Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
1. H: cuando era niño iba a la iglesia con mi familia y me enseñaron que Dios nos había
hecho a su imagen y semejanza, es decir, que éramos como Él. La verdad es que yo no
entendía mucho cómo podía ser porque somos todos tan diferentes…entonces pensaba
que Dios tenía diferentes caras al mismo tiempo y que era gordo – flaco – chico – grande –
negro – blanco – rubio – colorín – moreno – crespo – liso…es como mucho, ¿no? …el
asunto es que crecí intentando entender, ero no me resultó mucho, así que mejor busqué
creer no más. Me dijeron que la fe no se entiende con el pensamiento natural, sino con el
sobre natural, así que dejé de intentar entender…pero si no entiendo todo me cuesta un
poco creer. Efesios 2:10 dice que nosotros somos hechura de Dios, en esencia, su obra
maestra. Ahora, no sé tú, pero cuando yo me levanto por la mañana y me miro en el
espejo, yo no veo una obra maestra…quizás un Picasso, un Miró…o una obra de arte
abstracto…pero quiero ser una obra maestra. Yo quiero ser todo lo que Dios ha creado y
dice que debo ser, y entonces vengo a Él y le digo Señor, haz lo que haya que hacer para
sacar de mi vida todas esas cosas que no necesitan estar allí, moldéame a la imagen de tu
hijo Jesús para que yo pueda ser tu obra maestra…
2. D: hola
4. D: soy Dios
6. D: sí, Yo Soy. Dijiste la oración, así que aquí estoy, es así como funciona
14. D: no dice nada porque Lamentaciones es un libro muy corto, sólo tiene 5 capítulos
16. D: ¿sabes qué? Yo no estoy para estos juegos, ¿por qué insistes en probarme?¿Por qué
no empezamos a trabajar en tu transformación ahora mismo?
22. D: estas son las herramientas que voy a usar para volverte a mi obra maestra original
28. D: yo saco todas las cosas de tu vida que no vienen de mí, que están ahí como un peso
muerto
29. H: oh…hablando de eso, ¿podrías darle un poco aquí (MUESTRA LOS ROLLITOS) no me
los he podido sacar y ya he probado de todo: cuido lo que como, entré a un gimnasio,
incluso estuve haciendo pilates…pero nada me funciona, si pudieras modelar justo aquí…
30. D: ¿vas a hablar o puedo cincelar?, ¿o esto va a ser conversa, cincelada, conversa,
cincelada?
32. D: tengo otros hijos que no son tan buenos para hablar
35. H: ¡ay!
38. D: ¿a no?
39. H: ¡no!, yo puedo dejar todo eso cuando quiera…está bien…sácalo (DIOS VA A
CINCELAR Y ÉL LO DETIENE)..espera…quizás podamos hacer un alto. Quiero decir, creo que
lo estoy haciendo bastante bien hasta ahora
40. D: ¿qué estás haciendo bastante bien hasta ahora? ¿Cuándo te miras al espejo qué
ves?
42. D: ok, entonces yo necesito seguir cincelando, porque no debieras verte a ti mismo en
el espejo
44. D: lo que tú y otros necesitan ver es a mi hijo. Si Cristo vive en ti, entonces es a Él a
quien debes ver…y a quien debieran ver los demás al mirarte… Así que continuamos
45. H: de acuerdo, espera…no tomes a mal esto, es sólo que cuando yo empiezo a
parecerme más a tu hijo las personas a mi alrededor se ponen incómodas, incluso mis
amigos de la iglesia empiezan a decirme “te crees tan santo” o “¿por qué eres así?”…
46. D: así que lo que estás haciendo ahora es que prefieres que Dios obre en tu vida sólo
sobre ciertas áreas, en vez de que Dios gobierne tu vida completa, me estás diciendo que
te saque un poco de aquí, pero de acá no
49. H: sí, así es…es difícil hablar contigo, sabes todo lo que estoy pensando. Yo
simplemente estoy diciendo que has hecho un buen trabajo, quizás debamos tomar un
pequeño descanso, nada más
50. D: lo que estás haciendo ahora es muy común, quieres tomar el control de la situación,
¿quieres controlar las cosas de tu vida o puedo cincelar? ¿control, cincel, control cincel?
53. H: ¿podemos cincelar donde yo quiera cincelar?...es porque yo sé qué cosas están mal
55. H: ok…
56. D:…(OBSERVA ALGO) uuuf, has estado envuelto en esto por mucho tiempo…¿estás
listo?
57. H:…sí… ¡no!....o sea sí…no, mejor no…..sí, sí…(DIOS CINCELA) …ay…duele
59. H: sí, claro (DIOS SIGUE CINCELANDO) …ay…¡no creo que entiendas este dolor!
60. D: no me hables sobre el dolor, yo sé todo sobre el dolor. Envié a mi hijo a morir en la
cruz por el pecado y por el dolor, pero lo hice también por otra razón: para darte libertad,
vida plena y eterna. ¿Sabes qué es la locura?, locura es estar haciendo las mismas cosas
una y otra y otra vez, esperando resultados diferentes. Hay cosas que has estado haciendo
en tu vida que no funcionan y a pesar de eso vuelves a ellas cada vez que estás dolido,
cada vez que estás enojado, cada vez que te sientes solo y cansado, pero no funcionan
68. D: Cristo en ti! eres fuerte porque Cristo, que habita en ti, es fuerte, ¡diga el débil
fuerte soy!
