Sei sulla pagina 1di 26

DERECHO NOTARIAL I

TEXTO PARALELO

6 DE JUNIO DE 2019
UNIVERSIDAD RURAL DE GUATEMALA
DAYANNA MIROBLABA GONZALEZ ORTIZ
4. INDICE
5. Introducción 2
6. Protocolo
6.8. Depósito y guarda 3
6.9. Casos en que se deposita 3
6.10. Protocolo del notario fallecido 3
6.11. Garantía y principios que lo fundamentan. 4
6.12. Pérdida, destrucción y reposición 5
6.13. Revisión ordinaria 5
6.14. Revisión especial por averiguación sumaria 6
6.15. Análisis comparativo en las legislaciones centroamericana. 6
7. Organización Legal del Notariado Guatemalteco
7.1. Requisitos habilitantes del Notario 7
7.2. Causas de inhabilitación para ejercer 7
7.3. Incompatibilidades con el Ejercicio Profesional. 8
7.4. Gobierno y Régimen disciplinario del notario 8
7.4.1. La Colegiación Profesional Obligatoria 9
7.4.1.1. Fines de la Colegiación Profesional Intervención de la Corte 9
Suprema de Justicia.
7.4.2. Intervención de la Corte Suprema de Justicia 11
7.4.2.1. Tribunales 11
7.4.2.2. Corte Suprema de Justicia 11
7.4.2.3. Colegio Profesional 12
7.4.2.4. Rehabilitación, su procedimiento 13
7.5. Impugnaciones o Recursos. 14
8. Fe Pública
8.1. Definición 14
8.2. Fundamento 15
8.3. Clases 15
8.3.1. Registral 16
8.3.2. Administrativa 16
8.3.3. Judicial 16
8.3.4. Extrajudicial o Notarial 16
8.4. Garantía de Autenticidad y Legalidad 17
8.5. Campo de Fe Pública. 18
9. El instrumento público
9.1. Documentos 19
9.1.1. Privados 19
9.1.2. Públicos 19
9.2. El instrumento público 20
9.2.1. Definición 20
9.3. Fines 20
9.4. Teoría de la prueba pre-construida. 20
10. Eficacia Jurídica Del Instrumento Público
10.1. Valor Formal del Instrumento público 21
10.2. Valor probatorio del instrumento público. 21
10.3. Impugnación por causas de nulidad 23
10.3.1. Fondo 23
10.3.2. Forma 23
10.4. Impugnación por Falsedad 24
10.4.1. Material. 24
11. Bibliografía 25

1
5. Introducción

El Derecho Notarial exige la aplicación de ciertos principios y reglas fundamentales


propios en la redacción de los instrumentos públicos. Si la técnica constituye las
reglas para constituir algo adecuadamente; la técnica notarial vendría a ser las
reglas de carácter notarial en la redacción de la escritura pública y actas notariales
para que estas nazcan a la vida jurídica, sino que surtan los efectos legales
deseados por las partes.

Es el Conjunto de disposiciones legislativas y reglamentarias, usos, decisiones


jurisprudenciales y doctrinas que rigen la función notarial y el instrumento público
notarial. Para el autor Oscar Salas: “ El derecho Notarial puede ser definido como
el conjunto de doctrinas y normas jurídicas que regulan la organización del
notariado, la función notarial y la teoría formal del instrumento público.”

La técnica notarial exige que el Notario conozca el derecho, principalmente el


Derecho civil, como pilar fundamental o piedra angular sobre la que gira toda la
ciencia del derecho; pero también debe de ser sabedor del Derecho mercantil,
laboral, procesal penal, administrativo, entre otros.

El Notario debe conocer, también, otras áreas del saber humano, tales como la
gramática, para redactar con claridad, precisión y sencillez; sin perder la técnica
científica de las cosas, el Notario debe de evitar las redundancias o el uso de frases
o términos inadecuados, además el Notario debe de conocer matemática
fundamental, medidas aritméticas y, sobre todo, aplicar en su quehacer notarial, la
lógica jurídica y el sentido común.

La técnica notarial la podemos explicar o describir a través de la estructura interna


y externa, tanto de las escrituras públicas, actas notariales o protocolaciones.

2
6.8 Depósitos y Guarda

Principiaremos diciendo que el Notario no es propietario del o los protocolos, ya que


únicamente es depositario del mismo y responsable de su conservación. El hecho
que sea él quien adquiera o compre el papel, no lo hace propietario del mismo. La
ley guatemalteca menciona los casos de depósito del protocolo, algunos en forma
temporal y otros en forma definitiva.

6.9 Casos en que se deposita

Puede hablarse de entrega, siendo los siguientes, por:

 Ausencia del país por tiempo menor de un año.


 Ausencia del país por más de un año.
 Inhabilitación.
 Entrega voluntaria.
 Fallecimiento.

En el primer caso, el Notario debe dejar depositado su protocolo en otro Notario


hábil, dando un aviso firmado y sellado por ambos Notarios al Archivo General de
protocolos, (art.27). En estos casos el Notario al cual le queda en depósito el
protocolo, puede extender las copias o testimonios que fueran necesarias, ya que
tiene facultad para ello, ningún otro Notario podría hacerlo, pero desde luego no
podrá autorizar escrituras en ese protocolo que le ha sido depositado. Mientras dure
la ausencia del notario depositante, el depositario es responsable de la guarda y
custodia de ambos protocolos, ya que la ley exige que sea también un Notario hábil.

En el segundo caso, si la ausencia es por más de un año, el protocolo debe


depositarse en el Archivo General de Protocolos, directamente si es en la capital, o
por medio del juez de Primera Instancia en los departamentos, quien lo debe remitir
al Archivo. (Art. 27). En estos casos, es el Director del Archivo General de
Protocolos, el único facultado para extender copias y testimonios.VEn los casos de
que el Notario quedare inhabilitado por cualquier causa, debe entregar sus
protocolos al Archivo General de Protocolos en la capital, y al juez de Primera
Instancia en los departamentos, para que éstos los remitan al Archivo (Art. 26),
siendo el Director del Archivo General de Protocolos, el que tendrá las facultades
de extender las copias y testimonios que le sean requeridas.

En el cuarto caso, si un Notario voluntariamente decide dejar de cartular, también


puede hacer la entrega de los protocolos al Archivo (Art.26), podría darse el caso
que, por su edad, alguna enfermedad, o porque simplemente no desee seguir
ejerciendo tome tal decisión. Desde luego en los casos anteriores los protocolos
serán devueltos por requerimiento personal del Notario depositante al quedar sin
efecto la causa que motivó el depósito. (Art. 28).

6.10 Protocolo del notario fallecido:

En el último caso, del fallecimiento del Notario, los albaceas, herederos, parientes,
o cualquier persona que tuviera en su poder protocolos de un Notario fallecido,
deben depositarlos dentro de los treinta días siguientes al fallecimiento al Archivo
General de Protocolos, si fuere en la capital, al Juez de Primera Instancia, si
estuviere en una cabecera departamental; o al Alcalde, si estuviese en un municipio;
en esos casos, estos funcionarios deben remitirlo dentro de los ocho días siguientes
del depósito al Archivo de protocolos (Art. 23).

6.11 Garantía y principios que lo fundamentan

Se ha dicho que las garantías del fundamento Oscar Salas, afirma: “Dado que
nuestro sistema notarial se concentra en el principio de que los originales o matrices

3
deben quedar en poder del notario, es necesario rodear y dotar, a tales documentos
de una serie numerosa de seguridades. Ello permite o facilita la expedición de
copias (testimonios), lo mismo que la comprobación de la autenticidad de las
mismas, en todos aquellos casos en que los documentos notariales sean
redargüidos de falsedad.

Se ha dicho, no obstante, que “el protocolo es un complemento de la función


notarial, pero no es de absoluta necesidad” (Sajahuja, J.M.), porque bien podría
suceder, tal como ocurre en los países que siguen el sistema sajón (Inglaterra,
Estados Unidos, etc.), que la autenticación de las actas y negocios jurídicos se
realice sobre la base de que los documentos originales en que aquellas constasen,
sean conservados por los mismos interesados. En todo caso se considera que, en
el sistema notarial latino, la existencia y fundamentación del protocolo radica en los
siguientes aspectos a examinar.

Permanencia documental en las relaciones jurídicas

El protocolo notarial constituye una garantía que presta el estado para la efectividad
perdurabilidad de los actos jurídicos que requieren de la intervención notarial, para
su completa validez y eficacia legal. Ello, porque los protocolos evitan que se
pierdan instrumentos públicos, los cuales, en manos de las partes, están sujetos al
enorme riesgo de que resulten extravíos. La pérdida de dicho documento, como es
obvio acarrea automáticamente la perdida de la prueba del derecho consignada en
los, mismo con los cuales se les podría ocasionar múltiples daños irreparables a
algunos de los otorgantes del negocio jurídico.

