DISCOS
FOLCLORISTAS URUGUAYOS
.. wedis deena de discos Ue-
gados a nuestras manos en los
iltimos meses ofrece un p no-
rama variade y rico de muestre canto:
popular de raiz folelérica,
Un titulo puesto en venta hace po-
eas semanas por Sondor ¢'Cimarro-
nes”, monofinico, 33.182) permite un
reeneventro con Osiris Rodriguez Ca:
filles, una’ de tas figuras pioneras del
folclorismo en nuestro pofs. El disco
enta versiones actuales ‘de varius
Obras grabdes originariamente para
‘Antar hace ya mas de una década,
conservando el estilo de siempre, que
permanece incambiado a través de
os aos, aun en sy énfasis declama~
tive y en su aire distanie. Osiris Ro-
‘rigtiez tiene una hermosa voz, a la
‘que permite retobarse sin preocupar-
se demasisdo por Hevarla de riends
corta. Tampoco le preocupa pulir su
técnica gullarristica, poniéndola al
dia en materia de matices y refina-
mientos timbrices: prefiere ‘alli con-
setvar su tocuie parejo, sdlido y s0-
nore, come forma de conservar —en
Ia guitarra como en la voz— ciertos
rasgos tradicionalesdel modo cam=
pero, aun cuando éstos se contradigan
con 'su decir cultivado y ciudadano.
La aparicién del disco es muy opor-
tuna, por cuanto hace facil la refe-
rencia a este antecedente prestizioso
y de amplia influencia, al enfrentar-
Se a Ia produccion de’ la generacién
siguiente 0 a Ia de los cantantes més
jévenes. —los de los veinte aitos—,
‘generaciones que no lograron. por su.
parte influir a Osiris Rodriguez
‘Ethel Moreles ha grabado su _pri-
mer disco (Orfeo, monofénico. ULP
90.566), que la muestra con buenas
condiciones vocales y expresivas. no
siempre explotadas i en “La redota”
de Tabaré Etcheverry, por ejemplo;
no en In folelérica “Memorias a Ar-
tigas” recogida por Lauro Avestaran)
El acompafiamiento de guitarras. tra.
dicional y por tanto duro y “pesado”,
no parece el mis adecuado a Iss ca~
MARCHA « 26 8
de los hombres, ademas de los
péjaros y de los monstrues, pieri dice en galeria U.
Sarandi 690 (entrepiso) en junio.
racteristicas de la interprete ni gran
parte de su repertorio, La tapa del
disco, bonita (equipo. As), recuerda
demisiado la de Bresciano para “Can-
to libre” de Viglietti
“Poeta al sur” (Orteo, estereofénico,
SULP 90.565) presenta un nuevo Ya-
mandi Palacios o un Yamandii Pala~
clos renovado. Producto del trabajo
conjunto del ietrista Ignacio Suarez
¥, del propio Palacios como compo-
Sitor, el disco mantiene una intere-
santé unidad, que permite apreciar ef
proceso de atianzamienté de un in-
térprete de hermosa voz hébilmente
manejada y de un suficiente dominio
de le guitarra; E) total es sobrio, cé
ido e intimo, resultado al que con-
curren los buenos arreglos de Luis
Pasquet y Federico Garcia Vigil Mo-
lests el ‘cierre repentino del poten-
clémetro en los finales de las piezas.
“Por ti, compafiero” (Macondo, mo-
nofénico, GAM 541), primer disco de
Rodolfo ‘Da Costa, joven de 25 atios,
opts por el testimonio combative, ¥
en es opcidn sactifica ciertas. proti~
jidades, justezas métricas y refina-
mientos de grabacién (exisie adicio-
nalmente un sensible descentrado et
Ia cara A), Importa la definids per-
sonalidad de Da Costa y sus buenss
condiciones de intérprete, incluido el
Heo timbre de su voz.
El ctiatto yolumen (De ly Plants
monofinico, KL 8320) de Victor Me
nue! Pedemonte es sin embargo el
primero que hemos recibido a Ia fe-
cha. Pedemonte pose una voz excep~
clonalmente grave y de espectro ar-
ménico Heno, que mocula con buen
gusto, déndole bast»nte_flexibilidad,
Es ademés buen. guitarrista, lo cual
concvrre a la abtencién de ‘un buen
producto final, Pedemonte creador
imesinativo, si bien un tanto apegado
a'la tradicién folcloristica de la ge-
neracién anterior
ara Manuel Capella ha pasado
mucho tiempo desde su: poco feliz in-
ifios y los pdjaros
y, también, de los hombres, de los nifios, de los
\
‘sursién junto con Francisco ‘Trelles
por tierras de luces malas, brujes,
aparecidos y demas (De la Planta,
monofénico, KL 830%. En “Se trata
de caminar” (De la Planta, monot6~
nico, KL #326) el proceso vivido co-
eetivamente ha centrado a Capella y
Je hace dar lo mejor de si, que es
‘bueno e interesa. Las canciones (ocho
en total) son de él, y ofrecen varios
puntos de interés, Hay aqui. y alli
influencias y arraigos varios, pero el
resultado tiene uns personalidad de-
finida, y fuerza. La voz es plena y
esti bien Hevada; en el acompana~
miento instrumental se destaca de-
masiado el permanente juego distra~
yente de la amandolinada guitarra