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Responsabilidad Patronal
Teoría de la Culpa:
Culpa es el término jurídico que, según Francesco Carrara, al igual que la negligencia, supone la
"voluntaria omisión de diligencia en calcular las consecuencias posibles y previsibles del propio
hecho".
A esta teoría se le han formulado diversas críticas, lo que no implica que no se reconozca que el
concepto de previsibilidad desempeña un papel de importancia en la culpa, sino tan solo que ese
elemento no puede considerarse como suficiente para servirle de fundamento, dado que en otras
razones, aun siendo previsible el resultado, puede no darse la culpa, si el sujeto ha actuado con la
debida diligencia y prudencia.
El concepto de culpa penal es semejante al de culpa civil: en ambos casos la culpa se define por
una omisión de la conducta debida para prever y evitar el daño. Se manifiesta por la imprudencia,
negligencia, impericia o inobservancia de reglamentos o deberes. Sin embargo, en la apreciación
de la culpa a los fines del resarcimiento del daño, en un caso, y de la represión del delito, en el
otro, existen pautas diversas: en el primer caso la culpa se aprecia como un criterio muy afinado
para no dejar a la víctima sin reparación; en el segundo, existe mayor rigor para valorar las
circunstancias constitutivas de la culpa con el propósito de no condenar a un inocente. De allí que:
la más leve culpa impone responsabilidad civil al autor de un daño y, por consiguiente, una
absolución penal por falta de culpa no hace cosa juzgada en lo civil. Corolario del mismo principio
es que puede fundarse la responsabilidad civil en una simple culpa en la vigilancia y que aun ésta
se presuma, lo que no se admite, en principio, en materia penal.
Delito culposo
En Derecho se define al delito culposo como el acto u omisión que produce un resultado descrito y
sancionado en la ley penal, a causa de no haber previsto ese resultado siendo previsible, o se
previó confiando en que no se produciría, en virtud de no observar un deber de cuidado que debía
y podía observar según las circunstancias y condiciones personales.
Estaremos entonces, frente a un delito culposo cuando se realiza una conducta o una omisión que
produjo un resultado que ya la ley penal establece y sanciona y que por lo general es un resultado
dañoso; por otra parte ese resultado puede ser conocido o desconocido por el ciudadano pero que
la ley nos impone el deber de conocerlo o por lo menos de imaginar sus alcances para luego
entonces poder preverlo y evitar que se produzca, sin embargo aquel ciudadano que no prevea
ese resultado, o si lo prevea y confíe en que no se producirá, y debido a esa confianza o falta de
previsión deje de tomar o ni siquiera tome las medidas necesarias para evitar ese daño será sujeto
a la
Por otra parte, en el dolo eventual, como en el directo, hay una representación del resultado
disvalioso, pero difiere de éste, del dolo eventual, en que a ello se le suma el desinterés de si tal
resultado se produce o no.
Formas de la culpa
Imprudencia.- Punible e inexcusable negligencia con olvido de las precauciones que la prudencia
vulgar aconseja, la cual conduce a ejecutar hechos que, a mediar malicia en el actor, serían
delitos.
Impericia.- Falta de pericia. Pericia.-(Del latín peritia) Sabiduría, práctica, experiencia y habilidad
en una ciencia o arte.
Inobservancia.- Consiste que al desempeñar ciertas actividades o cargos, el sujeto omita cumplir
los deberes impuestos por los reglamentos u ordenanzas.
Es muy importante la clasificación de la culpa por su gravedad, dado que en muchas ocasiones los
contratos eximen de responsabilidad para ciertos grados de culpabilidad. Es habitual la distinción
entre:
Responsabilidad contractual
El contrato puede ser mal ejecutado o no ser ejecutado del todo. En estos casos, el acreedor tiene
el derecho de acudir a las instancias judiciales, para obligar al deudor a satisfacer forzosamente el
contrato o a ser indemnizado por daños y perjuicios. Tratándose de obligaciones de hacer, el
cumplimiento forzoso no es posible.
La falta contractual es una conducta antijurídica imputable al deudor. El incumplimiento debe ser
culposo o doloso. Algunos ordenamientos, que siguen la teoría subjetivista de la valoración de la
responsabilidad, toman en cuenta el dolo para agravar la responsabilidad del deudor. En ciertas
obligaciones, ni siquiera la fuerza mayor exime del cumplimiento de la deuda, por ejemplo, en las
obligaciones de entregar una suma de dinero.
