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2.1. Sobre la necesidad de que los actores políticos sean formados en la Ciencia Política como
exigencia previa para postular a cargos políticos.
Hacia una nueva ley de partidos políticos para una mejor gobernabilidad (Felipe ESTRADA
MUÑOZ) TESIS Para optar el Grado Académico de Magíster en Derecho Constitucional y
Derechos Humanos 2017 lima Perú UNMSM
http://cybertesis.unmsm.edu.pe/bitstream/handle/cybertesis/6785/Estrada_mf.pdf?sequence
=1&isAllowed=y
La desregulación y lagunas que tiene nuestra actual Ley de los Partidos Políticos, se expresa en
el financiamiento de los partidos políticos. La Ley de Partidos Políticos no impide que una
misma persona natural o jurídica financie a una multiplicidad de partidos,
Esta problemática expresa la necesidad de contar una nueva Ley de Partidos Políticos. Sin
embargo, los actores políticos, no aceptan esta situación. porque consideran que se va ver
limitadas sus cuotas de poder y con ello sus relaciones de poder en la vida política.
Otro aspecto, la barrera socio cultural de los partidos políticos, con temores infundados dado
que históricamente, la experiencia foránea y todos los estudios hechos en diversos países
concluyen que una Ley de Partidos fuerte y debidamente reglamentada tiene como directa
consecuencia instituciones democráticas sólidas y partidos políticos fuertes en los que la
ciudadanía se siente representada. Los partidos políticos, están acostumbrados a una
regulación flexible de sus actividades, y han cimentado en dicha práctica su identidad.
Los partidos políticos, no han admitido que estar en política implica servicio, es decir, que
tienen un cargo de responsabilidad de servidor público. Aquí la idea es que alguien que tiene
un cargo público es alguien con poder, se necesita un cambio cultural, para así poder derrotar
las resistencias de ciertos sectores dentro de las organizaciones políticas que no aceptan una
Ley de partidos políticos más fuerte y una reglamentación más detallada y acuciosa.
Una nueva Ley de partidos políticos es vital en razón de la importancia de los partidos políticos
porque se puede afirmar sin temor a equivoco que estas organizaciones son una condición
imprescindible de los regímenes democráticos; porque su descrédito coloca en riesgo la
subsistencia misma de la democracia y de nuestra sociedad.
Destacaremos que está limitada visión de la importancia de una Ley de partidos políticos más
fuerte está cambiando debido a los avatares de la política contemporánea y su problemática
que se expresa en continuos escándalos de corrupción de los cuales la población y la sociedad
civil ya no pueden desentenderse y deben buscar los medios más idóneos para reducir dichas
prácticas.
No cabe duda, que la corrupción política es un mal endémico en nuestra región, es el tema
más abordado por el periodismo en América Latina y muchos ejemplos se pueden apreciar en
su historia reciente en México, Ecuador, Guatemala, Bolivia, Brasil, Argentina, El Salvador,
Uruguay, Venezuela, Honduras y nuestro país por citar los casos más sonados, indicando que
generalmente se trata de corrupción política y administrativa y en los casos más graves se
encuentra relacionado al lavado de dinero producto del tráfico de drogas y tráfico de armas.
La baja institucionalidad de los partidos políticos a nivel nacional y local es preocupante ya que
esto no permite que los partidos puedan cumplir de forma efectiva con su rol en el proceso
democrático. Esta situación es especialmente preocupante a nivel local ya que la Ley de
partidos políticos ha sido bastante laxa en cuanto a los requisitos necesarios para poder
postular a un cargo en este nivel de gobierno. La proliferación de organizaciones políticas con
bajos niveles de institucionalización a nivel local resulta un problema importante pues la
ausencia de partidos institucionalizados a este nivel resulta una traba importante al correcto
desarrollo del proceso de descentralización.
Es vital un análisis de los actores políticos que tienen que ver con el problema de nuestra Ley
de partidos políticos desregulada, el origen de dicho problema, prevención del mismo,
clasificar la información sobre el tema y la urgencia de incorporación de nuevos datos que
coadyuden a llevar un estudio exhaustivo de los factores de nuestra realidad política, social y
cultural que tienen conexión con la problemática de la Ley de partidos políticos actual.
Asimismo se justifica el tema que nos ocupa en la necesidad de perfeccionar y evaluar criterios
de eficiencia, aplicabilidad y equidad en la implementación de una nueva Ley de partidos
políticos, así también observar las condiciones institucionales para su adecuada ejecución en
nuestra realidad, dado que dicha ley va dirigida a generar su influencia directa o
indirectamente en cada uno de los estamentos y miembros de nuestra sociedad ( sociedad
civil, partidos políticos, grupos de poder, etc. ), así es tarea de esta investigación la evaluación
y selección de las alternativas que den como resultado una nueva Ley de Partidos Políticos que
mejore y garantice la gobernabilidad del país.
