Sei sulla pagina 1di 8

+++||-- [C] [U] [L] [T] [U] [R] [A] -- [☆] -- [R] [U] [S] [A] -- [☆]

La cultura rusa tiene una larga historia y tradición y los rusos se sienten muy orgullosos de ella. Los
rusos se consideran a sí mismos como una nación muy culta. En Rusia se lee muchísimo. Los libros
son muy baratos, y una persona puede comprar de 5 a 10 libros mensuales sin que suponga una
gran carga a la economía familiar.

Al mismo tiempo, la mayoría de los rusos no tienen lo que llaman el Occidente “Buenos modales”.
Sus modales no son malos, son simplemente modales rusos. Rusia es un continente duro y los
rusos, normalmente, no dudan en decir las cosas en un modo que no deje lugar a mal entendidos.
Durante el período soviético tener “buenos modales” al estilo occidental, era considerado como
una reminiscencia burguesa (y no olvide que el sistema soviético iba en contra de todo lo
burgués). Los rusos son muy directos. Cuando se ven o se llaman por teléfono, no pierden el
tiempo con preguntas como “¿Cómo te encuentras?” y van directamente al grano. No es que sean
rudos, sino que simplemente es un modo de hacer las cosas.

Esto no significa que no guarden las formas en acontecimientos sociales o que sean mal educados.
Muy al contrario, un ruso sabe perfectamente mantener las formas en muy diferentes situaciones:
una comida familiar o de trabajo, un acontecimiento cultural etc. Los rusos son personas muy bien
educadas. Siempre se dirigirán a un tercero formalmente y no lo tuteará hasta que se establezca
una relación de franca amistad. Tienen un gran respeto por la familia y por las normas familiares.
Los rusos son personas directas, francas y muy respetuosas.

La mayoría de los rusos se consideran a sí mismos como creyentes, y pertenecen a la Iglesia


Ortodoxa Rusa. Esto es un gran logro para un país donde el Ateísmo fue la religión oficial durante
más de 70 años. Sin embargo, la mayoría de ellos no son verdaderos creyentes. Aprecian la moral
Cristiana, pero no siguen a la Iglesia. La religión no es una parte real de su vida. Los rusos están
más pendientes del Horóscopo que de la Biblia.

El sistema médico y educativo de Rusia es totalmente gratis, aunque el chiste es que la educación
es cada año menos y menos gratis. Uno todavía puede ir a la universidad gratis, aprobando el
examen de acceso, pero las universidades tienen que disminuir el número de estudiantes que
admiten, debido a la pobre financiación estatal.
Tener un diploma o título universitario es algo común y Rusia tiene el nivel más alto del mundo en
educación. Desde que comenzó la Perestroika, el sistema de educativo de alto nivel (universidad)
está deteriorándose lentamente así como el de la sanidad, que solía ser uno de los mejores del
mundo. El mayor problema del sistema educativo ruso es que ha sido siempre muy teórico y poco
relacionado con lo práctico. Así, es muy común que una persona con una titulación en Ingeniería,
trabaje en ventas, o que un licenciado en química trabaje en Marketing. En los días de antaño,
obtener un título constituía un fin en sí mismo. Están intentando cambiar los programas
educativos, pero el proceso acaba de empezar.

No hay que extrañarse de que una mujer con un diploma o título universitario, trabaje como
secretaria. Tener un diploma en Físicas, no es algo extraño, y no te proporcionan ninguna ventaja a
la hora de encontrar empleo. Un buen conocimiento del Ingles te proporcionará un mayor grado
de competitividad. El puesto que una persona ocupa en una compañía no es tan importante como
la compañía en la que uno trabaja. Las compañías extranjeras, incluso las organizaciones
dedicadas a la caridad (ONG’s) son considerados los mejores empleos.

