EL DESCUBRIMIENTO DE JEREMÍAS

Neville Goddard 17/11/1969

El cuerpo de las Escrituras es la Palabra de Dios, que todo niño nacido de mujer
debe escuchar, asimilar, comprender y aceptar por completo. Esta creencia hará
que la Palabra haga erupción dentro de él, y al experimentar la Palabra de Dios,
él descubre quién es realmente.

El Libro de Juan comienza:

"En el principio era la Palabra, y la Palabra estaba con Dios y la Palabra era Dios. Él estaba
en el principio con Dios: Todas las cosas fueron hechas por medio de Él y sin Él nada de lo que
fue hecho fue hecho. Estaba en el mundo, el mundo fue creado por Él, pero el mundo no lo
conocía. Llegó a su propio hogar y su propia gente no lo recibió."

Ahora, en el Libro de Jeremías, él nos dice:

"Fueron halladas tus palabras, y yo las comi; y tu palabra fue para mi el gozo y la alegria de
mi corazón, porque por tu nombre soy llamado, oh Jehova Dios de los ejércitos."

¿Qué fue lo que comió Jeremías? La palabra. ¿Y cuál es la Palabra? ¿Qué descubrió Jeremías que era la
verdad concerniente a Dios? Él descubrió que Dios era la imaginación humana.

Blake cuenta esta historia de una manera simple en sus "Canciones de Inocencia" como:
EL CORDERO
Corderito quién te hizo
¿No sabes quién te hizo?
Él es llamado por tu nombre,
porque se llama a sí mismo un Cordero:
Él es manso y es suave,
se convirtió en un niño pequeño:
Yo un niño y tú un cordero,
somos llamados por su nombre.
Pequeño cordero Dios te bendiga
Pequeño cordero Dios te bendiga.

Aunque esto parece ser una canción de cuna, Blake dice una verdad muy profunda: "Yo un niño, y tú eres
un cordero, somos llamados por su nombre." En este poema, Blake repite la misma historia registrada en el
capítulo 15, el versículo 16 de Jeremías, diciéndonos a todos que la imaginación humana es el Dios de las
Escrituras. Escuche atentamente esta afirmación de Blake:

"Babel (el mundo con sus múltiples lenguas) se burla diciendo que no hay Dios o
Hijo de Dios. Que tú, oh Imaginación Humana, Oh arte del cuerpo divino, todo es
una ilusión Pero te conozco, oh Señor, cuando te levantas sobre mis cansados
ojos, incluso en este calabozo, este molino de hierro. Porque tú también me
toleras aunque no te miro. Entonces la Voz Divina respondió: '¡No temas! Aquí,
estoy contigo siempre. Solo cree en mí que tengo poder para levantar de la
muerte a tu hermano que duerme en Albión: No temas, oh sombra
temblorosa.'."

El profeta Jeremías (que significa "Jehová se levantará") nos está diciendo en su capítulo 15
que somos llamados el Señor Dios de los ejércitos. El hombre está destinado a descubrir que
Él es el Señor Dios de los ejércitos, a pesar de que ahora usa una prenda de carne y está
restringido.
 Restringido por todas las debilidades y limitaciones de la carne, el cuerpo que usa se
descompone, pero no es usted. Es una máscara que usted, el Señor Dios de los ejércitos, está
usando. Un día lo sabrás por experiencia, y luego, sin importar lo que diga el mundo,
conocerás la verdad, y al conocerla serás liberado.

He experimentado las escrituras. Aunque continúo usando esta prenda, que se está desgastando
lentamente y que algún día debe desecharse, ya no me devolverán a otra prenda similar a esta, ya que
abandonaré esta esfera por completo para volverme uno con el cuerpo que era mío antes de que el mundo
fuera, y donde sea que este cuerpo esté, hay cielo.

No hay un reino llamado cielo. Estás en el cielo por el hecho de que usas el cuerpo que se ha despertado
dentro de ti. Es el cuerpo imaginativo, y donde sea que vaya es el cielo. Nada puede permanecer imperfecto
en su presencia. Si vas al infierno, al instante (no durante un período de tiempo, sino instantáneamente) el
infierno se transforma en el cielo.

