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DIVORCIO Y SEPARACIÓN POR MUTUO CONSENTIMIENTO

De conformidad con el artículo 426 del Código Procesal Civil y Mercantil, el divorcio
o separación por mutuo consentimiento podrán pedirse ante el Juez del domicilio
conyugal, siempre que hubiere transcurrido más de un año, contado desde la fecha
en que se celebró el matrimonio, prescripción que también es la misma que regula
el Código Civil en el artículo 154.

La ley de Tribunales de Familia Decreto-Ley No. 206 establece que le compete a


este tribunal este tipo de jurisdicción privativa y por lo tanto conocer del expediente
voluntario que dará inicio a un proceso.

La forma en la cual se obtiene el divorcio o la separación por mutuo consentimiento


es la siguiente:

a) La Solicitud: Comúnmente en los expedientes de jurisdicción voluntaria no


se exigen mayores formalidades, sin embargo, para estos casos es aplicable
lo que regula el artículo 61 del Código Procesal Civil y Mercantil, puesto que
este artículo establece los requisitos de toda primera solicitud.
Dentro de los requisitos especiales de esta solicitud, es necesario contar con:
1. “Certificaciones de la partida de matrimonio, de las partidas de defunción
de los hijos que hubiesen fallecido;
2. Las capitulaciones matrimoniales, si se hubiesen celebrado;
3. Relación de los bienes adquiridos durante el matrimonio.”1

b) Las Medidas Cautelares: En virtud de que se trata de un procedimiento que


se ventila a través de la jurisdicción privativa de familia, le es aplicable lo
regulado en el artículo 12 de la ley de Tribunales de Familia, el cual establece
que: “Los Tribunales de Familia tienen facultades discrecionales. Deberán
procurar que la parte más débil en las relaciones familiares quede

1
Enrique Peralta Azurdia, Decreto-Ley 107, Guatemala, artículo 426.
debidamente protegida; y para el efecto, dictarán las medidas que consideren
pertinentes. Asimismo, están obligados a investigar la verdad en las
controversias que se les planteen y a ordenar las diligencias de prueba que
estimen necesarias, debiendo inclusive interrogar directamente a las partes
sobre los hechos controvertidos, y apreciarán la eficacia de la prueba
conforme a las reglas de la sana crítica.”2
El artículo 427 del Código Procesal Civil y Mercantil también establece la
forma en que los hijos serán cuidados por sus padres o por una tercera
persona, siempre y cuando el juez lo considere conveniente, velando siempre
por el bienestar de los hijos menores.

c) Junta Conciliatoria: En esta clase de expedientes, la junta conciliatoria


adquiere mucha más importancia porque de ella depende que el
procedimiento siga o no adelante. El artículo 428 del Código Procesal Civil y
Mercantil establece:
“El juez citará a las partes a una junta conciliatoria, señalando día y hora
para que se verifique dentro del término de ocho días. Las partes deberán
comparecer personalmente, auxiliadas por diferente abogado. Previa
ratificación de la solicitud, el Juez les hará las reflexiones convenientes, a
fin de que continúen la vida conyugal. Si aquellos se avinieren, el Juez
declarará el sobreseimiento definitivo.”3

En el caso de que no se presenten las partes a la audiencia citada, no se


presume la falta de consentimiento ni se les exige a las partes demostrar que
inasistieron por causa justificada. Por lo tanto, si las partes no asisten,
deberán instar, si lo desean, la prosecución del procedimiento, pidiendo
nuevo señalamiento de día y hora para que tengan lugar las diligencias de
ratificación y de conciliación.4

2
Enrique Peralta Azurdia, Decreto-Ley Número 206, Guatemala, Artículo 12.
3
Enrique Peralta Azurdia, Decreto-Ley Número 206, Guatemala, Artículo 428.
4
Mario Aguirre Godoy, Derecho Procesal Civil, Centro Editorial VILE, Guatemala 2005, página 189.
d) Convenio: El convenio o más conocido como bases del divorcio o de la
separación. Este documento se diligencia de acuerdo a como lo establece
el proceso, debiéndose presentar en la junta conciliatoria o con posterioridad
a ella.
Lo relativo al convenio está regulado en el artículo 429 del Código Procesal
Civil y Mercantil, el cual establece que si no hubiere conciliación, en la misma
junta o con posterioridad a ella, se presentará al Juez un proyecto de
convenio en que consten, en su caso los puntos siguientes:
1. A quien quedan confiados los hijos menores o incapaces habidos en el
matrimonio;
2. Por cuenta de quién de los conyugues deberán ser alimentados y
educados los hijos, y cuando esta obligación pesa sobre ambos
conyugues, en qué proporción contribuirá cada uno de ellos;
3. Qué pensión deberá pagar el marido a la mujer, si ésta no tiene rentas
propias que basten para cubrir sus necesidades; y
4. Garantía que se preste el cumplimiento de las obligaciones que por el
convenio contraigan los conyugues.

