidad, y sea llevado en procesión por las
calles y lugares públicos.

En el Corpus Christi, la Iglesia quiere honrar y tributar un especial culto de adoración a Jesucristo,
realmente presente en la Eucaristía, memorial de su pasión, muerte y resurrección por amor a
nosotros, banquete sacrifical y alimento de vida eterna.

El sacerdote sale de la capilla con el Santísimo

Monitor: Nos ponemos todos de rodillas mientras cantamos: Cantemos al Amor de los amores.

El sacerdote se dirige hacia el primer altar.

 PRIMERA ESTACIÓN

Monitor: Nos ponemos de rodillas.

Jaculatoria Eucarística

Sacerdote: Alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar.

Todos: Sea por siempre bendito y alabado.

Oración de los alumnos:

Señor Jesús, creemos que estás presente en medio de nosotros en el Santísimo Sacramento, por
ello te pedimos que derrames sobre nosotros tu gracia para ser cada día mejores cristianos.

Adoro te devote

Te adoro con devoción, Dios escondido,

oculto verdaderamente bajo estas apariencias.
A Ti se somete mi corazón por completo,
y se rinde totalmente al contemplarte.
Al juzgar de Ti, se equivocan la vista, el tacto, el gusto;
pero basta el oído para creer por firmeza;
creo todo lo que ha dicho el Hijo de Dios:
nada es más verdadero que esta palabra de verdad.
En la Cruz se escondía sólo la Divinidad,
pero aquí se esconde también la Humanidad;
creo y confieso ambas cosas,
y pido lo que pidió aquel ladrón arrepentido.
No veo las llagas como las vio Tomás
pero confieso que eres mi Dios:
haz que yo crea más y más en Ti,
que en Ti espere, que te ame.
¡Oh memorial de la muerte del Señor!
Pan vivo que das la vida al hombre:
concede a mi alma que de Ti viva
y que siempre saboree tu dulzura.
Señor Jesús, bondadoso Pelícano,
límpiame a mí, inmundo, con tu Sangre,
 de la que una sola gota puede liberar
de todos los crímenes al mundo entero.
Jesús, a quien ahora veo oculto,
te ruego que se cumpla lo que tanto ansío:
que al mirar tu rostro cara a cara,
sea yo feliz viendo tu gloria. Amén.
Oración del sacerdote:

Jaculatoria Eucarística

Sacerdote: Les diste el Pan del cielo.

Todos: Que en sí contiene todas las delicias.

Oremos.

Oh Dios, que nos diste el verdadero pan del cielo,

concédenos, te rogamos,

que, con la fuerza de este alimento espiritual,

siempre vivamos en ti

y resucitemos gloriosos en el último día.

Por Jesucristo, nuestro Señor.

R. Amen.

Monitor: Nos ponemos de pie y acompañamos cantando Oh Buen Jesús.

El sacerdote se dirige hacia la siguiente estación.

SEGUNDA ESTACIÓN

Monitor: Nos podemos de rodillas.

Jaculatoria Eucarística

Sacerdote: Alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar.

Todos: Sea por siempre bendito y alabado.

Lectura bíblica: “Yo soy el pan vivo bajado del cielo. El que coma de este pan vivirá eternamente, y
el pan que yo daré es mi carne para la Vida del mundo”. (Jn. 6, 51)
Oración de los alumnos: Buen Jesús, queremos comer tu cuerpo para tener vida; ayúdanos a
reconocerte cada día presente en la Eucaristía y a buscarte con todas nuestras fuerzas porque
sabemos que nuestro “corazón solo estará tranquilo hasta que descanse en Ti”.

Oración del sacerdote:

Jaculatoria Eucarística

Sacerdote: Les diste el Pan del cielo.

Todos: Que en sí contiene todas las delicias.

Oremos.

Oh Dios, que redimiste a todos los hombres

con el misterio pascual de Cristo,

conserva en nosotros la obra de misericordia,

para que, venerando constantemente

el misterio de nuestra salvación,

merezcamos conseguir su fruto.

Por Jesucristo, nuestro Señor.

R. Amen.

Monitor: Acompañamos rezando un denario.

El sacerdote se dirige hacia la siguiente estación.

TERCERA ESTACIÓN

Monitor: Nos ponemos de rodillas.

Jaculatoria Eucarística

Sacerdote: Alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar.

Todos: Sea por siempre bendito y alabado.