Ahora, ¿a qué se refería Jeremías cuando dijo: "Fueron halladas tus palabras y yo las comí"? ¿Cómo puede
uno comer palabras? Un año, cuando estaba en Barbados, visité una institución mental con mi hermano,
Lawrence, que era el médico allí. Mientras caminábamos por el pasillo, apenas podía creer lo que veía,
cuando vi a hombres arrancar páginas de la Biblia y comérselas. Estaban tomando la declaración de
Jeremiah literalmente.

Pero los profetas fueron inspirados y escribieron lo que escucharon y vieron, sin embargo, nuestros padres
de la iglesia primitiva agregaron a sus palabras para ajustarse a las tradiciones y convenciones de la iglesia,
cambiando por completo el cuadro. Déjame darte un par de ejemplos.

El capítulo 3 del Libro de Juan habla de una conversación entre uno llamado Nicodemo, un maestro de lo
que se considera correcto con respecto a Dios, y uno que había experimentado a Dios y afirmaba: "Cuando
me ves, ves al Padre, porque yo soy el Padre." Es Él quien hace esta declaración: "A menos que nazcas de
arriba, no puedes entrar en el reino de los cielos." Entonces Nicodemo cuestionó: "¿Cómo puede uno que
es viejo una vez más entrar en el vientre de su madre y nacer?" La respuesta se registra en el versículo 5
como: "De cierto, de cierto te digo, a menos que hayas nacido del agua y del espíritu, no puedes entrar al
reino de Dios."

Aquí encontramos que las palabras "agua y" no están en el guión original.

En el octavo verso, el Señor continúa, diciendo: "El viento sopla donde quiere y escuchas el sonido de él,
pero no puedes decir de dónde viene y ni a dónde va, así es con todos los que nacen del espíritu."

Aquí la palabra "agua" no se usa, y el espíritu se compara con el viento. Entonces, a medida que el espíritu
(viento) se mueve donde quiere, escucharás su sonido, pero no podrás saber de dónde viene ni adónde va.
Esto es verdad con todos los que nacen del espíritu.

Mi madre vino a este país cuando mi hijito tenía dos años y medio, y una de las primeras preguntas que le
hizo fue si había sido bautizado. Cuando ella supo que él no, ella se sorprendió y dijo: "Supongamos que
muere. Entonces no puede ir al cielo." A la madre le llamaron la atención las palabras "agua y espíritu", y
para ella significaba bautismo por agua, pero el agua no tiene nada que ver con eso. La palabra fue
agregada, ya que trae un ingreso bastante bueno. Aunque los padres no cobran por la pequeña ceremonia,
se espera que se dé algo para el evento. Esta es una de las muchas pequeñas indulgencias de nuestras
iglesias.

Sé, sin embargo, por haber nacido de arriba, que el viento es correcto y el agua es falsa. Escuché el viento.
Estaba en mi cabeza, pero parecía venir de afuera. No sabía de dónde vino y ni a dónde fue. Lo mismo
ocurre con todos los que nacen del espíritu, y no tiene nada que ver con el agua. Aunque el agua y la sangre
son símbolos de nacimiento, la declaración en el versículo 34 del capítulo 19 de Juan: "Cuando se le
traspasó el costado, vino agua y sangre", se añadió la palabra "agua".

Recuerde, el cuerpo de las Escrituras es la Palabra y la Palabra es Dios. La Palabra debe ser asimilada, y lo
que no puede ser asimilado (como el mundo físico) debe ser rechazado o eliminado. Comenzando con el
versículo 51 del capítulo 6 de Juan, elimine la segunda mitad del versículo 51 hasta el versículo 58, luego
entre al 59: "Yo soy el pan que descendió del cielo. El que come mi cuerpo vivirá para siempre.” Esto lo dijo
en la sinagoga. Entre estos nueve versículos encontrarás las palabras que apoyan la sagrada comunión, todo
agregado por los primeros padres para apoyar las tradiciones de la iglesia.