Garantías de ejecutoriedad de los hechos

Su existencia se justifica además del hecho que los actos y negocios jurídicos que
se consignan ante los notarios tienen , por lo general, una cierta durabilidad que se
prolonga en el tiempo, para lo cual es conveniente que los interesados puedan tener
a su disposición, en cualquier momento una prueba eficiente sobre los derechos y
relaciones jurídicas incorporadas en todos aquellos casos en que la disposición de
un título es requisitos esenciales para ejecutar un derecho de tal forma que dicho
derecho se halla incorporado en cierta manera al documento.

Con acierto ha dicho Sanahuja ´¨si existe el protocolo, demostrada la perdida de la


copia ejecutiva que el acreedor tenía en su poder se facilita de una manera expedita
la obtención de un nuevo ejemplar que supla la primera copia. Es, pues también el
protocolo una garantía de ejecutoriedad.

Autenticidad de los derechos

El protocolo desempeña, por otra parte, una función autentica dora en el sentido de
que las reglas legislativas atinentes a la formación y conservación del mismo
dificultan enormemente la posibilidad y eventual suplantación de documentos
autorizados, lo mismo que la interrelación de otros entre los que ya constan
debidamente ordenados y fechados.

Publicidad de los derechos

Por último, los protocolos cumplen una labor de publicidad, porque los actos o
negocios jurídicos que autoriza un notario suele afectar intereses de tercera persona
que no han intervenido en su otorgamiento constituye, en consecuencia, el protocolo
el mejor procedimiento para que un documento esté al alcance de quien tenga
interés en examinarlos y hasta sacar copia del mismo, lo cual sucede
frecuentemente en materia de derecho reales. Las legislaciones centro americanas
establece, concordantemente con la doctrina la publicidad de protocolo notarial, solo

4
los interesados podrán ver y saber de su contenido en presencia del notario
autorizante o del oficial que lo custodia, salvo aquellos casos de otorgamiento de
testamento o donaciones por causa de muerte, casos en los que mientras viva el
otorgante, solo a este podrá ser enseñado

6.12 Pérdida, destrucción y reposición

No obstante, el cuidado y responsabilidad que debe tener un Notario con sus


protocolos, estos pueden perderse, destruirse o deteriorarse, y sería necesario
reponerlo. Para estos casos el Código de Notariado tiene regulado que el Notario al
enterarse de esta circunstancia, debe de dar aviso al Juez de Primera Instancia de
su domicilio. Cualquier persona que, según el Código Procesal Penal, puede
denunciar un delito público, también tiene el derecho del conocimiento del Juez, el
hecho que haga necesaria la reposición del protocolo.

El juez debe instruir la averiguación y terminada la misma resolverá declarando


procedente la reposición; en caso de delito, mandará que se abra procedimiento
penal contra los presuntos responsables, en nuestra opinión podría ser contra el
mismo Notario. Al declarar procedente la reposición, el juez pedirá a la Corte
Suprema de Justicia, copias de los testimonios especiales enviados por el Notario
al Archivo General de Protocolos. La citación se hará por avisos que se publicarán
tres veces durante un mes en el Diario Oficial y en otro de los de mayor circulación
en la localidad.

6.13 Revisión ordinaria

La inspección y la revisión del protocolo tienen por objeto comprobar si en el mismo


se han llenado los requisitos formales establecidos en la ley. La revisión puede ser
de tres clases:

 Ordinaria
 Extraordinaria
 Especial

La inspección y revisión ordinaria se debe de hacer cada año, para el efecto, el


Notario está obligado a presentar el protocolo y sus comprobantes, debiéndose
practicar la inspección y revisión en su presencia.

En la capital es el Director del Archivo General de Protocolos el facultado y en


los departamentos los Jueces de 1ra. Instancia. También el Presidente del
Organismo Judicial puede nombrar a Notarios colegiados activos para que
practiquen la inspección y revisión de protocolos, tanto en el departamento de
Guatemala, como en otros departamentos.

6.13 Revisión especial por averiguación sumaria

La inspección y revisión extraordinaria podrá hacerse en cualquier tiempo, cuando


lo ordene la Corte Suprema de Justicia. Es importante mencionar, en casos de
averiguación sumaria por delito, también se puede hacer la revisión de un protocolo
notarial, este es el especial.

6.13 Análisis comparativo en las legislaciones centroamericana

Según Oscar Salas, en Costa Rica, El Salvador y Nicaragua se usan para formar el
protocolo, a opción del Notario, libros encuadernados o bien hojas sueltas, pero en
la práctica predomina el uso de hojas o folios sueltos, para encuadernarlos al final
del año natural, sistema que se usa en Guatemala, Honduras y Panamá.

5
Al respecto, el Licenciado Julio César Monterroso Paz, al referirse al tema, expresó,
“Existen tres clases de folios del protocolo:

 El folio suelto, que es el que consta en una sola hoja o foja.


 El folio doble, consiste en dos fojas o hojas unidas entre sí
 El folio contenido dentro de un libro empastado, el que consiste en folios
formando un libro empastado, sean estos fijos o movibles.

El estatuto del Notariado de Colombia, contenido en el Decreto 960 del año 1,970,
en su artículo 18 y 20, aunque no lo expresa taxativamente, se deduce que se usa
folio suelto. La Ley Notarial en Ecuador, en su artículo 23, parcialmente dice: “Los
protocolos se formarán anualmente en libros o tomos mensuales o de 500 hojas
cada uno” se establece igualmente que usan el folio suelto, aunque ordena dividirlos
en libros o tomos, ya sean estos correspondientes a un mes de escrituración o de
quinientas hojas.

7. Organización legal del notariado guatemalteco

En Guatemala se utiliza actualmente el folio suelto, aunque anteriormente el folio


doble (pliego), y las escrituras matrices, actas de protocolación, razones de
legalización de firmas y documentos se redactan conforme a la ley. Para integrar el
protocolo, se hace en uno o en varios tomos empastados, del tamaño que sea
cómoda y práctica su consulta, en forma anual. La Ley de Costa Rica, establece en
el artículo 29 que: “Los protocolos serán libros encuadernados de cien folios, con
hojas de papel sellado de cincuenta céntimos cada una. La administración de
Rentas Nacionales suministrará tales libros a los Notarios, previo el pago
correspondiente”; se establece claramente que el protocolo está contenido en libro
empastado.

El Código Notarial de Costa Rica, regula las clases de tomos en que se formará el
protocolo, que introduce la novedad alternativa del tomo encuadernado y del tomo
con hojas movibles, lo que advierte un avance práctico, como seguro y en
concordancia con la integración al Registrar Notarial, dependiente a su vez del
Registro Nacional. Concluye el Licenciado Monterroso Paz, expresando que las
hojas movibles o folios sueltos para formar protocolos, facilitan entre otros aspectos,
la protocolización de documentos. La Notaria Mirna Valenzuela de Mérida, en su
trabajo de tesis de maestría, aporta un cuadro sobre el protocolo notarial en la
legislación guatemalteca y extranjera. En el mismo puede apreciarse, con respecto
a la forma de llevarlo, que la mayoría de los países estudiados, utiliza hojas sueltas,
que posteriormente se empastan y pasan a formar tomos. En muchos de los países
se exige razón de apertura, todos utilizan razón de cierre e índice y queda
establecida la intervención del poder judicial.

7.1 Requisitos habilitantes del notario

Se conocen como habilitantes, los requisitos que debe cumplir el Notario para
ejercer la profesión, estos están contenidos en el artículo 2° del Código de
Notariado, en el que se establece que para ejercer el notariado se requiere:

 Ser guatemalteco, el Código todavía preceptúa natural, pero esta


denominación desapareció en la Constitución Política (1985). Es importante
tomar en cuenta que la Ley de Nacionalidad, Decreto 1613 del Congreso de
la Republica, en el artículo 7°., regula que para los efectos de dicha ley, los
términos “natural, de origen y por nacimiento”, referidos a la nacionalidad son
sinónimos.
 Ser mayor de edad, actualmente 18 años, según el artículo 8 del Código Civil,
Decreto Ley 106.
 Del estado seglar, esto quiere decir, no ser ministro de ningún culto.

