Envases y Embalajes

tema 3
´ Presentación y embalado
del pedido para su trans-
porte o entrega
´ Tipos de embalaje secun-
dario
´ Otros elementos del em-
balaje
´ Medios y procedimientos
de envasado y embalaje
´ Operaciones de emba-
lado manual y mecánico
´ Control de calidad: visibi-
lidad y legibilidad del pe-
dido y/o mercancía
´ Uso eficaz y eficiente de
los embalajes: reducir, re-
ciclar y reutilizar
1. PRESENTACIÓN Y EMBALADO
DEL PEDIDO PARA SU TRANSPORTE OBJETIVOS:
O ENTREGA - Interpretar los símbolos utili-

zados habitualmente en el
La necesidad de proteger las mercancías solicitadas por un cliente y embalaje de los productos
que van a ser transportadas hasta su destino, requieren de una tarea para la orientación en la
importante para finalizar con éxito la preparación del pedido. Co- manipulación y siguiendo,
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nocer las diferentes unidades de carga y envases que nos ayudaran por ejemplo la norma ISO
en esta labor es de vital importancia. Durante este tema podremos 780:1999, RAL
conocer los diferentes tipos de envases y embalajes existentes y que (Recomendaciones Logísticas
podremos elegir en función de las características de los pedidos a de la Asociación Española
de Codificación Comercial)
servir. Existentes recomendaciones de asociaciones de fabricantes
de AECOC
que las empresas intentan seguir acerca de los envases y embalajes,
sus funciones y su tratamiento.
8
Añadiremos otro factor más, aparte de la protección y optimización

de la unidad de carga, y es la presentación. Una correcta presenta-
Carro, L. E. (2015). Preparación de pedidos (transversal) (mf1326_1). Retrieved from http://ebookcentral.proquest.com

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8
- Interpretar la simbología nece-
saria para la presentación y
recomendaciones de acondi-
cionamiento y manipulación
de los bultos y mercancías/pro-
ductos en función de sus carac-
terísticas
- Enumerar las características de
los principales tipos de enva-
ses, embalajes y sistemas de
paletización
- Enumerar los tipos normaliza-
dos de unidades de manipula-
ción, paletas y sistemas de
Según las recomendaciones de AECOC (asociación de fabri-
embalaje más habituales en el cantes y distribuidores), las funciones de los embalajes son:
transporte de cargas o bultos
1. La función gráfica o de comunicación: debe facilitar la
- Valorar la importancia de la percepción de toda la información útil del embalaje y pro-
minimización y reducción de ducto que contiene a todos los usuarios de la cadena de
residuos en el embalaje de suministro y consumidores finales.
pedidos 2. La función física o estructural: debe cumplir los requisitos
de la optimización superficial y cúbica de los palés; trans-
porte; almacenes y tiendas; la resistencia a la manipula-
ción y apilamiento, y la optimización del peso y volumen
de los embalajes.
3. La función de facilitar la cantidad mínima y necesaria de
material de embalaje para cumplir sus funciones físicas y
produzca el mínimo residuo.
ción de los materiales dentro de la unidad de carga, generará

una buena consideración por parte del cliente de nuestro tra-
bajo, pero además le podrá servir de ayuda a la hora de su re-
cepción, facilidad para la verificación de los productos
demandados y quizás, ese cliente pueda conducir esa unidad
de carga directamente a un posible punto de venta sin tener
que desmontarla, evitándole así tareas secundarias. La imagen
de nuestro trabajo redunda en la imagen de la empresa y la sa-
tisfacción del cliente será la primera prueba de haberlo hecho
bien.
pg. 76 Tema 3 / Envases y embalajes

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1.1 Consideraciones previas
Aunque a menudo consideramos el envase y el embalaje como sinónimos, se tratan de dos conceptos
diferentes. El envase es el recipiente destinado a contener el producto y el embalaje es el envoltorio o
protección de las mercancías.
A la hora de proteger la mercancía debemos conocer los diferentes niveles de embalaje existentes. Por
norma general las diferentes unidades de pedido deberán ser embaladas, siempre y cuando no lo estén
ya por parte del proveedor o desde una línea de producción. Dependiendo de cuál sea está unidad de
pedido necesitaremos proveernos de material de embalaje. Las características del producto nos marcarán
las necesidades de embalaje.
La forma de entrega al cliente final también deberá ser tenida en cuenta. Puede que el cliente en su pe-
dido de compra haya realizado una serie de especificaciones acerca de cómo quiere que sea preparada
y acondicionada la mercancía. Estas especificaciones de compra han de ser de obligado cumplimiento,
ya que, hemos de recordar, que todo lo acordado en una orden de compra no puede ser alterado. Estas
especificaciones pueden tener relación con el peso máximo por bulto, las dimensiones de la unidad de
carga, etiquetado especial, uso de materiales con certificaciones fitosanitarias para su embalaje, etc.
Dependiendo del destino podemos encontrar nuevas recomendaciones sobre el embalaje. El uso de ma-
dera tratada y con certificaciones fitosanitarias son de obligado cumplimiento en la exportación de pro-
ductos a otros países. Las maderas han de ser tratadas para no exportar ninguna bacteria desde su origen,
para ellos se les dota de un tratamiento fitosanitario, cuya muestra es el sello de una espiga en uno de
los tacos del palé. El paso por aduanas que contengan obligaciones al respecto puede frenar la operación
y la mercancía ser devuelta para su reacondicionamiento, con la consiguiente pérdida de tiempo y coste.
Cada vez se produce acuerdos entre vendedor y comprador por el cual el vendedor se compromete a en-
tregar las mercancías acondicionadas para que el comprador, as u vez, pueda disponerlas en puntos de
venta. Esto sucede en gran medida en el sector de la distribución para las grandes superficies comerciales.
1.2 Embalaje primario: envase

