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FORMACION DE MONAGUILLOS

En este nuestro Boletín de notas de ACTUALIDAD LITÚRGICA,


queremos llegar a todos los amigos de la liturgia, y hoy es ocasión
especial para llegar a los mas pequeños de nuestros amigos, a los
servidores del altar…los monaguillos, no decimos pequeños porque su
servicio sea menor, sino porque es aquel en el que se le puede servir al
Señor desde los primeros años de vida.
Ofrecemos hoy un subsidio que puede ser utilizado por los
coordinadores de los equipos de monaguillos en nuestras comunidades,
con el fin de afianzar lo que ya saben, pero sobre todo de animar la vida
espiritual y de fe, de estos importantes servidores
1. ORACIÓN: Momento breve, para colocar a todo el Equipo de
Monaguillos en la presencia del Señor

2. REFLEXION: “Carta a los Monaguillos del Papa Juan Pablo II


(Agosto 3 de 2001)”

Queridos monaguillos: Vuestro compromiso en el altar no es sólo un


deber, sino también un gran honor, un auténtico servicio santo. Quisiera
ofreceros algunas reflexiones a propósito de este servicio. La túnica del
monaguillo es particular. Recuerda el traje que cada uno usa cuando, en
nombre de Cristo, es acogido en la comunidad. Me refiero al hábito
bautismal, cuyo significado profundo expone san Pablo: “En efecto,
todos los bautizados en Cristo os habéis revestido de Cristo” (Gál 3, 27).
Si bien a vosotros, queridos monaguillos, os queda ahora ya muy
pequeño el vestido bautismal, os habéis revestido con el de los
monaguillos. Sí, el bautismo es el punto de partida de vuestro "auténtico
servicio litúrgico", que os pone al lado de vuestros obispos, sacerdotes y
diáconos (cf. Sacrosanctum Concilium, n. 29). El monaguillo ocupa un
lugar privilegiado en las celebraciones litúrgicas. Quien desempeña el
servicio durante la misa, se presenta ante una comunidad. Experimenta
de cerca que en cada acto litúrgico Jesucristo está presente y actúa. Jesús
está presente cuando la comunidad se reúne para rezar o alabar a Dios.
Jesús está presente en la Palabra de las Sagradas Escrituras. Jesús está
presente, sobre todo, en la Eucaristía, bajo las especies del pan y del vino.
Él actúa por medio del sacerdote que, "in persona Christi", celebra la
santa misa y administra los sacramentos. De este modo, en la Liturgia
sois mucho más que simples "ayudantes del párroco". Sois sobre todo
servidores de Jesucristo, el Sumo y Eterno Sacerdote. Así, vosotros,
monaguillos, estáis llamados en particular a ser jóvenes amigos de Jesús.
Esforzaos por profundizar y cultivar esta amistad con Él. Descubriréis
que habéis encontrado en Jesús a un auténtico amigo para toda la vida.
Con frecuencia el monaguillo lleva en su mano una vela. Eso nos hace
pensar en lo que dijo Jesús en el sermón de e la Montaña: "Vosotros sois
la luz del mundo" (Mt 5,14).
3. FORMACIÓN:
Con este subsidio reforzaremos esas pautas ya conocidas por nosotros y
que nos ayudan para el cumplimiento de nuestro ministerio.
Inicialmente, recordemos que ante todo nuestro punto de referencia
principal es el Sacerdote, el cómo tu pastor te recordará y te reforzará
todo lo que debes saber, todo lo que tienes que hacer y sobre todo será
tu guía. Otro punto importante de resaltar es que los monaguillos son
muy afortunados, ya que servir a Jesucristo en el altar en medio de su
comunidad de discípulos es un don muy preciado, por lo tanto, los
monaguillos son unos cristianos felices. Aunque ya se tenga
algún tiempo en la prestación de este servicio lo importante está en
descubrir día a día, lo maravilloso de él, pero ante todo ten en cuenta
que debes para participar de la Santa Misa con una ilusión especial, ya
que es el momento en que Cristo se encuentra entre nosotros en una
manera especialísima
No olvidemos… Que nosotros los monaguillos, no solamente somos los
que ayudamos al sacerdote en el altar en la celebración de la Eucaristía,
sino que de igual forma colaboramos con otros servicios del altar. El
momento más importante para nosotros los Monaguillos, es la
Celebración Eucarística. Nunca olvidemos que para nosotros los
cristianos la Celebración Eucarística es la fuente de la vida misma, pues
en mayor razón para mí como monaguillo, nosotros debemos amar la
Celebración Eucarística, pues en ella está presente Jesús, de un modo
muy especial.

Esta presente en el sacerdote que preside


En la Palabra proclamada en las lecturas
En la reunión de los cristianos en la iglesia
Pero sobre todo en el pan y el vino consagrados.
Conscientes de que nuestra labor nos convierte en servidores de la
Celebración y de toda la asamblea presente, como monaguillos debemos
tener un auténtico espíritu de servicio, mostrando a través de nuestro
obrar cuan eficaz es nuestra ayuda para la parroquia, en medio de
nuestros hermanos cristianos.
¿A quien sirve el Monaguillo?… Nosotros los monaguillos, servimos al
altar, y esto significa que prestamos un auténtico servicio al Señor que
se hace presente sobre el altar, al sacerdote que lo representa por la
ordenación que ha recibido y también a toda nuestra comunidad
pastoral reunida para la celebración eucarística y las demás acciones
litúrgicas. Por lo todo anterior y lo más importante de esta primera
entrega es recordar siempre que ser monaguillos es un ministerio
precioso y que somos unos ALEGRES SERVIDORES DE DIOS Y DE LOS
HERMANOS.
4. ORACION FINAL

(Se realiza la oración de los monaguillos antes de la Misa)


Señor, te doy gracias porque me llamas nuevamente a tu servicio, en esta
celebración que estamos a punto de comenzar. Ayúdame a estar atento
para reconocerte en seguida en la persona del sacerdote, a escuchar con
provecho tu palabra, a alimentarme dignamente con tu cuerpo y tu
sangre, y a reconocerte presente en medio de la asamblea de los
hermanos. Ayúdame a servir a tu altar como tú mereces, a hacerlo todo
con diligencia y eficacia, y, sobre todo, a hacerlo por tu amor. Si, que
todo mi actuar sea, Señor, expresión del amor con el que quiero amarte,
puesto que solo en ti encuentro la paz y la alegría. Ayúdame, Madre de
Dios y madre mía, tú que nos dijiste a todos “Haced lo que él os diga”
Amén. Padrenuestro, Avemaría y Gloria. ¡¡Que Dios los bendiga y nos
vemos en el próximo número!!

Comisión Arquidiocesana de liturgia de Barranquilla

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