Feminismo y Fútbol: Un complemento perfecto

Nombre: Felipe Garrido Q.

Curso: 3° E
Correo electrónico: alonsofelipegarrido@gmail.com

Hace unas cuantas décadas atrás, resultaba casi imposible pensar que las mujeres podrían
abrirse paso en un mundo tan machista y exclusivo como lo es el fútbol. Razones sobraban
para pensar en aquello, puesto que, desde sus inicios, siempre fue un deporte que se limitaba
a la participación del género masculino en su totalidad. No obstante, ha sido sorpresivo
imaginar que las mujeres podían adentrarse en este y tantos otros mundos, que
probablemente, nunca fueron ideados para ellas.

Actualmente, el futbol femenino congrega a cientos de miles que apoyan el desarrollo de este
deporte desde ambos géneros. Ya no es terreno exclusivo de hombres, ahora son ellas las que
cada vez han ido adquiriendo mayor protagonismo en la cancha. No es una aseveración
apresurada, si consideramos la reciente participación de la Selección Chilena de Futbol
Femenino en el Mundial de Francia 2019. Ellas tuvieron un corto pero destacado paso en el
campeonato desarrollado en tierras europeas. Sin duda que esta participación ha marcado un
precedente, ya que al igual que otras disciplinas, contribuye a potenciar la equidad de género
dentro del mundo del deporte, tanto a nivel nacional como mundial.

A pesar de lo anterior, sería importante preguntarse cómo es que las mujeres han logrado
abrirse paso en terrenos que se creían que eran exclusivos de hombres. La respuesta pareciese
ser que se encuentra en el Feminismo. Aludiendo a una definición concreta, entendemos
como Feminismo al movimiento que busca reivindicar la igualdad de derechos y deberes de
hombres y mujeres dentro de una misma sociedad. Contrario a lo que algunos podrían pensar,
el feminismo no concierne un odio de mujeres a hombres, sino que busca establecer un
sistema de igualdad respecto a los derechos y deberes de ambos sexos dentro de la sociedad
en general.

Es probable que muchas mujeres nunca se atrevieron a explorar sus habilidades debido a la
corriente machista que durante años ha reinado en nuestra sociedad. No obstante, el
feminismo ha establecido una lucha frente a las injusticias de género, permitiendo que las
mujeres se abran paso en cualquiera sea el espacio que pretendan cohabitar. Tal vez por
mucho tiempo muchas mujeres se han negado a descubrir otros espacios por temor al juicio
público, lo cual se ha visto desechado a través del feminismo, que busca empoderar a la
mujer, e invitarla a ampliar sus horizontes de lucha dentro de la sociedad. Asimismo, este
deporte ya no es tierra de machos; las mujeres son tanto o más capaces que ellos de conocerlo,
practicarlo, jugarlo y hacer de ello una profesión y estilo de vida. En pleno siglo XXI resulta
imprescindible que el ser humano amplíe su mente y sea capaz de equiparar ambos sexos en
relación a capacidades, pensamientos y habilidades.

El Feminismo se ha convertido en un bien necesario para nuestra sociedad; no sólo en

ámbitos deportivos, sino que también, en el descubrimiento y reivindicación de hábitos,
costumbres y rutinas. Un ejemplo de ello son las nuevas formas de crianza, donde el hombre
también toma protagonismo dentro del proceso, adquiriendo roles compartidos. De ser la
figura proveedora, pasa a ejercer la paternidad desde una perspectiva más equitativa y
consciente. Ciertamente, las nuevas realidades que se abren paso en nuestra sociedad, habrían
sido impensadas en décadas pasadas, donde el papel de la mujer era mucho más limitado y
la sociedad un medio segregador.

Al mismo tiempo, resulta fascinante ver cómo la sociedad evoluciona y al mismo tiempo,
revoluciona la forma de pensar de quienes habitamos en ella. Para ello, el feminismo ha
tomado un rol principal, ya que ha contribuido a evidenciar lo que significa la importancia
de generar nuevas políticas en torno a la igualdad de género. Ciertamente, esta área es uno
de los tantos espacios en lo que la mujer ha conseguido establecer un espacio mucho más
amplio que antes, pero también es cierto que la lucha por los derechos de la mujer no ha
cesado, y aún quedan escenarios en los cuales la mujer aún no es participe.

Es tarea de todos contribuir a potenciar la participación de mujeres y hombres dentro del

medio social, político y cultural, y también deportivo, en el caso del futbol. El Feminismo
nos enseña el valor del respeto y equidad mutua, igualdad en derechos y deberes para todos,
y es nuestro deber trabajar y luchar para que eso suceda. Qué gratificante es ver cómo
hombres y mujeres pueden establecerse en diversos enfoques, sin importar género, raza o
religión. Que el único foco sea contribuir a la equidad de género, más allá del espacio en el
que se desarrolle. Qué gratificante sería poder construir una sociedad donde mujeres y
hombres puedan desempeñarse en las mismas disciplinas, explorar los mismos espacios, y
desarrollar las mismas competencias, sin exclusión. Eso es lo que podemos entregar a las
futuras generaciones; que sin importar quienes seamos, podemos alcanzar las mismas metas,
dentro del respeto, tolerancia, equidad e inclusión.