6
 Residencia, esta norma es la que permite ejercer libremente el notariado en
cualquier lugar de la república, ya que no impone limitaciones con respecto
al territorio. Incluso se puede ejercer fuera del territorio nacional, cuando los
actos y contratos van a surtir efectos en Guatemala, tal es el caso de los
Cónsules, regulado en el numeral 2 del artículo 6°. Del Código de Notariado,
y en los casos de que el Notario Guatemalteco estuviera en el extranjero,
regulado en el artículo 43 de la Ley del Organismo Judicial.
 Tener título facultativo, esta norma hace el notariado una profesión al exigir
el título, el cual puede obtenerse en cualquiera de las universidades de la
república, y si se obtuviera en el extranjero, es necesaria la incorporación,
siendo la Universidad de San Carlos, la que con exclusividad autoriza las
incorporaciones.
 Registrar en la Corte Suprema de Justicia el titulo facultativo y la firma y sello
que usará con el nombre y apellidos usuales. En este caso el registro se hace
mediante certificación que extienden las Facultades; la firma y sello que se
registran, son los que utilizará el Notario en ejercicio profesional, siendo
prohibida la utilización de firma o sello no registrado, según lo establece el
artículo 77 numeral 5°., del Código de Notariado. El sello usualmente de hule,
sustituyó como ya se dijo al signo notarial, lo que resulta mucho más cómodo,
aunque fácilmente falsificable. Puede utilizarse cualquier otro tipo de sello de
mayo seguridad. En el sello, la ley no exige que aparezca el número de
Colegiado y los nombres y apellidos completos, solo pide los nombres y
apellidos usuales del Notario. Sin embargo es más frecuente encontrar
registrados con los nombres y apellidos completos. En cualquier momento se
puede registrar una nueva firma y un nuevo sello. En todos los sellos
aparecen los títulos: Abogado y Notario. La ley no da más características que
las indicadas, al contrario de otras legislaciones como la mexicana, que
establece que el sello del notario tendrá forma circular, con un diámetro de
cuatro centímetros, en el centro debe aparecer el Escudo Nacional y
alrededor de esté, la inscripción “México, Distrito Federal”, el número de la
notaria y el nombre y apellidos del notario. (Artículo 39 Ley del Notariado
Mexicano.)
 Ser de notoria honradez, atributo necesario para ejercer la profesión, no
siendo necesaria mayor explicación. Este artículo no regula lo relativo a la
Colegiación, la cual estudiaremos más adelante, pero antes de registrarse en
la Corte Suprema de Justicia, es necesario estar inscrito en el Colegio de
Abogados y Notarios, es decir, estar colegiado.

7.2 Causas de inhabilitación para ejercer

Se conocen como causas de inhabilitación, aquella que impiden el ejercicio del


notario a una persona, este impedimento es total o absoluto, para los que se
encuentren en los siguientes casos:
 A los civilmente incapaces, regulado en los artículos 9 al 14 del Código Civil,
Decreto Ley 106
 A los toxicómanos y ebrios habituales, aunque también es causas de
incapacidad, el Código de Notariado les da un tratamiento especial, por los
peligros a que se exponen ellos mismos y a sus familias.
 A los ciegos, sordos o mudos, así como a los que adolezcan de cualquier
otro defecto físico o mental que les impida el correcto desempeño de su
cometido.
 A los que hubieren sido condenados por alguno de los delitos como: falsedad,
robo, hurto, estafa, quiebra o insolvencia fraudulenta, cohecho e infidelidad
en la custodia de documentos, prevaricato y malversación. Esto
indudablemente se debe a que no se podría confiar en una persona que ha
sido encontrada culpable de haber cometido un delito de esta naturaleza.

Los impedimentos anteriores, como se dijo son totales o absolutos y están


regulados en el artículo 3° de nuestro Código.

7
7.3 Incompatibilidades con el ejercicio profesional

Se conocen como incompatibilidades en el ejercicio profesional, a los casos en que


se encuentran o se pueden encontrar algunos otarios, de verse impedidos
temporalmente de ejercer el notariado, estos están regulados en el artículo 4°
Código de Notariado. Los que tengan auto de prisión motivada de los mismos
delitos a que se hizo mención en párrafos anteriores. De dictarse en sentencia
condenatoria, esta prohibición de tipo temporal se convertiría, en definitiva, como ya
vimos.

Los que desempeñen un cargo público que lleve aneja jurisdicción.


Etimológicamente ANEJA significa Anexo y Jurisdicción: Derecho o facultad legal
de ejercer autoridad. Esta prohibición estiba, en que los funcionarios, que además
de desempeñar cargo público de tiempo completo, tienen también funciones de
dirección o mando en un grupo determinado, están impedidos de ejercer el
notariado mientras permanezcan a esos cargos.

Los funcionarios y empleados de los Organismos Ejecutivo y Judicial y de las


Municipalidades, que devenguen sueldos del Estado o del Municipio y el Presidente
del Congreso de la Republica. La ley no hace distinción entre las diferentes
instituciones, sean autónomas o no, centralizadas o descentralizadas, etc. Prohíbe
el ejercicio del notariado a funcionarios y empleados del Ejecutivo. Los funcionarios
y empleados del Organismo Judicial, también tienen prohibición de ejercer el
notariado. Da la impresión que la idea del legislador fue prohibir el ejercicio del
notariado a todos los que devengan sueldos del Estado y del Municipio. Esta norma
ha dado origen a muchas discrepancias. También tiene impedimento temporal el
Presidente del Congreso de LA Republica si fuere Notario, los diputados que sean
notarios si les permite la ley ejercer. Como se dijo estas prohibiciones son
temporales, mientras estas personas permanezcan en sus respectivos cargos.

Los notarios que hayan incumplido durante un trimestre del año civil o más, con las
obligaciones que impone el artículo 37 del Código de Notariado, relativa a la entrega
de testimonios especiales y avisos. Ya que mientras no se pongan al día están
impedidos de ejercer, y solo podrán expedir los testimonios especiales atrasados
para subsanar al impedimento.

7.4 Gobierno y régimen disciplinario del notario

La Colegiación oficial obligatoria, en Guatemala, la Colegiación obligatoria tiene


carácter Constitucional. El artículo 90 de la Constitución, establece: “La colegiación
de los profesionales universitarios es obligatoria y tendrá por fines la superación
moral, científica, técnica y material de las profesiones universitarias y el control de
su ejercicio. Los Colegios profesionales como asociaciones gremiales con
personalidad jurídica, funcionarán de conformidad con la Ley de Colegiación
Profesional obligatoria y los estatutos de cada colegio se aprobarán con
independencia de las universidades de las que fueren egresados sus miembros.
Contribuirán al fortalecimiento de la autonomía de la Universidad de San Carlos de
Guatemala y a los fines y objetivos de las universidades del país. En todo asunto
que se relacione con el mejoramiento del nivel científico y técnico cultural de las
profesiones universitarias, las universidades del país podrán requerir la
participación de los colegios profesionales.”

7.4.1 La colegiación profesional obligatoria

Esta norma Constitucional, es muy importante para la existencia de los Colegios y


la colegiación, ya que conocemos casos de países en donde la colegiación ha sido
declarada inconstitucional, por ejemplo: El Salvador y otros países en que ha tratado
de hacerse lo mismo sin haberlo logrado, como es el caso de Argentina. Ese riesgo

8
no lo corremos nosotros en virtud de que en la Constitución ha quedado garantizada
la colegiación.

7.4.1.1. Fines de la Colegiación Profesional Intervención de la Corte Suprema


de Justicia.

Los fines de la colegiación como lo estatuye la norma son:

a) La superación moral, científica, técnica y material de las profesiones


universitarias.
b) El control de su ejercicio.

La Ley de Colegiación Profesional Obligatoria, está contenida en el Decreto 72-2001


del Congreso de la República, la cual fue emitida el 30 de noviembre de 2001.

Los fines principales de los Colegios Profesionales son:

 Promover, vigilar y defender el ejercicio decoroso de las profesiones


universitarias en todos los aspectos, propiciando y conservando la disciplina
y solidaridad entre sus miembros.
 Promover el mejoramiento cultural y científico de los profesionales
universitarios.
 Promover y vigilar el ejercicio ético y eficiente de las profesiones
universitarias.
 Defender y proteger el ejercicio profesional Universitario, combatir el
empirismo y la usurpación de calidad.
 Promover el bienestar de sus agremiados mediante el establecimiento de
fondos de prestaciones, contratación de seguros y otros medios que se
consideren convenientes.
 Auxiliar a la administración pública.
 Resolver consultas y rendir informes.
 Contribuir al fortalecimiento de la autonomía de la Universidad de San Carlos
de Guatemala y al cumplimiento de los fines y objetivos de todas las
universidades del país.
 Participar en el estudio y solución de los problemas nacionales y propiciar el
mejoramiento integral de los guatemaltecos.
 Elegir a los representantes del colegio respectivo ante el Consejo Superior
Universitario de la Universidad de San Carlos de Guatemala, Juntas
Directivas de las Facultades de las mismas, a los miembros que integran el
cuerpo electoral Universitario y otros.

Los colegios Profesionales se integran de los siguientes órganos:

 La Asamblea General.
 La Junta Directiva.
 El Tribunal de Honor.
 Tribunal Electoral.

El acceso a los cargos directivos es por elección y los cargos son incompatibles
entre sí, siendo electos para un período de dos años. Para ser miembro de la Junta
Directiva se requiere ser guatemalteco, colegiado active, estar solvente en
obligaciones con el Colegio, ser de reconocida honorabilidad y competencia, no
encontrarse inhabilitado en el ejercicio de la profesión por el Tribunal de Honor y
tener tres años como mínimo de ser colegiado active, excepto en el caso del
Presidente y Vicepresidente que requieren como mínimo 5 años.

