Sei sulla pagina 1di 4

Un modelo de subsistencia para la puna del Perú Central.

John Rick
Enzo Alfredo Nulli Perdicci

El presente ensayo analiza el artículo de John Rick acerca de los modelos de subsistencia para la
puna del Perú Central. Es uno de los primeros estudios de este tipo en la puna de Junín que permite
analizar dos variables importantes dentro de la presente área de análisis como es la ecología y la
tecnología para el nivel de cazadores recolectores.

El autor lo que inicialmente brinda es la explicación del presente modelo. En sí, un modelo es un
sistema o conjunto de hipótesis trabajadas e interconectadas entre sí. Dichas hipótesis (o elementos
del sistema) no pueden estar independientes entre sí, por lo cual su relación es dinámica. Si una de
las relaciones cae, el modelo fluctúa y no aprueba. En este caso, para lo que denomina "cultura de
cazadores" (Rick, s/f, 103), el autor los relaciona con dos variables: ecología (que brinda los recursos
necesarios para su desarrollo dentro del contexto sistémico de aquel momento) y tecnología (que
implica las técnicas que permitieron explotar los recursos).

Los recursos son trascendentales para determinar si una zona es ocupada un tiempo determinado o
no. En este caso, se busca si estos recursos fueron brindados todo el año o por estaciones. Si fueron
por temporadas limitadas, es obvio que los sistemas sociales debieron buscar los mismos por otros
lados, si es que no contaban con la tecnología de conservación o preservación de sus recursos
alimenticios.

La puna es un área fisiográfica que "parece muy poco cambiada desde el precerámico" (Rick, s/f,
104). No tiene mucha diferenciación en sus estaciones por lo cual es un ambiente frio y poco
diferenciado en sus épocas de lluvias. Sus rangos de altitud de entre 3800 a 4600 msnm no ha
producido motivo alguno para que no sea habitable, especialmente por el hombre antiguo.

Existe en la misma una biomasa que puede ser clasificada en animal y vegetal. En cuanto a recursos
animales se percibe una gran cantidad de camélidos, entre los cuales encontramos a la vicuña, al
guanaco, los venados de cola blanca, las tarucas, peces, anfibio, roedores, zorrinos, felinos, canidos y
algunas aves acuáticas. En el caso de los vegetales, se encuentran las gramíneas, consumidas por la
masa animal de esta región y algunas raíces y semillas que solo crecían en otros lados o en cortos
plazos al año. Existen estudios de las vicuñas, según el autor, las cuales lo identifican como un animal
territorial, que se encuentra ubicada en dos grupos: las bandas (con un macho dominante y varias
hembras) y las tropas (conjunto de machos subdominantes).

Por consiguiente, otra de las hipótesis del autor implica si "la subsistencia durante el precerámico en
la puna tendría a los cérvidos y camélidos como base, especialmente a la vicuña" (Rick, s/f, 109). La
abundancia de carne en todo el año, probablemente implicó a la caza para poder obtener los
requerimientos nutricionales diarios que se necesitaban en la dieta. Según Rick, basa sus cantidades
de vicuñas por km2 gracias al trabajo de Koford de 1957, con lo cual estipula el cálculo aproximativo
de 10 vicuñas por km2, que en sus observaciones considera menor. Según otros autores, puede
disponer de los datos de "grupos de alrededor de 25 personas" (Rick,s/f,110) en un área que
consideró "aproximadamente 250 km2" (Rick,s/f,110), obteniendo así un círculo de
aproximadamente 9 km de radio.
Otra de sus hipótesis es ver si los cazadores que cazaban camélidos como es la vicuña podrían llegar
al sedentarismo. En este punto, debate con los antropólogos puesto que consideran a los cazadores
nómades, pero según el investigador, esto puede variar de acuerdo a las condiciones de los
ambientes. En el caso de ofrecer las condiciones de dieta, abrigo y calor, el hombre puede conllevar
al sedentarismo.

En base a dichas cuestiones, implica la existencia de campamentos base y campamentos temporales.