Una de las contingencias que más influencia tienen sobre los trabajadores y la cual se materializa
como un flagelo que ha diezmado a la población laboral, lo constituyen precisamente los riesgos o
accidentes del trabajo. El empleador al establecer una empresa, explotación, faena o
establecimiento, asume directamente los riesgos y contingencias de carácter económico, por lo
cual es sumamente importante que cumplan las normas establecidas sobre las Condiciones de
Trabajo y de Higiene y Seguridad. En base a ello, es importante analizar las normas legales
establecidas en nuestro ordenamiento jurídico con respecto a las condiciones de trabajo y normas
de higiene y seguridad industrial, como lo contenido en la Ley Orgánica del Sistema de Seguridad
Social, Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y Medio Ambiente de Trabajo y en la Ley
Orgánica del Trabajo.
Condiciones de Trabajo
La obligación que pesa sobre todo empleador, de garantizar la vida y salud física y mental de los
trabajadores, tiene rango constitucional y aparece consagrada de manera específica o concreta en
el único aparte el artículo 87 de la Constitución Bolivariana de la República de Venezuela,
publicada en la Gaceta Oficial No. 36.860 de fecha 30-12-1999. Que dice:
Artículo 87:
Dicha norma se encuentra en estrecha relación con las previsiones de los artículos: 83 (El Estado
debe Responder en Materia de Salud), 84 (Derecho a la Salud), 85 (Financiamiento del Sistema
Público de la Salud), 86 (Seguridad Social), del mismo cuerpo normativo.
Con fundamento en la misma filosofía constitucional, la Ley Orgánica del Sistema de Seguridad
Social, publicada en la Gaceta Oficial de la República Bolivariana de Venezuela No.37.600, de
fecha 30-12-2002, establece en su artículo 94 lo siguiente:
Igualmente la Ley Orgánica del Trabajo (1999) consagra, en la redacción amplia y genérica de los
artículos 185, 236 y 237 respectivamente, la obligación de los patronos de garantizar condiciones
de higiene y seguridad a sus trabajadores y adecuar los centros de trabajo en forma que éstos no
se vean afectados física ni mentalmente.
Las condiciones de trabajo son las diferentes circunstancias de tiempo, lugar, forma y modo en que
debe prestarse el trabajo. Han constituido el objeto primordial, fundamental de la lucha social y del
mismo Derecho del Trabajo, para lograr condiciones de trabajo óptimas y preservar así la salud del
trabajador, y en beneficio del patrono, quien puede lograr una mejor productividad.
El Dr. Rafael Caldera consideraba que las condiciones de trabajo mínimas no han de verse como
accesorias de un contrato de trabajo, sino como requisitos legales aplicables en toda situación en
que surja el hecho social trabajo (Caldera, 1975).
El autor mexicano Mario de la Cueva al respecto dice: “Entendemos por condiciones de trabajo las
normas que fijan los requisitos para la defensa de la salud y la vida de los trabajadores en los
establecimientos y lugares de trabajo y las que determinan las prestaciones que deben percibir los
hombres por su trabajo” (De la Cueva, 1975).
La Ley Orgánica del Trabajo no define las Condiciones de Trabajo, sino establece que el trabajo
deberá prestarse, de acuerdo con la Ley, en condiciones que:
2. Les dejen tiempo libre suficiente para el descanso y cultivo intelectual, y para la recreación y
expansión lícita;
Las condiciones de trabajo pueden fijarse mutuamente por las partes, pero no podrán ser inferiores
a las señaladas por la LOT o por la convención colectiva. Prohíbe la Ley establecerse entre
trabajadores que ejecuten igual labor diferencias no previstas por la Ley. Se considera bajo
protección del Estado el aprovechamiento del tiempo libre para la cultura, para el deporte y para la
recreación. Se mantiene la obligación del patrono de fijar anuncios relativos a la concesión de días
y horas de descanso, en letras grandes, puestos en lugares visibles en el respectivo
establecimiento o en cualquiera otra forma aprobada por la Inspectoría del Trabajo.
En concordancia con lo anteriormente descrito, es necesario hacer referencia sobre los deberes
que deben cumplir las empresas, establecidos en la Ley Orgánica de Prevención, Condiciones y
Medio Ambiente de Trabajo en sus artículos 56 y 59, los cuales dicen:
Artículo 56:
1. Organizar el trabajo de conformidad con los avances tecnológicos que permitan su ejecución
en condiciones adecuadas a la capacidad física y mental de los trabajadores y
trabajadoras, a sus hábitos y creencias culturales y a su dignidad como personas
humanas.
5. Abstenerse de realizar, por sí o por sus representantes, toda conducta ofensiva maliciosa,
intimidatoria y de cualquier acto que perjudique psicológica o moralmente a los
trabajadores y trabajadoras, prevenir toda situación de acoso por medio de la degradación
de las condiciones y ambiente de trabajo, violencia física o psicológica, aislamiento o por
no proveer una ocupación razonable al trabajador o la trabajadora de acuerdo a sus
capacidades y antecedentes y evitar la aplicación de sanciones no claramente justificadas
o desproporcionadas y una sistemática e injustificada crítica contra el trabajador o la
trabajadora, o su labor.