Lectura bíblica: “Mientras comían, Jesús tomó el pan y, después de pronunciar la bendición, lo
partió y lo dio a sus discípulos, diciendo: Tomen y coman; esto es mi cuerpo”. (Mt. 26, 26)

Oración de los alumnos: El Papa Juan Pablo II decía que "La Eucaristía, infundiendo en el corazón
del

hombre una nueva energía -el amor sobrenatural-, refuerza, encauza y purifica el

afecto humano, haciéndolo más sólido y más auténtico. Cuando tiene a Dios en su

pecho, todo el hombre queda armonizado en sí mismo... En el sacramento divino,

el Señor está sumido en el silencio para escucharnos".

Oración del sacerdote:

Jaculatoria Eucarística

Sacerdote: Les diste el Pan del cielo.

Todos: Que en sí contiene todas las delicias.

Oremos.

Ilumina, Señor, con la luz de la fe nuestros corazones

y abrásalos con el fuego de la caridad,

para que adoremos confiadamente

en espíritu y en verdad

a quien reconocemos en este Sacramento

como nuestro Dios y Señor.

Él, que vive y reina por los siglos de los siglos.

R. Amen.

Monitor: Nos ponemos de pie y acompañamos cantando Oh Buen Jesús.

El sacerdote se dirige hacia la siguiente estación.

CUARTA ESTACIÓN

Monitor: Nos ponemos de rodillas.

Jaculatoria Eucarística

Sacerdote: Alabado sea el Santísimo Sacramento del Altar.

Todos: Sea por siempre bendito y alabado.

Lectura bíblica: “Ellos dijeron: ‘Señor, danos siempre de ese pan’. Jesús, les dijo: ‘Yo Soy el Pan de
Vida. El que viene a mí nunca tendrá hambre, el que cree en mí nunca tendrá sed’”. (Jn. 6, 35)

Meditación y oración del sacerdote

Jaculatoria Eucarística

Sacerdote: Les diste el Pan del cielo.

Todos: Que en sí contiene todas las delicias.

El sacerdote se dirige hacia la capilla.

Monitor: Nos ponemos de pie y acompañamos cantando Vaso nuevo
 CANTOS

CANTEMOS AL AMOR DE LOS AMORES 3. Espero en Ti, piadoso Jesús mío;

1. Cantemos al Amor de los amores, oigo tu voz que dice “ven a mí”,

cantemos al Señor. porque eres fiel, por eso en Ti confío;

¡Dios está aquí! ¡Venid, adoradores: todo, Señor, lo espero yo de Ti.

adoremos a Cristo Redentor! Todo, Señor, lo espero yo de Ti.

¡GLORIA A CRISTO JESÚS! 4. ¡Oh, buen pastor, amable y fino amante!

¡CIELOS Y TIERRA, BENDECID AL SEÑOR! Mi corazón se abraza en santo ardor;

¡HONOR Y GLORIA A TI, REY DE LA GLORIA! si te olvidé, hoy juro que constante

¡AMOR POR SIEMPRE A TI, DIOS DEL AMOR! he de vivir tan sólo de tu amor.

he de vivir tan sólo de tu amor.

2. Por nuestro amor oculta en el sagrario

su gloria y esplendor; 5. Dulce maná y celestial comida,

para nuestro bien se queda en el santuario, gozo y salud de quien te come bien;

esperando a justo y pecador. ven sin tardar, mi Dios, mi luz, mi vida,

desciende a mí, hasta mi pecho ven.

3. ¡Oh gran prodigio del amor divino! desciende a mí, hasta mi pecho ven.

¡Milagro sin igual!

¡Prenda de amistad, banquete peregrino, VASO NUEVO

do se come el Cordero celestial! 1. Gracias quiero darte por amarme.

Gracias quiero darte yo a Ti, Señor.

OH BUEN JESÚS Hoy soy feliz porque te conocí.

1. ¡Oh, buen Jesús! Yo creo firmemente Gracias por amarme a mí también.

que por mi bien estás en el altar,

que das tu cuerpo y sangre juntamente YO QUIERO SER, SEÑOR, AMADO

al alma fiel en celestial manjar, COMO EL BARRO EN MANOS DEL ALFARERO.

al alma fiel en celestial manjar. TOMA MI VIDA, HAZLA DE NUEVO

YO QUIERO SER UN VASO NUEVO.

2. Indigno soy, confieso avergonzado,

de recibir la santa Comunión; 2. Te conocí y te amé.

Jesús que ves mi nada y mi pecado, Te pedí perdón y me escuchaste.

prepara Tú mi pobre corazón. Si te ofendí, perdóname, Señor

prepara Tú mi pobre corazón. pues te amo y nunca te olvidaré.