Cómo anteriormente hemos señalado, el envase es el recipiente que contiene el producto. Su elaboración
puede ser de diferentes materiales que cumplan su función. Ésta es la de contener, proteger, mantener,
facilitar su manipulación y atraer a los clientes. Las funciones estéticas del envase son muy cuidadas y
tratarán, asimismo, cumplir las funciones de optimización de su transporte, facilitando la conformación
de unidades de carga con su diseño. No se podrá separar al producto de dicho envase y el consumo, en
la mayoría de los casos, se realiza desde él.
1.3 Embalaje secundario: cajas

En el embalaje secundario también se conoce como embalaje colectivo. Se trata de la agrupación de
un número determinado de envases primarios. Estamos ante los packs. Estos envases serán los que, con
MF1326_1 / Preparación de pedidos pg. 77

frecuencia, dispondremos en nuestras estanterías del almacén. Generalmente agrupaciones de unidades
de un mismo artículo dispuestos en cajas. Estos embalajes serán estudiados y diseñados para que se
adapten a las medidas de las unidades de carga. El número de productos que se encuentren en su interior
también responderán a criterios de optimización. Múltiplos de cantidades más demandas o que faciliten
la preparación de pedidos.
1.4 Embalaje terciario: palés y contenedor

El tercer nivel de embalaje es el elegido para conformar la unidad de carga. Sobre ellos o en su interior,
se dispondrá el conjunto de productos solicitados por el cliente, siempre y cuando, el volumen de artí-
culos lo requiera. Son embalajes destinados al transporte, almacenamiento o manipulación de un gran
número de productos.
El palé es un armazón de madera, plástico, y en excepciones de algún otro material, que está diseñado
para el movimiento de mercancía apoyado en equipos de trabajo móviles diseñados también para esta
unidad de carga.
El palé, al ser la unidad de carga más utilizada para el transporte de mercancías es la base para que el
diseño de envases y embalajes que se adapten al mismo. Pero no solo se adaptan los envases, sino que
también se adaptan los mismos palés a las medidas de los remolques de los camiones, o a los contene-
dores de transporte marítimo o ferroviario. Existen diferentes medidas de palés, pero hay dos medidas
que se recomiendan utilizar sobre las demás como forma de optimizar el espacio en el transporte. Ha-
blamos del palé ISO y al europalé.
- Palé ISO; sus medidas son 1.2m de largo y 1m de ancho, se le conoce como “palé americano”.

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- Europalé; sus medidas son 1.2m de largo y 0.8, de ancho. Es el palé más utilizado en la Unión eu-
ropea y su uso se recomienda sobre el palé ISO debido a que optimiza de mejor manera el espacio
en los remolques de camión al tener estos un ancho de 2.4m. Por ejemplo, en un remolque hay
hueco para 33 europalés, por el contrario, entran 26 palés europeos.
Del europalé o palé europeo, nació el concepto de medio palé (0.8m x 0.6m) que suele ser habitual
para cargas de poco volumen, pero con un peso mayor y con necesidad de un embalaje terciario de
protección.
Existen recomendaciones acerca de la altura que han de tener los palés con la mercancía estibada, de-
pendiendo del peso de la mercancía y las limitaciones que ésta nos puede ofrecer. Se establecen tres
rangos de altura máxima en las unidades de carga; 1.15m, 1.45m y 2 metros. Si los palés fueran apilados,
cada uno de ellos no podría superar la altura de 1.35m.
También podemos clasificar los palés en términos de empleo:
- Palé abierto: no tiene uniones entre sus tacos de esquina y como consecuencia pueden ser utilizado
por todo tipo de máquinas.
- Palé cerrado: sólo podrá ser usado por máquinas con “horquillas libres”, es decir, máquinas que
solo tengan un juego de horquillas que sean las que eleven o desciendan la carga. Ejemplo de palé
cerrado:
A parte del palé, también podemos encontrar otras unidades de carga en un almacén. Son las jaulas o
“roll container”. Son contenedores metálicos que poseen ruedas para su traslado. Sus medidas también
son objeto de estudio para su optimización, las recomendadas son de 0.6m x 0.8m, iguales a las del
medio palé.