Los primeros donde centraban su vida cotidiana y sus actividades sociales, y la segunda que
implicaban la caza, reparación de artefactos de caza, procesamiento de los alimentos, y otras
cuestiones que eran de corto plazo.

Campamentos base según Rick poseen en la gran mayoría "una cueva con cámara profunda, un
pequeño lugar plano inmediatamente frente a la boca y un talud largo y muy inclinado." (Rick,
s/f,117), con evidencias de actividades sedentarias, donde una evidencia del campamento
mencionado es que la mayor parte de las herramientas y basura arqueológica se encuentran
depositadas, especialmente las que requieren de gran tiempo de fabricación.

En esta cuestión deben demostrarse encontrando tres tipos de evidencia: a) la evidencia


arqueológica sobre la subsistencia de caza de la vicuña y otros animales (que debían ser visualizados
como dato en los sitios arqueológicos y en gran cantidad de restos óseos del camélido, sus utensilios
de caza y de procesamiento), b) la evidencia arqueológica que implica una ocupación en la puna de
manera permanente (con evidencia de plantas y animales obtenidos todo el año), c) evidencias
arqueológicas que implican sedentarismo (donde existan ciertos patrones que impliquen una
ocupación intensiva).

Por otro lado, se menciona sobre el patrón de asentamiento. Es obvio que deben tener ciertas
características bien definidas y que permita en si lograr interrelacionar las hipótesis. Es asi que para
esto se deben realizar la prospección que permita establecer el patrón de asentamiento en un área
determinada y la excavación tanto en el sitio de campamento base como temporal.

Posteriormente, en el capítulo subsiguiente denominado "El Precerámico en la puna de Junín:


pruebas para el modelo de sedentarismo", Rick explica los trabajos de campo entre 1973 a 1976 que
realizó para fundamentar su modelo. Ya existían trabajos realizados por Ramiro Matos de 1975 y que
implicaba dos excavaciones: a) Pachamachay, el cual reconocía como campamento base y b)
Pampacancha, el cual era probablemente un sitio de caza.

La prospección fue realizada alrededor de Pachamachay, en un radio de 10km, para encontrar


ocupaciones y que permitieron en zona maso menos planas y en cuevas ubicarlos. Es asi que el autor
encuentra 26 sitios del precerámico, añadiendo "tres sitios más anotados por Hurtado de Mendoza
(1975)" (Rick, s/f, 126). Fueron divididos en a) Grupo Uno, campamento base comprobado, con solo
01 sitio que es Pachamachay (donde se encontraron 15621 herramientas ubicadas en 10m3 de
excavación; b) Grupo Dos, probablemente temporal con 06 sitios incluido Pampacancha con 297
objetos ubicados en 1.13 m3 de excavación y c) Grupo Tres, al parecer de poca importancia, con 19
sitios y muy poco material superficial (sin excavación). En cuanto al patrón, el Grupo Dos están en
forma circular a Pachamachay, y los del Grupo Tres se presentan como racimos alrededor de los del
Grupo 1 y Grupo 2.
Es factible que Rick aplicara los círculos concéntricos para obtener las áreas de captación y así poder
determinar las áreas explotadas desde los sitios del Grupo Uno o Dos. Se denota que la mayoría de
los sitios se encuentran cerca de las concentraciones de vicuñas y riachuelos. Dichos sistemas de
drenaje son al parecer dominados por los Grupos Uno y Dos.

Es por tales condiciones, que se permite realizar una jerarquía de sitios que tiene definición en base
a la densidad de los materiales culturales (según Rick, con aproximación total de 500,000 (Grupo
Uno), 10,000 (Grupo Dos) y 1000 (Grupo Tres) artefactos culturales). Esto es un indicador de
ocupación intensiva "viviendo en forma permanente en la zona" (Rick,s/f,135).