Según este artículo, el convenio no perjudicará a los hijos, quienes, a pesar


de las estipulaciones, conservarán íntegros sus derechos a ser alimentados
y educados, con arreglo a la ley.

El convenio de bases requiere de la aprobación judicial, tal como lo establece


el artículo 430 del Código Procesal Civil y Mercantil al establecer que el juez
aprobará el convenio si estuviere arreglado a la ley y las garantías propuestas
fueren suficientes, disponiendo, en tal caso, que se proceda a otorgar las
escrituras correspondientes, si fuere procedente.

No necesariamente el convenio debe de instrumentarse en escritura pública,


puesto que en la mayoría de casos se acostumbra a proponer como garantía
el sueldo de la persona que resulte obligada, y únicamente se es necesario,
cuando la garantía se debe a fianza o con bienes hipotecarios o prendarios.
e) Sentencia: A pesar de que se trate de un expediente de jurisdicción
voluntaria, la ley exige que se dicte sentencia, tal como lo establece el artículo
431 del Código Procesal Civil y Mercantil, el cual estipula que: “cumplidos los
requisitos que se han mencionado e inscritas las garantías hipotecarias, en
su caso, el Juez dictará la sentencia dentro de ocho días, la que resolverá
todos los puntos del convenio y será apelable.

El hecho que la sentencia sea apelable reside en que, existe una posibilidad
de que una de las partes sea víctima de agravio, por lo que el Código prevé
esta situación permitiendo el recurso de apelación.

Como disposición complementaria, el Código Civil en su artículo 167


establece que cualesquiera que sean las estipulaciones del convenio o de la
decisión judicial, el padre y la madre quedan sujetos, en todo caso, a las
obligaciones que tienen con sus hijos y conservan el derecho de relacionarse
con ellos y la obligación de vigilar su educación.

La sentencia que se pronuncie en las diligencias de separación por mutuo


consentimiento, puede llegar a convertirse en sentencia de divorcio. De
conformidad con el segundo párrafo del artículo 431 del Código Procesal Civil
y Mercantil, “después de seis meses de haber causado ejecutoria la
sentencia de separación, cualquiera de los cónyuges puede pedir que se
convierta en divorcio, fundado en la ejecutoria recaída en el proceso de
separación. Esta petición se resolverá como punto de derecho, previa
audiencia por dos días a la otra parte. En caso de oposición, se tramitará en
juicio ordinario.”5

f) Reconciliación: El Código Procesal Civil y Mercantil contempla la posibilidad


de que los conyugues se reconcilien antes de que se dicte la sentencia de
divorcio, puesto que el artículo 432 establece que: en cualquier estado del

5
Enrique Peralta Azurdia, Decreto-Ley Número 206, Guatemala, Artículo 431
proceso de separación o de divorció y aún después de la sentencia de
separación, pueden los conyugues reconciliarse, quedando sin efecto dicha
sentencia. Solo por causas posteriores a la reconciliación, podría entablarse
nuevo proceso. La reconciliación podrá hacerse constar por comparecencia
personal ante el juez, por memorial con autenticación de firmas o por
escritura pública.

g) Inscripción en los Registros: La sentencia que dicte el Juez de Familia


tanto en las diligencias de separación como en las de divorcio por mutuo
consentimiento, o bien el acto de reconciliación, deben llevarse a
conocimiento de los registros públicos.

El artículo 433 del Código Procesal Civil y Mercantil establece que “la
sentencia de separación, reconciliación posterior a ella y la sentencia de
divorcio, serán inscritas de oficio en el Registro Civil y en la de la Propiedad,
para lo cual el juez remitirá, dentro de tercero día, certificando en papel
español, de la resolución respectiva.”6

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Enrique Peralta Azurdia, Decreto-Ley Número 206, Guatemala, Artículo 433

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