La obra “La Red Invisible” está sustentado como propuesta de perspectiva

de visión feminista en la intervención psicoterapéutica. Las autoras señalan

que “En la estructura y el funcionamiento de la familia se han producido
importantes cambios que están ahora firmemente arraigados en nuestra
sociedad. Han surgido complicadas redes de parentela extensa” Así mismo
añade que “Un punto de fundamental importancia en todo esto es: es el
reconocimiento del derecho de la mujer a controlar la reproducción”.
La obra de la Red Invisible señala el origen de su trabajo en tres etapas:

 La primera fue: Proceso de definir un marco de referencia feminista en

común y al mismo tiempo preservar nuestra diversidad clínica
 La 2da: “Centrarse en lo que había que evitar en nuestra práctica: el
proceso de desarrollar intervenciones sistémicas no sexistas y
feministas, y de revisar y adaptar las intervenciones sistémicas
tradicionales de manera de tomar en cuenta el género.
DEFINICIÓN DE FEMINISMO

La obra La red invisible define el feminismo como “Un marco o visión del
mundo humanista cuyo objeto son los roles, las reglas y las funciones que
organizan las interacciones hombre-mujer. El feminismo busca incluir la
experiencia de las mujeres en todas las formulaciones de la experiencia
humana y eliminar el predominio de las premisas masculinas. El feminismo
no culpa al hombre como individuo del sistema social patriarcal existente
sino que trata de comprender y cambiar el proceso de socialización que
determina que hombres y mujeres sigan pensando y actuando dentro de
un marco sexista dominado por el varón”

En cuanto a la labor terapéutica me parece muy acertado cuando las

autoras describen que “las mujeres en realidad están en desventaja en
nuestra sociedad y el hecho de no reconocerlo significa redoblar esa
desventaja”.

Así mismo añade que “debemos reconocer que cada género percibe un
significado distinto en la misma intervención clínica y que, por consiguiente,
se siente o bien culpado o bien respaldado por una idéntica instancia
terapéutica”.

Me siento identificada con las autoras cuando reconocen el hecho de que

desarrollan el modelo con su propia resistencia al hacerlo.
LOS PRESUPUESTOS PATRIARCALES
En el modelo tradicional de la terapia familiar se utilizan términos o
concepciones que reproducen modelos patriarcales, uno de ellos es la
complementariedad de roles, la cual según esta perspectiva feminista se
cambia por simetría de roles, en la cual ambos sexos desempeñan tareas
tanto instrumentales como expresivas, en lo laboral y en lo afectivo.

El modelo tradicional nos habla también de la interdependencia como

cualidad deseable. Aquí también menciona que según el modelo feminista
de habla de la madurez debería definirse idealmente como autonomía de
vinculación en y explica que “contraste con la noción patriarcal que divide
estos atributos asignándole autonomía (en realidad separación) y
vinculación (dependencia) a las mujeres. Lo que nos lleva a concebir la
separación como signo de madurez mientras que la vinculación se equipara
con dependencia, señal de inmadurez y por lo tanto desvalorizada”.

Otro punto importante de la lectura y espero plasmarlo claro fue un análisis

que realizan las autoras al explicar que la mujer gano involucrarse
mayormente en el campo laboral pero a la par socialmente se espera de
ella que sea “buena madre y ama de casa” es decir la carga de
expectativa aumento, además explica que “lo que se necesita es que los
hombres compartan las responsabilidades de la crianza de los hijos tanto
brindado un apoyo económico como a través de su propia participación, y
abandone la idea que el objetivo central al que deben dirigir sus energías
está en el trabajo fuera del hogar. Esto sin duda implicaría una pérdida de
status, dinero y poder para los hombres.
RECIPROCIDAD

La reciprocidad es una herramienta conceptual útil, pero también puede

conducirnos a la concepción clínica de que todas las conductas no sólo
están similarmente construidas sino que también son del mismo orden de
importancia.

