Bueyes o Levitas.

2 Samuel 6: 1 al 11. Leer…

Cuando era niño mi madre me llevaba a una iglesia evangélica, allí nos enseñaron muchas historias
bíblicas, muchas de ellas estaban lejos de la realidad que vivíamos como congregación y como
personas, esta iglesia tenia muchísimas normas de lo que no se podía hacer y muy pocas de lo que
si se podía; una de esas normas que más recuerdo, era que las hermanas no podían usar
pantalones, solo podían usar falda, 4 dedos debajo de las rodillas; otra de esas normas, era que los
hombres no podían subir a lo que se llamaba “altar”, sino tenían saco y corbata , nunca entendí el
por qué; otras de las normas era que, no se podía ir al cine, porque era sentarse en silla de
escarnecedores ,uff eran muchas normas y al no cumplirlas era pagar una disciplina mínima de
tres meses; la disciplina consistía en no participar en ninguna de las actividades de la iglesia, es
decir, era estar sentado sin hacer nada, solo mirar; otra de las normas era, que no se tocaran
instrumento como , la batería, guitarra eléctrica, bajo, tumbadoras, timbal, entre otros, porque
según el pastor, esos instrumentos eran de adoración al diablo; solo había un órgano, una guitarra
acústica, y tres panderetas; y solo los músicos que estaban bautizados podían tocar dichos
instrumentos; era una congregación de muchas normas y pocos miembros; pero había una norma
que nos ayudó mucho, y era que todos debíamos participar en las cadena oración (niños,
adolescentes, adultos, ancianos) y todos debíamos aprendernos un versículo de la biblia en cada
servicio; y unas de las cosas que aprendí escudriñando la biblia es que nada de esto fue
establecido por Dios sino que son normas de hombres para regir las congregaciones. Pero si hubo
algunas leyes que Dios estableció y debieron ser cumplidas al pie de la letra, y vamos a ver algunos
detalles en estos versículos que acabamos de leer.