He mencionado solo unos pocos versículos, pero podría pasar por toda la Biblia y mostrarte muchos lugares
donde se cambiaron las palabras para que se ajusten a las tradiciones de la iglesia.

Cuando mi madre insistió en que mi hijo fuera bautizado, lo llevé a un ministro episcopal, donde le puso un
poco de agua en la cabeza. Lo único que sucedió durante esa ceremonia fue que mi hijo se mojó la cabeza.
Ciertamente no le hizo nada espiritualmente. Pero, a pesar de las advertencias mencionadas al final de
Proverbios: "Que nadie agregue o tome de la palabra de las profecías de este libro", y Apocalipsis, con
respecto a la adición o eliminación de las palabras del libro, nuestros primeros padres no los escucharon.

Más bien intentaron hacer que las palabras se ajustaran a sus tradiciones y convenciones. El Libro de Juan
tiene muchas poderosas afirmaciones YO SOY: "Yo soy la luz del mundo, YO SOY el pan de vida, YO SOY la
puerta, YO SOY el camino", pero en ningún momento dijo: "YO SOY" la convención, o YO SOY la tradición,
sin embargo, para apoyar las tradiciones de la iglesia, los primeros padres agregaron a la palabra de Dios.

Te digo: Detrás de la máscara que usas eres el único Dios. La Imaginación Divina se reprodujo en ti como tu
imaginación humana, y debido a que la Imaginación Divina contiene todo, todo está contenido en la
imaginación humana. Un día te despertarás ante este hecho y descubrirás que el mundo eres tú mismo
exteriorizado, así como el mundo es Dios exteriorizado. A medida que este conocimiento despierta en ti,
comienzas a expandirte en el seno de la Imaginación Divina. Entonces, para ti, la imaginación humana y
Dios, la Imaginación Divina, son Un creador.

Estás comiendo el cuerpo de Dios al escuchar la palabra. Ahora asimílelo al detenerse en él. Nehemías nos
dice: "Leyeron la palabra de Dios con la interpretación y dieron el significado para que la gente
entendiera lo que se leía." Al meditar en la palabra de Dios, su significado se le revelará desde adentro.

El Nuevo Testamento es sólo el cumplimiento del Antiguo. Identificando la palabra con el pan de la vida,
Juan nos dice que ha cumplido la declaración en Jeremías: "Fueron halladas tus palabras, y yo las comi; y
tu palabra fue para mi el gozo y la alegria de mi corazón, porque por tu nombre soy llamado, oh Señor
Dios de los ejércitos."

Incapaz de pagar el alquiler, comprar ropa o alimentar a su familia debido a las

limitaciones del cuerpo que ahora usa, puede que le cueste creer que usted es el
Señor Dios de los ejércitos, pero lo es. Nadie te impuso esta limitación, lo hiciste
todo por ti mismo. Usted tiene el poder de dejarlo y el poder de levantarlo
nuevamente.

Lo hiciste para expandir tu poder y tu sabiduría, ya que tu viaje es de expansión

constante y no podrías expandirte a menos que primero te hayas contraído.
Debes alcanzar el límite de contracción y opacidad llamado Hombre, antes de
que puedas romper el caparazón para descubrir tu verdadera identidad que está
contenida dentro de ese caparazón (cuerpo) que has estado usando. Entonces
usted, el Dios que creó el mundo, comenzará a expandirse más allá de lo que era
cuando decidió contraerse para expandirse. Todos tendrán éxito. ¡Nadie fallará!
 Hoy puede estar satisfecho con sus ganancias y el lugar en el que vive en su forma
contratada, pero un día comerás (experimentarás) la palabra de Dios y te
expandirás a la conciencia de saber: "Yo soy Él." Esto sucederá solo cuando el
hambre de una experiencia así se apodere de ti, como nos dijo en el Libro de
Amós: "Enviaré hambre sobre la tierra. No será hambre de pan, ni sed de agua,
sino para escuchar la palabra de Dios."