Tener tu propio negocio en Rusia es un gran reto. El sistema de Impuestos funciona de tal manera
que la persona que tiene un pequeño negocio o empresa privada, debe pagar los impuestos antes
de que reciba permiso para ponerlo en marcha. Suena increíble, pero es verdad: se supone que se
debe hacer una estimación de los futuros ingresos y pre-pagar los impuestos procedentes de dicha
estimación. Sólo entonces se consigue el permiso para iniciar su negocio o empresa; pero el
emprendedor debe correr al Departamento de Impuestos (Hacienda), en el mismo segundo que
gane 1 rublo más de beneficio de lo que había estimado y pagado con antelación. De lo contrario
se considera que está ocultando beneficios y puede recibir una multa de un 200% de la cantidad
de “beneficios ocultos”. Entiendo que suena gracioso, pero así funciona. Las autoridades
sospechan de todo aquel que sea propietario de un pequeño negocio.

Las grandes empresas tienen un sistema más conveniente de impuestos. Debido a la gran cantidad
de fraude acumulado, en el año 2000 el gobierno anunció un impuesto sobre beneficios del 12%, e
incluso dijeron que el dinero oculto (dinero negro) se legalizaría si el propietario pagaba ese 12%
de impuestos. Al mismo tiempo, hubo comentarios de altos oficiales del gobierno de que ésta es
solamente una “retirada” temporal, y que el sistema de impuestos progresivo volverá tan pronto
como la gente se acostumbre a pagar sus impuestos. Actualmente el gobierno espera que la gente
empiece a pagar sus impuestos y a declarar lo que realmente ganan. Pero los rusos conocen a su
gobierno. No quieren ser atrapados fácilmente, mostrando sus verdaderos ingresos, para luego ser
obligados de nuevo a pagar los enormes impuestos del pasado, con tasas de hasta el 90%, según el
estado, región o ciudad en la que desarrolla su actividad. El cobro de impuestos sigue siendo una
de las mayores preocupaciones del gobierno Ruso. Muchos inversores serios de los llamados
“Nuevos Rusos” transfieren sus capitales al extranjero. Por supuesto, esto es ilegal, pero hay
demasiadas formas de hacerlo y darle la vuelta al sistema de impuestos.
Antes del año 2000, el sistema de impuestos ruso era uno de los más complicados del mundo. Si
contamos todos los impuestos que debían pagarse, la cantidad total podía alcanzar el 90% de los
ingresos, incluyendo las retenciones de los salarios de los trabajadores. Para poder pagar 100
rublos a un trabajador, el empresario o empresa, debía pagar 80 rublos en concepto de impuestos
al estado: fondo de pensiones, seguros sociales, seguro médico, y así. Además había muchos
impuestos federales, regionales y locales que eran completamente distintos de una ciudad a otra.
El sistema hacía que las compañías llevasen una doble contabilidad y algunas veces un doble
salario para los trabajadores: uno oficial y otros llamado “salario en efectivo negro”.

Otra realidad de los negocios en Rusia es el crimen organizado, que muy a menudo tienen
conexiones muy cercanas a las autoridades. Los pequeños y medianos negocios deben pagar un
10% de sus beneficios al “mafioso” que le corresponde (según donde esté situado el negocio o
empresa) o que contrata. Hoy en día muchos negocios prefieren contratar los departamentos
“comerciales” de organizaciones policiales o de seguridad, que en realidad no son más que
“mafiosos” camuflados. Ellos le “ayudarán” en caso de tener impagados, problemas con socios de
negocio o en situaciones criminales, como robos, etc, proporcionándo “protección”. Todas estas
organizaciones criminales tienen negocios oficiales registrados y se les paga ese 10% en dinero
oficial, en lugar de dinero negro.

Fue un caso muy gracioso cuando en Ekaterinburg, en la primavera de 1999, una de estas
“empresas de cooperación y protección” registró su asociación con el nombre de OPS. En Rusia
esta es una abreviación muy común que significa “Sindicato del Crimen Organizado”, (en ruso
"Organizovannoye Prestupnoe Soobshcestvo"). Los muchachos de “OPS” dieron una explicación
distinta y dijeron que las siglas significaban “Unión Política y Policial” (en ruso “Obschestvenno
Politicheskiy Soyuz"). Era uno de los más famosos y grandes grupos mafiosos de la ciudad y la
elección de ese nombre demostraba que se sentían completamente cómodos con su estatus.
Venía a decir: “¿Así que nos consideráis como un “OPS”?. Pues aquí lo tenéis”.

