Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Ahora hay más trabajo que antes. No hay razón por el cual
deba apagarse tu llama y la devoción por Cristo.
No hay razón alguna. Sigue adelante, trabajando con amor
para Dios.
Dios quiere que siga ardiendo el fuego en nuestras vidas hasta
el fin de nuestros días en esta tierra, hasta presentarnos delante
de Él.
Por lo tanto…,
¿Qué hacemos?
1. NO DESCUIDEMOS LA PALABRA DE DIOS.
Cada vez que nos reunamos, traigamos la Biblia con nosotros,
porque así como es la leña para el fogón, así es la Palabra de
Dios para el creyente.
3. ASISTAMOS A LA IGLESIA.
Acostumbremos estar en los cultos siempre, el día que no
estemos presentes, que sea la excepción pero no la regla.
Y, el día que no queramos congregarnos, aún así, vamos al
templo. Porque es mejor un día en sus atrios que mil años fuera
de él. Si usted es una persona que ama la casa de Dios y la
comunión con sus hermanos, de seguro dirá como el Salmista:
Yo me alegré con los que me decían a la casa del Señor iremos.
Si usted es una persona esforzada, valiente, y que trata de no
fallar en sus actividades cúlticas, Dios sabrá que usted lo honra
y Él te honrará a ti.
4. NO DEJES DE OFRENDAR Y DIEZMAR.
Si como apostólicos que somos hemos recibido la doctrina de
nuestro Señor Jesucristo antes de ser bautizados y allí
aprendimos que el Sistema económico de la iglesia es el de
Diezmo y Ofrendas pero si por algún motivo no relacionado
con la Palabra usted lo ha dejado o se ha olvidado de ello,
retómelo ahora y aprenda a ser fiel a Dios en todo y usted verá
la bendición del Señor. Debemos ser leales y fieles como el
Señor Jesús lo es con nosotros.
Solamente recuerde, que es Jesús quien nos da el trabajo.
Quien prospera nuestro negocio. Él es quien nos da la salud
para trabajar y además, nos sana si es que estamos enfermos.
Todo proviene de Dios. Sin Dios no somos nada, y entonces,
¿Por qué no podemos diezmar y ofrendar como un principio
de fe, sabiendo que al no hacerlo acarreamos malas cosas hacia
nosotros mismos?
Malaquías 3:6-10
Óiganme, israelitas: Si ustedes no han sido destruidos es porque yo
soy el Dios todo poderoso y mi amor no cambia.
Busque a Dios todos los días, órele a Dios, dígale que quiere oír
su voz. No es pedir sus necesidades, es tener una relación más
estrecha con Él.
10. DEBEMOS INVOLUCRARNOS EN LA VIDA DE
OTROS.
La razón por la cual nos encontramos con las pilas bajas, es
porque solo pensamos en nosotros mismos.