DESARROLLO

Por muchos años vi músicos, excelentes, buenos, guataqueros, malos y yo, en mi niñez como dije
anteriormente, en nuestra congregación habían tres instrumentos, pero los que ejecutaban estos
instrumentos eran excelentes músicos, muchas veces traían bandas invitadas y me quedaba con la
boca abierta de como tocaban esta gente y poco a poco la música fue despertando en mi las ganas
de aprender a tocar un instrumento, y a los diez años de edad comencé a interesarme en la
guitarra, le sacaba lágrimas, a la guitarra y a la gente que me escuchaba tocar de lo mal que lo
hacía, pero Dios puso en mi camino a mi mejor amigo Cristian, éramos niños pero Cristian era
músico nato, no solo sabía tocar la guitarra, sino el cuatro, el teclado y también cantaba, con el
aprendí mucho de la música, nos íbamos a otras congregaciones a ver las bandas tocar, y la edad
de once años fuimos a un campamento de la iglesia madre de nuestra iglesia, era un campamento
solo para jóvenes , pero nos coleamos algunos adolescentes, y una de esas tres noches, en medio
de una presencia de Dios en aquel circulo de personas, que lloraban, cantaban, arrodillados,
tirados en el piso; una de las líderes pone la mano en mi frente y me dice estas palabras: No te
avergüences del evangelio, porque es mi poder, Yo te haré un Adorador de mi presencia; y yo
rompí en llanto; en ese tiempo si decías que eras evangélico, te agarraban de burla y a mí me daba
pena decir que era, y de hacerme un Adorador no lo entendí, sino muchos años más tarde; pero
quiero explicar un poco que Adoración es una cosa y los cánticos en las congregaciones es otra
cosa; como dice un amigo mío; si en las iglesias los Adoradores solo son los que cantan, entonces
estamos grave, si en las iglesias Los Intercesores son los únicos que interceden, entonces estamos
gravísimos, porque todos estamos llamados a Adorar e Interceder. Adoración no son canciones
suaves, Adoración simplemente es, Un estilo de vida. Y el cántico, la música, la danza, el servicio,
la palabra, la oración, y cada cosa que hacemos para agradar a Dios, son derivados o resultados de
la Adoración, te pongo un ejemplo muy sencillo; imagínate que una torta es La Adoración y la
música, la danza, los canticos etc., son cada ingrediente, como la harina de trigo, la mantequilla,
los huevos, etc. Los ingredientes por si solos tienen un nombre, pero juntos conforman La torta
(la Adoración).Y el primer músico registrado en la palabra que Adoraba a Dios con instrumento se
llamó Luzbel o Lucifer, y estaba encargado de todo lo que tenía que ver con música, canto y
algunas cosas más que aún no han sido reveladas. Ahora bien David era un hombre que adoraba a
Dios, por lo tanto le gustaba cantarle, de echo en 1 crónicas 23:5 dice que David hizo instrumentos
para alabar y adorar a Dios, en cada paso que David daba adoraba a Dios, en las guerras lo
adoraba, en el palacio lo adoraba, en la angustia lo adoraba, en las derrotas lo adoraba, en las
victoria lo adoraba, todo lo que él hacía, era por la Adoración que había hacía Dios. ¿Será que
nosotros también adoramos en la angustia y en la prueba? Claro que debemos Adorarlo en todo
tiempo, por eso digo que la Adoración es un estilo de vida, no canciones, porque si fuera cantar
entonces los que no saben cantar y los mudos no tuvieran cabida en las congregaciones; David no
escatimaba a la hora de hacer algo exclusivo para Dios, era todo o nada para el Padre, había una
entrega total, Dios era su deleite; nosotros nos hemos conformado con saber que Dios existe y
acudimos a él solo cuando estamos en problemas, necesitamos darle un mejor lugar a Dios. En
este pasaje de la biblia David va trasladar el Arca del Pacto y lo que iba dentro de esa Arca era la
presencia de Dios, puedo imaginar la emoción de David, el gozo y el compromiso de trasladar la
misma presencia de Dios, fue tanto el entusiasmo que tenía, que buscó un carro nuevo para
montar el Arca del Pacto, y en querer hacer algo bueno para Dios olvido un detalle, aunque era
algo bueno, no era como Dios había ordenado, ¿la idea del carro nuevo era buena? Sí; pero el Arca
era jalada por Bueyes y no por Los Levitas como Dios lo había ordenado , y dice que cuando los
bueyes pasaron por un camino de piedra, el carro se tambaleo y parecía que el Arca se iba caer, y
un hombre llamado Uza metió su mano atajando el Arca e inmediatamente que la toco, se
encendió el furor de Jehová y cayó muerto, porque alguien quiso hacer algo bueno, pero no era
como Dios ordenó; y leyendo esto que acaba de acontecer, se me vino una pregunta¿ que soy
yo, soy un buey o soy un Levita? Y esta misma pregunta te la hago a ti, ¿que eres tú? Y me quiero
detener un momento aquí para explicarte algo; Cuando Dios le ordena a Moisés que construya el
Arca del Pacto, manda a poner cuatro anillos de oro en las cuatro esquina del Arca ¿tú crees que
esos anillos eran de adorno? Pues no; por esos anillos iban unas varas y con esas varas Los Levitas
debían por órdenes de Dios cargar el Arca, no eran los bueyes eran los Levitas, pero no solo el
hecho de ser Levitas, también tenían que ser consagrados para poder cargar el Arca, y quien era
Uza? Era descendiente de un levita llamado Merari y aunque era descendiente de un Levita, y a lo
mejor tenía el conocimiento pero para Dios el conocimiento no tenía peso, sino la obediencia y
Dios lo había establecido de una manera que debía ser cumplida al pie de la letra (1 Crónicas
15:14. Así que los Sacerdotes y los Levitas se santificaron para traer el Arca de Dios de Israel.)
Según la historia Uza era dueño de un jardín ubicado cerca de Jerusalén y no sabemos si estaba
consagrado o apto para tocar la Presencia de Dios.