Si se tienen problemas con otra empresa con la que se hace negocio, tu “protector” ("krysha"), se
reunirá con el “protector” de la otra empresa he intentará llegar a un acuerdo y solucionar el
problema. Si no pueden hacerlo, se designará a un tercero imparcial – una persona “dentro de la
ley” ("v zakone"), que tomará una decisión, por norma general, bastante justa. Esta decisión es
definitiva y no puede ser apelada ni desatendida. Existe un modo oficial de arreglar los problemas
a través de un juicio legal, pero está casi en desuso: es un proceso largo, impredecible y bastante
patético.

A pesar de todo, los empresarios gozan de una situación de privilegio en comparación con los
empleados. Aunque tienen dolores de cabeza y estrés, al menos todavía tienen algo de dinero y un
buen nivel de vida. Los empleos estatales (funcionarios) y en particular los médicos y los
profesores, no cobran sus salarios en meses (algunas veces hasta 6-12 meses). Esto no significa
que no cobren salario. Todo empezó hace años, primero como un retraso de unos días en los
pagos. Luego se recibía el salario una semana más tarde, al mes siguiente, 2 semanas más tarde, y
así. Finalmente ocurre que en Junio se recibe el salario de Diciembre. Como se recibe un salario de
forma regular, se puede sobrevivir, aunque el gobierno deba a ese funcionario miles de rublos.
Este medio de pago fue rápidamente copiado por otros organismos y empresas y ahora, incluso si
se trabaja para una compañía privada, raramente se recibe el salario a tiempo. El gobierno
promete constantemente que se va poner al día en los pagos de salarios y pensiones atrasados y
que va a corregir esta situación, pero hasta la fecha tan solo son promesas.

En Rusia hay un famoso cómico, Mikhail Zadornov. Su nombre también es una graciosa
coincidencia, ya que es el mismo que el de un antiguo ministro de economía ruso. Una vez una
enciclopedia extranjera mezcló sus fotos – en el artículo sobre el ministro, pusieron la foto del
cómico y en la del cómico la del ministro. No hay de qué preocuparse: la economía rusa también
es algo graciosa y cómica.

Los rusos son listos. Tienen tantas dificultades y problemas en su vida diaria, que puede
prácticamente darle la vuelta a casi cualquier cosa. No tienen un respeto profundo hacia ninguna
ley, incluyendo las normas de tráfico. Los rusos son unos de los peores y más temerarios
conductores del mundo y también los más descuidados peatones del mundo.

Los rusos están acostumbrados a situaciones en las que todo es impredecible e inestable. Ellos
viven en una sociedad en la que todo puede ocurrir y no se preocupan por si su moneda pierde un
25% de su valor 3 días después de que el presidente prometiera que no habría inflación en un
futuro cercano porque la situación nunca había sido tan estable. Se tienen que adaptar a nuevas
reglas y leyes rápidamente, y consiguen completar exitosos esta tarea. Después del “Lunes Negro”
(17 de Agosto de 1998), cuando el gobierno anunció una devaluación y el rublo cayó de forma
dramática, la gente de los países occidentales quizás hubiera corrido a exigir un cambio de
gobierno, mientras que los rusos corrieron a cambiar sus rublos por dólares.

