Un suelo contaminado es aquel que ha superado su
capacidad de amortiguación para una o mas sustancias y como consecuencia pasa de actuar como sistema protector a ser causa de problemas para el agua, aire y organismos. Al mismo tiempo se altera el equilibro geoquímico apareciendo cantidades anómalas de determinados componentes que originan importantes modificaciones en sus propiedades físicas, químicas y biológicas. En la contaminación de los suelos se debe considerar: La presencia de agentes contaminantes Definir los máximos valores admisibles Vulnerabilidad del suelo Poder amortiguador Movilidad Biodisponibilidad Persistencia Carga critica Susceptibilidad: Grado de sensibilidad del suelo para un determinado agente contaminante Carga critica: Es la máxima cantidad de una sustancia que un suelo puede recibir sin que aparezcan efectos negativos para el o para la vida que soporta. Vulnerabilidad Es el grado de sensibilidad o debilidad frente a la agresión de agentes contaminantes La vulnerabilidad permite diferenciar los riesgos potenciales de diferentes actividades o predecir las consecuencias de la continuación en las condiciones actuales. El poder amortiguador del suelo representa la capacidad de inactivar los efectos negativos de los contaminantes. A mayor capacidad de amortiguación menor vulnerabilidad. El grado de vulnerabilidad de un suelo depende de: La intensidad de afectación Del tiempo que debe transcurrir para que los efectos indeseables se manifiesten en las propiedades físicas y químicas del suelo De la velocidad con que se producen los cambios secuenciales en las propiedades de los suelos en respuesta al impacto de los contaminantes Biodisponibilidad Capacidad del agente de ser absorbido por los seres vivos Su disponibilidad puede variar dependiendo de: Solubilidad Grado de retención Degradación Eliminación Movilidad: capacidad del contaminante de extenderse en el suelo y hacia otros sistemas relacionados Persistencia: Capacidad del contaminante de permanecer en el suelo sin ser degradado o neutralizado Capacidad depurativa Depende de: La actividad microbiológica que facilita la descomposición e inmovilización de los contaminantes Arcilla y materia orgánica: Que mediante reacciones fisicoquímicas adsorben a los contaminantes y permiten su inmovilización o liberación. La capacidad filtrante que regula la facilidad de penetración de los contaminantes, para ello se debe considerar: Textura (suelos arcillosos tienen alta capacidad de autodepuración) Porosidad y permeabilidad facilitan la circulación de los contaminantes en el suelo y pueden eliminarlos o traspasarlos hacia los niveles freáticos Causas 1.- Uso intensivo y excesivo de fertilizantes Los principales problemas de contaminación se centran en el nitrógeno y su acumulación en forma de nitratos (NO3-) que lixivian produciendo la contaminación de los acuíferos, o por escorrentía las aguas superficiales. El exceso de nitratos causa problemas de eutrofización y de toxicidad. 2.- Generación incontrolada de residuos de origen animal en el suelo. El exceso de abonos orgánicos (estiércol) utilizados como fertilizantes en los suelos, puede agravar su contaminación, y en el caso del uso excesivo de residuos líquidos, conducir a problemas de salinización. 3.-Utilización inadecuada de fitosanitarios empleados en suelos y sus productos de degradación, son peligrosos para los suelos en función de su persistencia y toxicidad, así como su posible bioacumulación. Son compuestos que pueden sufrir transformaciones químicas, degradaciones biológicas, retención en las partículas edáficas o lixiviación a los acuíferos en función de su naturaleza química, la constitución del suelo y la concentración de microorganismos en el mismo. 4.- Generación de lodos que provienen de la depuración de efluentes. 5.- Disposición inadecuada de residuos urbanos e industriales. 6.- Aporte natural de contaminantes atmosféricos por deposición en el medio. Efectos de los contaminantes en el suelo •Contaminación de las aguas subterráneas a través de lixiviados. •Contaminación de las aguas superficiales a través de la escorrentía. •Contaminación del aire por combustión, evaporación, sublimación o arrastre por el viento. •Envenenamiento por contacto directo. •Envenenamiento a través de la cadena alimentaria. Degradación del suelo (pérdida cualitativa o cuantitativa, parcial o total de su productividad, como resultado de procesos y agentes contaminantes. Otras formas de deterioro de suelos La erosión.- Eliminación del material que constituye el suelo (partículas) al ser disgregado, arrancado y transportado. Los principales agentes erosivos son el agua y el viento provocando la erosión hídrica y eólica respectivamente Salinización.- Acumulación elevada de sales solubles, y se caracterizan por afectar el crecimiento de la vegetación. Este proceso se atribuye a dos aspectos principales: Inadecuada práctica de regadío y actividades industriales y mineras Desertificación.- Es una degradación avanzada provocada generalmente por agentes antropogénicos. Genera una disminución del potencial biológico del terreno, pudiendo llegar a condiciones desérticas. •Los factores de los que depende este proceso son el clima, los cambios ecológicos y aspectos antrópicos. Tratamientos In-situ: Métodos aplicados contra la acción contaminante sin movilizar el suelo del terreno. Con estas técnicas, el impacto ambiental es bajo, son más fáciles de aplicar y el costo económico menos comparado con otras técnicas. Técnicas: Biodegradación: consiste en la descomposición de sustancias peligrosas en sustancias inocuas mediante procesos biológicos. Dichos procesos consisten en la aplicación de microorganismos aptos para los diferentes tipos de contaminantes a tratar. Degradación química: se basa en la degradación del contaminante mediante la aplicación de productos químicos. La técnica consiste en inyectar el reactivo en el suelo y luego mezclarlo mecánicamente. Lavado: consiste en la disolución de las sustancias contaminantes mediante la aplicación de una mezcla de agua y productos solubilizantes. Aireación: consiste la inyección por bombeo de gases, con una diferencia de presión; arrastra las sustancias contaminantes que son evacuadas por el pozo de extracción para su tratamiento. Solidificación: técnica que incorpora en el suelo un medio de fijación y crea con el suelo una masa endurecida de baja permeabilidad inmovilizando los contaminantes. Fito enmienda: consiste en cultivar vegetación adecuada y acorde al tipo de contaminante presente en el suelo. Estos cultivos se encargan de extraer las sustancias contaminantes siguiendo las vías habituales de captación de nutrientes. Tratamientos ex-situ: Técnicas de recuperación del suelo contaminado en instalaciones especiales, previa excavación y traslado de su ubicación original. Con estas técnicas, existe una alta seguridad de actuación, el control de los procesos es alto al igual que la garantía de sus resultados. Técnicas: Compostaje: implica la transformación de compuestos tóxicos en sustancias asimilables, mediante la acción metabólica de microorganismos específicos al tipo de contaminación. Incineración: tratamiento térmico (alta temperatura), donde los contaminantes son volatilizados mediante combustión en un tratamiento posterior. Esta técnica requiere depurar los gases generados. Confinamiento: se da cuando el suelo contaminado es considerado como un residuo tóxico. La técnica implica el confinamiento del suelo contaminado en un vertedero seguro, cumpliendo varias condiciones como la impermeabilización y compactación del material.