Quiero hacer una analogía de lo que es un Buey y un Levita.

Un Buey: es esa persona que tiene un mar de conocimiento con un dedo de profundidad, que cree
que con venir al templo un domingo ya le cumplió a Dios, también es ese músico o cantante que
piensa que con hacerlo bien es suficiente para Dios(sino nos consagramos, nunca será suficiente),
Uza pensó que estaba bien no dejar caer el Arca y cayó muerto, es esa persona que piensan que si
ellos no son los que interceden Dios no va hacer nada, son los que creen que si diezman mucho
Dios tiene que darles casa, carro, cuentas en dólares y pare usted de contar, un buey es esa
persona que creen que cualquier negocio que produce plata viene de Dios,¿ será que el vender
drogas, licor y cosas ilícitas vienen de Dios? Se ve que es un buen negocio, pero estamos seguros
que vienen del Padre? A David le parecía que a Dios le iba agradar que el montar el Arca en un
carro nuevo arrastrado por bueyes, era buena idea pero desobedecía la orden de Dios (hacer sin
ser autorizado),1 Crónicas 15:12 Y les dijo: Vosotros que sois los principales de las familias de los
Levitas, santificaos, vosotros y vuestros hermanos, y pasad el Arca de Jehová Dios de Israel, al
lugar que le he preparado; pues por no haberlo así vosotros la primera vez, Jehová nuestro Dios
nos quebrantó, por cuanto no le buscamos según su ordenanza. El Apóstol Pablo dice en una
oportunidad a la iglesia de los Corintios: Todo me es licito pero no todo me conviene; hay muchos
bueyes que dicen; Dios me dijo y la verdad es que a ellos les pareció, un buey es ese hermano que
piensa que ellos son los que tienen la autoridad de sacar un demonio o de sanar un enfermo,
déjame decirte que la única autoridad fue dada a Jesucristo cuando hizo aquel acto de sacrificio en
la cruz y la delega a quien él quiere.

Un Levita: es esa persona que tiene sensibilidad para escuchar la voz de Dios, es esa persona que
no se deja llevar por emoción sino por convicción, es aquel que canta o toca un instrumento, no
para que lo vean, sino para exaltar a aquel que es digno de cantarle y de llevar música a su
presencia o cualquier otra cosa que agrada el corazón de Dios, es esa persona que se prepara a
tiempo y fuera de tiempo, es el que no lleva la gente al cielo, sino que le trae el cielo a la gente; es
aquel que ora, ayuna, lee la biblia, tiene intimidad con el Padre, alimenta el espíritu, es una
persona que no se conforma con lo que escuchó, sino que escudriña para que Dios le revele, es
esa persona que busca lo excelente sin perder detalles que sabe que le agradan al Rey, un levita
sabe que le agrada al Padre, porque pasa tanto tiempo con el que conoce mucho de él.