Los rusos han tenido que hacer un largo recorrido entre el control total de la Unión Soviética a la
incertidumbre total de la actual situación. Sus vidas han cambiado extremadamente y si la
felicidad de la gente pudiera ser medida, esta medida indicaría que la felicidad ha ido
definitivamente a peor. La gente más mayor echa mucho de menos los tiempos de la Unión
Soviética, cuando todo era entendible, predecible y estable. Uno no podía tener una vida mucho
mejor que otros compatriotas, a pesar de su talento y trabajo duro, pero tenía la confianza de que
contaba con un mínimo que garantizaba su bienestar: un lugar donde vivir, un trabajo, sanidad
gratuita de alta calidad, precios asequibles en la alimentación, educación gratuita para sus hijos y
acceso gratuito a cualquier instalación deportiva y cultural. ¡No eran tiempos tan malos!
Hoy en día la gente ha perdido todas las ventajas del estado socialista, y aún están por obtener las
ventajas del sistema capitalista occidental. La mayoría de la gente no entiende, realmente, la gran
diferencia entre la vida en Rusia y la vida en Occidente. Los rusos NO consideran que su vida sea
miserable. Muy al contrario, tienen la impresión que la vida en occidente es inhumana, limitada y
aburrida, a pesar de los mejores coches y casas que la gente tiene. Consideran que en occidente se
da demasiada importancia a los objetos y a las cosas y piensan que la mayoría de los occidentales
son infelices porque sólo buscan acumular más bienes materiales.

A los rusos les gusta hacer hincapié en su actitud tan diferente que tienen hacia los valores
materiales, y se consideran a sí mismos sinceros, cordiales y comprensivos. Les gusta hablar acerca
de los “misterios del alma rusa” y repiten una famosa frase de un autor ruso: “No puedes
entender a Rusia sólo con tu mente.” La gran mayoría de los rusos juzga al prójimo por lo que ES
no por lo que TIENE. Prefieren ver los valores morales de una persona, que el coche que tiene esa
persona.

Por norma general, los rusos aman a su país. Lo pueden criticar de forma severa, pero si tú
intentas criticar a Rusia, la defenderán furiosamente. Ellos se sienten ciudadanos de uno de los
países más grandes del mundo y están muy orgullosos de ello.

+++||-- [P] [E] [R] [S] [O] [N] [A] [L] [I] [D] [A] [D] -- [☆]

Se caracteriza por ser un hombre directo, darle las vueltas al asunto no son su manera de llevar las
cosas, no le gusta cuando la gente comienza a inventar, o peor a recalcar y poner en duda sus
palabras. Muchos le denominan como alguien demasiado frío, casi como si no sintiera, pero la
verdad no es esa, la verdad de Iván es que la vida le ha golpeado tan duro que ya ha creado una
coraza que le impide el comprender del todo lo que sucede a su alrededor, no es que no le
importe la realidad, simplemente es que no se da cuenta de ello. Un día frío, un día cálido, una
noche con lluvia o sin ella, que un niño le sonría o no... irse a guerra, o contemplar la paz... viene
siendo lo mismo para él... vienen siendo nuevas faces que como nación, sabe que simplemente
debe saber manejarlas y ya. ¿Alguien aburrido? Tampoco, ya que disfruta de la tranquilidad de su
hogar, guarda con celos su pasado, pero ama con devoción su presente, que estén bien o mal es
cosa del gobierno, es cosa de los millonarios de su país, es cosa de la mentiras burócratas...

Es bastante franco, y sabe bien cuánto él ha caminado para llegar hasta donde está ahora,
desgarrando sus pies por el camino de la vida, manteniendo siempre la frente en alto aunque se le
acuse de ser el protagonista de las pesadillas de los niños, aunque le llamen monstruo, bestia...
sabe que todos esos adjetivos no son más que parte de su historia y no se avergüenza de ellos. No
le da miedo esperar el juicio en donde le hagan pagar cada tortura que hizo, cada venganza y
muerte que llevó a cabo, no teme el aceptar la sentencia, pero no será hasta ese momento en que
seda a que la desesperación mueva los hilos de su mente. Antes de ello, seguirá de pie, seguirá
avanzando, con el peso en sus hombros, pero seguirá creyendo que Rusia, es el amor de su vida.
Su franqueza llega a límites como aceptar sin problemas que la URSS tuvo problemas para manejar
tanto poder, sabe también que él aun siendo mayor que muchos países, cayó en un juego tan
infantil como la arrogancia, creerse invencible, creerse un dios en tierra de demonios... fue su gran
problema. Pero claro, no hay que detenernos sólo en esa época, antes, en la revolución, conoció lo
que es la libertad de acción, conoció lo que era sentir la anhelada adrenalina correr por sus venas,
fue gracias a ello que su manera de pensar se deslindó de la de los zares. Últimamente la calma es
lo que reina, o eso es lo que él cree, las muertes son básicamente por enfermedades,
automovilísticas... nada fuera de lo común, nada... ligado a las guerras.