Para ser miembro del tribunal de honor y tribunal electoral se requieren además de
los requisitos enunciados tener al menos cinco años como colegiados activos.

9
La Junta Directiva está integrada por un Presidente, un Vicepresidente, dos vocales,
un secretario, un prosecretario y un tesorero.

El tribunal de Honor, se integra de siete miembros titulares y dos miembros


suplentes. Electos por planilla para un período de dos años.

El Tribunal Electoral se integra por cinco miembros titulares y dos miembros


suplentes. También electos por planilla, para un período de tres años.

Entre otras, las atribuciones de la Junta Directiva, está cumplir y hacer cumplir la
Ley de Colegiación, ejercer la representación legal del Colegio por medio de su
Presidente o de quien haga sus veces, proponer a la Asamblea la reforma de sus
estatutos, ejercer el Gobierno del Colegio, administrar su patrimonio y organizar sus
actividades. (Arto. 17 Decreto 72-2001 del Congreso de la República).

Entre las funciones y atribuciones del Tribunal de Honor, está conocer de las
denuncias, instruir averiguación y emitir dictamen y en su caso acordar la sanción
correspondiente, cuando se sindique a alguno de los miembros del Colegio de haber
faltado a la ética o atentado contra el honor y prestigio de la profesión. (Arto. 19
Decreto 72-2001).

Las funciones del tribunal electoral son:

a) velar el fiel cumplimiento de la Ley de Colegiación Profesional Obligatoria, en


materia electoral y del reglamento de elecciones
b) Organizar y realizar los procesos electorales para elegir a los miembros de la
Junta Directiva, Tribunal de Honor y Tribunal Electoral
c) Organizar y realizar los procesos electorales
d) Declarar el resultado y la validez de las elecciones; o en su caso, la nulidad de
las mismas
e) Inscribir a los candidatos por planilla y adjudicar los cargos de elección
f) Disponer sobre las mesas electorales necesarias para cada evento electoral y
designar a sus integrantes
g) Establecer las normas de control y fiscalización de los eventos electorales
h) Proponer el reglamento electoral y las reformas al mismo

Las sanciones que a los colegiados se pueden imponer son:

 Sanción pecuniaria
 Amonestación privada
 Amonestación privada
 Amonestación pública
 Suspensión temporal en el ejercicio de su profesión y suspensión definitiva.

La suspensión temporal en el ejercicio de su profesión no podrá ser menor de seis


meses ni mayor de dos años. La definitiva conlleva la pérdida de calidad de
colegiado active.

Los extractos anteriores de la Ley de Colegiación, hacen clara referencia a la moral,


disciplina, honestidad, eficiencia, competencia, honorabilidad, buena conducta y
ética, que deben tener los profesionales universitarios; tómese en cuenta que esta
es una ley que se aplica a todas las profesiones y no solo a los Abogados y Notarios.
A la fecha se han emitido tres leyes sobre colegiación, la primera de 1947; la
segunda contenida en el Decreto 62-91 del año 1991; y la que actualmente se
encuentra en vigencia, Decreto 72-2001 del Congreso de la República.

10
7.4.2. Intervención de la Corte Suprema de Justicia

La Corte Suprema de Justicia puede intervenir en el régimen disciplinario del


Notario, ya que para lo relativo a sanciones, cualquier persona o el Ministerio
Publico, tiene derecho a denunciar ante la Corte Suprema de Justicia, los
impedimentos de un notario para ejercer la profesión. Así también cuando la Corte
tuviera conocimiento de que un notario ha incurrido en alguna de las causales de
impedimento, debe proceder a formalizar denuncia.
Estos casos de poca o ninguna aplicabilidad en la práctica, por la falta de claridad
en la norma, están regulados en los artículos 98 y 99 del Código de Notariado.

7.4.2.1. Tribunales

El Tribuna de Honor, se integra de siete miembros titulares y dos miembros


suplentes. Electos por planilla para un periodo de dos años. El tribunal Electoral se
integra por cinco miembros titulares y dos miembros suplentes. También electos por
planilla, para un periodo de tres años. Entre las funciones y atribuciones de Tribunal
de Honor, esta de conocer las denuncias, instruir averiguación y emitir dictamen y
en su caso acordar la sanción correspondiente, cuando se sindique a alguno de los
miembros del Colegio de haber faltado a la Ética o haber atentado contra el honor
y prestigio de la profesión. (Arto. 19 Decreto 72-2001).

Las funciones del tribunal electoral son:

 Velar el fiel cumplimiento de la Ley de Colegiación Profesional Obligatoria,


en materia electoral y del reglamento de elecciones
 Organizar y realizar los procesos electorales para elegir a los miembros de
la Junta Directiva, Tribunal de Honor y Tribunal Electoral
 Organizar y realizar los procesos electorales
 Declarar el resultado y la validez de las elecciones; o en su caso, la nulidad
de las mismas.
 Inscribir a los candidatos por planilla y adjudicar los cargos de elección
 Disponer sobre las mesas electorales necesarias para cada evento electoral
y designar a sus integrantes
 Establecer las normas de control y fiscalización de los eventos electorales;
 Proponer el reglamento electoral y las reformas del mismo.

7.4.2.2. Corte Suprema de Justicia

Corte Suprema de Justicia: tiene la facultad de efectuar las diligencias que


considere necesarias para agotar la investigación y comprobar el o los hechos que
le fueron denunciados, y en su caso; proceder a la inhabilitación y a sancionar al
notario denunciado.

7.4.2.3. Colegio Profesional

En Guatemala, la colegiación obligatoria tiene carácter constitucional. El artículo 90


de la Constitución, establece “La colegiación de los profesionales universitarios es
obligatoria y tendrá por fines la superación moral, científica, técnica y material de
las profesiones universitarias y el control de su ejercicio.

Los colegios profesionales como asociaciones gremiales con personalidad jurídica,


funcionarán de conformidad con La Ley de Colegiación Profesional Obligatoria y los
estatutos de cada colegio se aprobarán con independencia de las universidades de
las que fueren egresados sus miembros. Contribuirán al fortalecimiento de la
autonomía de la Universidad de San Carlos de Guatemala y a los fines y objetivos
de las universidades del país. En todo asunto que se relacione con el mejoramiento

11
del nivel científico y técnico cultural de las profesiones universitarias, las
universidades del país podrán requerir la participación de los colegios profesionales.

Esta norma Constitucional, es muy importante para la existencia de los Colegios y


la colegiación, ya que conocemos casos de países en donde la colegiación ha sido
declarada inconstitucional, por ejemplo, el Salvador y otros países en que ha tratado
de hacerse lo mismo sin hacerlo logrado, como es el caso de Argentina. Ese riesgo
no lo corremos nosotros en virtud de que en la Constitución ha quedado garantizada
la colegiación.

Los fines de la colegiación como lo estatuye la norma son:

 La superación moral, científica, técnica y material de las profesiones


universitarias,
 El control de su ejercicio
 La Ley de Colegiación Profesional Obligatoria, está contenida en el Decreto
72-2001 del Congreso de la Republica, la cual fue emitida el 30 de noviembre
de 2001.

Los fines principales de los Colegios Profesionales son:

 Promover, vigilar y defender el ejercicio decoroso de las profesiones


universitarias en todos los aspectos, propiciando y conservando la disciplina
y la solidaridad entre sus miembros
 Promover el mejoramiento cultural y científico de los profesionales
universitarios
 Promover y vigilar el ejercicio ético y eficiente de las profesiones
universitarias
 Defender y proteger el ejercicio profesional universitario, combatir el
empirismo y la usurpación de calidad
 Promover el bienestar de sus agremiados mediante el establecimiento de
fondos de prestaciones, contratación de seguros y otros medios que se
consideren convenientes;
 Auxiliar a la administración pública en el cumplimiento de las disposiciones
legales que se relacionen con las respectivas profesiones universitarias,
resolver consultas y rendir los informes que soliciten entidades o funcionarios
oficiales, en materia de su competencia, siempre que se trate de asuntos de
interés público
 Resolver consultas y rendir informes que les sean solicitados por personas o
entidades privadas, en materia de su competencia, siempre que se trate de
asuntos de interés público. Para estos casos, la Junta Directiva, si lo
considera pertinente, podrá autorizar el cobro de honorarios a favor del o de
los profesionales
 Contribuir al fortalecimiento de la autonomía de la Universidad de San Carlos
de Guatemala y al cumplimiento de los fines y objetivos de todas las
universidades del país
 Participar en el estudio y solución de los problemas nacionales y propiciar el
mejoramiento integral de los guatemaltecos;
 Elegir a los representantes del colegio respectivo ante el Consejo Superior
Universitario de la Universidad de San Carlos de Guatemala, Juntas
Directivas de las facultades de la misma, a los miembros que integran el
Cuerpo Electoral Universitario, así como a quienes deban representarlo en
otros cargos y funciones, de conformidad con las leyes y reglamentos
respectivos
 Promover la organización y mejoramiento de otras asociaciones y
agrupaciones afines a las respectivas profesiones universitarias, propiciando
su adscripción al colegio correspondiente, de conformidad con lo que para el
efecto establezcan sus estatutos.