Vuelvo y pregunto, ¿Somos Bueyes o Levitas? No te estoy diciendo que no hagas nada para Dios,
simplemente te digo, que no hagamos cosas que parezcan buenas; como dije anteriormente, hay
ordenanzas de Dios que son para siempre y hay otras que fueron quitadas en el nuevo Pacto, y
una de las que son para siempre es la Adoración a Dios porque se ha convertido en un estilo de
vida, hay gente que se confunde en esto, la Adoración no es un talento o un don, es tan necesaria
como la oración, la vigilia y el ayuno, y tampoco depende de nuestro estado de ánimo, si estamos
alegre Adoramos, y si estamos tristes también Adoramos, imagínate si nuestro corazón latiera
únicamente cuando estuviéramos felices, sería imposible, moriríamos ,porque cada latir nos
impulsa sangre a todo el cuerpo y cada 5 minutos esa sangre hace un recorrido por todas las venas
y arterías, por eso nuestro estado de ánimo no determina o no debería determinar nuestra
Adoración. Y en esta ocasión David, el hombre que era conforme al corazón de Dios, se dejó llevar
por sus emociones y se entristeció y tuvo miedo, y no quiso seguir celebrando la llegada del Arca
con la presencia de Jehová (2 Samuel 6:8,9) . Vuelvo y repito; nuestro ánimo no debería
determinar nuestra Adoración; y así como a David nos ha pasado a nosotros, si se nos muere un
uza (familiar) en el camino, se nos mete la tristeza en el corazón, culpamos a Dios, ya no nos da
ganas de orar o de cantar, nos sentimos tan triste que se nos enfría el ánimo, se nos va la alegría,
ya Dios no es tan importante, ya no vale la pena levantar las manos, o predicar su palabra, ya no
ofrendamos; ni danzamos para Dios ;porque la emoción determinó nuestra Adoración; y ya se nos
hace indiferente su presencia en nuestras vidas, nos volvemos Bueyes y no Levitas, y esa tristeza y
ese temor nos neutraliza y no nos dejamos usar por Dios y mientras estamos en ese proceso, el
usa a otro y a ese otro le pasa como a Obed Edom, que David por el miedo que lo invadió dejó el
Arca del Pacto en casa de Obed Edom y los tres meses que duro el Arca en su casa, Dios lo Bendijo
grandemente. Hermanos hay mucha gente que se quedó en el camino, su parte almática los
entretuvo y se apartaron de Dios y hoy en día son esclavos de las cosas que hay en el mundo, por
no entender, esto que te voy a decir: en este tiempo de David la Presencia de Dios la cargaban en
un Arca, en una Tienda, en un Tabernáculo entre otras cosas, pero Jesús cuando va a la cruz, ese
Pacto es abolido y se establece un nuevo Pacto (Hebreos 8:8. Porque reprendiéndole dice: He
aquí vienen días, dice el Señor, En que estableceré con la casa de Israel y la casa de Judá un
nuevo Pacto) y sabes cuál es ese nuevo Pacto? (Hebreos 8:10. Por lo cual, este es el Pacto que
hare con la casa de Israel. Después de aquellos días, dice el Señor: Pondré mis leyes en las
mentes de ellos, y sobre su corazón las escribiré; y seré a ellos por Dios, y ellos me serán a mí
por pueblo.) Es decir ya Dios no será trasladado en Tiendas, o en tabernáculos o en Arca, Tú eres
esa casa donde Dios habita, Tú eres portador de la Presencia de Dios, Tú te convertiste en ese
Altar de Oración, Adoración, Palabra, Ofrenda, Pacto, Alabanza; Tu eres La Iglesia; Cuando Dios
Pacta con David le habla de ti y de mi (2 Samuel 7:12 y 13. Y cuando tus días sean cumplidos, y
duermas con tus padres, yo levantare después de ti a uno de tu linaje, el cual procederá de tus
entrañas, y afirmare su reino. El edificara casa a mi nombre, y yo afirmare para siempre el trono
de su reino.) Ese hombre que salió de sus entrañas se Llama Jesús y esa casa somos Tu y Yo. (Lucas
1: 32. Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David
su padre.) Ahora te pregunto ¿Qué eres, Buey o Levita? Los bueyes: servían fuera del templo para
hacer los surcos para la siembra, para jalar carretas, servían de carga, hacían trabajos pesados
pero guiados siempre por una persona, no necesitaban consagrarse para hacer su trabajo. Los
Levitas: servían dentro del templo, bajos las ordenanzas de la palabra, guiados por la Presencia de
Dios, eran personas consagradas a él.

CONCLUSION

Hay dos características que Dios busca en un Adorador: Verdad y Espiritualidad; si tú tienes esas
dos características, entonces Dios te está buscando, porque él es el único que sabe, si eres
Verdadero o no, ya que quien busca el verdadero Adorador es El y no la gente; y solo los
espirituales conocen lo espiritual.

Devocional: Eulisis Marín

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