8. Tomar las medidas adecuadas para evitar cualquier forma de acoso sexual y establecer
una política destinada a erradicar el mismo de los lugares de trabajo.
9. Abstenerse de toda discriminación contra los aspirantes a obtener trabajo o contra los
trabajadores y trabajadoras y, dentro de los requerimientos de la actividad productiva,
respetar la libertad de conciencia y expresión de los trabajadores y trabajadoras.
11. Notificar al Instituto Nacional de Prevención, Salud y Seguridad Laborales, con carácter
obligatorio, las enfermedades ocupacionales, los accidentes de trabajo y cualquier otra
condición patológica que ocurriere dentro del ámbito laboral previsto por esta Ley y su
Reglamento y llevar un registro de los mismos.
13. En caso de actividades que por su peligrosidad sean consideradas por el Reglamento
como susceptibles de controles especiales por los daños que pudiera causar a los
trabajadores y trabajadoras o al ambiente, informar por escrito al Instituto Nacional de
Prevención, Salud y Seguridad Laborales las condiciones inseguras y las medidas
desarrolladas para controlarlas de acuerdo a los criterios que éste establezca.
15. Organizar y mantener los Servicios de Seguridad y Salud en el Trabajo previsto en esta
Ley.
Artículo 59:
1. Asegure a los trabajadores y trabajadoras el más alto grado posible de salud física y mental,
así como la protección adecuada a los niños, niñas y adolescentes y a las personas con
discapacidad o con necesidades especiales.
3. Preste protección a la salud y a la vida de los trabajadores y trabajadoras contra todas las
condiciones peligrosas en el trabajo.
7. Garantice todos los elementos del saneamiento básico en los puestos de trabajo, en las
empresas, establecimientos, explotaciones o faenas, y en las áreas adyacentes a los
mismos” (República Bolivariana de Venezuela, 2005).
Asimismo las normas sobre Higiene y Seguridad en el Trabajo, contenidas en los artículos 236 al
246 de la Ley Orgánica del Trabajo, contemplan una serie de normas de carácter constitucional
que tienden a preservar las condiciones de higiene y seguridad, que garanticen a los trabajadores
la salud física y mental de los mismos, en un medio ambiente de trabajo adecuado y propicio.
Señala la LOT (artículo 237) que ningún trabajador podrá ser expuesto a la acción de agentes
físicos, condiciones ergonómicas, riesgos sicosociales, agentes químicos, biológicos o de cualquier
otra índole, sin ser advertido acerca de la naturaleza de los mismos, de los daños que pudieren
causar a la salud, y aleccionado en los principios de su prevención.
Igualmente se establece la prohibición de hacer los trabajadores sus comidas en el propio sitio de
trabajo, salvo cuando se trate de casos que no permitan separación del mismo, igualmente no se
permite que duerman en el sitio de trabajo, salvo aquellos que por razones del servicio o de fuerza
mayor, deban permanecer allí. La obligación de suministrar sillas a los trabajadores para utilizarlas
en determinados momentos.
Es necesario destacar que ha sido y sigue siendo todavía difícil lograr concientizar a los
empleadores y a los propios trabajadores sobre la imperiosa necesidad de mantener los sitios y
lugares de trabajo en condiciones de higiene y seguridad que permitan una doble orientación
efectiva, es decir, por un lado lograr garantizar a los trabajadores una higiene y seguridad que los
ponga a salvo de los riesgos y contingencias del trabajo, especialmente de los accidentes y
enfermedades profesionales, y por el otro es sorprendente ver como cada día se desarrollan
procesos tecnológicos mejores, y avances metodológicos para producir más y menos costo; se
gastan millonarias sumas en la investigación y aplicación de la nueva tecnología, pero
lamentablemente no hay igual preocupación para preservar al hombre y a la mujer trabajadora de
los efectos de las consecuencias que estas nuevas tecnologías han causado y siguen causando en
la salud física y mental de los trabajadores.
La medicina del trabajo constituye en Venezuela una de las cenicientas de toda la infraestructura
de la protección del trabajador; no existe conciencia para preservar y mejorar el hábitat laboral,
desgraciadamente, muchas veces los trabajadores tienen que enfrentarse a diario con riesgos
producto de contaminaciones con elementos que se utilizan en la preparación, manufactura de
distintos procesos industriales, que afectan y degradan su integridad física, laborar en condiciones
de trabajos inapropiadas no respetando las normas establecidas en la higiene y seguridad del
trabajo, esto puede dar origen a accidentes o enfermedades laborales, donde la empresa tendrá
que responder frente a los trabajadores que hayan sufrido tales hechos.
INSTITUCIONES Y ORGANISMOS NACIONALES E INTERNACIONALES
En el país:
a) IPSASEL
INTERNACIONALMENTE.