Las empresas fabricantes y distribuidoras no son ajenas a estas
recomendaciones. En la búsqueda del ahorro de costes y opti-
mización del espacio, empiezan a diseñar sus embalajes pri-
marios y secundarios en función de las medidas de la unidad
de carga seleccionada. En muchos casos estos embalajes se
ajustaran a medidas que sean múltiplos de los europalés. Para
ello existe una recomendación de realizar embalajes con el
módulo de referencia de (600 x 400mm), para que se pueda
adaptar a la base del europalé.
Existen otros contenedores, sin ruedas, que comparten medi-
das optimizadas con los palés. Incorporan a su estructura un
armazón de diferentes materiales, plástico, hierro, madera, etc.
y aseguran la que la carga no sufra caídas o perdidas. Estos con-
tenedores facilitan el embalaje final y el cerramiento de la uni-
dad de carga. Dichos contenedores son usados para optimizar
aún más el transporte por sus medidas y características, ya que
facilitan el apilamiento de unidades de carga. Según sus medi-
das y su altura, en un tráiler pueden transportarse hasta 99 uni-
dades de estos contenedores.
2. TIPOS DE EMBALAJE
SECUNDARIO
Los embalajes secundarios son los diseñados para agrupar un
número determinado de unidades de venta y poderlos ofrecer
como packs o como cantidades más atractivas para el consu-
midor final. Generalmente se utilizan para su exposición en el
punto de venta y suelen poseer precios más baratos que al ad-
quirir unidades sueltas.
2.1 Bandeja
Son pequeños recipientes de diferentes materiales que confor-
man una base donde se agrupan más de una unidad de pro-
ducto. Suelen estar envueltos por celulosa para que el
contenido no se desplace. Este tipo de embalaje no permite la
sobreestiba, ya que en su parte superior carece de protección
para evitar el aplastamiento del producto. Es un embalaje muy
habitual en el sector alimenticio.

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2.2 Box palet
Son cajas de cartón dispuestas sobre una base de palé. En él se garantiza la protección de los productos
para su transporte debido a su hermeticidad. Están destinados a agrupar un número grande de unidades de
venta y se suele utilizar para disponer el producto en su interior en el punto de venta de superficies comer-
ciales. Suelen tener un diseño destinado a reclamar la atención del consumidor a modo de expositor.
2.3 Caja dispensadora de líquidos

Tipo de embalaje destinado a contener líquidos que se apoya en un grifo exterior para poder extraer el
contenido. Su fisionomía consta de una caja normal con una abertura que se deberá rasgar para poder

sacar el grifo. El grifo estará conectado a una bolsa estanca en el interior de la caja que contiene el lí-
quido.
2.4 Caja envolvente o Wrap around

Es un embalaje de cartón ondulado que se envuelve alrededor de la agrupación de productos y se cierra
lateralmente por medio de cuatro solapas termoselladas. Es muy habitual en la agrupación de tetrabriks
o azulejos: Es un embalaje poco resistente pero posibilita de mejor manera la optimización de las uni-
dades de carga debido a su escaso grosor. El embalado de los productos en este tipo de envases se suele
realizar en líneas automáticas de envasado. No es un embalaje recomendable para realizarlo manual-
mente.
2.5 Caja expositora

Caja de pequeñas de pequeñas dimensiones que cumple dos funciones a la vez. Sirve para agrupar di-
ferentes unidades de venta y a la vez sirve de expositor en el punto de venta. Su diseño es cuidado y
atractivo para el consumidor. Por norma general, la tapa superior se elevará y la caja actuará en forma
de bandeja. La tapa será el objeto de diseño atrayente para el consumidor final posibilitando la confi-
guración de formas o figuras.

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2.6 Caja de fondo automático
Son cajas que una vez conformadas se asemejan a bandejas con unos pequeños laterales. El fondo de
las cajas está formado por cuatro solapas que se unen de dos en dos mediante su plegado y superposi-
ción. A diferencia de las bandejas, existen modelos con cerramiento superior basado en el mismo sistema
de pliegue y superposición que la base. Este embalaje se conforma de manera rápida y permite una
mayor agilidad a la hora de embalar unidades de pedidos sueltas.
2.7 Caja de fondo semiautomático

Embalaje similar al de la caja de fondo automático, con la diferencia que la tapa superior no consiste
en el plegamiento y superposición de solapas, sino de solapas de cierre estándar. La agilidad que se
pierde a la hora de embalar en contraposición a la caja de fondo automático se gana a la hora de des-
embalar, posibilitando además la reutilización de la caja.

2.8 Caja de madera
Este tipo de embalaje es utilizado para introducir en él ma-
terial de extrema fragilidad. Son cajas realizadas a medida
del producto a transportar y aseguran una buena protec-
ción del producto, siempre y cuando éste se encuentra in-
movilizado en su interior. Es muy habitual para transportar
maquinaria o botellas de vidrio. Es un embalaje de gran
coste, por lo que los productos que se encuentran en su in-
terior son de un elevado coste también. Las medidas de
estas cajas son variables. Desde pequeñas cajas que con-
tienen dos botellas de vino, o grandes cajas que contienen
maquinaria y que se apoyan en tacos para ser manipuladas
por equipos de trabajo móvil.
2.9 Caja de plástico

Embalajes diseñados para optimizar la unidad de carga.
Existen de muchos tamaños diferentes, con cerramiento su-
perior o en forma de cubetas, pero lo más importante de
este tipo de cajas es que están diseñadas para ser apiladas
entre ellas. Normalmente suelen ser embalajes retornables,
es decir, una vez que el cliente recibe la mercancía de-
vuelve la caja al proveedor para embalar un nuevo pedido:
Son embalajes de circuitos cerrados. Las empresas suelen
adquirir este tipo de embalajes que puedan reutilizar para
suministrar componentes a empresas manufactureras o de
ensamblaje, garantizándose el retorno y reutilización de las
cajas.
2.10 Caja con rejilla incorporada

Cajas de diferentes materiales (cartón, plástico, madera,

etc.) en cuyo interior se encuentran unas rejillas que actúan
a modo de separadores. Este tipo de embalaje protege aún
más los productos en el interior, ya que evitan el contacto
entre ellos, así como las vibraciones y los golpes en los
traslados. Son utilizadas para productos frágiles, tales como
botellas de vidrio, componentes electrónicos, cerámica,
etc.

