Pacto Federal Eléctrico (Publicado en “Los 50 años del Consejo Federal
de la Energía Eléctrica”)
El 29 de noviembre de 1989, en el Salón Blanco de la Casa de Gobierno, se
firmó el Pacto Federal Eléctrico. El entonces Secretario de Energía Dr. Julio C. Aráoz afirmaba: “Desde el comienzo mismo de nuestra gestión, recibimos instrucciones precisas del Sr. Presidente de la Nación y del Sr. Ministro de Obras y Servicios Públicos, en el sentido de federalizar las decisiones energéticas para suprimir tensiones indebidas y mejorar en forma drástica tanto la eficiencia como la justicia de un sistema que adolecía de malformaciones casi congénitas… En cuanto al sector eléctrico, nos dimos de lleno a la tarea de su reordenamiento institucional, un tema que en las dos últimas décadas ha figurado reiterada e invariablemente en el temario de las más importantes reuniones interprovinciales y de los encuentros nacionales de profesionales, trabajadores y técnicos. En plena certeza de que la gestión cotidiana de la crisis eléctrica y los esfuerzos en pos de una nueva organización institucional del sector no constituyen prioridades excluyentes, adelantamos la necesidad imperiosa de acordar un nuevo Pacto Federal Eléctrico que asegure un desarrollo armónico del sistema en las distintas regiones del país, que garantice el funcionamiento eficiente y preserve la equidad del régimen tarifario”. El Pacto Federal Eléctrico delimita claramente la competencia y las responsabilidades de los ámbitos nacional y provincial. Contempla la existencia de un Consejo Federal de Energía que amplía la competencia del actual CFEE, y que viabiliza definitivamente e idóneamente la participación de la provincia en la formulación de la política energética global. Entre sus alcances, crea la “Empresa Federal de Energía Eléctrica”, que involucra a las empresas Agua y Energía Eléctrica, Hidronor y otras nacionales, opera el Despacho Nacional de Cargas, promueve el equilibrio de tarifas por tipo y modalidad de consumo en todo el territorio nacional, interviene en la coordinación de los aspectos de generación eléctrica con la representación argentina ante los Entes Binacionales, ratifica para las provincias los sistemas de generación de sus sistemas de interconexión, la subtransmisión, comercialización y distribución, especificando consideraciones para el caso de no adoptarse estas soluciones. Sobre las tarifas impulsa el equilibrio entre ingresos y egresos de los integrantes del Sistema Eléctrico Argentino creando un fondo compensador tendiente a viabilizar la aplicación del principio de “igual precio por igual uso y modalidad de consumo”.