La excavación permitiría complementar dichas hipótesis estipuladas. Así, se excava en Pachamachay,


una cueva con cámara de 7 metros de profundidad y 4.5 metros de ancho. Se aprecia un depósito
superficial de aproximadamente 300 m2. Ya se habían hecho excavaciones por Matos (de 1969 a
1970), Matos - Kaulicke (1973) anteriormente. Por consiguiente, se realiza una excavación de 3 x 3
metros cuadrados subdividido en 09 sectores, por capas naturales, donde se encontró 33 capas en
2.49 metros de profundidad hasta la roca madre. Todos los artefactos fueron registrados
tridimensionalmente (herramientas, huesos y otros objetos). La tierra extraída fue tamizada
obteniéndose más material, y de cada capa se extrajeron muestras para análisis posteriores. Por
cuestiones de seguridad, Rick decidió reducir la excavación a 2 x 2 metros a partir de la capa 22. Las
primeras 11 capas estaba relacionadas con épocas cerámicas, mientras que las otras 22 se
relacionaron con el precerámico. Se demostró que existieron antes grupo nómadas, pero también
cazadores sedentarios y probable de pastores tempranos.

Encuentra en la excavación 10,000 artefactos entre huesos y fragmentos. Asimismo, se encuentran


en el análisis de flotamiento semillas de cactus (Opuntis), Chenopodium entre las más numerosas.
Los huesos identificados determinan a 319 individuos en 10 m3 de depósitos. Es así que estima para
todo el sitio (400 m3) un estimado de 12,000 camélidos. Produjeron también la excavación 15621
herramientas de piedra, clasificadas en a) Herramientas pesadas (grandes núcleos); b) lascas
utilizadas (sin evidencia de modificación, pero con huellas de uso); c) bifaciales (trabajadas en sus
dos caras), que podían ser como c.1) punta afilada, c.2) con retoques a los dos lados, c.3) con
retoques extensivos; d) unifaciales (trabajada en una sola cara) probablemente usadas para cortar.

Asimismo, entre las especies que fueron analizados, un alto número fueron de animales recién
nacidos, los cuales apuntan los meses de diciembre a marzo. En cuanto a restos de alimentos, son
especímenes que pertenecen a la puna. Los análisis de flora implican sobre la presencia de semillas
que son de mayor abundancia entre abril y agosto. Los análisis de líticos estipulan que provienen de
canteras cercanas, distantes 10 a 25 km.

Para sustentar la evidencia de una ocupación sedentaria en la puna, implica el trabajo de


recuperación de estructuras, las cuales fueron cinco: a) Casa 01 (capa 15) que es una estructura
redonda de piedra; b) 06 moldes de poste (capa 17); c) líneas de piedras grandes (capa 18); d) casa
02 (capa 25) con 14 moldes de postes; e) muro de piedras grandes (capa 32) probablemente para
cerrar parcialmente la boca de la cueva. Todas estas estructuras presentan una densidad de huesos,
herramientas y evidencia de desgasta que implican que hubo una ocupación intensiva del sitio.

Finalmente, en Pampacancha, la excavación de 1.13 m3 implico la obtención de menor evidencia


que en Pachamachay. Estas diferencias cuantitativas de herramientas, así como poca evidencia de
ceniza, sin restos de fauna (probable por la acidez del suelo) y sin restos de semilla carbonizada
implica que funciono como "sede de actividades relacionadas con la caza" (Rick,s/f,185)
En conclusión, el trabajo de Rick ofrece una gran riqueza de conocimiento con respecto al estudio de
los cazadores-recolectores de la puna de Junín, en la cual se demuestra por la evidencia de que
existió un grupo social que alcanzó un grado de sedentarismo; aunque lo replica el investigador y mi
perspectiva es que es obvio que se necesita complementar si el sedentarismo tiene varios grados
definidos, en base a indicadores. Por otro lado, Rick complementa la información infiriendo las
acciones sociales que se podían realizar en el sitio, pero se deja en claro que aún hay cuestiones por
sustentar como por ejemplo trabajar sobre la evidencia de entierros. El investigador ha continuado
trabajando el sitio posteriormente, para poder reforzar el modelo presentado y ajustar los eventos
ocurridos en el precerámico de la puna de Junín.

Bibliografía

RICK, J. Un modelo de subsistencia para la Puna del Perú Central. En Cronología, clima y subsistencia
en el precerámico andino. INDEA, Lima.

Potrebbero piacerti anche