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2.11 Caja con tapa
Son cajas normales, cuya tapa está incorporada al resto de la
estructura de la misma. Las medidas de estas cajas pueden ser
diversas y su uso es frecuente para embalar productos que ne-
cesiten un cerramiento. Generalmente se incorporan a los
puntos de embalajes sin desplegadas y su conformación suele
ser ágil debido a que la tapa viene incorporada a la estruc-
tura.
2.12 Caja de tapa y fondo

Similar a la anterior con la diferencia que la tapa va sepa-
rada de la estructura y se conformará aparte. Son muy fre-
cuentes en zapaterías, y en el sector del retail. Estas cajas
permiten una mayor agilidad en la verificación de los pro-
ductos de su interior, sin embargo a la hora de conformarlas
son menos ágiles y requieren de una mayor destreza y de-
dicación.
2.13 Caja de solapas

Cajas de cartón de muy fácil montaje, Muy usada en la prepa-
ración de pedidos debido a este motivo. Ocupan poco espacio
plegadas. Tanto el fondo como la tapa son solapas que se cerra-
rán mediante un precinto o grapas.
2.14 Cesta
Tradicional embalaje que trata de un recipiente con un asidero
superior para su traslado. Este tipo de embalajes busca crite-
rios de atracción hacía el cliente debido a su diseño. No sirve
para la optimización ni de tiempo de preparación ni de espa-

cio en la unidad de carga. Su uso es frecuente para la presen-
tación de productos complementarios o surtidos de diferentes
productos.

2.15 Estuche
Embalajes de productos exclusivos con un gran diseño. De di-
ferentes formas y materiales, este embalaje se caracteriza por
su diseño atrayente. Suelen poseer mecanismos de cerramiento
y en su interior se presentan los productos con una cuidada dis-
posición. Son frecuentes en productos exclusivos o destinados
a regalos o recuerdos con un gran coste para el consumidor.
2.16 Film plástico

También llamado plástico de retractilar. Es un elemento de em-
balaje muy utilizado en los almacenes. Una vez colocada la mer-
cancía sobre una unidad de carga, ésta se rodea mediante un
rollo de plástico estirable que hará presión sobre los productos
impidiendo su movimiento y fijándolo a la unidad de carga. La
técnica debe ser depurada y rápida y el operario debe asegurarse
de la correcta finalización del retractilado. Existen máquinas de
retractilado automático que se usan cuando hay un gran volu-
men de palés a retractilar. Su ejecución manual es cansada y se
adoptan posturas forzadas, por lo que se recomienda el uso de
máquinas cuando el volumen de trabajo es elevado.
2.17 Plató agrícola

Embalajes destinados al transporte de productos agrícolas y que
se basan en diseños de fondo plano y bajo, sin tapas y con
aberturas lateras para ser utilizadas como asideros. La gran ven-
taja de este embalaje es su posibilidad de apilado entre ellas y
que pueden servir de expositor de los productos en los puntos
de venta. Pueden ser de varios materiales, en caso de cartón
serán embalajes desechables y en caso de plástico serán reuti-
lizables.
2.18 Saco de papel

Embalajes de un solo uso destinados al transporte de productos
granel, como cementos, arena, harina, etc. Su diseño consta de
varias capas de papel que le otorgan resistencia, sin embargo
sufren daños con facilidad en caso de golpes. Sus dimensiones
son variadas y responderán más a límite de pesos que a volu-
men.

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3. OTROS ELEMENTOS DEL
EMBALAJE
En anteriores apartados hemos visto la importancia de inmovili-
zar el material y protegerlo para evitar daños en su transporte y
evitar las vibraciones y choques en el interior de cada embalaje
secundario. Para proteger la unidad de carga antes de su expe-
dición tenemos bastantes elementos en los que apoyarnos.
Vamos a conocer alguno de ellos, muy habituales en este tipo
de tareas.
3.1 Cantonera
Son perfiles de cartón que se colocarán en las esquinas y
bordes de la unidad de carga. Sirven para proteger la mer-
cancía de roces y golpes en dichos lugares. Cumple tam-
bién la misión de presionar y ayudar a una mayor sujeción
si se combina con otros elementos de embalaje como el
plástico film.
3.2 Acondicionador
Son piezas de diversos materiales que se utilizan para proteger
e inmovilizar el producto dentro de la caja. El diseño de estos
acondicionadores se adapta al producto a proteger y no valdrá
para otro tipo de producto. Suele utilizarse para productos de
gran valor y extrema fragilidad por el elevado coste de diseño
personalizado por producto.
3.3 Separador
El separador es el complemento que llevan las cajas con re-

jillas. Estos separadores evitan el contacto entre los produc-
tos que se encuentran en una caja y minimizan los riesgos
de daños derivados de las vibraciones y los choques. Los
más usuales son hechos en cartón y sus medidas dependen
de la caja donde van a ser introducidos y las medidas de los
productos que vayan en su interior.