12
Los Colegios Profesionales se integran de los siguientes órganos:

 La Asamblea General
 La Junta Directiva
 El Tribunal de Honor
 Tribunal Electoral

7.4.2.4. Rehabilitación, su procedimiento

Cabanellas, expone que Rehabilitar, significa: “Habilitar de nuevo. Autorizar el


ejercicio de los derechos suspendidos o quitados” y con respecto a la Rehabilitación:
“Acción o efecto de rehabilitar; esto es, de poner a una persona en la misma
situación moral o legal en las que se encontraba, y de la cual había sido desposeída.

El Licenciado Quezada Toruño, expone con respecto a la rehabilitación del Notario


que: “La legislación –guatemalteca contempla sendos procedimientos de
rehabilitación que se aplican según el órgano que impuso la sanción disciplinaria.

Si el mismo fue de naturaleza jurisdiccional, la rehabilitación corresponde a la Corte


Suprema de Justicia y, si fue de índole gremial, aquella compete al Consejo Superior
Universitario de la Universidad de San Carlos de Guatemala. En el primer caso el
procedimiento se regula en el Código de Notariado y el segundo ya no fue incluido
en la actual ley de colegiación.

El código de Notariado permite la rehabilitación de los notarios que hubieran sido


condenados por cualquiera de los delitos que conllevan inhabilitación para el
ejercicio profesional, siempre que concurran las siguientes circunstancias:

 Que hubieran transcurrido dos años más del tiempo impuesto como pena en
la sentencia.
 Que durante el tiempo de la condena y los dos años a que se refiere el literal
anterior, hubiera observado buena conducta.
 Que no hubiera reincidencia
 Que emita dictamen favorable el Consejo Superior Universitario de la
Universidad de San Carlos de Guatemala.

En conclusión, en caso de que un Notario quedara inhabilitado, por un tribunal o por


la Corte Suprema de Justicia, puede ser rehabilitado de conformidad con lo
establecido en los artículos 104y 105 del Código de Notariado; haciéndose trámite
ante la misma corte.

7.5. Impugnaciones o Recursos

Los recursos regulados en el Código de Notariado son:

 Recurso de Responsabilidad: el cual puede interponerse en dos casos: 1.-


contra la resolución que dicte la Corte Suprema de Justicia, por la inspección
y revisión de un protocolo; 2.- Contra la resolución de la Corte Suprema de
Justicia, en expediente de rehabilitación. Articulo 105 Código de Notariado

 Recurso de Reposición: el cual se puede interponer contra la resolución que


se dicte sancionado un notario. Articulo 98 Código de Notariado

 Recurso de Reconsideración: el cual se puede interponer ante el Director del


Archivo General de Protocolos, por las sanciones que se impongan por
incumplimiento de las obligaciones del notario contenidas en los artículos 37
y 38 del Código de Notariado.

13
 Recurso de Apelación: En contra del auto que apruebe una liquidación de
honorarios. Regulado en el artículo 107 del Código de Notariado.

En materia de recursos notariales, podemos afirmar que tienen poca aplicación en


la práctica, ya que las sanciones que se imponen, si llegan a imponerse, son
benignas y resulta innecesario interponer un recurso en tales circunstancias. Las
únicas dos multas pecuniarias significativas están reguladas en la Ley de Armas y
Municiones, por la falta de aviso, y en la Ley de Extinción de Dominio, que vino a
modificar el artículo 100 del código de Notariado, esa norma entra en vigencia en
junio de 2011.En el caso del Recurso de Apelación, es el único no motivado por
sanción al Notario

8. Fe Pública

La fe pública es un atributo de estado que tiene como virtud de ius imprium y es


ejercida a través de los órganos estatales. En el sistema Jurídico mexicano, el
notariado forma parte de la organización del poder Ejecutivo. El notario recibe la fe
pública del titular de este poder, por disposición de la ley. En Guatemala, el
notariado depende del poder ejecutivo, la fe pública se tiene por disposición de la
ley.

Carlos Emérito González, por su parte afirma: la fe pública, es el poder que compete
al funcionario para dar vida a las relaciones jurídicas, constituye una garantía de
autenticidad. La da el Estado a determinados individuos mediante ciertas
condiciones que la ley establece, destacándose especialmente la notarial, por los
requisitos de gran honorabilidad, título habilitante especial e incompatibilidades,
impuestos a los que con ella son investidos.

Gonzalo de las casas, citado por Giménez Arnau, define la fe pública como:
“presunción legal de veracidad respecto a ciertos funcionarios a quienes la ley
reconoce como probos y verdaderos, facultándoles para darla a los hechos y
convenciones que pasan entre los ciudadanos”.

8.1. Definición

La fe pública es la presunción de autenticidad de los instrumentos que autorizan los


notarios debida en forma y lo que estos contienen se tenga por verdadero en tanto
no existe prueba alguna en contrario. La que posee el notario al recibir interpretar y
dar forma legal a la voluntad de las partes.

8.2. Fundamento

Podemos mencionar dos a) la realización normal del derecho; y b) La necesidad


que tiene la sociedad de dotar a las relaciones jurídicas de la certeza.
Giménez-Arnau, expone la primera así: La fe pública, al igual que todas las
instituciones que integra la publicidad jurídica o satisfacen sus necesidades, se
producen fatalmente en la sociedad para la realización normal del Derecho que es
uno de los fines de Estado.

Mengual, expone la segunda, afirma: el fundamento de la fe pública se halla en la


necesidad que tiene la sociedad para su estabilidad y armonía, de dotar a las
relaciones jurídicas se fijeza, certeza y autoridad, a fin de que las manifestaciones
externas y de estas relaciones sean garantías para la vida social y jurídica de los
ciudadanos y hagan prueba plena ante todos y contra todos, cuando aquellas
relaciones jurídicas entran en la vida del derecho en su estado normal. “(citado por
Enrique Giménez-Arnau)”

14
8.3. Clases

Argentino Neri, hace un tratamiento exhaustivo del tema, bajo el subtítulo de


división, mencionando a muchos autores. Respecto a la clasificación de fe pública
expone, que estos no presentan un cuadro general que abarque en su totalidad a
las distintas categorías de fes. Y es cierto, ya que Giménez-Arnau, al igual que

Esteban Azpeitia, exponen que según la clase de hechos la fe pública puede ser:

 Administrativa
 Judicial
 Notarial
 Registral

Mengual y Mengual, únicamente la clasifica en: Judicial y Extrajudicial.


De Velasco, por su parte la clasifica en Judicial y Extrajudicial, pero agrega, que de
esta división se deduce otra, ya que la fe extrajudicial, abarca otros aspectos de
derecho en su normal desenvolvimiento, y así es como hay; fe pública
administrativa, política, y civil privada, afirmando que la extrajudicial es la fe pública
notaria.

Sanahuja y Soler, distingue: la fe pública legislativa, judicial, administrativa y notarial


Allende, afirma que muchos tratadistas han ensayado divisiones de fe pública y así,
y que no cabe la posibilidad de una división, sin embargo, reconoce que hay fe
pública registral, al admitir que una certificación del registro hace fe.

Con excepciones de Velasco, casi coincide en que las clases de la fe pública son:
a) judicial b) administrativa c) registral d) notarial.

Se menciona una clase de fe pública que en Guatemala, hasta hace poco tiempo la
estudiamos, la fe pública legislativa, expuesta por sanahuja y soler. Otro defensor
de la existencia de la fe pública legislativa es Eduardo Bautista Ponce.

En conclusión, podemos decir que la clase de fe pública son:

 Judicial
 Administrativa
 Registral
 Legislativa
 Notarial
 Fe Pública Judicial
Neri expone que es judicial: la que dispensan los funcionarios de justicia
especialmente los secretarios de juzgados, quienes dan fe de las resoluciones autos
y sentencias de los jueces o tribunales en los cuales actúan; por otro lado, Giménez-
Arnau, establece: las facultades o limitaciones establecidas en la norma objetiva,
pueden dar lugar a contienda o pugna entre el estado y los particulares o entre dos
particulares.

Menciona también el autor referido, que las actuaciones judiciales suscritas


únicamente por el juez, deberían producir efecto pleno, pero tradicionalmente
siempre se ha colocado a su lado un secretario judicial, que autentifica las
actuaciones, y es que pone cuño de credibilidad a las decisiones del juzgador.
Además, la denominada copia secretaria, cuando el secretario del tribunal fuere
notario, en este caso podrá dar fe plena de la actuación judicial de que conozca el
tribunal al cual sirve, sin precisar de la intervención de ningún otro funcionario, bajo
su responsabilidad.