Por último, otra acción necesaria es el seguimiento de la nueva Ley de partidos políticos a
implementarse, para lo que deben diseñarse mecanismos de permanente evaluación y
monitoreo y garantizar así la aplicabilidad y eficacia de la nueva ley.
http://148.202.18.157/sitios/publicacionesite/pperiod/republicana/pdf/ActaRep02/articulos3.
pdf
Como es bien sabido, la ciencia política es una disciplina de mucha tradición. Se remonta a los
tiempos griegos. Es la disciplina madre de muchas otras disciplinas, cuando con el correr del
tiempo se formaron dentro de su seno ámbitos del saber que posteriormente se desvincularon
de ella y formaron disciplinas independientes y autónomas como, por ejemplo, la economía,
mejor dicho, la economía nacional.
Hay que diferenciar entre tres áreas que forman el cuerpo de materias de docencia en ciencia
política.
La segunda área engloba a la política comparada, que incluye las tres dimensiones de la
política que, debido a limitaciones idiomáticas, ni en alemán ni en castellano podemos
diferenciar conceptualmente bien: polity, politics y policy (en inglés), o sea la forma, el proceso
y el contenido de la política. La tercera área está conformada por las relaciones internacionales
que incluyen, por ejemplo, la política exterior, las organizaciones internacionales, lo
intergubernamental, lo intersocietal –cada día más– y, finalmente, lo supranacional, si nos
referimos a procesos de integración.
https://www.redalyc.org/pdf/4264/426439976006.pdf
Muñoz Patraca, Víctor Manuel (2009). La disciplina de la ciencia política. Estudios Políticos, 9(17),
undefined-undefined. [Fecha de Consulta 8 de Septiembre de 2019]. ISSN: 0185-1616. Disponible
en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=4264/426439976006
1
Para un estudio amplio y bien documentado sobre este tema, véase Madeleine Grawitz y Jean Leca,
Traité de Science Politique, Paris, Presses Universitaires de France, 1985, vol. 1 (en particular la
introducción y el primer capítulo).
disciplina.2 La Ciencia Política hoy día sigue caracterizándose por la diversidad de las
temáticas abordadas por politólogos que encuentran en los razonamientos de filósofos,
sociólogos, juristas, historiadores, psicólogos, internacionalistas, administradores
públicos y economistas, una fuente útil para nutrir sus investigaciones.
El especialista en Ciencia Política tiene la posibilidad de contrastar en esos estudios los
resultados de sus propias investigaciones, las cuales realiza guiadas por interrogantes
propias, distintas a las que se plantean los otros especialistas. La posibilidad de que un
problema se aborde a partir de diversos enfoques disciplinarios siempre será en
beneficio del conocimiento, pues constituye la posibilidad de obtener una visión más
completa de un objeto de estudio. Por lo cual puede afirmarse que no existen fronteras
incontestables entre las diferentes ramas del conocimiento científico, sino una necesidad
de establecerlas. El espíritu científico moderno impone una demarcación, y las
necesidades de la enseñanza la apoyan. Sin embargo —como lo demuestra el desarrollo
actual de la ciencia—, es la práctica de la investigación, guiada por la necesidad de
ofrecer nuevas respuestas a una realidad cambiante, la que fija los límites del campo de
estudio de una disciplina. Y éstos se han ampliado significativamente para la Ciencia
Política en los últimos cincuenta años.
Si bien es cierto que la ciencia política, desde el punto de vista profesional, ocupa un
lugar marginal, no podemos desconocer el resurgimiento e interés por su estudio en el
conjunto de los países de América Latina. Partiendo de esta premisa, podemos señalar
que la ciencia política es ante todo una profesión alimentada por una diversidad de
conocimientos, enfoques y perspectivas teóricas como principales herramientas, que se
2
Cf. John S. Dryzek y Stephen T. Leonard, “History and Discipline in Political Science”, en
David Easton, John Gunnell y Michael B. Stein (eds.), Regime and Discipline. Democracy and
the Development of Political Science, Ann Arbor, The University of Michigan Press, 1995, pp.
27 y ss.
abre paso en el abordaje de los diversos fenómenos y problemáticas que caracterizan la
política, naturalmente al sinnúmero de efectos que se desprenden del poder y las
relaciones de dominación. Por esta vía, la ciencia política, como saber, disciplina
científica y profesión de punta, viene convirtiéndose en las últimas décadas en el área
especializada de conocimiento imprescindible para conocer e interpretar las diversas
dinámicas políticas nacionales, regionales y locales que explican los hechos y
fenómenos políticos.
Los perfiles profesionales de la ciencia política, por tanto, son variados y ricos en
posibilidades. Éstas van desde la docencia e investigación hasta la consultoría y asesoría
política a políticos, pasando por el análisis de la política, la administración pública, y los
medios de comunicación. Nuestro departamento, y región, son un excelente laboratorio
que demanda investigación, reflexión, explicación y tratamiento del fenómeno político
en todas sus manifestaciones.
http://www.cies.org.pe/sites/default/files/investigaciones/balance_y_agenda_ludwig_huber.p
df
Lo que motiva a los gobiernos a emprender una lucha anticorrupción pudiera no ser
necesariamente el interés general, pues la corrupción personal está dentro de los "factores de
riesgo para los presidentes sudamericanos que quieren completar sus mandatos".
