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INTRODUCCIÓN

Hoy en día sé afirma que una estrategia se compone de una serie de acciones
planificadas que ayudan a la toma de decisiones y de esta manera conseguir los
mejores resultados.
La responsabilidad de lo que pase con la estrategia empresarial, es decir de que
funcione o no es de las personas que tiene el poder de la toma de decisiones, ya
que son ellos los que planifican paso a paso como implementarla, los objetivos
que quieren lograr a corto y largo plazo, ya en este punto llegamos a determinar el
personal que tendremos en el proceso, definir costos y gastos, delegar funciones.
Adquirir una estrategia o un plan empresarial genera una ventaja competitiva en el
mercado donde se desenvolverán sus actividades.
El objetivo principal de una estrategia empresarial para toda organización es
sobrevivir, crecer, obtener productividad en el presente y asegurar su futuro, cabe
destacar que todo esto se hace con un alto grado de complejidad e incertidumbre.
La siguiente reseña de la unidad no. 5 “Diseño de Estrategias en momentos de
incertidumbre” contiene críticas que a mi punto de vista muestran la importancia
de las estrategias aun cuando se tiene un momento de indecisión y de saber que
pasará o no.
DESARROLLO

El subtema de Impacto del objetivo y/o problema nos habla de los motivos que
llevan a los individuos a proponer estrategias a seguir bajo condiciones de
incertidumbre pueden ser varios, pero lo importante es que esa fricción trae como
resultado un aumento en el grado de participación del empleado de niveles medios
y bajos en las decisiones importantes de la organización, algo que los altos
mandos deben tener muy presente a la hora de determinar cuál será el curso de
acción a seguir en el mediano y largo plazo. El empleado de los mandos medios y
bajos está en diario contacto con proveedores, consumidores, clientes, por lo tanto
puede observar más de cerca una realidad que en muchos casos la alta dirección
solo observa a través de cúmulos de datos estadísticos que proveen los
indicadores de gestión. Sería un grave error no incorporar los aportes que estos
pueden generar en cuanto a la determinación de la estrategia que será
implementada para adaptarse a las situaciones que el mercado presenta, en
especial si estas no se presentan favorables en lo inmediato.

Como siguiente subtema se habla sobre el Modelo de ajuste del entorno interno
en momentos de incertidumbre una vez que se han definido las principales
oportunidades y amenazas, el trabajo que sigue es valorar los elementos con los
que se cuenta para ofrecer una respuesta apropiada, lo que clásicamente se
refiere como el establecimiento de fortalezas y debilidades.

La capacidad de respuesta está en función del nivel y la calidad de los recursos,


las habilidades que se han logrado desarrollar o la posición que ocupa la empresa,
lo que hace una lista larga de factores por considerar, por lo que se deben enfocar
los aspectos clave.

Al contrario en el modelo de ajuste del entorno externo se refiere al entorno en el


cual la empresa se rodea. Todo aquello que está fuera de los límites de la
empresa, el cual cada vez es más dinámico y cambiante, generando incertidumbre
creciente que obliga a la adaptación de la empresa para sobrevivir en el mercado.
Por ello, las empresas deben de tener la capacidad para adaptarse a su entorno, e
introducir en el modificaciones que le favorezcan a la misma. Esto determina su
supervivencia así como las posibilidades de su desarrollo en el futuro. El entorno
limita las posibilidades de la actividad empresarial a la vez que también es una
fuente de oportunidades para la empresa.

En un Modelo de estrategias de Dirección en momentos de incertidumbre se ve


que actualmente vivimos una época de grandes riesgos con niveles altos de
imprevisibilidad que deberíamos sortear. Dirigir esta coyuntura requiere directivos
“sueltos”, con autonomía. Directivos que puedan ser ágiles, versátiles, y actuar
con iniciativa, intuición y capacidad innovadora. Ahora bien, una organización
funcional tradicional ancla a la empresa y convierte los cambios en meros
“recambios” que frenan las verdaderas innovaciones.

En la evolución de la dirección estratégica al pensamiento estratégico hasta llegar


a estrategia institucional, nos hemos ido concentrando en los objetivos. Para ello,
se buscaron lo que llamamos “percheros” donde colgarlos. Los “percheros” del
primer nivel (empresa global) los definimos como “áreas clave de resultados”.
Englobaban a los objetivos propios de cada empresa, por otro lado, bastante
comunes (rentabilidad, productividad, utilización de medios
productivos/recursos...). En un segundo nivel se encontraban los objetivos de cada
directivo: las “áreas de resultados” que debían apoyar a las áreas clave. Cada
empresa debe identificar su “fuerza motriz”, es decir, aquella área de resultado
diferencial, principal causante del éxito de la compañía.

La mejor manera de lograr un estrecho ajuste entre la estrategia y la estructura de


recompensas es ponerse de acuerdo en los objetivos de resultado, delimitar la
responsabilidad y los límites para lograrlos, y considerar su cumplimiento como un
contrato, el rendimiento estratégico incluido en este contrato deberá construir la
base real para diseñar incentivos, evaluar los esfuerzos individuales y entregar las
recompensas. Los gerentes de todos los niveles deben de ser responsables de
cumplir su parte del plan estratégico y tienen que saber que sus recompensas se
basan en sus logros estratégicos.
Para que una compañía tenga éxito, su estrategia debe ajustarse al ambiente
donde opera, o debe tener capacidad de reformarlo para sacar su propia ventaja,
mediante la selección de estrategias. En la actualidad, las organizaciones
modernas se operan en un ambiente de turbulencia en el que abundan los
desafíos de todo tipo. Con frecuencia la organización y sus departamentos ejercen
mínimo control sobre su entorno. Estos, modelan la forma en que la organización
opera y por esa razón influyen sobre los demás departamentos.
CONCLUSIÓN

En conclusión no debe verse los debates y propuestas de estrategias por parte de


los empleados de toda la organización como un intento de socavar las estructuras
de poder, sino de fortalecerlas a través de la toma de decisiones con criterios
democráticos.

También es importante una vez tomada la decisión en cuanto a la estrategia a


seguir, es tomar las acciones correctas orientadas a la transmisión y puesta en
marcha exitosa de la misma por parte de la organización.

La implementación exitosa dependerá en gran parte de la alta gerencia, quien


deberá delinear claramente los objetivos generales, específicos, políticas
necesarias para el logro del objetivo estratégico, si esto se da correctamente los
encargados de las unidades medias y operativas podrán estructurar sus planes de
acción a corto plazo en los que la organización se apoyara para llegar al objetivo
fundamental.

Nos menciona que toda empresa y sus líderes se enfrentan al ambiente


cambiante, por lo que es importante hacer frente a las exigencias del entorno,
planeando estrategias para momentos de incertidumbre y lograr los objetivos
establecidos. También, las organizaciones deben de tener claro cuál es su visión,
para poder elegir la mejor estrategia que se adapte al momento y poder garantizar
el rumbo de la misma. Por lo que se debe de analizar cómo repercuten los
cambios del entorno de manera interna y externa de la empresa, aplicando el
modelo ideal para la problemática.

Todo esto, me será útil ya que en un futuro, seré capaz de aplicar estos
conocimientos, herramientas, estrategias y controles. Como administradora podré
establecer a través de estrategias, las herramientas para estimular al personal y
demás recursos para alcanzar los objetivos establecidos en un entorno cambiante.
BIBLIOGRAFÍA
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