La persona promedio no está interesada en escuchar la verdad revelada. Ayer leí un sermón en el periódico
donde el ministro decía que la religión debe estar enraizada en la razón. ¡Qué absurdo! La religión es verdad
revelada. ¿Cómo podría explicarse lógicamente la historia del nacimiento desde arriba? ¿Cómo podría
alguien como Nicodemo, nacido del vientre de la mujer y acercándose a la tumba, nacer desde arriba
lógicamente?

El mundo piensa que "arriba" está ahí afuera, pero está dentro. Viniste "afuera" al nacer
desde abajo. Sólo al nacer desde "adentro" puedes entrar al reino de los cielos. Ese interior es
desde arriba, y esa superioridad es el cráneo del Hombre. Ahí es donde ocurre el nacimiento
espiritual y no hay agua presente.

Si a su familia le agrada que el niño pequeño se bautice, hágalo, pero el bautismo con agua no tiene nada
que ver con entrar al cielo, porque este mundo no termina en el punto donde sus sentidos dejan de
registrarlo. Cuando alguien muere aquí, es porque se han separado del cuerpo que ahora llevan puesto,
pero todavía se encuentran en un mundo terrestre como este. Todos son restaurados instantáneamente a
una vida terrestre hasta que nacen desde adentro (desde arriba), entonces ya no son restaurados, porque
son hijos de Dios que ahora se saben a sí mismos como uno con Dios.

Jeremías descubrió que Jehová era su propia imaginación humana maravillosa.

Sé que esto es cierto, porque ha resucitado en mí y ahora llevo la prenda en la
que se levantó. Era mía antes de que el mundo fuera.

Luego me la quité para entrar en esta prenda de carne. Mientras la llevas, todas
las imposibilidades se disuelven, como el toque de exaltación que surge en mí
imparte a mi naturaleza, y donde sea que vaya, vestido de esa forma, es el cielo.

Blake identificó la imaginación humana con el cuerpo divino del Señor Jesucristo, diciendo:

"Babel se burla diciendo que no hay Dios o hijo de Dios,

pero tú, oh imaginación humana,
oh arte del cuerpo divino, todo es una ilusión,
pero yo te conozco, Oh Señor."

Sabiendo exactamente lo que había experimentado y cómo había viajado a través del puente
del incidentes que lo llevó de regreso a este estado mundano llamado el mundo de la vigilia,
supo, cuando abrió los cansados ojos, que había regresado. Pero en ese reino, lo que sea que
haya imaginado sucedió, y él conocía el poder del creador. Sabía que todas las cosas estaban
hechas por la imaginación, y sin imaginación no se hizo nada de lo que se hizo.

Si despiertas en un sueño y sabes exactamente quién lo está imaginando, puedes controlar

tu sueño. Lo mismo es cierto en este mundo. Ten en cuenta que, también, es un sueño.
¡Despierto! Recuerda quién lo está imaginando y controla tu día. Entonces, un día, te
despertarás completamente para encontrarte en ese cuerpo que es el Señor Jesucristo, para
saber que todo es tu imaginación exteriorizada. La restricción que se impuso a sí mismo
cuando llegó aquí fue con el propósito de la expansión, porque no podría expandirse hasta
que haya alcanzado el límite de contracción y opacidad llamado hombre.
Hay quienes esta noche negarán mis palabras, pero sé la verdad de la que hablo. Cuando mi madre me
contó la palabra de Dios, la creí, pero ahora sé la palabra de Dios por experiencia. Mi conocimiento no está
enraizado en la razón, se revela la verdad, y cuando la verdad se revela, es porque Dios se ha revelado en el
individuo. La verdad no puede ser probada lógicamente. Debe ser experimentada para ser conocida, y
cuando se comparte, algunos creerán y otros la negarán. Entonces, cuando leas las "Canciones de la
inocencia" de Blake, recuerda: Blake está diciendo una verdad profunda en el lenguaje del niño que puede
mantenerse viva, debido a que está tan bellamente dicho, sus palabras vivirán para siempre:

“Corderito quién te hizo

¿No sabes quién te hizo?
Él es llamado por tu nombre,
porque se llama a sí mismo un Cordero:
Él es manso y es suave,
se convirtió en un niño pequeño:
Yo un niño y tú un cordero,
somos llamados por su nombre.
Pequeño cordero Dios te bendiga
Pequeño cordero Dios te bendiga.”

