Sei sulla pagina 1di 3

Vegetaciones

Las adenoides o vegetaciones son un tejido linfoide esponjoso que se sitúan en la parte
superior de la garganta, al fondo de las fosas nasales (justo detrás de la nariz, en el interior
de la cara).
La función principal es la retención y captación de sustancias que pueden ser nocivas para el
cuerpo humano, como las bacterias, los virus o el polvo, entre otros. Una vez que los captan
intervienen procesándolos y activando la respuesta inmune, las defensas.
En los niños, las vegetaciones tienen mayor tamaño debido a que el sistema
inmunológico está continuamente trabajando, ya que los infantes se exponen por primera
vez a un gran número de agentes extraños.
Todos los niños pequeños (que son los que suelen sufrir esta patología) tienen adenoides,
pero cuando comienzan a experimentar síntomas es cuando se producen los problemas.
En la mayoría de los casos la inflamación de las vegetaciones suele estar acompañado de
la inflamación de las amígdalas, ya que ambas estructuras tienen la misma función.

Causas
El aumento excesivo de las vegetaciones puede surgir de forma natural, comenzando
normalmente en el desarrollo fetal, o puede desarrollarse en el periodo escolar debido
a infecciones repetidas de las vías respiratorias a causa de enfermedades como los catarros
o los resfriados.

Síntomas
Las manifestaciones de las vegetaciones comienzan cuando se obstruye la vía área superior.
A partir de ese momento los síntomas que pueden aparecer en el paciente son:

 Cambio de la respiración: La nariz del niño estará taponada por lo que la respiración
cambiará y se verá obligado a respirar sólo por la boca.

 Mucosidad nasal.

 Ronquidos y apneas: Los niños con vegetaciones roncan siempre por la noche. Además,
dependiendo del caso puede llegar a tener pausas en la respiración (apnea del sueño). Los
infantes que tienen estos síntomas suelen dormir mal y estar inquietos y cansados durante el
día.

 Dificultades para tragar.


 Aumento de las infecciones: La acumulación de las secreciones, la dificultad para drenarlas
y para que el aire circule con normalidad por las vías aéreas pueden provocar que aparezca
la tos e infecciones como la sinusitis, la faringitis y la otitis.

Prevención
En la actualidad no existe ningún método que ayude a prevenir la aparición de las
vegetaciones. No obstante, sí se puede evitar las consecuencias negativas que puede tener
sobre el niño. Los especialistas recomiendan acudir al otorrinolaringólogo cuando presente
los primero síntomas de dificultades para respirar o ronque por las noches.

Tipos
Las adenoides no están clasificadas por tipos.

Diagnóstico
Debido al lugar donde están situadas, las vegetaciones no pueden visualizarse de manera
directa mirando la garganta.
Para diagnosticarlas el especialista deberá realizar un examen físico para verificar que el
tamaño de éstas ha aumentado. También se puede realizar una radiografía lateral de la
faringe para evaluar el tamaño.
En los casos más graves es conveniente realizar una prueba apnea del sueño para estimar
la intensidad de los episodios de apnea.

Tratamientos
El primer paso que suele dar el médico es administrar antibióticos al paciente para tratar
la infección en las amígdalas, adenoides y senos paranasales.
Sin embargo, y por lo general, lo recomendable suele ser la extirpación quirúrgica de las
glándulas adenoides junto con la extracción de las amígdalas. Esto evita complicaciones
futuras. La operación se produce cuando el paciente está totalmente dormido, con anestesia
general.
Algunos profesionales prefieren cauterizar las vegetaciones en vez de extirparlas,
controlando el sangrado con apósitos.

Otros datos
La hipertrofia adenoidea o vegetaciones es característica de los niños entre 3 y 6 años de
edad. Si se toma como opción extirpar las adenoides, la operación consiste más en “rebajar”
el tamaño de éstas que en extraerlas completamente. Por ello a veces se debe realizar una
segunda intervención al cabo de meses o años. Aunque se requiere anestesia general,
normalmente el paciente puede volver a casa el mismo día de la intervención.
El papel que desempeñan las vegetaciones durante la infancia pierde protagonismo cuando
el niño va creciendo, ya que el cuerpo desarrolla otras formas de luchar contra los gérmenes.

Potrebbero piacerti anche