4. MEDIOS Y PROCEDIMIENTOS DE ENVASADO Y
EMBALAJE
Dependiendo del tipo de empresa en el que nos encontremos podemos disponer de procedimientos de-
finidos para el embalado y envasado de los productos destinados a la distribución o venta.
En empresas del sector de la alimentación estos procesos son muy sensibles y tendremos que dotarnos
de equipos de protección y vestuario para impedir la exposición de los alimentos a cualquier tipo de
bacteria o suciedad. La limpieza en procesos de envasados es crítica, sobre todo en procesos de envasado
al vacío.
En muchos productos el envasado garantiza la conservación del producto en buenas condiciones durante
un periodo de tiempo. Es el envasado al vacío, muy habitual en el sector alimenticio, donde se debe re-
tirar el aire del interior de un envoltorio para su conservación durante mayor tiempo.
En materiales frágiles debemos tener en consideración las zonas más sensibles del producto para proteger
de mejor manera dichas zonas.
En empresas manufactureras, que se dedican a fabricar los productos que luego venderán, el envasado
de los mismos se producirá al final de la línea de producción. El embalado de los pedidos seguirá espe-
cificaciones técnicas basadas en las características del producto. Estas características serán las que nos
obliguen a actuar de una manera u otra a la hora de proteger los productos para su expedición. Raras
veces se produce el embalaje primario de los productos en la fase de preparación de pedidos. Este en-
vasado vendrá realizado desde el proveedor o desde la línea de producción.
El envasado primario, en las empresas distribuidoras, vendrá realizado desde el proveedor.
Existen líneas de embalado en empresas manufactureras donde el producto es dispuesto en cintas trans-
portadoras y, bien por medios automáticos o manuales se van colocando en embalajes secundarios para
después ser ubicados o conformar unidades de carga homogéneas para su almacenamiento.
Tendremos que tener en cuenta que el embalado final dependerá de las características del pedido a
preparar. En todo procedimiento de embalado y envasado se deben de seguir las siguientes indica-
ciones:
ACTIVIDAD 1
Indica cuál es, a priori, el embalaje secundario necesario para los siguientes productos.
a) Bollitos de repostería.
b) 200 paquetes de azúcar que van a ir directamente al punto de venta en promoción.
c) 6 cajas de leche.
d) Una máquina de inyección de plástico.

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1. Proteger la mercancía que se va a colocar en la unidad de carga.
2. Minimizar el número de unidades de carga en los que van dispuestos los productos. Cuantos menos
bultos se necesiten para su transporte, más barato nos saldrá el mismo.
3. Pesaje y medición de los bultos preparados.
4. Optimización del espacio de la unidad de carga.
5. Rellenar los espacios vacíos para impedir que se puedan desplazar en su traslado. Sujetar bien la
carga para evitar caídas de material.
Existen dos medios para el embalado y el envasado; el manual y el mecánico.
5. OPERACIONES DE EMBALADO MANUAL Y

MECÁNICO
Cómo en muchos otros procesos, la elección de un embalado manual u automático dependerá del vo-
lumen de trabajo que estas tareas nos absorban. El embalado mecánico, muy habitual al final de las
líneas de producción conlleva un coste mayor, por lo que tendremos que valorar si el proceso de em-
balado y envasado es un proceso crítico. Cómo en todo proceso crítico es más fácil asumir inversiones
que optimiza el proceso y asegura un retorno de la inversión en poco plazo de tiempo.
En la preparación de pedidos es habitual realizar un embalado manual de los productos solicitados en
un pedido. Para que el proceso mecánico tenga sentido, además de suponer un proceso crítico, los pe-
didos y unidades de carga deben cumplir un principio básico; la homogeneidad. Si los pedidos son de
muchas referencias diferentes, con volúmenes y pesos diferentes, la automatización de dicho proceso
es muy difícil de lograr.
Por el contrario si los productos son homogéneos y los embalajes donde van a ser colocados comparten
medidas, la automatización es factible. Por ejemplo, en una bodega de vinos, donde los productos se
envasan en botellas del mismo tamaño y se disponen en cajas con las mismas cantidades y dimensio-
nes.
5.1 Consideraciones previas: dimensión, número de artículos o

envases
Antes de iniciar la labor de embalado de los productos solicitados en un pedido, deberemos observar el
conjunto de artículos, sus dimensiones, sus pesos y sus cantidades. Esto nos ayudará a determinar, y ha-
cernos una visión previa, de la unidad de carga en la que vamos a disponer la mercancía. Nos ayudará
a seleccionar los embalajes secundarios que más nos facilite la labor de protección y optimización.
Consideraremos, asimismo, las características y especificaciones del producto, por si hubiera algún tipo
de recomendación al respecto como “no sobreestimar”, “colocar este lado hacia arriba”, etc.