En este sencillo poema, Blake comparte la experiencia de Jeremías tal como se registra en su capítulo 15, el
versículo 16. El cordero es un símbolo. Nos quitamos la vida cuando entramos en este mundo, ya que
somos la humanidad universal que Blake llama Albion. Todos caímos en la individualidad y la diversidad.
Como el Hombre se reúne, todos nos levantaremos, uno por uno, de vuelta al mismo Hombre que es Dios el
Padre. Todos serán reunidos, ya que el cuerpo no estará completo hasta que todos sean redimidos.

Tú y yo somos los dioses contenidos en el único Dios. La palabra hebrea "Elohim" a veces se traduce singular
y otras veces plural, como en la gran confesión de fe del hebreo: "Oye, oh Israel, el Señor (singular) nuestro
Dios (plural), el Señor (singular) es Uno." Un Señor se convirtió en innumerables dioses que ahora están
siendo reunidos de nuevo en el único Señor.

Espero que pueda quitarte las cosas que se han agregado a las Escrituras, porque confunden la mente.
Olvide la palabra "agua". No has nacido del agua y del espíritu. El tuyo es un nacimiento espiritual, y ningún
bautismo físico tiene nada que ver con eso. Si le agrada a la familia, bautice a su hijo, pero no piense que
porque alguien le puso un poco de agua en la cabeza tuvo una experiencia espiritual, porque no lo hizo.

Sin embargo, todos experimentarán el verdadero bautismo, cuando se parará en la presencia del Señor
Resucitado, para ser abrazado en su cuerpo de amor. Luego es enviado a experimentar la Palabra de Dios,
porque "Mi Palabra no puede volver a mí vacía, sino que debe cumplir aquello para lo cual la envié, y
prosperar en aquello para lo que fue enviada", y la Palabra de Dios es Él mismo.

Penetrando tu cerebro y anexando tu cuerpo, Dios, ahora creyéndose tú mismo, está pasando por las
aflicciones del mundo como tú hasta que despierta en ti.

Entonces verás el mundo como nada más que tú mismo exteriorizado. Y si no te gusta lo que ves, lo cambias
dentro de ti cambiando tu actitud hacia él. A medida que tu actitud cambia, también lo hace tu mundo,
porque todo está dentro tuyo.

Entonces, un día, despertarás para entrar y convertirte en uno con la prenda que era tuya
antes de que el mundo fuera, ser uno de los observadores desde arriba, contemplando el
mundo de la muerte y esperando ansiosamente el regreso de todos tus hermanos. Tú y yo
éramos antes de que el mundo fuera. Todavía lo somos, pero no nos reconocemos. Y cuando
este mundo deje de existir, todos seremos realzados por la experiencia de venir aquí y vencer
a la muerte.
Lo que te estoy diciendo, lo sé por experiencia. No estoy especulando o teorizando. En el mundo de César,
soy débil y limitado, pero sé lo que he experimentado y no puedo negarlos.

Sé exactamente lo que tenía para cenar esta noche. No puedo negar la comida que comí, del mismo modo
que no puedo negar las visiones que he tenido al revelar mi verdadera naturaleza, y sé que todos las van a
tener. Cuándo, no sé. El día y la hora siguen siendo el secreto del Padre en ti, porque no despertará hasta
que haya cumplido su propósito. Habiéndose enviado al mundo vestido como usted, cuando despierta,
usted es el Señor Dios Todopoderoso, pero sigue restringido hasta que se quite esta prenda carnal del actor,
la cuelgue y abandone esta etapa para siempre.

Pero mientras estamos aquí, se nos da una Ley por la cual, a través de su operación, podemos saber quién
es Dios. La ley es simple. Se dice de muchas maneras, una de las cuales es: "Como el hombre siembra, así
cosechará." Cuando imaginas que eres el hombre (la mujer) que te gustaría ser, estás sembrando ese
pensamiento imaginal en tu mente.