69. H:…ah…
70. D: ¿qué?
71. H: nada
72. D: ¿qué?
73. H: no entenderías
74. D: …yo, Dios de todo el universo, no entendería algo que uno de mis hijos tiene que
decir. Pruébame
77. H: de acuerdo…cincela
78. D: bien…
79. H: sólo prepárate para lo que vas a encontrar ahí dentro, yo sé quién está ahí dentro, y
es que Señor…yo me levanto todas las mañanas y me asomo al espejo y es este pequeño
niño asustado que se levanta todos los días, que intenta vestir como un adulto y actuar
como un adulto, pero no puede, así que sólo prepárate para lo que vas a encontrar ahí
dentro
80. D: tú has escuchado demasiadas voces por demasiado tiempo, pero no me has
escuchado a mí. ¿Piensas que eres basura, verdad?, tú en serio, en serio, realmente
piensas que eres basura…escúchame, yo no hago basura. ¿Qué te dice eso de mí?, ¿cómo
puedo mostrarte que mi amor para ti no tiene ningún límite?...ya sé, busca en tu bolsillo
81. H: ¿qué?
83. H: ¡Dios!
84. D: ¿qué?
85. H: nada, sólo, que lo voy a hacer, dije “Dios” como decir cualquier cosa, es…
simplemente es una expresión
86. D: estabas diciendo simplemente mi nombre en vano
88. D: este es más que un nombre o más que una expresión, es más que un mal hábito o
una palabra cualquiera, es el nombre sobre todos los nombres. Yo quiero enseñarte algo
sobre mi nombre, busca en tu bolsillo
90. H: es una hoja del diario que tenía cuando chico, ¿cómo conseguiste esto?
91. D: ¡hello!
92. H: ..mm, sí
94. H: querido Dios: hoy yo pongo todo en tus manos, no voy a aferrarme a nada nunca
más. Tu Palabra dice que me harás tu obra maestra y me usarás para hacer grandes cosas.
Yo no veo cómo es eso posible, pero yo lo quiero, con todo lo que soy, así que por favor,
haz todo lo que sea necesario para transformarme en lo que tú quieras. Yo te amo, Señor
95. D: yo te amo también Tomás. Te amo demasiado como para dejarte en donde estás
ahora, la salvación que tienes ahora es sólo la puerta de entrada a mi Reino, no te quedes
en la puerta ni permitas que sólo sea un poco de sentimentalismo o de conocimiento
intelectual, yo quiero que tú trabajes en cada detalle de tu vida, y no te compares con
nadie más porque eso es simplemente trivial y sin sentido, eres mi obra maestra original.
Eres una de mis obras y en ti encuentro gracia. Esto (LAS HERRAMIENTAS) no lo veas como
un castigo, pero míralo como un padre disciplina a su hijo, un padre disciplina a los que
ama
97. D: sí, va a ser difícil, nunca te dije que sería fácil, no funciona así. Yo quiero que tú
mires hacia allá y digas: Tomás, eres la obra maestra original de Dios
98. H: Tomás, o sea yo, es la obra perfecta de Dios y por eso seré admirado y contemplado
por todos, no hay duda que seré famoso o reconocido en todo el mundo, aunque siempre
me equivoque y cuando llegue a mi casa me siga sintiendo vacío y solo
99. D: no, no, no. No de la manera en como tú te ves, ni como te ven los demás, sino como
yo te veo. No eres mi obra maestra porque tengas algún mérito y no quiero que lo
malentiendas, pero cuando te miro, veo a mi hijo, veo a Cristo en ti porque Él habita en ti.
Cuando pecas, tu pecado me aparta de ti, pero veo la sangre de mi hijo que te cubre, te
lava y los quita de mi presencia. ¿Entiendes? Te amé desde que la idea de crearte estuvo
en mi pensamiento, te hice para ser eterno y como expresión máxima de mi Gloria, tú lo
echaste a perder al pecar, cuando se envaneció tu corazón y creíste que eras
autosuficiente, pero mi amor por ti fue tan grande que envié a mi hijo a morir en tu lugar,
¿lo entiendes, Tomás?, así quiero que te veas, como yo te veo, a través de Jesús, como la
creación que captura todo mi infinito amor.
102. H: cuando yo era niño iba a la iglesia con mi familia y me enseñaron que Dios nos
había hecho a su imagen y semejanza. Muchas veces intenté, con mis fuerzas, ser a la
imagen y semejanza de Dios, pero todos los que estaban a mi alrededor salían corriendo,
se burlaban de m í y me sentía falso….así que dejaba de intentar y no entendía cómo Dios
podía habitar en mí. Pero hoy ocurrió algo sobrenatural que me reveló cómo es que
somos hechos su obra maestra. Como es que no debemos intentar ser como Él, sino dejar
que sea en nosotros, morir a nosotros mismos, dejar en la cruz todo lo que Jesús se llevó y
no volver a buscarlo. Pues ya no vivo yo, sino Cristo vive en mí. Así como yo soy la obra
maestra de Dios tú también lo eres. Te invito a declararlo conmigo. Yo (cada asistente dice
su nombre) soy la obra maestra de Dios.
TELÓN