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Efectos adversos de los anticonceptivos en la madre y el feto.

En este artículo nos referimos particularmente al uso de los anticonceptivos orales


combinados. Desde hace cincuenta años se introdujeron en el mercado y se han
vendido muchos millones de píldoras anticonceptivas en el mundo entero lo que
necesariamente ha impactado las tasas de natalidad y ha permitido que la humanidad
no crezca de manera desaforada poniendo en riesgo, por ejemplo, la seguridad
alimentaria, los distintos índices de desarrollo humano y la calidad de vida de las
mujeres y sus familias.

Colombia tiene en la actualidad un consumo inferior de anticonceptivos orales al de los


Estados Unidos y Gran Bretaña pero cada vez la diferencia es menos notoria. Los
anticonceptivos combinados no solo uno de los métodos de control natal más usados
sino que hacen parte de los más seguros como lo demuestran todos los estudios de
acuerdo al índice de Pearl. No obstante, los pocos embarazos que se producen durante
su utilización exponen al feto a los efectos de estrógenos y progestágenos.

El uso universal de los contraceptivos orales durante medio siglo hace que los médicos
conozcan con precisión los efectos adversos que se presentan en las mujeres que los
consumen como cefalea, dolor mamario, depresión, disminución de la libido, aumento
de peso, melasma, algunas alteraciones en el metabolismo de lípidos y carbohidratos,
entre otros muchos. Sin embargo, no son tan conocidos los efectos en el feto por el uso
inadvertido de estas sustancias en mujeres gestantes. Aunque ha habido algunos
reportes que los asocian con hipospadias, alteraciones en las extremidades y algunas
cardiopatías, no hay un estudio que relacione fehacientemente estas malformaciones
con la utilización de los anticonceptivos. Parece ser que los anovulatorios orales son
drogas muy seguras desde el punto de vista de la teratogenicidad.

Lógicamente si una mujer queda en embarazo planificando con anticonceptivos orales


se debe proceder sin demora a la suspensión de la terapia. En realidad, en la mayoría
de los casos las madres solo toman estos medicamentos durante unos pocos días y los
interrumpen rápidamente cuando creen estar embarazadas.

Decidir libre y responsablemente el número de hijos, su frecuencia y el momento


oportuno para tenerlos, es la base fundamental de los derechos sexuales y
reproductivos aceptados internacionalmente, que rigen para todos los individuos sin
exclusión de género, edad, grupo de población, estado marital, parejas o personas,
opina el doctor Aníbal Castañeda Leal pionero de la planificación familiar en nuestro
medio.

León Speroff et al citan la publicación de 1978 de Rotthman y Louik, quienes


aseveraron observar una relación entre anticonceptivos orales y defectos congénitos de
los miembros, pero sentencian que era un estudio estadísticamente no significativo y
que no se ha confirmado.

Bracken en 1990 comunicó un metanálisis de 12 estudios prospectivos al respecto, no


observando aumento en el riesgo global de malformaciones, cardiopatías congénitas ni
defectos de las extremidades. El tema parece quedar limitado al uso de la píldora en
época precoz del embarazo, no se han observado malformaciones en los nacimientos
subsiguientes en mujeres que interrumpieron la anticoncepción oral. No hay aumento
en las tasas de anomalías cromosómicas ni abortos espontáneos. No hay razón para
recomendar a las mujeres, diferir sus intentos de concebir, hasta uno o dos meses
después de suspendido el uso de la píldora.

En estudios prospectivos no se ha observado ninguna relación entre esteroides


sexuales y la aparición de anomalías del complejo VACTERL (malformaciones
vertebrales, anales, cardíacas, traqueoesofágicas, renales y de las extremidades, así
como tampoco se han relacionado con hipospadias y con efectos mutagénicos que
pudiesen ser los responsables de fetos cromosómicamente anormales.

El doctor Alvaro Monterrosa Castro, ginecólogo cartagenero, periódicamente actualiza


el tema de los métodos de planificación familiar y en sus revisiones de la literatura no ha
logrado determinar que existan efectos teratogénicos demostrados de los
anticonceptivos orales combinados. De todas maneras estas sustancias siguen
clasificadas como fármacos categoría X y no deben ser usados por mujeres
embarazadas. En cualquier programa de planificación familiar debemos descartar
definitivamente un embarazo antes del inicio de un método de control natal.

Material preparado por el profesor Luis Javier Castro Naranjo para uso exclusivo en la docencia

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