Aunque muchos le llamen irrespetuoso, él prefiere denominarse como: "Respetuoso, pero ruso",
puesto que no es alguien que trate mal a terceros simplemente por querer hacerlo o porque su
educación haya sido mala, para nada, solo que a Ivan le importa tan poco lo qué dice un tercero,
que además de ser frío en un encuentro, el que le digan que es sumamente inexpresivo, no le
remueve absolutamente nada dentro de su cabeza, es más, prefiere alejarse de esa gente que
comienza a hostigarle.

Con el paso del tiempo, son pocas cosas las que le sorprenden, está tan acostumbrado a todo, que
ya no le ve lo divertido a su entorno, le podrán llamar viejo, o aburrido, pero es que ya nada le
llama demasiado la atención. Por lo mismo termina siendo un hombre de rutina, encerrado
literalmente en una Rusia que vive por vivir, y no para descubrir. Todo avanza, cada elemento
encaja y eso es su diario vivir. No tiene pensamientos negativos, sólo que ya ha visto demasiado,
conoce lo bueno y lo malo, lo que realmente importa y lo que no (materialismo por ejemplo) así
que se puede decir que es un ser maduro, tiene demasiados puntos de vista y es abierto de mente,
mucho más que antes. Aun así, no se negará que hay cosas que aun le tienen a la expectativa de:
¿Qué pasará?


+++||-- [H][E][A][D][/][C][A][N][O][N][S] -- [☆]

| ★ | Tiene colecciones de botellas alcohólicas en casa, regadas por todos lados en realidad, unas
tantas en su despacho, otras en la sala de estar y sobre todo, en las habitaciones que ya no ocupa
de su casona, allí guarda cajas y cajas de licor, no solo vodka, sino que también las botellas de
regalo que llegan de otros lugares, sake japonés, el whisky escocés, la cerveza alemana. Y como
dato Freak, tiene una botella de Coca~Cola de los años 60 en una repisa, como trofeo en realidad y
como recuerdo personal de haber "perdido" la guerra, algo que en realidad es una burla e ironía
para su propia persona, no es algo que le mosquee en realidad, o al menos piensa eso.

| ★ | Posee la bufanda que Yekaterina le hizo hace más de cuarenta años, la tiene guardada junto
a otras cosas. El punto, es que antes de que su hermana le regalara algo como eso, jamás había
usado las bufandas con buena gana; pero, como la mujer se empeñó tanto en ella, la usó y jamás
se la sacó durante la guerra, incluso la tomaba como amuleto.

| ★ | Los girasoles sí le agradan bastante, tiene un cuarto en donde estas flores han sido
retratadas en una pared completa, si bien sabe que aquellas plantas no pueden darse en Rusia, las
admira bastante en otros países. El color amarillo, la grandeza y majestuosidad de su hoja le dejan
atónito. Hermosos ejemplares de la flora silvestre.

| ★ | Cree en ovnis tanto como el norteamericano, no encuentra muy alejada de la realidad la


teoría de su existencia, hasta podría dar por sentado que ha tenido encuentros ovnis más de una
vez.

| ★ | Es práctico, racional, pero eso no quita a que se "vuele" en cosas nada normales, a veces se
divierte pensando o discutiendo sobre temas banales, o simples en peso. De todas formas,
también tiene un pequeño amor secreto por esa parte "mágica" de la historia.


Potrebbero piacerti anche