RUTA DE INVOLUCRAMIENTO PARENTAL

Para la atención educativa a la población con discapacidad y/o talentos excepcionales

En ejercicio de su corresponsabilidad con el proceso de educación inclusiva, las familias deberán:

1. Adelantar anualmente el proceso de matrícula del estudiante con discapacidad

2. Aportar información sobre cualquier enfermedad crónica del estudiante y actualizar la información requerida por
la institución educativa en cuanto a actualización de diagnósticos.
3. Cumplir y firmar los compromisos señalados en el PIAR y en las actas de acuerdo, para fortalecer los procesos
escolares del estudiante.
4. Participar en los espacios que el establecimiento educativo propicie para orientar y apoyar procesos de formación
del estudiante para fortalecerlos.
5. Asistir puntualmente a los llamados que hagan los profesionales internos y externos de la institución cada vez que
se requiera.
6. Seguir estrictamente los tratamientos médicos y farmacológicos prescritos por los profesionales competentes, y
por ningún motivo suspenderlos por iniciativa propia.
7. Llevar a las terapias necesarias cuando el programa de salud lo indique, en lo posible, en jornada alterna a la
escolar.
8. Retroalimentar a través de informes periódicos a la docente y profesional del equipo de apoyo pedagógico, los
procesos llevados a cabo en el programa de rehabilitación integral y los logros alcanzados.
9. Entregar al docente titular copia de seguimiento que se viene realizando cada vez que el estudiante reciba
atención médica o de especialista tratante.
10. Realizar un acompañamiento oportuno en el hogar, atendiendo a las recomendaciones o sugerencias de los y las
docentes.
11. Acudir a citación del docente para la realización de talleres propuestos y descritos en las jornadas de flexibilización.