La regulación anterior, no es muy afortunada, debido a que se confunde la fe pública


judicial con la calidad de Notario. Si la idea legisladora era que el secretario tenga

15
fe pública por el hecho de ser secretario, así debido regularlo. Sabemos que los
Secretarios Judiciales son Abogados y Notarios, por ser un requisito establecido en
el artículo 109 de la Ley del organismo Judicial para los secretarios de la Presidencia
del Organismo Judicial, la Corte Suprema de Justicia, Salas de Apelaciones y de
los demás tribunales, pero para estos últimos permite que, a falta de Abogado y
Notario, pueda nombrarse a persona idónea. Ahora bien, si el legislador no
consideraba suficiente la actuación del secretario judicial, pudo exigir además la
firma o el visto bueno del juez en todas las certificaciones o copias y no condicionarlo
a la calidad de Notario, por tener funciones distintas, el secretario Judicial, el Juez,
y el notario.

8.3.1. Registral

Es la que poseen los registradores, para certificar la inscripción de un acto que


consta en un registro público, el cual tiene autenticidad y fuerza probatoria desde
que fue inscrito, por ello extienden certificaciones de las inscripciones dotadas de fe
pública. En Guatemala, existen muchos registros públicos, siendo los más
conocidos: De la propiedad, de personas, mercantil, de la propiedad intelectual, de
poderes, ciudadanos, etc.

8.3.3. Judicial

Es la que posee el Organismo Legislativo y por medio de la cual creemos en las


disposiciones emanadas del mismo, las cuales pasan a ser leyes de la Republica.
Esta es de tipo corporativo, ya que la tiene el Congreso como órgano, y no sus
representantes en la individual.

8.3.4. Extrajudicial o Notarial

También llamada extrajudicial, la fe pública es una facultada del Estado otorgada


por la Ley al Notario. La fe del notario es pública porque proviene de Estado y porque
tiene consecuencias que repercuten en la sociedad. Según González Palomino “la
fe pública notarial consiste en la certeza y eficacia que da el poder público a los
actos y contratos privados por medio de la autenticación de los notarios”.

A veces nos pregunta, quien tiene la fe pública, el notario o los documentos por él
autorizado; ya que las leyes procesales preceptúan que los documentos autorizados
por el notario producen fe y hacen plena prueba. Creemos definitivamente que el
Notario. Porque el documento notarial es producto de la autorización del notario, y
además el código de notariado establece: el notario tiene fe pública para hacer
constar y autorizar actos y contratos en que intervengan por disposición de ley o a
requerimiento de parte (Artículo 1º.) Es la observación que emana de notario a fin
de otorgar, garantía de autenticidad y certeza a los hechos, actos y contratos
celebrados en su presencia y con su intervención. Como nota característica se
reconoce en la fe pública notarial, la facultad fedante por excelencia que ostenta
el notario. Con ella, se obtiene todas seguridades y garantías que los particulares
pueden ambicionar; sin ella nada puede lograrse contiene la suma de todas las
facultades del notario. Dícese entonces, que la fe pública notarial detenta el valor
de verdad oficial.

Única, porque solo él la tiene. Personal, porque no necesita de ninguna otra persona
para ejercitarla. Indivisible, porque no puede dividirla o fraccionada. Autónoma en el
ejercicio de la funciones y responsable conforme la ley, porque en su aplicación el
notario no depende de superior jerárquico. Imparcial, porque no debe inclinarla a
favor de ninguna de las partes y no delegable, porque no la puede compartir con
ninguna otra persona ni mucho menos delegar en otro su función. Las actuaciones
notariales no tienen instancia ni revisión superior, toda su función, inicia y finaliza
ante el notario. Desde luego, si alguna persona se ve perjudicada por una actuación
de un Notario, puede acudir ante las autoridades judiciales o administrativas, a

16
defender sus derechos. La garantía de autenticidad y legalidad, de los instrumentos
autorizados por el Notario, devienen del respaldo de la fe pública, ella hace el
instrumento público sea autentico y legal, esta garantía le da plena validez; desde
luego pueden redargüidos de nulidad falsedad, como veremos más adelante.

El campo de la fe pública notarial, con los intereses de los particulares a quienes el


notario sirve, ya que como afirma Giménez, Arnau, tiene la misión de preparar y
elaborar la prueba pre constituida. El notario tiene FE PUBLICA para autorizar actos
y contratos en que intervenga por disposición de la ley a requerimiento de parte.”

Art. 1 del código de notariado CARACTERISTICAS UNICA: solo él la tiene.


 PERSONAL: no necesita de ninguna persona para ejercerla.
 INDIVISBLE: No puede dividirla o fraccionarla en el ejercicio de las
funciones responsables.
 AUTONOMA: Conforme a la ley, no depende de superior jerárquico.
 IMPARCIAL: No debe inclinarla a favor de ninguna de las partes.
 NO DELEGALEBLE: No la puede compartir con ninguna otra persona ni
mucho menos delegarla.
8.4. Garantía de Autenticidad y Legalidad

Esta garantía deviene del respaldo de la fe pública, ella hace que el instrumento
público sea autentico y legal. De cuanto se ha dicho e inferido que la función notarial,
no puede radicarse exclusivamente en la jurisdicción voluntaria, ni en la prueba, ni
en la forma. Tiene esa triple finalidad y además un evidente aspecto de jurisdicción
preventiva, asesora y legitimadora. Los tres fines fundamentales del instrumento
público, que constituyen la esencia y el resultado o efectos del instrumento público
en que se manifiesta la función notarial son: dar forma, probar y dar eficacia legal.

Para cumplir estos propósitos la función notarial debe aspirar a:

a) Asegurar la autenticidad para el futuro.


b) Garantizar la legalidad o legitimidad del acto.
c) Constituir un medio de fijación formal que asegure los efectos del mismo, así
entre las partes, como en cuanto a los causahabientes de ellas o los futuros
interesados.

Esta conclusión puede aparecer ambigua o vacilante; y sin embargo, a través de la


variada bibliografía y de opiniones en apariencias dispares, puede verse una cierta
unanimidad. Esa triple función de la actividad notarial está reconocida directa o
indirectamente por todos los autores que se esfuerzan en vano en encontrar una
síntesis que abarque los aspectos varios de la función y del que la desempeña, que
es a la vez juez, funcionario y profesional del derecho. La función del Notario es
autorizar escrituras que tienen tres características: autenticidad, fuerza probatoria y
ejecutoriedad.

La fuerza probatoria es consecuencia de la autenticidad y supone, en el terreno


procesal, un desplazamiento de la prueba. La ejecutoriedad deriva de la naturaleza
de la función o poder del Notario, que tiene una delegación del poder público;
delegación que, en la jurisdicción voluntaria, es similar a la que se concede a los
Jueces de jurisdicción contenciosa. En síntesis, la garantía de la Fe Pública, son los
intereses de los particulares a quienes el Notario sirve.

8.5. Campo de Fe Pública

Los actos públicos por lo general ostentan su propia garantía de certidumbre y


legalidad y generan publicidad por si, a diferencia del acto privado que nace y se

17
conforma en la intimidad de un bufete particular, razón que acredita que la Fe
Pública adquiera mayor amplitud y desarrollo en este ámbito de aplicación jurídica,
“la fe pública notarial es la fe pública por excelencia”.

El fundamento de la fe pública notarial lo constituye la necesidad de certidumbre


que deben tener los actos de los particulares, a fin de que el Estado pueda proteger
los derechos que irradian de éstos, garantizándolos contra cualquier violación y en
tal sentido, la fe pública notarial llena una misión preventiva la de constituir los actos
que ella ampara, en una forma de prueba pre constituida eficiente para resolver e
impedir posibles litigios; por eso el Notario de fe pública está facultado para dar fe
de los actos jurídicos extrajudiciales en los que por razón a su cargo interviene de
conformidad con lo establecido por ley.

Fases de la Fe pública:

Es necesario describir las fases en las cuales se integra la fe pública notarial en la


función notarial y en la ficción y autorización del instrumento público notarial.

 La Fase de evidencia. En esta fase el fedatario, notario o persona pública


autorizada, como autor del instrumento, solo tiene conocimiento directo de
evidencia de lo que allí se celebra. El notario no recibe la Fe, DA LA FE.

 La Fase de Solemnidad, Para que el acto de evidencia reciba la garantía de


la Fe pública debe producirse en un acto ritual, es decir, con las
solemnidades requeridas por la ley.

 La Fase de Objetivación, el acto de evidencia, con el ritual y las solemnidades


correspondientes y conformadas se objetiva en su dimensión material,
transcrita al él, en cuanto el acto narrado toma cuerpo en el instrumento
público (objetivación de la fe pública).

 La Fase de coetaneidad, la evidencia la solemnidad del acto y su corporeidad


en el momento han de producirse en un solo acto, coetáneamente.

 La Fase de evidencia y la fase de coetaneidad, proporcionan criterios


clasificadores de Fe pública notarial en sus vertientes básicas: Fe Pública
originaria (principio de autoridad) y Fe pública derivada.

