Hablar sobre el proceso creativo, es hablar sobre un “método” que descubre cada persona con

respecto a sus intereses, digo “método” entre comillas, ya que para el artista no sólo hay una

manera de hacer, no existe una formula exacta para crear, pues para este es válido caer en el

ensayo error, en la toma de decisiones imprecisas que quizás, lleven a un buen resultado.

Mi proceso creativo lo inicie retomando el tema que he venido desarrollando algún tiempo atrás,

mis intereses se mueven entre la memoria, la identidad, el reconocimiento y la construcción del

yo, generalmente hago un estudio en primer lugar con ejercicios de dibujo, en los que empiezo a

buscar rasgos faciales y luego pienso en la idea de la identidad, esta vez, para ubicar de mejor

manera el tema, identifique una primera lista de palabras clave, palabras como memoria

identidad, cuerpo, autorretrato, espacio, tiempo, etc. Posteriormente realice un archivo de

imágenes, en las que encontré pistas que me permitían relacionar palabras y definiciones tanto

objetiva como subjetivas, en esta medida y tomando en cuenta la técnica del dibujo, me topé con

la idea de la letra como una forma de dibujar, así busque la manera de realizar retratos con el

propósito de organizar ideas conceptuales, de ahí logre como resultado 60 autorretratos

elaborados con texto, en los que efectúo un ejercicio de memoria como recuerdo, trayendo al

presente momentos y vivencias que influyen en la construcción de la identidad.

El siguiente punto trata sobre una de mis referencias de interés, un hombre conocido como

“padre del psicoanálisis”. Sigmund Freud, nació en Freiberg, Moravia, Imperio austriaco el 6 de

mayo de 1856 y murió en Londres, Reino Unido el 23 de septiembre de 1939. Estudió Medicina

en la Universidad de Viena y en el año de 1880 conoció a Josef Breuer, quien sería su maestro.
Al inicio de su carrera Freud se vería influenciado por Ernst Wilhelm Ritter von Brücke (médico

y fisiológo alemán) ; Theodor Hermann Meynert (médico, psiquiatra, neuroanatomista y

neurólogo alemán) ; Jean-Martin Charcot (neurólogo francés, profesor de anatomía patológica,

titular de la cátedra de enfermedades del sistema nervioso) ; y por el ya mencionado antes, Josef

Breuer: (médico, fisiólogo y psicólogo austriaco) .

Freud para el año de 1885 comenzaría sus especializaciones en neurología y posteriormente

centró su interés en los aspectos psicológicos de ésta. Entre 1896 y 1900 elaboró el método y los

conceptos básicos del Psicoanálisis y posteriormente aplica sus teorías psicoanalíticas a la

interpretación global de la personalidad. Posiblemente, la contribución más reveladora que ha

hecho al pensamiento moderno es la de intentar darle un estatus científico, el cual no es

compartido por varias ramas de la ciencia y la psicología, al concepto de lo inconsciente que

tomó de Eduard von Hartmann, Schopenhauery y Nietzsche .

Desde principios del siglo XX las ideas de Freud se han representado con frecuencia de forma

explícita o implícita en corrientes del arte, la literatura y el cine. Entre las representaciones en

que más destaca las influencias freudianas se encuentra el arte de vanguardia

denominada surrealismo, algunos de sus autores son André Bretón, Luis Buñuel y Salvador Dalí.

Ahora bien, mi interés personal en el pensamiento de Freud va ligado a su idea que abarca tres

conceptos fundamentales de su teoría del psicoanálisis, el yo, el ello y el superyó, como

estructura fundamental de la personalidad definiéndolos de la siguiente manera:

 El yo: Actúa dependiendo de su pensamiento y su comportamiento. Todas las acciones

ejecutadas son analizadas por el yo, nos permite reconocer nuestras operaciones y razonar
 ante los impulsos, es el primer paso de reconocimiento para afrontar las alegrías o la

culpabilidad.

 El ello: Se refiere a la zona más desorganizada de la personalidad, este se presenta de

manera instintiva y la llevamos con nosotros desde el nacimiento.

 El superyó: Representa los principios morales y éticos que nos permiten vivir en

sociedad. Este neutraliza al ello.

Este pensamiento es relevante para mi trabajo, ya que plantea estos tres aspectos

fundamentales que son parte de la persona, pienso que son elementos base para empezar a

generar cuestionamientos sobre la construcción del yo de manera personal, teniendo en

cuenta que en el proceso creativo van apareciendo características propias de cómo me

percibo. Es importante señalar que es también un ejercicio de memoria, pues la construcción

del yo se genera desde el primer día de vida, aquí es conveniente mencionar el planteamiento

que Jacques-Marie Émile Lacan ( médico psiquiatra y psicoanalista francés conocido por los

aportes teóricos que hizo al psicoanálisis basándose en la experiencia analítica y en la lectura

de Freud) sobre la “etapa del espejo” concepto que utiliza en su teoría definiéndolo como

una fase del desarrollo psicológico del niño comprendida entre los seis (6) y dieciocho (18)

meses edad, etapa en la que el niño por primera vez es capaz de percibir su imagen corporal

completa en el espejo, de acuerdo con eso se desarrolla el yo como instancia psíquica o como

sujeto, pero se genera un juego de reconocimiento y desconocimiento a la vez, ya que aquello

que ve no es el mismo, sino una imagen de él. Además propone que el espejo implica una

división del sujeto y se encuentra con ese eje del ser y no ser.

Dayerly Dayana Diaz Gomez