En la medida en que seas fiel a esa asuncion, cosecharás su fruto en tu mundo, pero primero debes saber
lo que quieres. Puede que no desee la riqueza de un Rockefeller o la fama de un Richard Burton.
Ciertamente no deseo ese tipo de dinero o fama, pero si alguien me dice que realmente lo quiere, rezaré
por él para que lo tenga.

Todo aquí se está desvaneciendo y algún día desaparecerá, pero el inmortal tú que no funciona en este
mundo, vivirá para siempre. Todo lo que has logrado aquí desaparecerá, sin dejar rastro, pero el ser del que
hablo es perfecto y funciona en un ámbito de perfección.

No puede haber ciego, ni sordo, ni paralítico, ni limitación alguna en ese ámbito, más bien, a
medida que te deslizas, todo se transforma en la perfección que sabes que eres. Eso es el
cielo. El cielo no es una localidad, sino un cuerpo, un personaje que, a medida que se mueve
en el universo, lo transforma todo en la perfección que sabe que es. Luego se convierte en el
reino, por el momento, hasta que lo deja para que alguien lo ocupe, ya que se mueve a la
perfección en otro lugar.

Cuando leas el Libro de Juan, no pienses en comer el cuerpo de un hombre físico

o las páginas de la Biblia, sino la Palabra de Dios, la cual, habiéndola oído con
interpretación, la comes al captarla en el acto de asimilación. No puedes
comprenderlo todo de una vez.

Ciertas porciones que quizás no puedas digerir, por lo tanto, recházalas por un tiempo. Eventualmente
comerás todo el pan como mi amigo lo vio, como vivo, derramando sangre. Las bellas imágenes que vio en
su visión le dicen que ha aceptado completamente la verdad, y que todas las cosas surgen de su maravillosa
imaginación humana. Ella ha comido mi cuerpo y bebido mi sangre a través de su aceptación.

Ahora sabe que no tiene que ir a la iglesia para tomar una oblea y beber un sorbo de vino para comer el
cuerpo de Dios. Más bien, ella sabe que lo está haciendo al aceptar el hecho de que imaginar crea la
realidad. Ella puede vacilar al probarlo en el ensayo, pero lo ha aceptado completamente. Es por eso que el
símbolo vino a ella en una visión a la que siempre puede recurrir.

Ahora sabe que no puede pasar la pelota culpando a su esposo o a sus hijos, sino que debe
volverse hacia sí misma y decir: "Ningún hombre toma mi poder de mí, lo dejo yo mismo. Y
nadie viene a mí salvo que mi Padre lo llame, porque Él y yo somos uno".

Alguien puede ser un bribón y tomar de ti lo que es tuyo, pero cuando sabes que
imaginar crea la realidad, reconocerás que nadie podría entrar en tu vida a
menos que lo hayas llamado. Y no podría haberte quitado a menos que tú, por
tu actitud hacia la vida, lo hubieras permitido.
El mundo es exteriorizado, y tú lo controlas o no. Esa es la historia de las escrituras. No hay otro Dios más
que tu maravillosa imaginación humana. Si, cuando hablas de Jesucristo, te inclinas mentalmente (si no
físicamente) haces lo mismo cuando piensas en tu imaginación, porque ese es Él. La imaginación es la
Palabra de Dios que es Dios mismo. El mundo fue creado, es apoyado y sostenido por tu maravillosa
imaginación humana. ¡Cambia tu imaginación! Crea el cambio en el ser y vivirás en un maravilloso mundo
de la vida.

Ahora vayamos al silencio.

***
Título de la conferencia original en inglés es JEREMIAHS DISCOVERY (Neville Goddard 11-17-1969 )
Fuente Original del texto en inglés http://realneville.com/txt/jeremiahs_discovery.htm

Traducido por Gabriel Santín con google traductor, re-visado y re-presentado para facilitar su lectura y estudio (30/08/2018)

Más material de la Obra de Neville en español en:

http://nevilleenespanol.blogspot.com, http://nevillizando.blogspot.com, http://nevillegoddard.ivoox.com