 La fe pública originaria responde a los principios de evidencia y coetaneidad,


en ella el hecho se traslada al papel en forma de narración, captando
directamente por el notario de Fe Pública.

 La Fe pública derivada (Principio de representación instrumental) el acto


sometido a la evidencia del Notario no lo constituyen hecho ni personas, sino
documentos, papeles, por eso viene marcada con la fórmula del,
CONCUERDA CON SU ORIGINAL, y adquiere cuerpo en las copias
autorizadas o testimonios.

9. El instrumento público

Bernardo Pérez Fernández del Castillo, expresa: “El término instrumento proviene
del latín instruere: enseñar y se refiere a todo aquello que puede servir para dejar
una constancia, para fijar un acontecimiento. Cuando se trata de instrumentos que
comprenden signos expresados en imágenes se llama monumento como son las

18
estatuas, las películas, las fotografías, y aún las cintas magnetofónicas. Cuando en
el instrumento emplea signos escritos se llama documento.

Esta distinción entre los instrumentos se conoce desde la antigüedad en el Derecho


romano y en el canónico era instrumento todo aquello con lo cual se podía integrar
una causa. En este último Derecho se hablaba además de instrumento en sentido
estricto, que se refería a cualquier escritura y en especial a la escritura pública, que
tenía fe por sí misma.”

9.1. Documentos

Antes de entrar al estudio del instrumento público es necesario conocer primero el


documento. Guillermo Cabanellas, lo define así: “Instrumento, escritura, escrito con
que se prueba, confirma o justifica alguna cosa o, al menos, que se aduce con tal
propósito. En la acepción más amplia, cuanto consta por escrito o gráficamente, así
lo es tanto un testamento, un contrato firmado, un libro o una carta, como una
fotografía o un plano; y sea cualquiera la materia sobre la cual se extienda o figure,
aunque indudablemente predomine el papel sobre todas las demás. Cualquier
comprobante o cosa que sirve para ilustrar.”

9.1.1. Privados

Los documentos se dividen en: PRIVADOS Y PÚBLICOS. Los Privados elaborados


y firmados por las partes a quienes puede obligar o no.

9.1.2. Públicos

Públicos, elaborados y firmados por un funcionario en el ejercicio de su cargo, o por


un Notario, aunque éste último es más conocido como instrumento público.

9.2. El instrumento público

Como veremos, la definición de instrumento público siempre se relaciona con el


Notario; así Carlos Emérito González, menciona la definición de Fernández Casado:
“Es el documento notarial autorizado a instancia de parte, en el que consta un hecho
jurídico o una relación de derecho.”; para Gonzalo de las Casas: “Es escrito
autentico en que se consigna y preceptúa un título o un hecho” Torres Aguilar: “Son
los documentos autorizados por el Notario en que constan las relaciones jurídicas
de los partícipes, para que sirvan de leyes entre los mismos o se refieren a los
hechos relacionados con el derecho.”
Núñez Lagos, expone que “el nombre tradicional de una clase de documentos
públicos: los autorizados por Notario. Instrumento Público es, pues, el documento
público notarial.” Por su parte Enrique Gimenez-Arnua, lo define como: “Documento
Público, autorizado por Notario, producido para probar hechos, solemnizar o dar
forma a actos o negocios jurídicos y asegurar la eficacia de sus efectos jurídicos.

9.2.1. Definición

Instrumento público, es todo documento autorizado por Notario a requerimiento de


parte interesada, en el cual se hacen constar declaraciones que tienen validez entre
los participantes y ante terceros, el cual por la intervención del Notario se tienen
como ciertos y sirven de prueba en juicio y fuera de él.

9.3. Fines

Oscar Salas, citando a Norberto Falbo, dice: “Tradicionalmente se ha contemplado


el instrumento público únicamente en su aspecto meramente adjetivo, es decir,
como forma y como prueba.”

19
Por su parte Carlos Emérito González, Indica entre sus fines, el de la prueba
preconstituída, el de dar forma legal y el de dar eficacia al negocio jurídico. Y cita a
Fernández Casado, que afirmó que dos son los fines principales que llena el
Instrumento Público: a) Perpetuar los hechos y las manifestaciones de voluntad y b)
Servir de prueba en juicio y fuera de él.

9.4. Teoría de la prueba pre-construida

Fernández Casado, expuso esta teoría desde hace muchos años, al tratar la fuerza
del instrumento público “Prueba preconstituída ya preparada con anterioridad al
pleito futuro, Prueba escrita que está en ese instrumento y que, si alguna vez la
necesitamos, la presentaremos de inmediato para hacer valer nuestros derechos.”

Se critica esta teoría, porque puede darse el caso de que nunca lleguemos a utilizar
dicha prueba, ya que “millones de actos jurídicos se formalizan en el mundo, sin que
lleguen nunca a ser empleados sus instrumentos como prueba preconstituída.”

10. Eficacia Jurídica Del Instrumento Público

El instrumento público tiene un valor formal y un valor probatorio. Valor formal,


cuando se refiere a su forma externa o el cumplimiento de todas las formalidades
esenciales y no esenciales que el Código regula. Valor probatorio en cuanto al
negocio que contiene internamente el instrumento. Ambos deben complementarse.

Ya que no sería correcto que, en un caso determinado, la forma fuera buena y el


fondo estuviera viciado; o por el contrario la forma no es buena, por no haberse
cumplido los requisitos o formalidades esenciales del instrumento y el negocio o el
fondo del asunto fuere lícito.

Aunque el instrumento público y el documento público tienen plena validez a la luz


de lo establecido en el artículo 186 del Código Procesal Civil y Mercantil, siempre
queda a salvo el derecho de partes de redargüirlos de nulidad o de falsedad. Ya que
pudiera dares el caso de estar ante un instrumento nulo o un instrumento falso, que
indudablemente carece de valor. Según la Nueva Enciclopedia Jurídica, citada por
Pelosi: “Se entiende por impugnación la actividad encaminada a combatir la validez
o eficacia de algo que puede tener trascendencia en el campo de lo jurídico.”
“Con relación al documento notarial dos son las causas que pueden dar origen a su
impugnación, y según el caso, también son distintos los medios que el derecho
positivo ha previsto para obtenerlo.
Si existen vicios en su formación referentes al autor o por defectos de forma, la
acción que cuadra es la de nulidad. Si en cambio existe mutación de la verdad, hay
lugar a la falsedad, que será ideológica o material, según se trate del contenido de
la autenticidad externa; todo ello con las particularidades que serán examinadas.

Anticipo que, con respecto a la falsedad, es la alteración de la verdad formal como


tal, por eso se llama falsedad documental, y no de la verdad sustancial, porque esto
último importa simulación, que es un vicio del acto jurídico y no del documento. No
se simulan documentos, sí en cambio se los imita para que aparezcan como
auténticos y se los altera en lo que atañe a su autoría, la geniuda de sus formas o
la veracidad que deben tener las menciones del notario que asignan al documento
carácter de instrumento público y hacen plena fe era omnes.”

10.1. Valor Formal del Instrumento público

Debemos mencionar el valor del instrumento público; aquel instrumento que no


adolece de nulidad ni falsedad, por lo tanto, se tiene como plena prueba según la
legislación guatemalteca.

20
10.2. Valor probatorio del instrumento público

El instrumento público tiene valor formal y valor probatorio. Valor formal, cuando se
refiere a su forma externa o el cumplimiento de todas las formalidades esenciales y
no esenciales que el Código regula y valor probatorio en cuanto al negocio que
contiene internamente el instrumento. Ambos deben complementarse, ya que no
sería correcto que, en un caso determinado, la forma fuera buena y el fondo
estuviera viciado; o por el contrario la forma no es buena, por no haberse cumplido
los requisitos o formalidades esenciales del instrumento y el negocio o el fondo del
asunto fuere lícito.

El autor Pedro Ávila Álvarez, con respecto al valor jurídico del instrumento público,
expone que en el estudio de éste debemos distinguir:

1) El valor o efectos sustantivos


2) Efectos ejecutivos
3) Efectos probatorios.

Valor o efectos sustantivos.

En general: legitimación. Así como en el Registro de la Propiedad la previa


calificación del Registrador permite presumir juris tantum o provisionalmente que el
derecho inscrito existe y pertenece al titular registral, en la escritura pública la
preparación técnica que la Ley exige al Notario, los deberes que le impone, la
responsabilidad en que aquél incurre si los incumple, las formalidades y garantías
de que ha de rodear su actuación, etc., permiten obtener la seguridad -relativa, pero
suficiente para la vida jurídica- de que el negocio en aquella recogido es válido y
legal e incluso reconocer, al menos provisionalmente, al sujeto de aquél la titularidad
de los derechos que de dicho negocio se deriven. En esto consiste la legitimación
que implica la escritura.

En especial, la escritura puede ser, según los casos:

 Elemento indispensable para la existencia del negocio.