5.2 Empaque
El empaque es la acción de introducir los productos en los embalajes secundarios. Saber elegir el ade-
cuado es importante, aunque las empresas ya suelen tener definidos los embalajes a utilizar y disponen
de una gran cantidad de ellos para estas tareas. El objetivo principal será disponer el producto con una
buena sujeción y protegido de golpes y vibraciones. Tendremos que intentar optimizar el espacio, es
decir, empacar el máximo número de productos en un mismo embalaje manteniendo como norma cum-
plir el objetivo principal. Las dimensiones del embalaje seleccionado deben ayudar a optimizar el es-
pacio de la unidad de carga final.
5.3 Etiquetado
Una vez que hemos introducido los productos en los embalajes correspondientes y conformado la uni-
dad de carga, debemos señalar el contenido de cada uno de los bultos por medio de etiquetas. Cada
caja deberá identificar la referencia del producto o productos que se encuentren en su interior, así como
su cantidad. A menudo se solicita incluir en el etiquetado el número de lote, fecha de envasado, fecha
de caducidad, número de pedido de compra del cliente, etc.
5.4 Precinto
El precinto es la acción de cerrar cada caja de la unidad de carga para evitar mermas de productos,
robos, o caídas de productos. La unidad de carga será asimismo precintada si fuera necesario. El objetivo
es que la mercancía le llegue al cliente tal y cómo salió de nuestras instalaciones.
El precinto puede realizarse por medio de cintas adhesivas o mediante el flejado, que son tiras (bien de
plástico o metal) que se pegarán por medio de termosellado o por medio de grapas y que cumplen una
doble función, la de precintar el envío y asegurar la sujeción de la carga.

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5.5 Señalización y etiquetado del pedido
Un pedido puede estar dispuesto en más de un bulto diferente. Etiquetar cada bulto y señalizarlos
como bultos pertenecientes a un mismo pedido es necesario para evitar errores a la hora de la
carga. Cada unidad de carga deberá disponer de etiquetas donde se señale el destinatario final y
que haga mención al número de bulto que se corresponda con el parking list. Por ejemplo, si en
el parking list hemos señalado que el pedido consta de tres bultos, el primer bulto contienen 40
cajas de leche, el segundo contiene 50 cajas de detergente y el tercero contiene 20 cajas de aceite
el etiquetado del primer bulto deberá contener la información “bulto 1/3”, el segundo “bulto 2/3”
y el tercero “bulto 3/3”.
Asimismo, cada bulto debe tener información del número de bultos totales de la expedición. Esto faci-
litará al cliente la labor, en caso de pérdida, del bulto faltante. Debe señalarse asimismo, el peso de cada
bulto, el peso del total de la expedición y el nombre de la empresa transportista encargada de la en-
trega.
En caso de especificaciones de manipulación de los diferentes bultos también habrá que señalarlos por
medio de etiquetado. En este sentido son muy habituales las etiquetas de “muy frágil”, “contiene cristal”,
“no sobrestimar”, etc.
6. CONTROL DE CALIDAD: VISIBILIDAD Y LEGIBILIDAD

DEL PEDIDO Y/O MERCANCÍA
Anteriormente hemos hablado de la labor de verificación de la preparación del pedido previa a su carga
para el transporte final. Esta labor impedirá cometer algún error que se haya podido pasar por alto y se
asemejará a la labor que hará el cliente a la hora de recepcionar la mercancía.
Con el parking list en mano deberemos poder identificar cada producto que se encuentra en la unidad
de carga, visualizar las cantidades y verificarlas con la orden de pedido. Para ello, el etiquetado de cada
producto deberá ser legible desde el exterior de la unidad de carga. La disposición y colocación de los
productos en la unidad de carga debe facilitar esta labor.
6.1 Recomendaciones de AECOC y simbología habitual

AECOC es la Asociación Española de Codificación Comercial. Entre sus asociados se encuentran nume-
rosos fabricantes, distribuidores, operadores logísticos y empresas de transporte. Entre ellos han acordado
una serie de recomendaciones para la logística, las RAL, que buscan estandarizar ciertos procesos faci-
litando así la eficiencia de toda la cadena de suministro al compartir mismos procedimientos entre los
diferentes agentes.
Las RAL implican tres ámbitos; las infraestructuras, los procesos y la organización. Siendo la organización
el eje fundamental de la actuación logística para la aplicación de estas recomendaciones.

AECOC se encargará de identificar y analizar las ineficiencias de los procesos logísticos donde actúan
sus asociados y propondrá una serie de recomendaciones que supondrán mejoras de los procesos de
sus asociados si las siguen en conjunto.
Uno de las áreas donde AECOC ha conseguido grandes mejoras, es con las recomendaciones de eti-
quetado y codificación de productos. Esta codificación es compartida entre sus asociados y sirve de gran
ayuda a la hora de la trazabilidad de los productos.
AECOC diferencia claramente los conceptos de codificación y simbología. Para AECOC la codificación
trata de la asignación de un número estándar a un elemento físico, y la simbología trata de la represen-
tación de ese código a través de la figura de un código de barras.
Existen diferentes modos de codificación de los productos. El más habitual en el sector de la distribución
y fabricación es el denominado EAN 128 ya que incorpora más información adicional acerca del pro-
ducto, como fecha de envasado, caducidad, número de lote, dimensiones, origen, destino, etc. Una eti-
queta con esta codificación debe tener, obligatoriamente los siguientes campos:
1. Nombre y razón social de la empresa.
2. Información humanamente legible (textos sin codificar).
3. Símbolos, toda la información que se vaya a representar mediante códigos de barras.
AECOC también recomienda las dimensiones de los diferentes códigos y de las etiquetas, su ubicación
en los productos, estableciendo como regla general que su colocación sea perpendicular sobre la base
donde se asienta el artículo y señalando como mínimo la presencia de una etiqueta en una de las caras
del producto.
Una de las recomendaciones de AECOC con mayor impacto ha sido el de unidad de carga eficiente.
Ésta está constituida por una agrupación de productos que sirve para facilitar el transporte, almacenaje
y manipulación de las unidades de consumo. Para ello se recomienda el uso del europalé de 1.2 x 0.8
y seguir las recomendaciones en cuanto a la altura:
- Los tres rangos de altura máximas de unidades de carga serán; 1.15m, 1.45m y 2m.
- Solo se podrán remontar dos unidades de carga con una altura máxima de cada una de 1.35m.
Estos usos redundan en una serie de ventajas para todos los participantes en la cadena de suministro,
entre otras:
- Mayor índice de ocupación del transporte de larga y corta distancia.
- Mayor productividad en las operaciones de manipulación.
- Mayor aprovechamiento de la superficie y altura de las estanterías de almacenamiento.
- Mayor productividad en tareas de recepción y expedición.
- Viabilidad de almacenes automáticos al estandarizar medidas de unidades de carga.

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Para ello, habrá que seguir una serie de prácticas obligadas como:
- Estandarización de embalajes y elementos de manipulación.
- Modularidad de embalajes.
- Especificaciones de peso y altura.
- Identificación del embalaje mediante codificación EAN.
7. USO EFICAZ Y EFICIENTE DE LOS EMBALAJES:

REDUCIR, RECICLAR Y REUTILIZAR
La eficiencia logística también atiende a criterios de sostenibilidad. Conceptos como la limitación de
los recursos y una normativa exigente en cuanto a las responsabilidades del productor con su producto
desde su fabricación hasta la eliminación total del mismo, ha obligado a las empresas a introducir entre
sus tareas la logística inversa.
Existen varios conceptos sobre la logística inversa, pero la podríamos describir como todos los procesos
y actividades necesarias para gestionar el retorno y reciclaje de las mercancías en la cadena
de suministro. La logística inversa engloba operaciones de distribución, recuperación y reci-
claje de los productos.
La logística inversa planifica, organiza, coordina y controla el flujo de materiales desde el punto de con-
suma al punto de origen.

Dentro de la logística inversa se incluye también la gestión de las devoluciones, ya que en muchas oca-
siones, se deriva de daños en el producto y de esta manera puede ser reparado, pueden reutilizarse com-
ponentes no dañados o se puede gestionar su eliminación de acuerdo a la normativa de gestión de
residuos aplicable.
Esta nueva línea de actuación de las empresas se traduce en la aparición de la filosofía de las 3R: Re-
ducir, Reutilizar y Reciclar.
Esta filosofía responde a dos premisas; el ahorro de costes y al cumplimiento de normativas cada vez
más exigentes.
El ahorro de costes en la reutilización de embalajes es grande, pero para ello necesitamos un círculo
cerrado de suministro. Es decir, envíos y retornos constantes entre dos empresas con acuerdos de su-
ministro constantes. No siempre existen estos círculos de suministro, lo que ha originado que proli-
feren empresas que, bajo una especie de alquiler, suministran los embalajes y se encargan ellos de
recuperarlos para devolverlos a la cadena de suministro. Estas empresas empezaron con el alquiler
de palés y han ido incorporando a sus servicios, embalajes de todo tipo, sobre todo cajas modulares
o unidades de carga apilables que siguen las recomendaciones de AECOC para la optimización del
espacio de carga.
Cada vez más, las normativas y legislación acerca de la gestión de residuos obligan al productor a
hacerse cargo del reciclado y eliminación total de sus productos una vez finalizado el ciclo de vida
del mismo. Aunque muchas veces el consumidor final es el que se encarga de la eliminación o reci-
clado en su entorno doméstico de los productos, las empresas productoras han de pagar unas tasas
sobre este servicio dependiendo de la capacidad productiva y origen material de su producción.
La minimización del embalaje utilizado es otro objetivo de esta filosofía. En muchas ocasiones se
abusa del envasado o se utilizan materiales de costoso reciclado para los mismos. Optimizar los en-
vases, utilizar material reciclable y reducir el tamaño y cantidad de los envases primarios son medidas
de actuación en tal sentido.
Una nueva línea de actuación en las empresas es considerar los residuos como un subproducto. Esto
quiere decir, que las empresas pueden vender los residuos, considerados no peligrosos, a otras em-
presas que las utilizan para producir materia prima. Esto es posible con residuos como el cartón, el
plástico, la chatarra o los componentes electrónicos. El calor que se le saca a estos residuos es ínfimo,
pero es un ahorro de coste importante al ser un gestor de residuos quien te lo compre en vez de
pagar a otro por su eliminación. Las empresas que compran residuos para reciclarlos y producir nue-
vos materiales tienen que estar inscritos como gestores de residuos.
La eliminación de residuos peligrosos, productos químicos, inflamables, sanitarios, etc. se deberán
gestionar con un gestor especializado asumiendo los costes de eliminación de los mismos. Se deberá
notificar a la administración correspondiente el índice de generación de residuos periódicamente.
Otra vía es la de reparar y recuperar el producto siempre y cuando sea posible. Muchas empresas
que han dejado obsoletos productos o descatalogado los mismos han encontrado una nueva vía co-