Las autoras describen que la reciprocidad de se vuelve un factor de riesgo

donde quitamos la responsabilidad de los miembros de familia, y en lugar
de ser víctimas se vuelven responsables de la relación violenta por el término
de reciprocidad.

Las autoras señalan que como terapeutas “un modo de enfocar los factores
sistémicos que probablemente contribuyen al mantenimiento del patrón
problemático, sin dejar a un lado ni la responsabilidad individual por la
conducta ni el contexto social.
 Así mismo en el momento de realizar intervenciones, realizar preguntas que
tomen en cuenta tanto los aspectos interactivos de todo el intercambio
familiar como la responsabilidad individual de cada miembro sobre su
propia conducta.

Añaden las autores una famosa frase metafórica modificada: “se necesitan
dos personas para bailar un tango, si una de ellas lleva el compás la otra es
la que lo sigue, los pasos de ambas no serán igualmente interdependientes.

MODELO CRÍTICA PROPUESTA PERSPECTIVA FEMINISTA

TRADICIONAL EN TERAPIA FAMILIAR
DE TERAPIA
FAMILIAR
“La reciprocidad de se vuelve un “Realizar intervenciones, realizar
RECIPROCIDAD factor de riesgo donde quitamos preguntas que tomen en
la responsabilidad de los cuenta tanto los aspectos
miembros de familia, y en lugar interactivos de todo el
de ser víctimas se vuelven intercambio familiar como la
responsables de la relación responsabilidad individual de
violenta por el término de cada miembro sobre su propia
reciprocidad”. conducta”.
TRIANGULOS “Los triángulos no suministran “La intervención se efectuara
ninguna explicación diferencial entonces de un modo que
de las conductas relacionadas respete explícitamente la visión
con el género.. por otra parte de las mujeres de sus propios
describir los problemas roles.
emocionales como triángulos
significa definir los problemas
como internos al sistema familia
aislada y pasar por alto su
conexión con el sistema más
amplio
FUNCIÓN DEL “Se centra en los modelos “No se trata de que prescribir un
SÍNTOMA necesarios para lograr la síntoma sea intrínsecamente
estabilidad interna y deja de lado nocivo, sino de la manera en
el contexto social cultural más que el terapeuta verbaliza la
amplio dentro del cual existe la prescripción no debería de
familia misma”. reforzar una visión negativa del
rol o la conducta de la madre.
 CONCLUSIÓN PERSONAL DE LA LECTURA

Leer las perspectivas teóricas de la terapia familiar feminista significa como

mencionan las autoras auto cuestionar las veces que en la práctica hemos
reproducido paradigmas que continúan perpetuando la visión patriarcal de
la familia.

Me sentí identificada con las autoras cuando mencionan que parte del
trabajo fue luchas contra sus propias resistencias. Ya que el hecho de asumir
un postura con visión feminista conlleva sacrificar otras formas de concebir
las relaciones y luchas contra lo “que siempre se había hecho”.

Como opinión personal comparto que el feminismo debería de considerarse

por un mayor número de personas como como una opción o un bando, si
no como una realidad, ya que como lo menciona la autora: “no reconocer
que la mujer está en desventaja aumenta la desigualdad”.

En la actualidad nos encontramos en una situación de cambios y

movimientos, dónde grupos feministas han abierto caminos de reflexión, y
aunque sus formas son puestas a debate, considero que parte de la
ganancia es que las personas han empezado a dialogar y cuestionar formas
de relación que reflejan el machismo o la ventaja del hombre en
comparación a las mujeres.

Como terapeutas somos ejes de cambios en las personas que acuden a

consulta y es nuestro deber y compromiso contribuir por una sociedad más
justa y equitativa donde hombres y mujeres compartan los mismos derechos
y obligaciones.

FUENTE

Walters,M. Carter. B. Papp, P. Silvestein, O. (1996) La Red Invisible: Pautas

Vinculadas al Género en las Relaciones Familiares. España. Ed. Paidos
Iberia.