 Elemento indispensable para la eficacia, es decir, para la producción de
determinados efectos.
 Elemento indiferente, sin perjuicio del valor legitimador y del probatorio
(procesal).
En Guatemala, según la ley civil (Código Civil), hay contrato cuando dos o más
personas convienen en crear, modificar o extinguir una obligación. (Arto. 1517).
Los contratos se perfeccionan por el simple consentimiento de las partes, excepto
cuando la ley establece determinada formalidad (escritura pública, por ejemplo)
como requisito esencial para su validez, así lo recoge el artículo 1518.
Desde que se perfecciona un contrato (otorgamiento y autorización de la escritura,
si fuere el caso) obligue a los contratantes al cumplimiento de lo convenido, siempre
que estuviera dentro de las disposiciones legales relativas al negocio celebrado, y
debe ejecutarse de buena fe y según la común intención de las partes. (Arto. 1519).
También está regulado que los que celebren un contrato, están obligados a
concluirlo y a resarcir los daños y perjuicios resultantes de la inejecución o
contravención por culpa o dolo. (Arto. 1534).

Desde luego no todos los contratos deben constar en escritura pública, yaque
dependiendo el caso, pueden constar en documento privado, por acta levantada
ante el Alcalde del lugar, por correspondencia y verbalmente. Los contratos cuyo
valor exceda de trescientos quetzales, deben constar por escrito y si fuere mercantil
puede hacerse verbalmente si no pasa de un mil quetzales.

21
Ahora bien, los contratos que tengan que inscribirse o anotarse en los registros,
cualquiera que sea su valor, deberán constar en escritura pública, también los
contratos calificados expresamente como solemnes, sin cuyo requisito esencial no
tienen validez. Con respecto a la ampliación, ratificación o modificación de un
contrato, deberá hacerse constar en la misma forma que la ley señala para el
otorgamiento del contrato principal. Todo lo anterior está regulado en el Código Civil,
Decreto Ley 106, en los artículos 1574 al 1578.

Entre los contratos que deben celebrarse en escritura pública están, obligadamente
como se anotó, los que tengan que inscribirse en los Registros Públicos, entre ellos:
la promesa de compraventa de bienes inmuebles, el mandato, la Sociedad, la
compraventa de inmuebles y muebles identificables, la permuta de inmuebles, la
donación entre vivos, el arrendamiento en los casos de inscribirse en el Registro
(plazo mayor de 3 años y renta pagada por anticipado por un año o más), del mutuo
si se garantiza con hipoteca, por ser ésta un derecho real que recae sobre un
inmueble inscrito.

Aunque no es un contrato, sino un acto puramente personal de última voluntad, el


testamento y la donación mortis causa, deberán otorgarse en escritura pública,
como requisito esencial para su validez. Siendo nulo el testamento que se otorga
sin la observancia de las solemnidades esenciales. (Artículos 955 y 977 del Código
Civil).

Efectos ejecutivos: El testimonio de la escritura pública, es título ejecutivo, lleva


aparejada ejecución, le da esta calidad el Código Procesal Civil y Mercantil.

Efectos probatorios: Corresponde también al Código Procesal Civil y Mercantil,


darle valor probatorio al instrumento público, los cuales reconoce que producen fe
y hacen plena prueba. Las otras leyes procesales, también le dan la misma validez.
El derecho de la otra parte es de redargüirlos de nulidad o falsedad, si fuere el caso.
En realidad los instrumentos públicos hacen prueba contra todos, no solo de que la
escena en que consiste el otorgamiento ha tenido lugar en la fecha que se indica,
sino también de aquellos hechos que se producen ante el Notario en el Desarrollo
de aquella escena, a saber: del hecho de haber comparecido ante él determinadas
personas, del hecho de haberse leído el instrumento e incluso del hecho de haber
realizado las partes determinadas declaraciones (sin prejuzgar si éstas son o no
veraces) y del de haber prestado su consentimiento, etc. Todo esto podrá ser falso,
pero mientras no se impugne por falsedad habrá de hacer prueba so pena de que
desaparezca la utilidad de la función notarial.

10.3. Impugnación por causas de nulidad

Se entienden por Nulidad la “Ineficacia en un acto jurídico como consecuencia de


carecer de las condiciones necesarias para su validez, sean ellas de fondo o de
forma, o como dicen otros autores, vicio de que adolece un acto jurídico si se ha
realizado con violación u omisión de ciertas formas o requisitos indispensables para
considerarlo como valido…”
Salas con respecto a la nulidad expone: “Desde el punto de vista notarial, la nulidad
se puede definir como la incapacidad de un instrumento publico para producir
efectos jurídicos, por mediar algún vicio en su contenido o en su parte formal. La
nulidad de un instrumento puede ser, pues, de fondo o de forma.

10.3.1. Fondo

Se produce cuando aquel es ineficaz porque el acto o contrato que contiene está
afectado por un vicio que lo invalida. Esta especie de nulidad se rige por las normas
referentes a la nulidad de los actos jurídicos en Derecho Civil. (Se denomina nulidad
contractual o negocial)

22
10.3.2. Forma

La nulidad de forma o instrumental es la que más interesa en el Derecho Notarial,


porque afecta al documento considerando en sí mismo y no como contiene de un
acto o negocio jurídico, sin perjuicio desde luego, que la nulidad instrumental afecte
indirectamente la validez del acto o negocio que contiene. La nulidad formal está
sometida a tres principios fundamentales.

Principio de excepcionalidad: los instrumentos públicos, sólo son nulos en los


casos expresamente contemplados por la ley, ya sea en forma directa o indirecta;
no existen nulidades notariales por analogía o cualquier otro medio de interpretación
extensivo, dado que, dentro del ámbito del Derecho Notarial, predomina el interés
de los particulares.

Principio de finalidad: la finalidad del instrumento público prevalece sobre la mera


formalidad. La nulidad formal del instrumento no implica una total falta de eficacia
jurídica, sino tan solo, un dictamen de la misma. Así por ejemplo, un instrumento
público defectuoso por incompetencia del notario o por falta de alguna formalidad
exigida por el ordenamiento surte los mismos efectos de un documento privado,
siempre que esté firmado por las partes.

Principio de subsanabilidad: La subsanabilidad, en cuanto a la nulidad de un acto


jurídico, es diferente a la subsanabilidad en las omisiones instrumentales. En esta
se manifiesta como una consecuencia necesaria del principio de finalidad, porque
la finalidad del instrumento público debe prevalecer sobre el simple formalismo de
la misma. La subsanabilidad del instrumento puede realizarse por los medios que
admite la legislación de cada país.
Mientras que la omisión de formalidades no esenciales, hace que el Notario incurra
en una multa de cinco a cincuenta quetzales, según el caso. (Arto. 33)

Las formalidades esenciales reguladas en el artículo 31 son:


El lugar y la fecha
Nombres y apellidos de los otorgantes
Razón de haber tenido a la vista los documentos que acrediten representación
cuando se comparezca en nombre de otro.
La intervención del interprete, cuando el otorgante no hable español.
La relación del acto o contrato con sus modalidades
Las firmas o en su caso las impresiones digitales.
De no cumplirse con alguno de los requisitos anteriores, estamos ante una nulidad
de forma o instrumental que tendría que ser demandada.
Mientas que la nulidad de fondo, es el Código Civil quien la regula en el artículo
1301 en adelante, al establecer que hay nulidad absoluta en un negocio jurídico,
cuando su objeto sea contrario al orden público o contrario a las leyes prohibitivas
expresas, y por la ausencia o no concurrencia de los requisitos esenciales para su
existencia.

Recuérdese también los elementos para la validez de un negocio jurídico:

La capacidad legal del sujeto


El consentimiento
La Licitud del objeto.

10.4. Impugnación por Falsedad

Según Osorio, es la: “Falta de verdad o autenticidad. Falta de conformidad entre las
palabras, la ideas y la cosas.
Cabanellas afirma: “Cualquier mutación, ocultación o desfiguración de la verdad y
de la realidad, produce la nulidad de los actos jurídicos según las leyes civiles o
sancionada como delito en los códigos penales”.

23
Oscar Salas afirma: “La falsedad es material cuando consiste en la alteración del
contenido real del documento.

Es ideológica cuando se hace constar en un documento un hecho no declarado por


las partes. El documento expresa un acto o negocio que realmente se produjo, pero
se ha consignado de manera inexacta alguna de sus circunstancias. La falsificación
de tipo ideológico es privativa de los instrumentos públicos, dado que los
documentos privados no requieren de la intervención de ningún funcionario público
lo autorice.

10.4.1. Material

Se comete falsedad material cuando se hace un documento público falso o se altere


uno verdadero, y falsedad ideológica, cuando en el otorgamiento, autorización o
formalización de un documento público, se insertare o hiciere insertar declaraciones
falsas

24
11. Bibliografía

 Nery Roberto Muñoz, Introducción al Estudio del Derecho Notarial, Editorial.


Infoconsult editores, Guatemala, 2007 la 12 Edición,

 Constitución Política de la República de Guatemala,

 Código de Notariado

25

Potrebbero piacerti anche