EL ESTAFETA

Entrego a ustedes conferencias en vídeos directamente de nuestro instructor espiritual con alguna
frecuencia,

estimando que hayan tenido el tiempo de escuchar, de discernir y por qué no, de aplicar, los
conceptos en el día día.

También motivado por este proceso, a partir de labio a oídos, lo que escucho se caracteriza en mí,

y luego lo escribo o lo digo a otros que no han escuchado, aunque quizá, tanto palabras como
frases, son dichas o escritas sin tan alta sabiduría como fueron escuchadas;

sin embargo, soy un mensajero con el deseo de que los mensajes lleguen temprano, que tengan
las palabras correctas y que lleguen en el momento correcto, a las personas que lo necesiten.

Me gustaría que a partir de éste hecho socialicemos los mensajes recibidos una y otra vez y entre
uno y uno formar la costumbre sana en méritos que deje nuestra ignorancia de lado,

contribuyendo a un paso seguro en el cambio, en la transmutación y de esta manera en algún

momento llegará el instructor para empezar a pulir el diamante en bruto,

para que su luz, para que sus reflejos, sean con más frecuencia, la manifestación de un espíritu
por fin sabio y capaz de seguir su instrucción a los pies del maestro.

En este orden de ideas el emisor o fuente es DIOS, es la vida que canaliza a través de nuestro
instructor espiritual su manifestación en parte,

el mensaje es el video o ensayo en donde se plasman conceptos, leyes y principios

y el receptor es usted mi querido amigo que unido a vuestro merecimiento; como receptores en un
momento dado debemos aplicar unos axiomas que mejoren la recepción:

1. No crea en nada, es decir, debe discernir, meditar, antes de tomar una decisión de
aplicación cierta o falsa, según usted mismo, como máxima manifestación de su individualidad.

2. No negar la Biblia sin haberla leído; por lo tanto, si usted no ha mirado todo el mensaje
(vídeo, ensayo) no puede opinar razonablemente sobre el tema, no podría encontrar quizá lo que
busca y mal haría en aplicar sin conocer.

3. Cada día o cada semana o cada mes, regálese 46 minutos de su tiempo y comparta con
usted mismo conceptos que pertenecen a la sabiduría legada por un interés pretérito de ayudar en
su evolución.

Sin embargo todo depende de nuestro haber a través de la evolución del ser, mediante infinidad de
circunstancias, incluyendo la de alcanzar una vida espiritual, es decir,
no le podemos pedir peras al olmo; pero, siempre hay un plan B, es la Epigénesis como un modelo
nuevo de trabajo en el tiempo,

donde abrevando de la voluntad universal, nos ponemos en movimiento, ojalá de manera

consciente y así obtener lo más interesante como realización por el amor que se encuentra en Sí.

Al final de este proceso maravilloso Todos seremos Uno y seremos Todo;

la vida en nosotros y cada uno, será conocida porque seremos una consciencia que palpita en ella
y se manifiesta en un universo en armonía como final y principio para un nuevo salto cuántico.

Reciban un gran abrazo de comprensión, Asallas.

 EL ESTAFETA

Entrego a ustedes conferencias en vídeos directamente de nuestro instructor espiritual con alguna
frecuencia, estimando que hayan tenido el tiempo de escuchar, de discernir y por qué no, de
aplicar, los conceptos en el día día.

También motivado por este proceso, a partir de labio a oídos, lo que escucho se caracteriza en mí,
y luego lo escribo o lo digo a otros que no han escuchado, aunque quizá, tanto palabras como
frases, son dichas o escritas sin tan alta sabiduría como fueron escuchadas; sin embargo, soy un
mensajero con el deseo de que los mensajes lleguen temprano, que tengan las palabras correctas
y que lleguen en el momento correcto, a las personas que lo necesiten.

Me gustaría que a partir de éste hecho socialicemos los mensajes recibidos una y otra vez y entre
uno y uno formar la costumbre sana en méritos que deje nuestra ignorancia de lado, contribuyendo
a un paso seguro en el cambio, en la transmutación y de esta manera en algún momento llegará el
instructor para empezar a pulir el diamante en bruto, para que su luz, para que sus reflejos, sean
con más frecuencia, la manifestación de un espíritu por fin sabio y capaz de seguir su instrucción a
los pies del maestro.

En este orden de ideas el emisor o fuente es DIOS, es la vida que canaliza a través de nuestro
instructor espiritual su manifestación en parte, el mensaje es el video o ensayo en donde se
plasman conceptos, leyes y principios y el receptor es usted mi querido amigo que unido a vuestro
merecimiento; como receptores en un momento dado debemos aplicar unos axiomas que mejoren
la recepción:

1. No crea en nada, es decir, debe discernir, meditar, antes de tomar una decisión de
aplicación cierta o falsa, según

usted mismo, como máxima manifestación de su individualidad.

2. No negar la Biblia sin haberla leído; por lo tanto, si usted no ha mirado todo el mensaje
(vídeo, ensayo) no puede opinar razonablemente sobre el tema, no podría encontrar quizá lo que
busca y mal haría en aplicar sin conocer.

3. Cada día o cada semana o cada mes, regálese 46 minutos de su tiempo y comparta con
usted mismo conceptos que pertenecen a la sabiduría legada por un interés pretérito de ayudar en
su evolución.

Sin embargo todo depende de nuestro haber a través de la evolución del ser, mediante infinidad de
circunstancias, incluyendo la de alcanzar una vida espiritual, es decir, no le podemos pedir peras al
olmo; pero, siempre hay un plan B, es la Epigénesis como un modelo nuevo de trabajo en el
tiempo, donde abrevando de la voluntad universal, nos ponemos en movimiento, ojalá de manera
consciente y así obtener lo más interesante como realización por el amor que se encuentra en Sí.
Al final de este proceso maravilloso Todos seremos Uno y seremos Todo; la vida en nosotros y
cada uno, será conocida porque seremos una consciencia que palpita en ella y se manifiesta en
un universo en armonía como final y principio para un nuevo salto cuántico.

Reciban un gran abrazo de comprensión, Asallas.