Ugaz, Jose, comunicación personal, 11 de mayo de 2001)
José Ugaz, Procurador de la Nación en el caso Fujimori-Montesinos, expresa: "lo que pasó del
96 al 2000 en el Perú no tiene registro histórico de precedente parecido. Ya no era la
corrupción administrativa extendida sino toda una
Goodin, organización
Robert E. (2003),criminal en controlydel
"Las instituciones poder" en Teoría
su diseño",
(entrevista). Un expresidente y funcionarios se institucional,
del diseño encontrabanRobert
culpables por (comp.),
E. Goodin delito de
Barcelona,
corrupción. Después del régimen fujimorista, lo que hay en el Perú es un laboratorio
Editorial Gedisa donde se
han experimentado diferentes fórmulas anticorrupción.
La corrupción es un tema tan presente en la agenda pública peruana, pero "muchas de las
medidas anticorrupción aplicadas en América Latina no han dado los resultados esperados, y
son pocos los ejemplos de éxito" (Rojas Aravena, 2006: 120). Esta situación, lejos de reducir el
interés por conocer la experiencia, debe fortalecerlo, pues, en materia de diseño de políticas
públicas, "lo que exige explicación no es lo correcto, sino los casos que se apartan de ese ideal
(…); lo que resulta notable es lo que explican [los analistas de las instituciones]; no los
resultados correctos, sino los malos; no la consecución perfecta de nuestro objetivo, sino
nuestros fracasos" (Goodin, 2003: 53).
La Ciencia Política comparte con las otras Ciencias Sociales los métodos de investigación,
mismos que pueden sintetizarse en cuatro modelos:
4. Métodos no reactivos: esta categoría agrupa medios de investigación muy diferentes entre
sí, pero que presentan como rasgo común que son formas de observación que no perturban
las situaciones que analizan. A esta categoría pertenecen el uso que el investigador hace de
estadísticas y documentos oficiales, libros, documentos, archivos, etcétera. En otros términos,
la investigación documental.
De estos procedimientos que el investigador en Ciencias Sociales puede utilizar para allegarse
la información que requiere, cada uno de los cuales cuenta con diversas técnicas que le
confieren grados distintos de rigor a su investigación, vale la pena detenerse en dos de ellos,
por su importancia para la Ciencia Política actual.
El primero de ellos, es el empleo de las técnicas matemáticas para el estudio de las elecciones,
uno de los campos de la Ciencia Política que registra los mayores avances, precisamente
porque constituyen un fenómeno mensurable. El otro es el método comparativo que, como se
señaló más arriba, ha sustituido a la experimentación. Considerada por Durkheim una forma
de “experimentación indirecta”, la comparación, según aclara Jean Meynaud, es la operación
por la que se establecen las analogías y diferencias entre dos términos, y su utilización por la
Ciencia Política puede contribuir al perfeccionamiento de la explicación, y no sólo a la
descripción de los fenómenos en estudio. Sin embargo, a pesar de la aceptación de este
método por los investigadores de principios de siglo, fue largo el tiempo transcurrido para que
se aceptaran las ventajas del método comparativo. Para autores como Duverger, el peligro que
encierra este método es la realización de comparaciones artificiales basadas en una
deformación de los objetos examinados, una crítica que ha sido retomada y ampliada por
Sartori, uno de los politólogos que más ha contribuido al desarrollo de la disciplina
precisamente por su utilización de la comparación.
Es innegable que para la Ciencia Política actual el método comparativo es una herramienta de
enorme utilidad, no sólo “porque constituye el principal instrumento disponible de control de
las hipótesis”, sino porque la globalización pone en relieve la importancia de comparar los
procesos que, de manera simultánea, se producen en diferentes países de las diversas
regiones del mundo. La comprensión de fenómenos como la construcción democrática en
países con fuertes rezagos económicos y sociales, instituciones debilitadas por la corrupción y
una cultura política con resabios autoritarios, es mucho mayor. La comparación también ha
sido de utilidad para abordar el tema de la gobernabilidad democrática en diferentes sistemas
de partidos y en los regímenes presidenciales o parlamentarios. O para conocer cómo funciona
el sistema de rendición de cuentas en países de larga tradición democrática y en aquellos cuya
democracia está en proceso de consolidación.
Estas líneas de investigación han sido desarrolladas a partir de otras metodologías. Las
dificultades implícitas en la utilización del método comparativo, que no son siempre fáciles de
superar, estimuló estudios que parten de una crítica a este método en particular y a la Ciencia
Política principalmente estadounidense, por considerar que no responden a las interrogantes
que acompañaron a la realidad del mundo que emergió en los años sesenta, la cual estuvo
marcada por el proceso de descolonización y el surgimiento de nuevos Estados cuyo orden
político poco tenía que ver con el imperante en los países occidentales.
La explicación proporcionada por la Ciencia Política, de acuerdo con este punto de vista, no
podía afirmar su universalidad ni negar la importancia de las diferencias históricas y culturales.
De allí surgieron propuestas metodológicas para el estudio de realidades distintas a la de los
países desarrollados de origen europeo.