Ley de salud y seguridad ocupacional O.S.H.A. (Ocupational Safety and Healt Act).
La teoría del riesgo es una teoría con la cual se pretende establecer un criterio
adecuado para los fines delderecho y de las necesidades sociales de nuestra época por
medio del cual determinar cual o cuáles son los responsables de un daño ocasionado a
una persona natural o jurídica que no tenía por qué soportar.
Este criterio se estableció debido a la necesidad de lograr un criterio que no tuviese las
mismas dificultades que tiene la noción de culpa que reinaba anteriormente en el campo
de la responsabilidad civil. En efecto, la noción de culpa era insuficiente ya que en muchas
ocasiones es casi imposible determinar quien fue el que ocasionó el hecho dañino, en
especial teniendo en cuenta que en nuestra época, debido a la tecnificación, al crecimiento
de las ciudades y la complejidad de nuestra sociedad, determinar quién tiene la culpa
puede ser una tarea inmanejable.
Así ocurre, por ejemplo, en materia de accidentes de tránsito, porque con la teoría del
riesgo están incluidos: el conductor, el propietario del vehículo, la empresa afiliadora y
hasta la empresa Leasing, porque entre todos crearon un riesgo. El conductor ejerce la
actividad riesgosa y se lucra de ella, el propietario se lucra de esa actividad riesgosa, la
empresa afiliadora se lucra de esa actividad riesgosa y la empresa Leasing también se
lucra de esa actividad riesgosa, pero no únicamente porque se lucran son responsables,
sino porque crean el riesgo. Entre todos se hacen responsables por los daños causados.
Estas situaciones son las que salva la teoría del riesgo. Con esta teoría ya no se
pretende que sea una persona el directamente responsable del daño causado, sino todos
aquellos que en determinado momento tomaron la decisión de asumir ciertos riesgos
dentro de los que sus consecuencias se encontraba el que pudieran generar daños como
el que se efectúo en el caso concreto. En palabras más puntuales, con la teoría del
riesgo se acoje todos los que intervienen en la creación del riesgo y crearon las
condiciones para que el daño se produjese. Con esta teoría, todas estas personas son
responsables solidarios del daño ocasionado, a tenor del artículo 2344 del C.C.
En el derecho de civil, esta teoría tiene una especial significación, ya que permite
actualizar los criterios de responsabilidad al desarrollo de la actividad moderna. En efecto,
con tantas personas que intervienen en las actividades de la sociedad, el asumir una teoría
como la de la culpa lo único que generaría es patrocinar la irresponsabilidad de muchas
personas en sus decisiones y actos, las cuales se resguardarían en la participación de
otros en los actos llevados a cabo que generaron un perjuicio para un tercero.
Bueno, se ha dicho mucho sobre la teoría del riesgo pero no se ha dicho propiamente en
que consiste ésta. Vamos a puntualizar a continuación sobre en qué consiste la teoría del
riesgo.
La teoría del riesgo es una teoría que se aplica al campo de la responsabilidad civil
extracontractual y es un criterio para determinar la responsabilidad de las personas
(naturales o jurídicas) involucradas en el daño ocurrido a otra persona (natural o jurídica),
sin haber tenido tal persona que soportar el daño que se le ocasionó.Este criterio dice que
son responsables de los daños de tipo extracontractual todas aquellas personas que
efectúan una conducta que tenía el riesgo de que se presentara en concreto el resultado
dañoso acontecido. Es decir, son responsables todos aquellos que asumen el riesgo de
llevar una acción que puede tener una consecuencia dañosa para las otras personas, aún
cuando la persona que asuma el riesgo efectúe la actividad o conducta con el mayor
cuidado y perfección posible. En otras palabras, es responsable todo aquel que lleve a
cabo una conducta que conlleva el riesgo de un resultado dañoso. Si este resultado se
presenta, tendrá que responder patrimonialmente.
1. Que exista un riesgo de daño que se encuentre más allá del ordinario riesgo que implica
toda actividad humana. Esto es, el riesgo debe ser destacable, pues toda actividad en la
vida implica riesgos.
2. La actividad riesgosa debe ser permitida por el Derecho Penal y las buenas
costumbres. En efecto, hay actividades de riesgo que lo implican pero que también son
sancionadas penalmente. Un ejemplo de ello es el porte de armas de alto calibre en la
ciudad. Estos son riesgos no permitidos por el derecho y los daños que resultan de ellos
son sancionados de diferente manera a como lo haría la teoría del riesgo.
4. En la teoría del riesgo lo relevante es saber quiénes crearon el riesgo, no quien fue
materialmente el que lo causó. Esto es muy importante porque vincula al proceso a toda
aquella persona que haya contribuido a crear el riesgo que terminó en un daño para una
persona.