editorialcep
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mercial en los “outlets”. Estos sectores de negocio ponen a la venta artículos que ya no se comercia-
lizan a un precio más ajustado.
En el sector de la alimentación la recuperación y reutilización de productos puede derivar en la cesión
de los mismos a bancos de alimentos: No son productos en mal estado, sino que de cara a la comercia-
lización ya no sirven por tener próxima la fecha de caducidad, un envase golpeado y por razones de es-
tética no puede ponerse en el punto de venta, etc.
La gestión de las devoluciones también permitirá reutilizar el producto o partes de él para la provisión
de repuestos, separación de componentes no deteriorados que puedan incorporarse al mercado, repa-
ración del producto en su conjunto, etc.
Es importante por ello reservar una zona del almacén a la gestión de residuos y a la gestión de las devo-
luciones.
ACTIVIDAD 2
Tenemos unos costes de embalaje no reutilizable de 5 céntimos de euro la unidad. Solemos
utilizar 200000 cajas al año, en un total de 3 trasiegos al día y 360 días laborales. Las utilizamos
para suministrar productos a un cliente en circuito cerrado, este cliente nos devuelve los palés,
donde van dispuestas las cajas, en los viajes de retorno para volver a cargar más material. Nos
ha visitado un comercial de una empresa que se dedica a vender cajas de plástico. Cada unidad
de estas cajas vale 10 euros y son apilables. ¿Qué respuesta le daría a este comercial?

LO QUE HEMOS APRENDIDO
- La importancia de los envases y los embalajes en la preparación de los pedidos es crítica para la co-
rrecta recepción del mismo por parte del cliente.
- Existen un buen número de envases y embalajes que se adaptan a los productos, saber seleccionar
el adecuado dependerá de las características del producto.
- Los tres niveles de embalaje existentes nos indican la función que realiza cada uno. Cumplir con los
tres niveles nos acercarán a niveles óptimos de servicio.
- Deberemos identificar las necesidades de material adecuado para el embalaje que necesitaremos
para nuestros pedidos. Dependiendo de la distancia que tenga que recorrer o dependiendo del medio
de transporte tendremos que cumplir especificaciones concretas.
- La identificación y etiquetado de las unidades de carga ayudarán a una última verificación previa a
la carga y también a la recepción del pedido por parte del cliente.
- El correcto embalado del pedido redundará en una mejor imagen de la empresa y satisfacción del
cliente.
- Seguir las recomendaciones de AECOC posibilitará que compartamos procedimientos y herramientas
con otras empresas con las que podamos colaborar, facilitando y optimizando los procesos de ambas
compañías.
- Implementar la filosofía de las 3R en la empresa otorgará posibilidades de ahorro de costes y cum-
plimiento de normativas, mejorando la imagen de la compañía.


Envases y Embalajes

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tema 3

O ENTREGA - Interpretar los símbolos utili-

Añadiremos otro factor más, aparte de la protección y optimización

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ción de los materiales dentro de la unidad de carga, generará

pg. 76 Tema 3 / Envases y embalajes

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1.2 Embalaje primario: envase

1.3 Embalaje secundario: cajas

MF1326_1 / Preparación de pedidos pg. 77

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1.4 Embalaje terciario: palés y contenedor

pg. 78 Tema 3 / Envases y embalajes

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pg. 80 Tema 3 / Envases y embalajes

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2.3 Caja dispensadora de líquidos

MF1326_1 / Preparación de pedidos pg. 81

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2.4 Caja envolvente o Wrap around

2.5 Caja expositora

pg. 82 Tema 3 / Envases y embalajes

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2.7 Caja de fondo semiautomático

embalar, posibilitando además la reutilización de la caja.

MF1326_1 / Preparación de pedidos pg. 83

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2.9 Caja de plástico

2.10 Caja con rejilla incorporada

Cajas de diferentes materiales (cartón, plástico, madera,

pg. 84 Tema 3 / Envases y embalajes

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2.12 Caja de tapa y fondo

2.13 Caja de solapas

para la optimización ni de tiempo de preparación ni de espa-

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2.16 Film plástico

2.17 Plató agrícola

2.18 Saco de papel

pg. 86 Tema 3 / Envases y embalajes

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El separador es el complemento que llevan las cajas con re-

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5. OPERACIONES DE EMBALADO MANUAL Y

5.1 Consideraciones previas: dimensión, número de artículos o

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pg. 90 Tema 3 / Envases y embalajes

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6. CONTROL DE CALIDAD: VISIBILIDAD Y LEGIBILIDAD

6.1 Recomendaciones de AECOC y simbología habitual

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7. USO EFICAZ Y EFICIENTE DE LOS EMBALAJES:

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