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Reduzca las distracciones: la música fuerte, los juegos de computadora y la televisión pueden estimular
en exceso a su hijo. Establezca como regla que se apaguen la televisión y la música durante las horas de
comida o mientras su hijo hace las tareas.
Siempre que sea posible, evite llevar al niño a lugares que sean demasiado estimulantes.
Organice su casa: Si el niño tiene lugares específicos y lógicos para guardar su trabajo escolar, juguetes
y ropas, es menos probable que los pierda. Aparte un lugar cerca de la puerta de enfrente para que ponga
su morral escolar de manera que pueda tomarla al salir de casa.
Establezca metas sencillas, accesibles: Busque un avance lento en lugar de resultados instantáneos.
Asegúrese de que su hijo comprenda que puede tomar pequeños pasos para aprender a controlarse a sí
mismo.
Limite sus opciones: Ayude a su hijo a aprender a tomar buenas decisiones proporcionándole dos o tres
opciones por vez.
Encuentre actividades en las cuales pueda triunfar su hijo: todos los niños deben sentir el éxito para
sentirse bien consigo mismo. Se sugiere inscribirlo en algún deporte como natación, béisbol, futbol, otros.
Disciplínelo con calma: A veces puede ayudar alejando al niño de la situación perturbadora
1.- Planificar actividades y tareas de tiempo breve (adaptaciones al ritmo y dificultad del escolar)
2.- Situar los pupitres de modo que se reduzca la dispersión.
3.- Explicar en voz alta. Pasearse por todo el salón. Utilizar apoyos visuales y auditivos novedosos.
4.- Aumentar la participación del escolar haciéndole preguntas.
5.- Incorporar al educando a las responsabilidades y deberes del grado.
6.- Implementar normas de comportamientos, colocarlas escritas en un lugar visible. Entregar premios o refuerzos
por su cumplimiento.
7- Revisar las normas diariamente.
8- Entrenar al educando para que aprendan a explicar a otros niños tareas cortas.
9.- utilizar mecanismos de auto refuerzo en grupos.
10.- Compartir con los padres para canalizar en el hogar el apoyo familiar.
Reduzca las distracciones: la música fuerte, los juegos de computadora y la televisión pueden estimular en
exceso a su hijo. Establezca como regla que se apaguen la televisión y la música durante las horas de comida o
mientras su hijo hace las tareas.
Siempre que sea posible, evite llevar al niño a lugares que sean demasiado estimulantes.
Organice su casa: Si el niño tiene lugares específicos y lógicos para guardar su trabajo escolar, juguetes y ropas,
es menos probable que los pierda. Aparte un lugar cerca de la puerta de enfrente para que ponga su morral
escolar de manera que pueda tomarla al salir de casa.
Recompense el comportamiento positivo: Dígale palabras amable, abrácelo o prémielo cuando alcance sus
metas a tiempo o se porte bien. Premie y recompense lo esfuerzos de su hijo por prestar atención.
Establezca metas sencillas, accesibles: Busque un avance lento en lugar de resultados instantáneos.
Asegúrese de que su hijo comprenda que puede tomar pequeños pasos para aprender a controlarse a sí mismo.
Limite sus opciones: Ayude a su hijo a aprender a tomar buenas decisiones proporcionándole dos o tres
opciones por vez.
Encuentre actividades en las cuales pueda triunfar su hijo: todos los niños deben sentir el éxito para sentirse
bien consigo mismo. Se sugiere inscribirlo en algún deporte como natación, béisbol, futbol, otros.
Disciplínelo con calma: A veces puede ayudar alejando al niño de la situación perturbadora. O puede ignorar la
conducta, si no está en riesgo de hacerse daño. El castigo físico no ayuda. Discuta la conducta de su hijo cuando
ambos estén calmados.
Para que la familia sea operativa, debe cumplir con las siguientes características: